Killer Queen
- Me hace dudar de tu sexualidad el hecho de que tengas tanto vestidos juntos - lo escuchó reír. La verdad es que pensó iba a ponerse serio y a pedirle que se comporte. Esperó escuchar algo como "¿Te estoy haciendo el jodido favor de prestarse un maldito vestido para tu estúpida fiesta de graduación y me sales con esa insolencia?". Pero no. Klaus solo rio, se giró ligeramente y lo vio ahí parado. Sonriente, divertido, para él toda la situación tenía mucha gracia.
- Los vestidos son una obra de arte, Caroline. Y como te habrás dado cuenta me gusta apreciar la belleza.
- Y deben costar una fortuna... - dijo en voz baja. Cuando mandó a hacerse ese vestido ya le había costado bastante caro. Se había paseado varias semanas buscando modelos de vestidos en internet y revistas, modelos de vestidos tan hermosos, tan elegantes y tan lejos de su alcance pues no creía poder encontrar a un modista capaz de reproducir esas bellezas. Por eso se quedó boquiabierta mientras con delicadeza tocaba los bordes y admiraba la perfección de esos vestidos con los que nunca se atrevió a soñar.
- Y bien, ¿ vas a mirar o vas a escoger alguno?
- No me pidas escoger, tardaría horas... están hermosos.
- Entonces permiteme hacerte una sugerencia - avanzó a su lado, después de una corta búsqueda se lo mostró. Luchó para no quedarse boquiabierta pero al parecer no sirvió mucho pues Klaus lo notó de inmediato - ¿qué? Dijiste que querías verte como Grace Kelly.
- Pero Klaus, eso es demasiado...
- Nunca es demasiado para mi... - se detuvo. Caroline no quiso cuestionar lo que iba a decir, solo lo quedó mirando expectante - para una reina.
- Me lo probaré. Ya sabes lo que dicen, que no todo es para todas y eso.
- Te irá perfecto - afirmó muy seguro. Se fue detrás de un biombo. Aunque sabía que Klaus no estaba muy lejos también estaba casi segura que no iba a espiarla. Se puso el vestido al fin, se le acomodaba, o al menos así lo sentía.
- Creo que me va bien - dijo detrás del biombo.
- ¿Crees? Caroline, el espejo está acá afuera. Tienes que salir a verte.
- Bien - ¿acaso estaba modelando para él? "No pierdas tiempo con eso, ya estás aquí, ya le pediste un favor, sal ya". Respiró hondo salió, se dejó ver. Evitó mirar a Klaus a los ojos por un momento, pero como no decía nada finalmente terminó buscando su mirada. Él la miraba fijamente, los ojos le brillaban, su gesto era hermoso. Se quedó sin respiración cuando él empezó a avanzar hacia ella y se colocó justo detrás.
- ¿Cómo esperas que te quede bien el vestido si no lo abrochas? - dijo suavemente cerca del oído. No es que le estuviera hablando al oído exactamente, pero estaba tan cerca que le erizó la piel - ¿me permites?
- Claro... - respondió con voz temblorosa. Al cabo de un par de segundos sintió un leve pero delicioso roce en la parte baja de su espalda. Sus dedos rozaron si piel suavemente y empezaron a abrochar el vestido. Si no fuera por su vampirismo aquellos roces le hubieran sido imperceptibles, pero así... tan cerca, tan suave y tan tentador... entrecerró los ojos, si así se ponía cuando rozaba accidentalmente la piel de su espalda para abrocharle el vestido no quería imaginar que pasaría si sus manos llegaban a tocar todo su cuerpo. Finalmente Klaus apartó despacio sus cabellos para poder cerrar el vestido.
- Listo - dijo él. Pero Caroline seguía quieta le tomó unos segundos reaccionar y separarse, buscar el espejo y maravillarse con el reflejo de ella misma que le mostraba.
- Wow... - dijo al verse. Estaba divina. El vestido le iba de maravilla, Elena bien podía quedarse con el otro bodrio, es más, le había hecho un favor - muy buena elección Klaus - le dijo con una sonrisa mientras se movía de un lado a otro, mirándose de frente, de perfil, admirandose.
- Por supuesto. Te dije que sería algo digno de una reina.
- Vaya que si.
- Lo eres esta noche - ella giró para mirarlo. Sintió estremecerse con esa mirada tan intensa y pura. Él también la admiraba - vas a matar a todos de suspiros, reina asesina - bromeó con una sonrisa encantadora.
- Lo soy - le sonrió y volvió a mirarse al espejo - una reina asesina - todo listo. Tendría un genial vestido esa noche, nada iba a arruinar su fiesta de graduación - gracias Klaus - él asintió levemente. La miró sonriente. Era su reina asesina, lo estaba matando de ansias de amarla.
-
Bueno! siempre aluciné así la escena en que Klaus le mostró el vestido a Caroline, no habia nadie en esa mansión! alguien le tuvo que ayudar a ponerse el vestido *-*
