Ni Bleach, ni la historia me pertenecen, ya saben a quien pertenece Bleach, y la hsitoria pertenece a una de mis escritoras favoritas Minerva0924 de los cuentos perversos, es este oneshot...asi que cualquier elogio es para ella, yo solo pedi el permiso para adaptarla al Ichiruki


Me llamo Ichigo….

Para ser más exacto y entrar en detalles con mi profesión, soy el agente especial Kurosaki Ichigo, uno de los jefes de la división de servicios especiales relacionados con Acceso Carnal Violento….

Uno de los crímenes más terribles que tiene la sociedad.

Si….

Violaciones…sin importar de quién se trate…

Hombre….

Mujer….

Niños….

Oh por Dios, inclusive los más chicos sufren por las perversiones de los desadaptados

Pero para eso estoy yo, para hacer justicia y terminar con la vida delictiva de esos desgraciados.

Aunque en ocasiones ocurran accidentes y esos desgraciados mueran "accidentalmente" en mis redadas.

Hace semanas investigo con mucho cuidado uno de los crímenes más sonados del momento, no solo por la importancia de los implicados, es algo personal, se trata de la violación y posterior asesinato de mi compañera, la agente especial ….

Kuchiki Rukia…

Aunque yo guardo la esperanza de que ella siga viva, ya que sólo encontramos su ropa rasgada y manchas de sangre.

Doy una vuelta en mi cama y veo la pared con impotencia, golpeo con fuerza el colchón mullido por las noches que he pasado sin poder estar tranquilo y derramo unas lágrimas de tristeza.

Mi mejor amiga puede estar muerta y no puedo hacer nada para por lo menos saber la situación en que se encuentra.

¿Cómo sabemos que la violaron?

El muy cerdo dejó sus ropas manchadas de semen, como si a propósito quisiera que me revolcara en mi cama sin control y con rabia por no poder atraparle. Estoy seguro de que se trata de uno de los violadores en serie que hace mucho tiempo perseguimos con tanto empeño.

Bajo de mi cama y camino hasta la cocina para servirme una vaso con agua, pero me tiemblan los pies al pasar por la puerta del sótano, desde niño le he temido a ese sucio lugar que sólo me trae malos recuerdos. Recuerdos como la muerte de mis padres y hermanas por unos malditos asesinos a sueldo, todo por el dinero de mi familia, teníamos tanto que estoy seguro lo hicieron por encargo, pero nunca pude saber de qué se trataba.

Jamás lo averigüé y todo el dinero quedó a mi nombre, así que si la intención era quedarse con él, jamás completaron las cosas.

Me agarro los cabellos con fuerza y golpeo con furia la puerta que me atemoriza.

- No te tengo miedo- digo suave mientras camino ya cansino hasta mi primer objetivo – no voy a temer hasta que pueda encontrar a mi Rukia.

Encontramos rastros de semen en su ropa, espero pronto tener los resultados para atrapar al degenerado que le hizo eso tan terrible a la prometida de mi mejor amigo, el campeon nacional de kendo y hombre de negocios asociado a las empresas del hermano mayor de Rukia, Abarai Renji, que ahora llora destrozado su muerte….

Pobre Renji, se enamoró tan perdidamente de ella…él que era un completo arrogante y no tenia interes en las cosas relacionadas con el amor, solo pensaba en su carrera y llegar alto, en las empresas Kuchiki pero se enamoró y a los tres meses le pidió matrimonio…

La verdad no le quiero dar esperanzas, pero desde que lo conocí le advertí de los peligros de enamorarse de alguien que trabaje en estas altas esferas de la rama policiaca.

Siempre hay un maldito degenerado que está dispuesto a hacer daño a nuestros seres queridos, en especial a mi pequeña luz…..todo porque servimos a la sociedad.

Si, como lo oyen, mi luz, yo en verdad también la quiero, pero apenas conoció a mi mejor amigo Abarai Renji se enamoró perdidamente. Él, cómo es un idiota al principio no le hizo mucho caso, ya que no queria que pensaran que se estaba metiendo con ella por interes, pero cuando note lo mucho que ella le amaba le hice ver al imbécil de la gran mujer que se estaba perdiendo.

Hoy era el día en que se celebraría la boda y ella simplemente desapareció sin dar alguna explicación.

Ya es de madrugada y me despierto con un dolor en la entrepierna….

- ¡Demonios! – grito de nuevo y voy corriendo a la ducha – ¿Por qué con ella? – me quito el boxer y dejo libre una enorme erección que me atormentaba sin control, me coloco bajo el agua pero nada hace que baje, mis deseos por tenerla han aumentado en forma exponencial desde que estaba en el colegio.

Allí sólo eran inocentes besos, pero por Dios tengo 24 años y los deseos han aumentado de calibre desde que terminamos en el mismo trabajo.

Coloco mis manos de tal forma que pueda apretar el miembro con fuerza, quiero que sea rápido y sin placer, no quiero sentir placer por ella. Sujeto la base de mi miembro y muevo mis manos de tal forma que me vengo tan rápido que no disfruto, pero si llevo el cansancio que implica y la carga sobre mis hombros.

Todo por ella….

Mi amiga Rukia y la novia de mi gran amigo, pero la he de encontrar y cuando lo haga sé que las cosas van a ser diferentes, porque ella va a estar casada y tendrá hijos.

No puedo hacerle esto a mi amigo Renji…..

Nunca le traicionaría, pero lo que puedo hacer por él es encontrarla y llevarla de vuelta hasta sus brazos…..


Camino por las calles, sucias y grises calles desde que ella no está.

Cada mañana me traía un café doble y con sus sonrisas más sinceras o con una de nuestras estupidas peleas me daba el inicio de un nuevo día.

Pero hace unos meses que la notaba extraña, tenía marcas en los hombros y hasta un día llegó con el labio roto.

- ¿Qué te pasó? – le dije en tono preocupado mientras colocaba mi soda fría en sus rosas y dulces labios – ¿No me digas que Renji se atrevió a tocarte?

- No – dijo ella de inmediato – Renji me ama y nunca me ha puesto un dedo encima, creo que estamos enamorados de verdad.

- ¿Entonces? - dije cauteloso esperando que no me mintiera para salirse del tema como siempre por hacerse la fuerte.

- Fue un psicótico que me agarró desprevenida – dijo seria – pero ten por seguro que ese monstruo está controlado – y me guiñaba el ojo.

- ¿Quién fue? – le pregunté pensando en hacerle una visita al desgraciado, sería él y yo en su celda, luego él en el piso muerto y yo con mi venganza finalizada.

- Escapó, Ichigo – me dijo ella apesadumbrada y mirando hacia la ventana– pero ten la seguridad que si tú estás conmigo nada de eso pasará.

Seguro que fue ese desgraciado, pero mi próxima misión es averiguar de quién se trata.

¿Cómo se llama?...

¿Qué hace?...

¿Dónde vive?...

¿Cómo le gustaría morir?...

Yo haría sus sueños realidad y luego rescataría a la princesa de ojos violaceos, para que sea feliz con Renji.

Él se la merece, se la ha ganado. Cosa que no hice yo, pero yo salgo ahora con otra chica que es la ayudante de Renji y es un encanto, se llama Orihime y espero enamorarme de ella.

Sigo caminando y la gabardina negra que llevo se mueve ondeante por el aire frió la de ciudad, los animales corren de mi paso como si supieran las ansias asesinas que llevo dentro, sigo caminando y sin querer me tropiezo con un hombre de cabellos claros.

Demonios…. Mi jefe.

- Kurosaki Ichigo – dijo serio - ¿No se supone que debes estar en el trabajo de la oficina buscando a tu compañera? – y sacando debajo de su manga una carpeta me la entregó algo molesto – se que estas mal, pero han llegado nuevas pistas, así que si queremos saber si vive o está muerta, pues ponte a trabajar ahora – y sacando debajo de su otra manga unas cintas de video – lamento decirlo pero nuestras sospechas son reales, el muy desgraciado la ha violado de una forma terrible y en este video se observa todo con claridad, menos la cara del violador por supuesto, para nuestra desgracia.

- Maldito – dije con rabia – lo voy a descubrir.

- Eso espero – dijo él saliendo con rapidez – tengo un almuerzo con el jefe de distrito, las empresas Kuchiki – y sonriendo algo cínico – el imperio Kuchiki me acosa, el señor Abarai está urgido por encontrar a su prometida – se paró – tu compañera.

- Jefe – dije suave – ¿él ya sabe que la violaron? – y miré a otro lado.

- Si – dijo algo bajo – casi destroza mi oficina ese joven, estaba tan molesto que amenazó por tomar justicia con sus propias manos. Así que te pido dos favores: Atrapa al desgraciado antes que mate a Rukia y calma a Renji o no podremos trabajar.

- Si Yamamoto–sama – terminé sentado en una banca, sólo en ese parque donde ella me acompañaba.

Tomé la carpeta y la abrí.

- Sangre de la víctima sobre la ropa, cabellos arrancados del agresor – eso es bueno pensaba – semen no identificado en la base de datos de criminales sexuales – eso es malo, un criminal suelto que nunca ha sido condenado – sangre procedente de la agresión sexual – el maldito le había desgarrado su intimidad – ella era virgen – lo recordaba, ella nunca se había entregado a nadie y esperaba hacerlo con Renji en su primera noche de bodas.

- No le digas a nadie Ichigo – me dijo suavemente cuando la acompañé a la prueba del vestido, es raro pero ella no tiene amigas, sólo soy yo y pues no me podía negar – pero tengo tanto miedo por la noche de bodas.

- Pobrecilla – dije para mí – tan asustada debía estar.

Camino hasta la delegación y dejo mis cosas sobre la mesa, voy hasta el laboratorio y allá estaba Ishida haciendo sus conjeturas.

- ¿Qué has averiguado Ishida? – le digo con desgano y tristeza.

- Pues – dijo él pensativo – la última persona que la vio fuiste tú Ichigo.

- Demonios – dije molesto – otra vez estamos en ceros.

- No te preocupes – dijo él en la mesa – es estresante, pero vamos a encontrar a Rukia.

- Te lo agradezco – dije serio – pero muévete ¿Si?

- Claro – dijo él diligente.

Ishida no es el que mas respeto me tiene, pero sabe cómo hacer las cosas bien.

- Jefe Kurosaki – gritó la morena ex amante de Renji, Tatsuki se llama la joven, el buen polvo según Renji, pero las cosas no resultaron como para terminar en matrimonio.

- ¿Sí? – me apresuré a recibirle un papel.

- Señor – continuó presurosa – tengo los resultados de los cabellos, de la sangre y del semen en todas las formas posibles.

Se los arrebaté sin control y corrí hasta mi computadora para hacer la comparación.

- Lo quiero digital – le dije.

- Ya los tiene señor – era eficiente la chica.

Lo pasé por la base de datos, sabiendo de mi estupidez, la base de datos de nuevo, la correspondiente de los crímenes sexuales.

- Nada – asustando a mis subalternos – lo siento – dije luego y se me ocurrió una gran idea.

El hombre que la atacó puede ser alguien del trabajo y que Rukia tuviese miedo a denunciar.

Eureka, cambié la base de datos, mientras los miraba a todos, si alguno de ellos le había hecho daño no me alcanzaría la vida para extinguir la suya.

- ¿Qué base de datos desea? – dijo la computadora.

- Central Casos Especiales – empezamos por casa, luego serán los otros.

- Jefe Kurosaki – gritó Toushiro desde la otra computadora - ¿Usted reconoce a esta mujer? – me dijo algo pensativo – es que la vimos con Rukia en varias ocasiones y nunca supimos de quién se trataba.

Dejé la computadora haciendo la búsqueda, caminé hasta Neji y le vi el rostro a la mujer, una pelirroja buscada por prostitución.

- Lo siento Neji – dije seguro – no la reconozco.

- Gracias – se disculpó.

Mientras lo hizo, sonó el timbre que indicaba que las machas de sangre, semen y cabellos habían sido identificados en la base de datos de nuestro propio trabajo.

Maldito ….

¿Quién sería el desgraciado?...

Lo asesinaría aquí mismo….

Y ahora….

¿Urahara?.. No, él está saliendo con una mujer y ha estado en el extranjero en estos días.

¿Toushiro?….. No, es demasiado tradicional.

¿Grimmjow?... Puede ser, ese desgraciado nunca me gustó ….. y la miraba tan extraño, puede ser, le asesinaría al desgraciado.

Caminé lentamente hasta la computadora todos estaban ocupados en sus cosas, así que no se alertaría el maldito, bajo la hoja que bloquea la mirada a la pantalla.

Resultados….

ADN…ENCONTRADO

Sujeto….

Kurosaki Ichigo

Un momento….

¿Yo?...

Caigo sobre mi silla y con incredulidad suelto la corbata que parece querer ahorcarme, parezco empezar a asfixiarme por los resultados de la computadora. No puede ser, jamás le haría daño a mi Rukia, menos ahora que se va a casar con mi mejor amigo.

Estaba mal… la computadora se tenía que haber equivocado…..

Pero, esas muestras estaban en la ropa y la mezcla de secreciones vaginales confundidas con las seminales eran esas…y yo nunca he tenido tal contacto con ella…

Santo Cielo, la sola posibilidad me atormenta, pero ¿Si lo hubiese hecho, acaso no debería recordarlo?...

Una trampa… eso era….

Alguien que me quiere destruir y a mi Rukia….

Apago la computadora antes que alguien lo note, salgo sin prestar atención a los pobres que tratan de llamarme, pero camino a casa y me llevo todas las pruebas…

- Jefe – dijo Tatsuki – ¿Coincidió algo?

- No – mentí antes de salir – no lo sabemos aún, pero la encontraré.

Subí en mi coche y me dirigí a casa, mis cabellos anaranjados se despeinaron con el trayecto y quedó justo en los hombros, hace tiempo no me lo cortaba, dándome un aspecto más tenebroso de lo que pudiera imaginar.

Bajé tan rápido como pude y entré a mi casa, rebusqué en mis cosas y absolutamente nada… debía encontrar una prueba que dijera yo era capaz de hacer esas cosas, aunque sonara tan absurdo.

Busqué en mis cuartos algo que me que me ayudara a salir de dudas, antes que mis compañeros me buscaran, pero lo único que pude fue encontrarme con mi retrato justo en el espejo del baño.

- Sí que lo hiciste – dijo una voz en mi mente – la hemos violado, rey – siguió diciendo sin pausa.

Por los cielos, me he vuelto loco, perder a mi Rukia me ha vuelto loco. Camino hasta la sala, sigue sin haber nada, corro los muebles y nada.

Me veo en el espejo de la habitación y camino hasta verme de cerca.

- Lo hicimos, rey – dijo la voz en mi mente – si quieres un culpable lo tienes ahora – dime ¿Te vas a quitar la vida imbécil?

- ¿Quién eres? – me dije como enfermo por lo que estaba aconteciendo, mientras soportaba unas enormes ganas de vomitar.

- Soy lo que en verdad eres mi estupido rey – dijo muerto de risa – somos el monstruo que no ha soportado ver a su mujer ser feliz con otro.

- Ella no es mi mujer – me dije.

- No lo era – dijo libidinoso – porque esa noche en el parqueadero lo fue, ella y cada parte de su cuerpo fue nuestra hasta que nos cansamos de poseerla por todas partes. Sólo que tuvimos que golpearla para que se dejara hacer, nosotros solo queríamos darle placer y ella no lo deseaba, pero que ingrata es tu amiga. Pero no te preocupes, que estuvimos muy bien y le ofrecimos varios orgasmos en esa noche, es una lástima que ya no esté con nosotros.

- ¿Qué dices? – dije desconsolado pensando en que yo mismo había asesinado a mi mejor amiga.

- Pues si quieres salir de dudas deberías ir al sótano y ver si hay algo que te interese – dijo malicioso.

- ¿Cómo sé que no estoy loco? – me dije sonriendo ante la misma pregunta digna de un demente, preguntarse a sí mismo si en verdad estaba loco.

- Sé que te excitas por las noches con tan sólo pensar en lo que le hicimos a nuestra flor – dijo lujurioso – pobre, nos rogó tanto que no le rasgáramos la ropa, que no le hiciéramos cortes en los delicados brazos, que no le tiráramos al piso con furia, que no le penetráramos con fuerza y luego que no nos derramáramos dentro de ella.-

- ¡Yo no pude ser capaz de hacer eso! – grité mientras corría hasta la puerta de que dirigía al sótano.

- Vamos rey, si en verdad quieres saberlo ¿Por qué no vamos hasta abajo y buscamos los restos de tu querida Rukia? – se reía poseso y delirante mientras yo parecía morir por dentro, tapando mis oídos para no escucharle, pero en verdad de nada servía porque esa voz provenía de mis adentros.

- Yo no le haría eso a Renji – decía musitando suaves palabras en el piso luego de caer al tratar de ir al sótano y no poder de la simple desesperación.

- Está bien – dijo la voz – a él, si le quieres, en verdad es tu amigo, le quieres tanto que conscientemente sacrificaste su felicidad por él, pero mi querido rey, no puedes manejar tus impulsos salvajes que provienen de mí.

- ¿Y qué demonios se supone que eres tú? – dije ya rendido – ¡Contéstame de una buena vez! – camino con desgano hasta que con mis manos temblorosas empecé a correr la puerta hasta que en el fondo vi una pequeña luz.

- Yo – dijo serio ya – simplemente soy tú Ichigo.

Me levanté tal como pude, empecé poco a poco a bajar los escalones que me conducían hasta el sótano, yo nunca había entrado a él desde hace más de 15 años, desde los nueve supe que odiaba este lugar y ahora lo hacía tratando de encontrar cordura en mis palabras.

- Eso es tan loco – decía triste mientras me acercaba a esa luz en el fondo del sótano – yo nunca le haría daño – y pensaba en que con mis propias manos yo pude haberle hecho ese daño tan terrible, violarla y luego incluso …..

No, no, no puede ser, si ella está muerta yo me muero con ella.

Un cuarto tan oscuro como siniestro, eso era el sótano, seguía tal como lo recordaba mi infantil memoria, sucio, pero con algunas cosas que no recordaba haber traído.

Mesas…..

Hojas…

Fotos….

Videos…..

Un televisor, una computadora y una fotocopiadora, todo lo que tendría un maldito demente y enfermo sexual.

Santos cielos, ¿Y si en el fondo soy un maldito demente?

Camino hasta una mesa, en ella hay un bulto, y un poco de sangre resbala por ella, ¿Y si es ella? …..Si debajo de esa tela está mi querida Rukia.

Me acerco muy despacio, camino hasta que mis manos se posan sobre el bulto y ….el bulto se mueve…

Me retiro, retrocedo hasta que puedo colocarme a una distancia prudencial, pero tomo el valor suficiente para revisar y verificar qué es lo que hay bajo él.

Tiro la tela ….. ésta roza el piso con rapidez y sobre la mesa, una mujer desnuda, una mujer de cabellos negros amarrada de pies y manos a cada uno de los extremos de la mesa.

Su cuerpo está lastimado, pero limpio, le han limpiado.

La hemos limpiado rey – dijo la voz – le hemos consentido luego de hacerle daño. La hemos cuidado con mucho empeño, para que no sufra en cada una de las ocasiones que le hacemos el amor.

La miré, se movía ¡Rukia estaba viva!

Pero …..¡Yo le hice daño!...me odio, me odio como a nadie en la vida, cómo pude lastimarla, si yo la amo demasiado.

Camino hasta ella, le empiezo a soltar las manos y los pies, ella abre lentamente los ojos y tiembla cuando me ve.

¿Desde cuándo ella me tenía miedo?... Me maldigo de nuevo….

- Rukia – dije con una voz muy baja – no tengas miedo, soy yo Ichigo.

- ¿Ichigo? – dijo ella con una luz de esperanza en sus ojos, pero se desvanecieron cuando ella trató de alejarse de mi cuerpo para huir de mi cercanía y de mi toque.

- Pero Rukia ¿Te quiero salvar? – dije algo nervioso – te voy a llevar con Renji y no tendrás por qué temer.

- Ella teme porque sabe lo que sigue ahora – dijo la voz en mi cabeza.

- ¡Cállate! – dije agarrando mi cabeza con mucha rabia, quisiera arrancarme la cabeza si con ello fuese posible no escuchar su voz de nuevo.

- ¡Cállate!¡Cállate! – dijo ella nerviosa.

- ¿Tú también lo escuchas Rukia? – dije con una luz de esperanza que demostrara que algo muy extraño ocurría entre esas malditas paredes.

- Hay Ichigo – dijo ella con lágrimas en los ojos mientras me tomaba una de las mejillas – si lo dijiste tu mismo.

- ¿Yo mismo? – dije con incredulidad mientras retrocedía de su toque inmerecido, si yo le había hecho daño, su toque me lastimaba como una llama de fuego - No – dije sin creerlo aún – yo nunca te tocaría.

- Tú no – dijo ella – pero él sí.

- ¿Quién? – perdí el control y me abalancé contra ella, para tomarle y sacarle lo más pronto posible de ese lugar, si era verdad que yo le hacía daño la iba a alejar de mi para siempre.

- Tu otro yo, Ichigo – dijo bajando la mirada mientras se acurrucaba junto a mi cuerpo – ese hombre que me violó en el parqueadero, fuiste tú, me acorralaste contra mi carro y allí me violaste mientras me sostenías contra él, para que no escapara. Y desde esa noche me has violado muchas veces en este sótano – paró conmocionada – por favor, déjame ir, Renji debe estar destrozado, yo no te delataré, sé que no es tu culpa, pero te ayudaremos. Te lo prometo.

- No – dije conmocionado – yo no te hice daño.

- Pero yo sí – dijo de nuevo esa voz, ella corrió para tratar de escapar de mí, pero mis manos la detuvieron.

- Ya lo sabes – dijo él – ya sabes que los dos somos uno solo.

- Si – le respondí – claro que lo recuerdo ahora.

Y claro que lo recordaba ahora, horas antes caminé solo hasta un bar, en donde me emborraché sin control y luego él tomó el control de mí y le hizo lo que durante tantos años le quise hacer a ella y luego la guardó para mí, porque fue él quien la tuvo entre sus brazos esa vez y ahora la tendría yo en vez de él.

- ¿Ichigo? – dijo ella tratando de apelar de nuevo a mi cordura – estuve esperando mucho tiempo para que volvieras hacer tú, no puedes hacerme esto.

- Si puedo – le contesté, porque ya no era él, ni era yo, éramos los dos.

Nuestro objetivo: Tomarla de nuevo, por siempre y para siempre. Aunque la tuviese que dejar encerrada en mí casa.

- Rukia – le dije con los ojos perdidos en mi deseo y la lujuria – serás mía.

- No, Ichigo – dijo sollozando – no me hagas daño de nuevo.

- No seré tan malo – dije cínico, bueno le dijimos los dos, porque una parte de mí quería detenerlo, pero otra no, quería tenerla, su cuerpo, sus labios, todo ella.

- Si lo serás – dijo ella rendida.

- Bueno – sonreí cínico – sólo un poco.

Le tomé de los brazos y la azoté contra el piso, haciendo que empezara a llorar y no sabía los motivos para que me gustara tanto escuchar su llanto descontrolado. Ya estaba desnuda, pero no le iba a tomar en el sucio sótano que tanto odiaba, la alcé con cuidado y la llevé hasta mi sucio colchón mullido y desgastado.

Ya lo sabía, no era por pensar en ella, era porque en esa misma cama estaba ella y la había tomado tantas veces que se estaba empezando a desgastar, la dejé sobre el colchón y me empecé a desvestir.

Sentía su temor al ver como que quitaba la ropa, verle cómo miraba mi entrepierna y cuando bajé la mirada lo noté, tenía una enorme erección que pedía a gritos darle una descarga.

En ella…

De nuevo…..

Como siempre desde que desapareció….

Estaba desnudo, me tiré sobre ella y le empecé a besar sus tiernos labios, ya lo recordaba, yo le partí los labios en esa ocasión, cuando le mordí por no dejar besarla.

Ella lo sabía…

Y me protegía…..

Pero a mí no me importaba, sólo debía tenerla bajo mi cuerpo, suspirando, triste, sola, mía.

Bajé hasta el medio de sus piernas, le besé su intimidad hasta que empezó a ser accesible a mis dedos y a mi lengua.

Subí besando su cuerpo hasta llegar a su boca, ella lloraba destrozada, su amigo desde niña la violaba sin consideración y a él no le importaba.

A mí no me importaba…..

Besé sus senos, hermosos, senos que nunca tocaría Renji…

Jamás sería de él…

Ella era mía….

Tomé sus mejillas y la besé con ternura, ella sólo lloraba y se dejaba hacer, seguro ya acostumbrada a mis tratos y a mis caprichos sexuales.

La penetré …..que paz me da ella…

La penetro …una, dos, tres, más veces, mucha veces.. hasta que me derramo en ella.

- Ichigo – dijo ella con los ojos perdidos – creo que estoy embarazada.

Abro mis ojos con desconcierto, la mujer de mis sueños va a tener un hijo mío.

Ahora la amo más….

- Te amo Rukia.


Doy una vuelta en mi cama y veo la pared con impotencia, golpeo con fuerza el colchón mullido por las noches que he pasado sin poder estar tranquilo y derramo unas lágrimas de tristeza.

Mi mejor amiga puede estar muerta y no puedo hacer nada para por lo menos saber la situación en que se encuentra.

¿Cómo sabemos que la violaron?

El muy cerdo dejó sus ropas manchadas de semen, como si a propósito quisiera que me revolcara en mi cama sin control y con rabia por no poder atraparle. Estoy seguro de que se trata de uno de los violadores en serie que hace mucho tiempo perseguimos con tanto empeño.

Bajo de mi cama y camino hasta la cocina para servirme una vaso con agua, pero me tiemblan los pies al pasar por la puerta del sótano, desde niño le he temido a ese sucio lugar que sólo me trae malos recuerdos. Recuerdos como la muerte de mis padres y hermanas por unos malditos asesinos a sueldo, todo por el dinero de mi familia, teníamos tanto que estoy seguro lo hicieron por encargo, pero nunca pude saber de qué se trataba.


por fin se empieza a poner weno el manga, aunqu todavia Rukia no aparesca T.T