Naruto y todos los personajes usados aquí le pertenecen al señor MASASHI KISHIMOTO... sin embargo el paring no...
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Juego de Seduccion
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El reloj marcaba las dos y cuarenta y tres desde una esquina de la habitación.
Una marioneta desarmada sobre la mesa.
Un rollo gigante junto a la puerta.
Sus ropas caídas dibujando el camino de sus pasos hacia la pared.
Los moños desarmados, despeinados rodeando su rostro.
La pintura púrpura mezclada con el sudor, esparcida por sus cuerpos.
Sus manos se deslizaron entre las torneadas piernas de la konoichi, mientras su boca descendía por su cuello, deleitado por cada gemido emergido de entre sus pálidos labios.
Se suponía que ella no debía estar allí, sin embargo lo estaba.
Se suponía que él no debía dejarse llevar por sus impulsos, sin embargo se dejo.
Se suponía que estaba en la misión de escoltar, puntualmente, al embajador de la arena.
Pero allí estaba él también, mientras el reloj entraba en la cuenta regresiva de los minutos para que comenzara la reunión.
Dibujo un camino con sus labios sobre su cuerpo desnudo, arrodillándose como si se tratase de una diosa.
Llevándola al extremo del placer con sus húmedos roces, mientras sus femeninas manos se hundían entre los cabellos cortos de su cabeza.
Tsunade-sama la mataría si el embajador no llegaba a horario como se lo había pedido.
Gaara de seguro lo sepultaría si no concurría a la reunión con consejo de la aldea aliada.
Sus cuerpos en ardiente forcejeo, dejándose llevar por la piel, cubriéndose en cóncavo y convexo, cayendo al suelo.
Para ellos no existía nada parecido al tiempo ahora, no existía nada más que ellos y este deseo.
El reloj al otro lado de la habitación marco las tres.
Fin
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Espero que les haya gustado mi primer lemon y mi primer Kankuten.
¡Muchas gracias y besos!