CAPITULO UNO.

- Realmente, Alice…me estas escuchando?.- pronunció Bella muy contrariada.

- Si si, te escucho Bella…es solo que trato de ver si mañana lloverá, ya sabes…para jugar béisbol.- pronunció con su voz danzarina.

Hacia quince minutos atrás, Bella había entrado al cuarto de Alice con una profunda y desconcertante desesperación. Cuando entro, no había estado muy segura de hablar, pues no era un tema muy…convencional. Además, cabía destacar que a ella no se le daba bien el hecho de expresarse, y menos en esa clase de cosas.

Por todo ese tiempo, había tratado de sacar el tema a colación, pero le resultaba imposible con una Alice tan concentrada y dispuesta a hacer todo menos prestarle atención.

- Bella…entiendo lo que te pasa, pero no puedo ayudarte, porque a mi nunca me pasó, sabes?.- pronunció Alice, sabiendo de antemano que habia metido la pata.

- Entonces…quieres decir que el problema lo tengo yo, verdad? Es eso?- el panico alumbro en su voz.

- No tonta! El problema no es tuyo! Es de él!

- Pero entonces por que me siento así de mal? No se lo que me pasa…- dijo Bella al borde de las lagrimas.

En ese momento, entro Jasper por la puerta, un poco confundido, al percibir emociones tan negativas en la habitación de su amado monstruito.

Al ver la escena, Alice sentada en la cama, y Bella tirada sobre ella en posición melodramática, sabía como debía actuar.

Expandió una oleada de tranquilidad y paz por toda la habitación.

- Jazz…por eso te quiero tanto…- dijo Alice un poco mas relajada, pero a causa de su carencia de visión, no por el problema de su futura cuñada.

- Lo se, preciosa.- pronuncio en un tono tan bajo que Bella nunca escuchó.

- Creo que ser tan servicial, va a cobrar sus frutos esta noche…no crees?.- dijo una Alice muy inocente. Mientras Bella rodaba por la cama, tratando de llamar su atención, Alice se reclinó de tal manera que quedo en una posición muy estimulante y provocativa, extraña situación en ella.

- Espero! Desde que Bella apareció, sabes…ya casi ni tenemos tiempo para nosotros.- fue a tal la velocidad con la que hablaban, que Bella no se enteraba siquiera que estaban diciendo algo. Punto a favor.

- Por lo menos esperemos hasta que se vaya…no podemos con ella aquí, Jazz…o acaso quieres audiencia?

- No, no querida… no puedo esperar.

Mientras Jasper esperaba impacientemente en la puerta, haciéndose el desentendido con el mundo, Alice probo una maniobra evasiva.

- Bella…sabes quien puede ayudarte? Esme. Ella seguro tendrá la solución para ti- dijo una sonriente Alice. Todavía se maravillaba de su momento de lucidez para deshacerse de Bella, en esos momentos muy pesada.

- Tu crees? Pero si ni siquiera me atrevo a hablarle a mi madre sobre esto! Como…

- No te preocupes. Esme es muy abierta, ella te sabrá entender…además, con todos nosotros, ya ha tenido algunos problemas…así que…Ve!- dijo Alice, empujando a Bella fuera de su habitación.

- Pero…

Tiempo fuera. Alice le había cerrado la habitación en la cara, y por dentro, escucho risas sofocadas. Se puso colorada como un tomate.

Salio disparada de allí, dispuesta a hablar con Esme.

Aunque los nervios la consumían, debía hacerlo. Estaba cansada de esta situación.

Encontró a Esme en la cocina, mirando un catalogo de no sabia qué. Tampoco le importaba mucho…Bendita fuese que no estaba con Carlisle...no soportaria espectadores.

- Esme…yo…tendrías un momento para hablar?- pronuncio Bella en voz muy baja. Si fuera por el hecho de que hablaba con un vampiro, estaba segura de que ni la había escuchado.

- Si claro, querida. Que necesitas?- pregunto Esme con su voz angelical.

Hablar con ella no iba a ser tan difícil. Demostraba tanto afecto, y sinceridad, que era difícil…

- Bueno, mira yo…no se…

- Por que no empiezas desde el principio?- dijo Esme tratando de tranquilizarla.

- Es verdad, bueno…es Edward…

- Ya se lo que sucede contigo.

Eso no fue dicho por Esme.

Bella se giro con tal terror, que ni los poderes puestos al máximo de Jasper la hubiesen parado en ese momento.

Rosalie estaba parada en la puerta por donde momentos antes ella había entrado.

Oh, Dios…no.

- Que es lo que sucede con Bella, Rose?- pregunto Esme no muy entusiasmada.

- Lo que le pasa a esta chica es que…

- Que qué?- Bella estaba al borde del colapso. Ni aclarar que se había puesto muy colorada.

- Es que estas frustrada. Frustrada sexualmente.

Un incomodo silencio se apodero de toda la sala.

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holaaa!!

espero que les haya gustado este capitulo cortito

prontamente se desarrollara no como un tema aislado, sino que afectara a toda la familia...

dejenme sus reviews! asi sabre si seguirla, y en que enfatizar mas

nos vemos!!