Hola o/
Este es el primer drabble que hago de este fandom. Se me ocurrió después de quedar en un shock emocional y entrar en una depresión por la muerte de Hughes T.T
Me hize fanática de esta pareja, aunque sorprendentemente el drabble no es de amor, si no de amistad. Angst, mi especialidad.
Espero les guste o/ Acepto cualquier tipo de críticas; muchas gracias por leer. Y aclaró que me gusta mucho, aunque los párrafos, su organización... No me agrada de dos en dos.
Por cierto, si existe algún otro error, apenas voy en el capítulo 41 del anime, así que…
FullMetal Alchemist no es de mi propiedad y éste escrito es por y para fans, sin fines de lucro.
PROMESAS
Si había algo en lo que Roy Mustang era experto, eso era el dominar el esconder perfectamente sus sentimientos, como se supone un soldado debe hacerlo.
Aquel día del deprimente entierro del Hughes su corazón se estremecía junto al sonido del choque entre la tierra, el ataúd y las palas; aunado al llanto de su familia y la angustia de saber que no le volvería a ver a esa reluciente sonrisa causaban que se retorciera su estómago.
Si bien Maes había sido demasiado imprudente por enfrentarse a todos los problemas relacionados con los hermanos Elric sin su apoyo, el hecho de escuchar a Riza aclararle que su amigo le escondió los últimos sucesos para ayudarle a ascender al más alto puesto fue un golpe bajo.
Probablemente él fuese su único fiel y honesto amigo, quién le acompaño hasta el final y, a pesar de la distancia y las diferencias que a veces le hacían perder los estribos, lo protegió y buscó, con sus acciones, lo mejor para Roy.
Miró con tristeza su lápida tragando en seco, manteniendo una correcta compostura. Siempre le acompañó, en todo momento. Cerró los ojos; su mirada radiante se mantenía fresca en su memoria. Apretó fuertemente sus párpados hasta hacerlos lagrimear ligeramente y sacudió bruscamente la cabeza un par de veces, consternado. No lograba asimilar su muerte, su pérdida. Expulsó un suspiro deprimente y agobiado.
El dolor podría en cualquier momento atacar su pecho, pero no lo permitiría. Al contrario, lucharía contra él y reprimirá cualquier tipo de expresión que diera a relucir su pesar, porque temía sufrir nuevamente.
Hughes falleció y la causa era el desear ayudarle y apoyarle en lo que le fuese posible, prometiendo lealtad para que Roy lograra ser el Fuhrer y mejorar el estado miserable de Amestris.
Uno, dos, tres secos y silenciosos latidos y se sintió morir, quiso hundirse en esa lápida y reposar eternamente junto a él.
"Debo mantenerme... En pie" pensó, pero la tierra parecía dar vueltas, tirando esa máscara de frialdad, de indiferencia y de falsedad.
La verdad cayó sobre él y lo golpeó como un gancho al hígado. Como un balde de agua fría. Como la muerte propia.
Se dejó caer, arrodillado en el verde pasto frente a su tumba. No se permitía llorar, sin embargo su rostro expresaba miedo, agonía y soledad. Lograría ser quién salvara a Amestris de la fatalidad y la muerte de su camarada, de su amigo Maes Hughes, no sería en vano.
—Lo prometo —susurró decidido, apretando su puño derecho con fuerza mientras lágrimas rebeldes empañaban su vista.
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