Esta historia se basa en que después de que todo termina Sakura es visitada por los viajeros, y watanuki les informa que las plumas que contenían los recuerdos de sakura sobre syaoran deben ser recolectadas por que están generando desiquilibrio en otros mundo
Prologo
Estaban en medio de una especie de coliseo de cristal y luces, al frente, justo en el centro se erguía un trono de cristal con lo que al parecer era el rey del lugar. Aparecieron en mal momento según lo que estaba delante de ellos en la arena blanca; habían dos cuerpos tirados en el suelo completamente ensangrentados, uno atravesado con lo que parecía una lanza, el otro tenía el cuello roto.
Sakura se desvaneció ante la escena siendo atajada por Syaoran quien observó con desconfianza el espectáculo que todos ovacionaban. Kurogane y Fai se levantaron lentamente, habían sido aplastados por los más jóvenes, Mokona en los brazos del rubio ahogo un grito de sorpresa.
-hyuuu…-soltó el rubio viendo la escena
-tsk…- fue lo único que emitió el moreno poniéndose delante de Syaoran y Sakura quien comenzaba a despertar del pequeño desmayo.
Fue entonces que el sujeto que parecía el rey se levanto y silencio a la audiencia, bajo lentamente desde donde estaba, una mueca de molestia en su rostro, dos guardias ataviados con armaduras de bronce y cobre se acercaron a él corriendo. El Rey hizo un gesto de mano cortante indicando a los hombres que se detuvieran. La multitud ahora si guardo silencio notando a los extraños en la arena.
El hombre iba ataviado con una túnica blanca acompañada de costuras con diseños de hilo dorado que en la cintura estaba ajustada por una faja color granate. Al igual que el color de lo que parecía una capa militar. Llevaba el pelo rapado del lado izquierdo y largo del derecho, con ojos amarillos muy parecidos a los de un felino. Se acerco en silencio hacia los extranjeros, con malicia.
Kurogane vio avanzar al hombre con desconfianza y enseguida llevo sus manos a su cintura donde estaba su katana, para su sorpresa fue Fai quien adelantándose un paso lo detuvo haciendo un gesto con su mano. Kurogane lo observo sorprendido a la vez que Fai sonreía al hombre que se había detenido al ver el gesto defensivo del ninja.
-mil disculpa…eh…Majestad –se disculpo el rubio haciendo una pequeña reverencia con mokona en los brazos, esto calmo algo al hombre quien llevo sus manos a la cadera y pregunto.
-quienes son ustedes…¿por qué están interrumpen nuestros juegos de libertad? –pregunto de mala gana observando por sobre el hombro del rubio al ninja y los niños que estaban tras él
-Lo sentimos, somos viajeros…no podemos regular el lugar donde aparecemos…-Fai fue sincero con el sujeto ya que el mismo vio como aparecieron de la nada. Además apenas cayeron en este mundo percibió que este lugar poseía mucha magia negativa, y que mientras más rápido salieran de ahí sin provocar problemas mejor para ellos.
-lo sé…me pude dar cuenta…no todos tienen el poder de cruzar dimensiones -Dijo el hombre cruzándose de brazos y observando a mokona quien instintivamente se escondió en el pecho de Fai. El rubio decidió negociar con lo que parecía un rey ambicioso de poder.
-Majestad requerimos retiramos si no es mucho problema …para que continúe con sus juegos- Fai hizo una reverencia y Kurogane hizo que Sakura y Syaoran bajaran de la plataforma mientras Fai caminaba tras ellos.
-Alto! – la voz del rey los detuvo a la vez que mas guardias aparecían impidiendo que Sakura y Syaoran avanzaran, este ultimo adopto una postura de combate inmediatamente pero fue detenido por el ninja quien dedujo que por el comportamiento del mago este tipo no era de fiar y que debían ser precavidos.
-mocoso, no hagas nada tonto- le advirtió haciendo que el chico bajara la guardia y cogiera a sakura de la mano.
Fai que estaba ahora de espalda al rey entrego Mokona a Kurogane quien rápidamente se la paso a Sakura.
-Ustedes aparecen de la nada en esta arena sagrada, que está protegida por los conjuros más difíciles y poderosos del reino de Raedevouz, en medio de los juegos de libertad…-dijo el rey entrecerrando los ojos- juegos donde mueren miles de hombres y mujeres que quieren que yo, el Rey Deimian, les entregue el poder para poder hacer con este país lo que les dé gana…en estos juegos yo los aleccionó, les enseño que no hay nadie ni nada que pueda vencerme…y estaba a punto de dar por finalizada la ceremonia cuando ustedes…extranjeros!, aparecen de la nada, violando todos los conjuros de protección desafiando mi poder y pretendiendo irse sin recibir su castigo por su insolencia!?
El silencio en el lugar era mortuorio, al parecer con el alboroto de la caída habían confundido gritos de desesperación, abucheos y llantos con vítores de alegría. Fai inmediatamente se puso serio al oír el discurso del tal Deimian, Kurogane se adelanto desenvainado la espada.
-Solo te estamos pidiendo salir de esta estúpida arena!, no nos interesa si matas a uno o miles de tus hombres para perpetuarte en el poder!-dijo con poca paciencia apuntando al hombre con su espada.
-vaya….un hombre valiente…pero sé que ni tu ni esos mocosos son una amenaza para mí en cambio…- Deimian dio un paso adelante desafiando al moreno y aanzando en dirección a Fai – ese hombre y ese animal….uno de ellos ha sido, y por su insolencia tiene que pagar.
-Mokona no quiere morir!- grito asustada el animal escondiéndose en las faldas de sakura quien asustada la tomo y la tranquilizo.
-tranquila, no pasara nada, vas a estar bien- mientras sakura la cariciaba mokona emitió el característico "Meyko" .
Fai frunció el ceño ante eso, ese rey le estaba empezando a joder el día, y sabia que su plan de salir sin problemas ya se había arruinado, al parecer este hombre era más hábil de lo que parecía además de tener algo en su poder que no le pertenecía.
-Rey Deimian agradecería si nos deja ir, no buscamos problemas- dijo Fai a la vez que se volteaba y por segunda vez se adelantaba a Kurogane indicándole que bajara el arma. El ninja molesto obedeció confiando en que el mago sabía lo que hacía –Por lo que veo, esta gente esta cautiva acá dentro sin poder salir o entrar, obligada a ver como sus amigos o familiares son asesinados por ti o tal como estos dos; entre sí…..también me di cuenta de que todos pueden oír lo que hablamos…es bastante arriesgado de tu parte hablar con tal seguridad sobre tus dotes mágicos…a menos que tengas alguna carta bajo la manga, no te enfrentarías a mi verdad?
Esta vez el mago comenzó a sacarse los largos guantes que tanto le caracterizaban, tanto para la sorpresa del ninja como de los demás, era primera vez que Fai se mostraba ofensivo con alguien. Es más el ninja pensó que jamás vería a Fai usar su magia después de lo sucedido con Fei Wong.
-je…como lo sospechaba…tu eres el que puede cruzar dimensiones sin usar dispositivos….-el rey dejo caer su capa roja y llamo a sus hombres quienes le trajeron lo que parecía un báculo de oro con muchas puntas.- Pues bien terminemos con esto….para que puedan salir de acá debes luchar contra mi –de un momento a otro el rostro del hombre se torno mas sádico, su mirada y cara a pesar de ser hermosa realmente era una mirada digna de un demonio, su cuerpo se ilumino instantáneamente.
Kurogane observo todo recordando como Tomoyo se iluminaba cuando usaba sus poderes, Fai le toco el hombro tranquilamente.
-Kuro –wanko…necesito que me cuides esto por favor!- el rubio volvió a su mueca de sínico pasándole su abrigo y guantes quedando solo con pantalones y una fina camisa recta suelta muy medieval, de un algodón tan fino que parecía que se le traslucía el cuerpo. El ninja lo miro con desconfianza.
-es kurogane!…y no es necesario quedar en bolas para pelear- dijo este molesto porque parecía perchero, y por que además el rey le dedico una irada lasciva al mago.
-lo siento kuro-pon, es para mayor comodidad haciendo un gesto gracioso, se acerco a Sakura quien contenía a mokona- tranquilas, ya verán que saldremos de acá- dijo acariciando la cabeza de la chica.
-Fai san!, siento el poder de la pluma viniendo de ese hombre…es muy poderoso!- grito mokona asustada
-lo sé, también lo percibí - dijo enderezándose y pasando de kurogane advirtiéndole –kuro-kun…cuando veas que yo este acabando con este idiota debes sacar a los chicos sin dudar.
-mhp…-fue lo único que recibió de parte del moreno.
-ya basta de circo!, debo reconocer que me sorprendió que alguien tan bello y frágil pudiera guardar tal magia….pero bueno…empecemos, que no exista esperanza para estos vástagos ni en este ni en ningún otro mundo!
Fai se puso en guardia, Deimian lo imito, el coliseo estaba en completo silencio, el ninja observaba con atención lo que estaba por suceder.
-Dónde está tu báculo?- pregunto confundido el rey, Fai le dedico una sonrisa ladina.
-lo perdí –dijo sin mas, un recuerdo amargo paso por su cabeza de la vez que yuko le quito tu báculo para pagar un deseo.
-y como pretendes luchar contra mí?- el rey pregunto molesto
-pues así- dijo el rubio levantando una mano de la que salieron sus típicos conjuros morados encerrándolo a él en una especie de escudo.
-Que haces idiota!- bramo el rey a la vez que lanzaba un rayo contra el rubio quien tranquilamente observaba desde su pequeña capsula protectora. Estaba dejando en ridículo al rey.- Pelea Estúpido!
-estas seguro? Pregunto el rubio, sabiendo que este tipo no pelearía limpio.
-que esperas!
El rubio sonrió con malicia antes de salir del escudo y comenzar a correr con una velocidad que sorprendió a los presentes, de la nada guardias armados salieron con armas para proteger al Rey, pero el rubio simplemente los esquivo mientras a alguno los noqueaba con certeros golpes. Sakura y Syaoran estaban sorprendidos, pero el que no podía cerrar la boca era el ninja quien nunca había visto al rubio golpear con intención.
-que demonios!- Pregunto el rey apuntando nuevamente su báculo al rubio que ahora saltaba por las cabezas de los soldados y en un abrir y cerrar de ojos bloqueo el rayo que pretendía partirlo en varios trozos ya que al esquivarlo se desvió a un pilar que cayó hecho jirones. El rubio cayó a las espaldas del rey y cogiendo el báculo de este con las dos manos lo acorralo comenzando a asfixiarlo con este.
-como buen abusador subestimas a tus adversarios Rey Deimian…creo que gane, que tal si dejas que nos retiremos?-pregunto suavemente el rubio, el hombre de cabello azabache estaba furioso a la vez que forcejeaba con el rubio.
-Nunca!-grito a la vez que Sakura emitía un grito que lo desconcentro, alrededor de su cuello apareció una gargantilla que la hería.- si no me sueltas hare que ese collar la electrocute sin pensarlo dos veces.
-puedo matarte si quiero- dijo con un tono bastante oscuro el rubio a la vez que veía como Syaoran cogía a la chica mientras Kurogane se debatía entre intervenir o acompañar a los niños.
-pero no lo harás….si muero, ella también lo hará…a menos que hagamos un trato-dijo Deimian sintiendo que el agarre de Fai cedía un poco- dejo que ellos se vallan …pero a cambio tú te quedas… para ser mi reina.
-AHHHHH!-Sakura volvió a ser electrocutada
El agarre de Fei flaqueo unos segundos en que el Rey supo que el rubio estaba sorprendido. El rey sabía que el mago lo había humillado delante de toda esa gente que ahora vitoreaba al rubio, y eso no podía ser así, sabia además que este joven mago lo superaba en experiencia y magia por lo que no podía dejarlo ir ni ganar, lo único que podía hacer era reclamarlo como el único apto para ser la reina de su reino.
Kurogane apretó las prendas del rubio en su poder al ver que la chica caía al suelo sin que ni el chico, ni él se pudieran acercar. De un momento a otro el rubio estaba rodeado por soldados y espadas que estaban pegadas a su espalda, cualquier movimiento en falso y el mago podía ser atravesado.
-Maldición!-grito ofuscado a la vez que mokona gritaba el nombre de fai
-Está bien, déjalos ir….-acepto el rubio soltando ligeramente a Deimian
-Inteligente elección- sonrió el hombre dándole instrucciones a los soldados que rodeaban a los otros viajeros.- tiene cinco minutos para salir de acá! Si no lo hace la chica pagara!
-que pasara con el collar una vez que estemos fuera!?-`pregunto Syaoran
-dejara de ser efectivo… qué esperan?.. Tienen 5 minutos!-dijo el rey a la vez que Fai era detenido y arrojado al suelos de rodillas mientas le ponían lo que parecían una esposas en las muñecas y pies a la vez que lo seguían apuntando con las espadas.
El Rey se volteo victorioso a observar a la multitud olvidándose de los demás, Kurogane ayudo al chico a levantar a Sakura a la vez que dirigía una última mirada al rubio que ahora estaba de rodillas y en silencio. Maldijo por lo bajo, por qué siempre el mago las hacía de mártir, al parecer todavía no cambiaba esa manía suya de entregarlo todo por el otro…qué acaso las muchas discusiones que habían tenido se le habían olvidado?
-kuro –san- dijo media llorosa mokona cuando ya estuvieron fuera del coliseo, el ninja la miro serio- Fai - san sabía desde un principio que ese Rey tiene una pluma, tal vez este sea un plan para quitársela
-no creo que ese idiota esté dispuesto a convertirse en reina de un pueblo cautivo a cambio de la pluma…tiene que haber visto algo más-desecho el ninja molesto observando el lugar donde estaban, el pueblo estaba deshabitado, de seguro porque todos estaban en el coliseo, las calles eran de tierra y las casas de madera. Finalmente decidieron entrar en lo que parecía una casa vacía. Sakura lloraba suavemente cubriéndose el rostro.
-Fai- san..
-tranquila Sakura- hime, él estará bien, lo iremos a buscar…-syaoran aseguro acariciando el cabello de la chica que ahora reposaba contra sus piernas.
Kurogane pateo un mueble viejo a la vez que lanzaba las prendas del mago contra la pared molesto.
-Ese idiota…si tan solo me hubiese dejado atravesar al maltido rey con mi espada- resoplo el ninja.
-tu sabes que fai san solo quería protegernos –dijo el chico de cabello chocolate desanimado, el ninja guardo silencio ofuscado.
Guardaron silencio unos minutos cuando del collar que tenia sakura emitió una luz azulina que se proyecto en la muralla como cuando hablaban con yuko, inmediatamente apareció el rey Deimian sonriendo.
-hola…quería comentarles que reclamare a mi esposa y deseo que ustedes vean como someto a alguien tan poderoso como él…me percate de que les tiene un gran afecto, eso lo hizo más débil que yo….pero bueno los dejo, solo quiero que vean como sufre su querido mago jajajaja…eso si verán todo lo que le hago ajajajjaa
-qué?!-exclamo la princesa levantándose
-si intentan sacarle el collar a la mocosa-advirtio el rey notando que kurogane y syaoran se acercaban a examinarlo- ella muere…ingenuos…ahora todos creen que puede venir alguien de afuera a liberarlos de mi poder! Por culpa de ustedes viajeros
La mirada que les dirigió esta vez el rey hizo que Kurgogane comprendiera lo que fay había Visto, era misma mirada desquiciada con l que el Rey Ashura provoco a Fai la ultima vez que estuvieron en Celes, la muerte, este rey estaba a un paso de asesinar a todos en ese mundo y por eso el rubio había querido evitar precipitar esa locura.
Por unos segundo no volvieron a ver nada pero cuando volvieron a ver supieron que venia lo peor, estaban viendo una habitación completamente blanca, en el centro estaba arrodillado Fai encadenado a las paredes en el centro de la habitación, el pelo le cubria el rostro pero en su cuello , pantorrillas y muñenas se veian grilletes con piedras rojas incrustadas.
El rey Deimian apareció de nuevo esta vez se acerco para tomar el mentón de Fai y hacer que este mirara en dirección a ellos, este estaba serio, sin expresión alguna mas que de dolor y esto extraño al ninja.
-¿qué le estas haciendo?- grito prácticamente, Fai se sorprendió al oir la voz del ninja y comenzó a forcejear con las cadenas buscando el origen del la voz.
-es inútil querido, ellos están lejos, solo ellos pueden ver lo que hare contigo,….lo que están viendo son grilletes para controlar poderes mágicos elevados, asi es como mantenido a salvo mi reinado, jajajaj hace ya bastantes años aprecio en este coliseo algo que cambio mi vida y mi poder para siempre.-comento sonriendo el rey mientras saca de entre sus ropas una de las plumas de Sakura.
Fai lo miro con odio, el collar que le había puesto había disminuido notoriamente sus fuerzas.
-lo bueno ha sido que he podido fabricar con su poder muchas armas de control masivo a mi favor, como por ejemplo el collar que le regale a la chiquiilla, con tan solo un poco de magia de esta pluma, los principos mágicos de los cristales que llevan estos collares se intensifican más de lo imaginado….y bueno querida reina, tu me has humillado ante mi pueblo…es hora de humillarte yo a ti!
-maldito!-gimio Fai sintiendo una cachetada en su rostro a la vez que el hombre se paraba delante del poniendo su genital a la altura del rostro de fai.
-Noo!-grito sakura apartando la vista a la vez que una descarga eléctrica la recorría a ella y sus compañeros la chica al darse cuenta de lo que sucedió miro sorprendida adelante.
-todos deben verlo, a menos que quieran morir electrocutados- rio el hombre que disfrutaba de ver la angustia en le rostro de los acompañantes del mago.
-detente-dijo Fai agarrando una manga del rey y levantándose a duras penas, no sabia donde estaba el dispositivo que permitía que los vieran , y fuere lo que fuera lo que el rey quería hacer con el no estab dispuesto a que lo vieran sufrir.
-que me detenga? A caso te vas a entregar por las buenas?
-no- dijo Fai esta vez llevando sus manos a la altura de su pecho invocando un conjuro, el Rey sorprendido evito el conjuro con la pluma
-que crees que haces!-espeto dándole un certero puño en el labio al rubio que se tambaleo hacia tras cayendo contra la pared. Inmediatamente una descarga mayor cayó sobre Sakura quien grito de dolor, syaorna corrió a socorrerla pero corrió la misma suerte que ella.
-si te resistes…puedo hacer que el artefacto que lleva puesto esa chica la vuele en mil pedazos, deja de hacer tonteras idiota!- esta ves el hombre dejo que la pluma siguiera colgando en su cuello y se lanzo contra los labios sangrantes de Fai, abusando de su boca sin su consentimiento.
Kurogane sentía que su sangre herbia viendo lo que ese hombre le hacia al mago y a los chicos quienes entre llantos en el caso de la princesa y una mirada angustiada por parte del mocoso estaban soportando tan brutalidad.
-debemos hacer algo, manjuuuu!-grito el ninja desesperándose, Mokona que lloraba a los pies de la princesa lo miro asustada.
-no se que hacer-solloso tapándose los ojos a la vez que todos recibían otra descarga.
Mientras Deimian acariciaba el torso ahora semi desnudo del mago que aun forcejeaba desesperado con el peso de saber que si se rehusaba sakura y los demás corrian peligro.E hombre lamia sus pectorals con avidez, el rubo desvio la mirada perturbado, su estomago se revolvía.
-debo reconocer…que eres un hombre hermoso-susurro el rey en su oído mientras el cuerpo del mago se tensaba –eres perfecto para ocupar el trono de la reina…
-callate –espeto el rubio moviendo su cabeza para que el rey dejara de acariciar su cabello, sin poder evitarlo empujo al rey con su hombro haciéndolo trastabillar y retroceder, Deimian lo quedo viendo enfadado. Alzo un brazo y apretando su mano inmediatamete Sakura comenzó a perder el aire, llevo sus manos a la garganta asustada, syaoran inmediatamente observo la proyección.
-Detente ¡!- le grito al rey, fay se maldjo por lo bajo
-no lo hare hasta que este mago acepte su destino…
-bastardo- musito kurogane viendo como la chica coenzaba a desvanecerse en los brazos del castaño.
-hime!-asustado el chico la apretó contra si
-esta bien…-se enderezo el rebio aun con el peso de las cadenas y los cristales en sus extremidades – tan solo deja a la chica en paz
El rey demian sonrio y bajo sus brazos y se acerco lentamente al cuerpo del ahora resignado mago quien con sus manos esposadas en su espalda y la mirada baja esperaba de pie a que el otro se acercara.
-maldición Manjuu quiero hablar con el mocoso blanco!-grito kurogane refiriéndose a watanuki
-estás seguro?-pregunto asustada
-hazlo –afirmo el ninja mientras veía que de un solo movimiento el hombre rajaba la camisa del rubio y lo lanzaba de espaldas al suelo y comenzaba a besar su torso bajando lentamente.
Mokona proyecto la imagen de Watanuki que en esos momentos estaba ordenando tranquilamente las posiciones que Yuko había cobrado alguna vez.
-oye mocoso!- bramo el ninja haciendo que watanuki se asustara botando un par de cajas
-ah! Ejejeje lo siento-dijo recogiéndolas –kurogane-san…que sucede?
-necesitamos tu ayuda…
-.-.-.-
Fai ya no oia al resto del grupo, de seguro guardaban silencio para que el o se sintiera mal, estaba recostado en el suelo con Deimian besándolo lujuriosamente, sentía un hilo de saliva caer por la comisura de sus labios y sentía asco. Cerro los ojos con fuerza cuando sintió que el otro acariciaba su miembro.
-deja de fingir…eres hombre, a todos nos gusta que nos toquen –se burlo el rey comenzando a bajar los pantalones del rubio quien se tenso apretando la mandíbula. Su cuerpo ya estaba lleno de marcas moradas en los lugares que Deimian había decidido entretenerse por un buen rato además de algunos rasguños por haber querido resistirse, el mago maldecía la pluma que hacía que los dispositivos que le habían puesto le debilitaran tanto.
-.-.-.
Kurogane corria con la princesa en sus brazos mintras que syaoran llebava a mokona, watanuki había accedido a desactivar el collar que portaba sakura y desactivar los conjuros de seguridad del coliseo a cambio de que todos los collares de cristales utilizado para debilitar o controlar a los enemigos fueran entregados a él, tenían tan solo veinte minutos para hacerlo.
-muy bien ñiño- dijo el ninja dándose una vuelta –recolecta la mayor cantidad de dispositivo en lo que queda de tiempo te espero en la cúpula donde esta Fai.
-si- confirmo el castaño pasándole a Mokona –nos vemos
El castaño salió en dirección a los pasillos mientras que el pelinegro, siguiendo las instrucciones de wuatanuki llego a la cúpula donde se supone estaba encerrado el rubio, se encaramo rápidamente al techo donde recostó a la chica y dejo a mokona.
-intenta despertarla….recuerda que cuando llegue el momento debes activar esto –dijo el ninja pasándole lo que parecía una especie de explosivo, apenas abras el techo el mago y yo saldremos para estar con ustedes, recuerda que debes esperar al mocoso antes de activarla.
-hai! –dijo Mokona obedientemente –confía en mi kuro –puppy, ahora ve y rescata a mami!
-grh…-gruño el inja dirigiéndole una mirada asesina –dejate de estupideces!- bramo a la vez que saltaba y se encontraba con varios guardias, finalmente saco su espada y se dedico a hacer lo que mejor sabia hacer.
-..-.-..-
Su rostro azoto contra el suelo tenía toda su espalda arañada hasta las caderas, había hecho intentos de hacer conjuros pero Deimian era más rápido que él y la pluma que llevaba colgando en su cuello lo protegía, ahora sentía como el hombre lamia sus nalgas y su entrada, un escalofrió lo recorrió entero, sentía repulsión.
Apoyo su frente en el suelo gritando de frustración. Jamás nadie lo había tocado así, nunca antes había estado en una situación parecida, ni siquiera en Celes, donde muchos soldados lo deseaban pero por respeto a Ashura jamás lo tocaron, ni siquiera el mismo rey de Celes, si algo debía reconocer era que Ashura le entrego cariño, pero de una manera bastante delicada, de la forma que un padre lo hace con su hijo, muy pocas veces se sintió deseado por su Rey aunque sabía que no le era indiferente, no fue hasta el final de los días de locura del rey que este lo acorralo contra un pilar de la biblioteca y lo beso violentamente.
-exquisito!- Deimian lo saco de sus recuerdos al introducir un dedo en su ano.
-ahhgg-se quejo el rubio mordiéndose los labrios y aguantando las lagrimas de humillación, no podría volver a ver a sus compañeros a la cara nunca más.
-quien lo iba a imaginar…que la reina del mi reino fuese tan poderosa y a la vez tan compasiva, capaz de entregar su dignidad a cambio de simples humanos…
-callate! –grito jadeante el rubio por la rabia y el dolor
-tal vez eres lo que necesito para que mi pueblo deje de intentar revelarse contra mi ¡! Ya sabes que treinta y cuatro años de reinado tal vez puede agotar un poco a la gente –dijo con sarcasmo a la vez que introducía un segundo dedo a lo que Fai respondió arqueando la espalda y aguantando el dolor.
En ese momento Deimian se enderezó para sacarse la parte de arriba de la túnica y descubrir su miembro que al ver al rubio delante de el, en cuatro son su piel malratada se éxito más de lo esperado, rio para sus adentros.
-al menos ahora sabes que a tus amigos no les interesa ver cómo te sacrificas por ellos –se burlo el hombre a la vez que el rubio respiraba agitadamente sabiendo lo que venía ahora.
Kurogane limpio su katana la sangre de los soldados en su capa, rápidamente se volteo y concentrándose lazo un ataque contra la puerta de la cúpula que tal como había afirmado Wuatanuki cedió calleándose en varias partes.
-.-..-.
mokona estaba nerviosa sabia lo que Denia hacer pero temia hacerlo mal, en esos omentos sakura comenzó a despertar, se sento lentamente desorientada, vio como mokona miraba fijamente le aparato entre sus manos y luego a ella.
-sakura –chan
-mokona, donde estamos, que paso con Fai!-pregunto recordando
-Kurogane ha ido en su ayuda, nosotras debemos esperarlos, syaoran –kun debe esztar por llegar.
-cómo…yo no entiendo- dijo la castaña tomado a mokona en sus brazos.
-watanuki no sets ayudando abrirá un portal aca mismo cuando estemos por irnos para que este rey no nos siga el rastro una vez dentro los trasladare.
-gracias al cielo!-dijo sakura aliviada
En esos momentos se oyeron los pasos de alguien, las chicas se voltearon par a ver a syaoran con lo que parecía un saco lleno de…algo. Syaoran al ver a sakura despierta dejo el saco a un lado y se agacho a ver el rostro de la chica.
-como estas?- le pregunto acariciando suavemete su mejilla, la chica se sonrojo bajando la vista.
-mejor, gracias
-bien –dijo el chico tomando el saco y dirgiendose a mokona- acabo de pasar por donde esta kurogane…estaba acabando con los últimos soldados, debemos estar preparados-
-hai!...lo tengo todo calculado- dijo alegre la mokona, ahora que no estab sola se sentía más segura.
.-.-.-.
Lo que vio lo paralizo unos segundos, el era un soldado preparado pero desde hacía mucho tiempo sabia que cuando se trataba del rubio en problemas siempre volvía a sentirse un soldado adolescente, sus emociones se desbordaban haciendo que muchas veces su acciones fueran impulsivas y a veces exageradas. Nunca había querido cuestionarse porque le pasaba eso con el rubio, después de que todo acabo, no fue capaz de volver a Nihon sabiendo que ni Syaoran , ni el rubio tenían donde volver…y aunque el mocoso si podía ir a ver a sakura, Fai estaba condenado a vagar sin un hogar al cual retornar…quizás por eso sentía empatía por el…pero no podía entender por qué verlo así, semi desnudo, con los pantalones a medio quitar, amordazado y derrotado , con un degenerado ad portas de violarlo hacia que su sangre hirviera de tal manera que ahora veía todo rojo.
-Tú!- exclamo sorprendido el rey cubriéndose rápidamente Fai no quiso ni mirar, solo se agazapo sabiendo quien era la persona que había entrado de manera tan bulliciosa.
-maldito bastardo!- bramo el ninja tomando su espada y corriendo en dirección al rey, este apenas reaccionando trastabillo y cayó al suelo, la espada de kurogane rompió las cadenas que mantenían a Fai atado a la habitación.
-mago, watanuki desactivo los conjuros de este sujeto – dijo el ninja sin mirar a Fai quien sorprendido acababa de notar que podía romper los dispositivos de sus manos pies y cuello, sin pensarlo los hizo estallar en pedazo a la vez que abrochaba sus pantalones, tenía tanta vergüenza que no quería mirar al ninja.
-Maldición!...quienes son ustedes- bramo el rey levantándose y sacando la pluma para atacar a Kurogane pero ya no había caso, Fai lo protegió con una barrera –guardias!, guardias! –empezó a llamar.
-che..-se rio kurogane –no creo que quede ninguno vivo a unos varios metros a la redonda
-qu-qué!
-ahora recibirás tu castigo por ser una rata cobarde –kurogane se lanzo confiando en la barrera que Fai le proporciono, efectivamente los ataques del rey no lo alcanzaban, logro herir al hombre en sus extremidades con un certero golpe en el abdominal que subía hasta su brazo derecho, en ese momento Fai se acerco y con su magia le arrebato la pluma que colgaba de su cuello, fugazmente miro de reojo al ninja, humillado.
Entonces Kurogane supo que este tipo merecía la muerte y no era que él lo deseara, sino que se lo había ganado, en ese momento Mokona hizo estallar el dispositivo, los escombros cayeron sobre el rey, cosa que sorprendió a ambos hombres, delante de ellos se armo un camino dimensional y se podía oír como el animal los llamaba.
-kuro-pu!…Fai –san!, debemos irnos ya! – sin pensarlo dos veces el pelinegro tomo de la mano al rubio y salto al túnel para luego ser absorbidos por Mokona, lo último que vieron fue a un herido rey Deimian gritar de impotencia a la vez que llegaban al lugar cientos de personas que antes habían estado encarceladas esperando su turno de morir en los juegos, sin su collares y grilletes, Syaoran los había liberado.
