Los personajes son creación de Temari Matsumoto y Tomo Takabayashi

Segunda parte de Un cuento con final feliz -no es necesario que lo lean, pero me agradaría mucho si lo hicieran-, algo de Mpreg y muchas parejas, por supuesto Yaoi. Espero que lo disfruten y solo como aclaración, este fic lo escribí y publique hace mas de seis años en otra pagina -y tengo testigos-, por si le encuentra parecido con otros.

Cumplí Lady Angela von Spitzberg

Y vivieron felices para siempre

Por Tlacuilo

Una mañana normal en Shin Makoku, Gwendal trabajaba en un nuevo tratado de alianza con un país humano -era uno de los últimos que faltaban par unirse a ellos- , lo conveniente de su localización en la frontera oriente de Gran Shimaron, y muy cerca de Pequeña Shimaron, Saralegui había ayudado mucho en el proceso de convencimiento después de que resolvieron los conflictos en su país y que el confeso y se disculpo con Yuuri. El Maou considero que el joven monarca solo estaba desesperado por el bienestar de su reino.

El general terminaba de revisar los documentos para que los firmara el Maou al regreso de su mundo después de casi seis meses de ausencia ahora con la mayoría de edad cumplida y el ingreso a lo que el llamaba Universidad. El Maou no estaba muy seguido en Shin Makoku; lo que ocasionaba que a Gwendal se le cargara el trabajo, agradeciendo este hecho ya que no soportaba lo que ocasionaba la ausencia del Maou: con Wólfram que extrañaba a su esposo. Y por si fuera poco el hombre del cual estaba enamorado, llorando en los rincones por Heika; Gwendal pensó que con el matrimonio de Yuuri la obsesión de Gunter desaparecería pero que equivocado estaba; el Maou y Wólfram ya tenían más de siete meses casados y Gunter seguía igual…

El moreno en su fiesta de dieciocho años, en su forma de actuar impetuosa, había proclamado que el Príncipe Mazoku era suyo. No conforme lo hiso en presencia de Woltarana y su invitado -posible candidato para su sobrino- estaban hablando con Wólfram, lo que desencadeno que Yuuri gritara a todo pulmón … Yo Yuuri Shibuya Maou de Shin Makoku quiero informar a todo los que hoy me acompañan, que mi prometido Wólfram von Bielefeld y yo… contraeremos nupcias en seis meses mas , y están todo cordialmente invitados… cabe decir que todos los invitados estallaron en aplausos, a excepción de el rubio que con una vena apunto de estallar en la frente estaba punto de rostizar a su prometido, Conrad y Gwendal con mucho trabajo lograron sacarlo del salón y llevarlo a otro lugar para que desquitara su berrinche.

_ ¡¿Como se atreve ese Henachoko, a disponer a si de mi vida? ¡Sin pedirme opinión!-los hermanos cruzaron miradas de desconcierto preguntándose si se podía ser mas atolondrado, Yuuri ni siquiera había preguntado a su novio si quería casarse, los dos negaron con la cabeza. El rubio seguía despotricando en contra del Maou -Conrad tu sabes que desde que te casaste con su hermano y tienes una hija con el, Yuuri piensa que lo nuestro tiene que ser así de precipitado- el castaño se sonrojo es verdad que no tenia planeado formar una familia pero así surgieron las cosa y no se arrepentía.

_ Wólfram no culpes a los otros por las locura de tu prometido… además ¿no eras tu quien siempre le exigió al Maou que aceptara su compromiso? ahora que te hace caso te pones, así quien te entiende –aseguran el castaño.

_ Celaba a Yuuri pero… ¡era por su protección! ustedes saben que ese baka a todo mundo le da su amistad sin ponerse a analizar a las personas; ya ven lo que paso con Saralegui –intentaba justificarse el rubio.

_Bueno el Rey Saralegui cambio gracias a la amistad con el Maou-aseguraba Conrad.

_Si, pero le costo una desilusión al Henachoko, por eso todo este tiempo lo he protegido a mi manera y era fácil por que el se resistía a mi acoso; pero desde que Sigdis venia en camino Yuuri cambio su actitud hacia mi ¡ustedes lo han visto! ahora es el, quien me persigue para que formalizamos nuestro noviazgo -eso ultimo no le gusto a Gwendal.

_Con eso de formalizar ¿a que se refiere? si ustedes ya están comprometidos.-el rubio se sonrojo furiosamente.

_ A que como vio que a Shouri le funciono eso de embarazar a Conrad para casarse… el intenta…. hacer lo mismo.

_ Oye, oye, nosotros ya somos mayores y mi niña no fue una treta ni de parte de mi esposo, ni de la mía- contestaba avergonzado el castaño.

-Tranquilo Conrad no creo que Wolf lo haya dicho con esa intención ¿verdad? – preguntaba Gwendal ya con las venitas de la frente saltándole.

-No, lo que intento decirles y no te vayas a enojar Aniue es que Yuuri desde que se entero que los Mazoku varones en caso de necesitarlo podemos embarazarnos; me ha insistido para que nos casemos de eso hace ya año y medio, lo que me ayudo fue que Yuuri era menor de edad y aun no termina su estudios en su mundo, pero se defiende diciendo que aquí ya es Maou y no les importo la edad.

-Si yo he tenido que intervenir para que entienda que aun es joven para casarse. Y Shouri me ayuda a convencerlo pero él y su mama no han dejado de insistir.

-Lo que están diciéndome es que ¡¿ese crio a su vez quiere tener críos? Es una locura por muy Maou que sea no voy a permitirle que se aprovecha de Wólfram.

Decía Gwendal muy enojado, el rubio sonrió tranquilizándose después de todo su Aniue era capaz de todo por protegerlo bueno de hecho Conrad tampoco estaba muy de acuerdo en el acoso de Yuuri hacia el. En eso estaban cuando una cabellera azabache se asomo por la puerta, Murata entraba con su clásica sonrisa; detrás de el, usándolo como escudo iba Yuuri que tímidamente buscaba con la mirada al demonio de fuego, al ubicarlo codeo a su amigo.

-Sir Weller su esposo lo busca al parecer la pequeña Sigdis despertó de su siesta un poco enfadada -el castaño vio al Gran Sabio entendiendo el mensaje, tenia que dejar a solas a la pareja real, se dio cuenta por que Sigdis teniendo con ella a su otro padre era feliz.-Si enseguida voy - dijo saliendo de inmediato.

-Sir Von Voltaire me será muy útil su amable ayuda; acaba de llegar su alteza Saralegui y pregunto por usted ya que asegura que le aconsejaría para hacer mas fuertes sus defensas en su castillo -el General asintió y salió con Murata, Yuuri se quedo parado decidiendo en acercarse a su novio o no , sabia muy bien que su rubio Mazoku era de armas tomar cando estaba enfadado y no era para menos ¿pero acaso Wólfram no entendía que no soportaba que nadie se le acercara con fines románticos? después de todo era igual de celoso, bueno… de un tiempo para acá el Mazoku ya no lo celaba tanto.

-¿Wolf estas muy enojado?

-¿Tu que crees Henachoko?

-Tienes todo el derecho de molestarte ya que no había consultado contigo esto pe…-el rubio estallo.

-¡¿Consultarme? ¡¿Ni siquiera me lo has pedido?

-Bueno te he pedido que demos el siguiente paso en nuestra relación y tu no me has contestado - el moreno hablaba tranquilo buscando que su pareja se calmara.

-Es que es complicado. Tú eres muy joven y hasta hace poco no aceptabas nuestro compromiso.

-¿Hasta hace poco? desde hace dos años que lo decidí y te lo hice saber no me mientas Wolf ni pretendas buscar pretextos o ¿es que no me amas? ¿Hay alguien más? ¿No soy lo suficientemente bueno para ti? ¿Que es? ¡Dime! - el Bishounen miraba al de ojos negros, con desconcierto.

-¿De que hablas? Desde cuando Yuuri Shibuya es tan inseguro-decía sarcástico el rubio.

-Desde que me di cuenta que soy un desastre como prometido… -aclaro Yuuri deprimido- y tengo miedo por que se; que muchos Mazoku te pretenden… a veces me pregunto si estas conmigo solo por ese error que cometí al abofetearte.

-¿Error? ¡¿Te parece un error?

-Si. Por que si no hubiera sido tan imprudente te habría podido cortejar y enamorarte hasta que me aceptaras y no así como fue… a la fuerza, Wólfram desde la primera vez que te vi me pareciste hermoso, no puedes culparme por este sentimiento de posesión que me creaste, ¿dime que debo hacer? Si tengo un novio hermoso y perfecto al cual dejo mucho tiempo solo, cuando regreso a mi mundo.

-¿No confías en mi?

-Amor por supuesto que confió en ti; pero no en los demás por muy baka que te parezca he notado las miraditas de algunos de tus soldados y la amabilidad de Yozak.

-Jajajaja Henachoko estas celoso por una tontería, para mi puede venir el mismísimo Shinou a declarárseme que yo ya tengo a mi Henachoko del cual estoy enamorado - el Mazoku de fuego se acerco a su novio enredando su brazos al cuello del moreno.

-¿Me perdonas? es que me enfurecía cuando el idiota ese que trajo tu tío te sonreía y fue lo único que se me ocurrió para demostrar que eres mío, ¿Wólfram Von Bielefeld te casarías conmigo?

-Por supuesto, pero que posesivo resultaste y ahora por tu arranque de celos nos has puesto en un aprieto por que tu madre y la mía seguramente no nos dejaran descansar con los preparativos de la boda. Un beso fue lo que sello esa promesa.

000000000000000000000000

Como temía Wólfram ambas mujeres pusieron a todo el castillo a trabajar en la preparación de la boda real la servidumbre corría por todo el castillo acondicionándolo para recibir a los invitados -entre ellos las diez familias nobles de Shin Makoku con todo sus miembros-, Cecile se concentraba en buscar un ajuar especial para su Honey-chan y de paso uno para su futuro yerno; quien se lo había pedido encarecidamente -pues no pensaba llevar el vestido que le compro Jennifer-, Conrad siendo el único casado aconsejaba a su hermanito sobre la noche de bodas , Gwendal prefería no inmiscuirse mas; con el mal humor que crecía dentro de su ser, cada vez que veía a Gunter llorando y lamentándose por la boda de su Heika, su sobrina Sigdis lo acompañaba -pues Sir Von Voltaire le agradaba el carácter de la niña una combinación perfecta entre sus padres con la amabilidad de Conrad y la seriedad de Shouri la castañita- le gustaba jugar con todos los muñecos que su tío tejía , lo que asombraba a todo el castillo; es que los ojitos negros de la pequeña reconocían de inmediato la figura de los muñequitos; sin que el General se lo aclarase.

00000000000000000000000000

Yuuri por su parte, contaba los días para que se realizara su enlace; pues las mujeres del castillo se habían puesto de acuerdo y prohibieron que Wólfram compartiera habitación con él; Yuuri sospechaba que Gwendal y Conrad también tuvieron algo que ver en esa decisión, había notado que los hermanos mayores del rubio les había dado un complejo de sobreprotección hacia el Príncipe Mazoku. No los culpaba él mismo sabia que sus hormonas estaban desatadas y cualquier contacto con su novio le ocasionaba una incomoda erección que había aprendido a ocultar; aunque por la reacción de sus cuñados no paso desapercibida.

Después de lo que fue una larga espera para el Maou el gran día llego y se encontraba en el templo de Shinou con sus padres y hermano esperando a su futuro esposo ataviado con un traje negro pero con una camisa blanca de la que destacaba los puños en alanes y los pequeños adornos en un color dorado , su amigo Murata esperaba en el altar junto con Ulrike y Shinou -el cual ya se había presentado a los allegados de Yuuri quienes guardaron el secreto-, Yuuri se retorcía las manos en clara señal de nerviosismo pues el rubio y su madre ya se había tardado, vieron entrar a Conrad que presuroso se acerco a su esposo y le entrego a Sigdis -que estaba muy arregladita con un vestidito rosa pastel- el castaño salió corriendo y se escuchaban murmullos afuera, Yuuri si cabe se puso mas nervioso, preguntándose si su rubio se había arrepentido. En eso estaba cuando se abrió la puerta de nuevo, un Wólfram -vestido con un traje blanco y un velo pequeño que le cubría el rostro- de la mano de Cecile que sonreía; detrás venían sus hermanos. Llegaron con el Maou que de inmediato tomo la mano de Wólfram -que le entregaba Cecile-, el rubio en cuanto sintió el contacto con Yuuri prácticamente se arranco el velo, en tono bajo Shouri pregunto a su esposo por que la tardanza y Conrad le conto que su hermanito no quería entrar si lo obligaban a llevar un velo, solo accedió cuando él mismo le dijo; que Yuuri ya estaba muy nervioso por su tardanza.

Ese día el Maou se unió a su Príncipe de fuego con la misma alegría que su hermano a Conrad tiempo atrás. La fiesta estuvo muy concurrida ambas suegras se encargaron de que la cena fuera esplendida combinando recetas de ambos mundos. Gunter ya más repuesto de la depresión ayudo a Heika a recibir a los invitados extranjeros claro que cuando estos se trataban de militares se los dejaban a Gwendal.

El rubio seguía todas partes a su hermano Conrad pues con los nervios por la noche de bodas le surgieron infinidad de dudas, el castaño entre atender a los invitados, estar pendiente de la seguridad y cuidar que Sigdis no se quitara el vestido; no tenia mucho tiempo para resolver las dudas del joven Mazoku por eso su único consejo fue; déjate llevar por lo que sientes el rubio hizo un mohín de frustración.

000000000000000000000

Y lo que temía Wólfram y anhelaba Yuuri llego mas pronto de lo que pensaban; pues las hormonas del Maou soportaron solo la mitad de la recepción y en un descuido arrastro a su esposo hasta la alcoba -que habían decorado para esa noche Anissina y las mucamas- Velas aromáticas de gardenias, la cama con sabanas de seda roja cubierta de pétalos de rosas y en una mesita algunos bocadillos. El joven Maou se acerco como predador a su esposo quien con la mirada de lujuria que le dirigía Yuuri se sonrojo hasta las orejas, quien lo dijera el Henachoko perdió toda su inocencia para seducir a su rubio, tomo los labios delgados y carnosos del Mazoku, empezando un beso lánguido tierno que poco a poco se volvió mas salvaje, el moreno abrió la boca de su amor para probar su lengua, sus manos recorrían el cuerpo tembloroso del de ojos verdes; al sentirlo el Soukoku se separo.

-¿Que pasa amor? – se abstuvo de preguntar si temblaba de miedo, no quería salir quemado en su noche de bodas si hería el orgullo del príncipe Mazoku. El rubio observo a su pareja notando que le estaba contagiando su nerviosismo; respiro profundamente y siguió el consejo de Conrad , busco en su interior y de esos sentimiento se aferro para lanzarse a besar a Yuuri que acepto de inmediato la intrusión de la lengua de Wólfram en su boca , el rubio prácticamente le arranco la casaca negra a Yuuri, dejo la boca de su moreno y bajo por el cuello mordiéndolo, se quedo un rato succionado la clavícula del Maou que suspiraba por el placer que le proporcionaba su apasionado demonio. Yuuri cargo a su esposo y lo llevo hasta la cama lo desnudo con delicadeza tomo algunos de los pétalos y los fue colocando en lugares estratégicos del cuerpo bajo el, sobre la boca, en cada uno de los pezones, en el ombligo, una hilera que cubría las costillas y varios en la erección. Cuando considero terminada su obra se acerco a besar a su príncipe, jugando con al lengua para retirar el pétalo que cubría los labios. Bajo soplando sobre los que tenía en los pezones creándole sensaciones de escalofrió a Wólfram , provocando que los botoncitos de carne se endurecieran, el pelinegro los mordió jalándolos en el proceso, el rubio gemía y se retorcía en la cama, Yuuri continuo con el recorrido probando la piel pálida hasta llegar a falo turgente que se levantaba incitándolo a probarlo; lo que hizo de inmediato, lamiéndolo para después metérselo por completo succionándolo y acariciando con una mano los testículos de su pareja, el demonio se aferraba a las sabanas pronunciando el nombre de su esposo; cuando el pelinegro sintió tensarse a Wólfram -por el inminente orgasmo- se retiro para desnudarse, en lo que se quitaba la ropa observaba a esa cosita preciosa del que se sentía dueño. Ahí sobre la cama Wólfram lo miraba jadeante con las mejillas rojas y totalmente denudo con las piernas abiertas; el Mazoku se mordió los labios sensualmente al ver el la enorme erección de su marido, abrió mas las piernas invitando al otro a ocupar el lugar que le correspondía , Yuuri no se hizo esperar , busco sobre la cómoda lo que parecían frasquitos de lubricante -que la amable Anissina les dejo-, escogió uno con sabor y olor a fresas, metió los dedos y los llevo hasta la entrada virginal de su demonio; quien se mordía un dedo esperando lo que sabia seria un poco doloroso. Afortunadamente su hermano ya le había advertido y aconsejado que se relajara -para no sentir mucha incomodidad-, el Maou metió uno de los dedos y luego otro de inmediato; pues Wólfram estaba relajado, los movió dentro ensanchando y lubricando con cuidado a su hermoso esposo, metió el tercero y al sentir que Wólfram movía las caderas. Después de un tiempo los retiro y no pude evitar lanzarse a saborear el lugar antes ocupado por sus falanges; beso succiono y metió su lengua saboreando ese agujerito -que pronto seria llenado por su miembro-, el Príncipe le pedía que ya no lo hiciera esperar que lo tomara ya. El moreno dejo su golosina y posiciono su pene para empezar a entrar. El rubio se acerco a Yuuri para dejar en sus brazos el dolor, el moreno hacia esfuerzos sobrehumanos para no entrar en el Mazoku de un golpe; iba despacio hasta que se sintió totalmente dentro de su demonio rubio. Ambos respiraban agitados se besaron y Wólfram se movió indicándole al otro que empezara con la danza de lujuria. Las embestidas iban creciendo en fuerza y rapidez; los grito de ambos no se hicieron esperar, el Maou se sentó acomodando a su rubio sobre las piernas; ahora las estocadas eran mas profundas, el pene de Wólfram se rozaba con el vientre moreno, aun así Yuuri lo masturbo llevándolo al orgasmo y el lo siguió de inmediato. Cayeron exhaustos en la cama aun abrazados, el moreno intento salirse de su esposo pero este lo retuvo, quedándose dormidos más unidos y felices que nunca.

000000000000000000000000

Al día siguiente partieron hacia una residencia -que el tío de Wólfram les regalo por su boda-, contaba con un lago y un campo enorme lleno de flore y arboles frutales. Ahí ya los esperaban los sirvientes; un matrimonio de con un hijo de la edad de Greta. Se pasaron su luna de miel tranquilamente -cabe decir que no dejaron mucho la habitación y en las ocasiones en que salían era por que el traserito de Wólfram le pedía una tregua al impetuoso Maou- pero eso no nublaba su felicidad y los dos amantes se daban cuenta que ya no podían vivir separados.

Las semanas se le pasaron a Yuuri demasiado rápido, regresaron al castillo y un mes después se confirmo el embarazo del príncipe Mazoku. Las futuras abuelas se dedicaron a transformar la habitación del futuro heredero (a) -como hizo Cecile con su primer nieta-.

00000000000000000000

Gwendal cavilaba sobre su triste situación; con las hormonas alteradas de su rubio hermano; era el quien pagaba los platos rotos, consintiendo los caprichos y antojos del consorte real. Conrad estaba con su esposo e hija en el mundo de Shouri -pues desde que Bob se jubilo y lo dejo como Maou no podía ir tan seguido a Shin Makoku y su familia lo extrañaba-. Y así es como Gwendal termino encargándose de consentir a Wólfram. El General se le veía muy seguido visitando el pueblo por los encargos del rubio Príncipe, los dulces eran el alimento preferido del heredero al trono.

0000000000000000000000000

El Soukoku buscaba lugar en su agenda para visitar a su esposo; pero cuando el tiempo se terminaba entre: Murata, Gunter, Gwendal incluso Shinou; tenían que recurrir a la fuerza para separar a Yuuri de su esposo y la pancita de este. Afortunadamente para los pobre nervios del General , esa misma semana Yuuri regresaba a Shin Makoku aprovechando un permiso que pidió para estar los últimos meses de gestación con su rubio; de su deberes reales se seguiría encargando Gwendal -como regalo para que el matrimonio y sus bebes-, después del ultimo examen que le habían hecho a Wólfram por que les preocupaba su sobrepeso -claro que al rubio se le dijo que era un examen de rutina, estaba muy sensible con por su apariencia-, descubrieron que el motivo de que estuviera tan redondito era, que tendría gemelos, cabe mencionar que Yuuri se desmayo con la noticia.

Con Yuuri a su lado Wólfram ya no molesto a Gwendal dejando a este descansar y reflexionar; sus cuñaditos Soukoku una vez le mencionaron un dicho de la tierra que decía "hermano saltado hermano quedado", el General no entendió mucho pero lo que descifro no le agrado nada. Buscando una respuesta a sus problemas de corazón, opto por acercarse a Anissina, la ventaja era que se conocían desde pequeños acostumbrados a las manías de cada uno -ya hacia tiempo que había descartado la opción de intentar algo con Gunter el hombre al cual siempre amaría- , pero no todos tenían la suerte de sus hermanos que se casaron por amor y con la pareja anhelada. Él no fue tan afortunado, el consejero real vivía y moría por el Maou, y por ese motivo se decidió a iniciar una relación con la científica. Cuando hablo con Anissina, ella acepto gustosa al fin lo tendría de conejillo de indias permanente; ambos organizaron una reunión para informarle a todos acerca de su compromiso -en realidad ninguno estaba enamorados- pero ambos; como Mazoku adultos sabían que un matrimonio podía basarse en la confianza que te daba la amistad. Sus hermanos estuvieron algo renuentes; pero no les quedo otra que aceptar la decisión de Gwendal; su madre Cecile les pidió que la dejaran organizar la boda junto con el hermano de Anissina. Entre abrazos y felicitaciones, nadie se dio cuenta -a excepción de Gisela- de la ausencia del consejero real.

Después de felicitar a la nueva pareja, Gunter se retiro a su habitación, en donde salió al balcón para sentir la frescura de la noche y derramar lagrimas silenciosas; las que tendría que expulsar esa noche para al día siguiente enfrentarse a la realidad de que el Gwendal ya no lo miraría con amor, ni buscaría su compañía con el pretexto de los asuntos del Maou, no lo podía culpar; después de todo ¿quien no se aburriría de estar todo el día oyendo sus quejas acerca de que el Maou no le pone atención? o sus escenas dramáticas por la ausencia de Heika y que decir de sus lagrimas falsas; si falsas , todo eso lo hacia para que la confianza del joven Maou creciera, el trabajo de un consejero real era muy laborioso y Gunter lo cumplía al pie de la letra. Más nunca pensó que eso le costaría el amor de su General… pero él era un adulto y no se podía dejar llevar por la depresión. Se limpio las lagrimas del rostro recompuso su apariencia y salió con dirección a la reunión, al abrir la puerta de su habitación se topo con una persona que lo veía con claro disgusto.

Continuara.