Los personajes de Saint Seiya no me pertenecen, son propiedad de Masami Kurumada.

Las hojas comienzan a caer señal de que se acerca el otoño, en la Mansión Kido todo permanece en paz pues han pasado ya dos años desde la última batalla contra los Dioses. Los cinco caballero que protegen a Saori Kido la rencarnación de Athena en esta era se han marchado yace unos dos meses, las vacaciones que nunca pidieron los muchachos fueron otorgadas por la chica, siendo muy hábil y difícil de persuadir logro convencerlos de descansar y disfrutar un tiempo a solas y lejos de ella, pues tras varias batallas a cuestas ya era hora de unas necesarias vacaciones para sanar sus cuerpos y almas. La Fundación Graude les patrocinaría dicho periodo de vacaciones.

Seiya regreso al lado de su hermana Seika, viviendo en su pequeño departamento que tenia junto al puerto; Hyoga volvió a Siberia, una vez más necesitaba rezarle a su madre y volver a convivir con sus amigos que había dejado atrás al marcharse; Shiryu se encamino de regreso a los Cinco Picos, al lado de Sunrei , con quien tenia planes de boda ya que gracias a sus hermanos al fin se había atrevido a declarar su amor por ella a los cinco vientos hecho que había alegrado a todos incluso a Tatsumi pues ya todos creían que era la hora; Ikki no se hizo del rogar, en cuanto Saori les dio la noticia al Fénix s ele iluminaron los ojos, por fin se podría ir sin el reproche por parte de sus amigos, Shun fue todo un caso, se negó a irse, pero mas pronto lo convenio Ikki al prometerle llevarlo con él, lo convenció al mencionarle que le enseñaría el porqué de sus ausencias, lo cual animo al peliverde a seguirle. Por fin los cinco chicos estaban viviendo sus vidas, lejos de las batallas y los entrenamientos.

Así pues en la Mansión solo se encuentra Saori junto con Tatsumi y unos cuantos sirvientes a sus órdenes. En el despacho que alguna vez fue de su abuelo, una peli lila se encuentra mirando a través de la ventana, en la calle una pandilla de amigos juega con un balón viejo y sin aire, pero aun así son felices, pues estos niños son amigos y lo más importante para ellos es el hecho de estar juntos.

Al verlos Saori sonríe pues le recuerdan a sus cinco amigos, que un día conoció y con el tiempo ellos llegaron a ser muy unidos, tal vez el motivo de la unión no el mejor, pero da las gracias al cielo por tenerlos a su lado en las buenas y en las malas.

La pelilila sale al jardín para poder observar mejor al grupo de amigos que juegan, al acercarse hacia la puerta del gran cancel que resguarda la propiedad puede escuchar las risas más puras que solo las puede comparar con las de Shun , quién a pesar de haber pasado por tantas cosas aun sigue sonriendo como cuando niño.

Cada imagen que observa la llevan a recordar cada instante que vio cuando niña, ella cuan caprichosa y mimada trato mal a sus amigos, hecho que hoy día aun se lamenta, pero lo que nunca les ha dicho a ellos ni al propio Tatsumi es que siendo una mocosa engreída les envidiaba por ello los trataba mal, por envidia, una envidia que aun recuerda como nació pero que con el paso de los días la ha convertido en amor hacia ellos.

Recuerdos que guarda en su corazón…

Continuará...