Hola, lectores… Bueno, mi nombre es María pero llámenme Sketch y por lo general solo escribo fics en ingles, y mis amigas Melivampiresa y Karo-Simi-Cullen escriben fics en español y han intentado convencerme de escribir uno en español. Creo y espero que me vaya mejor con los críticos hispano-hablantes. Espero que les guste!!

Disclaimer: Todo lo que ven no es mío, solo lo son mis locas ideas XD.

Otra mañana en Forks. Que divertido. Soy Bella Swan y estoy en mi último año de secundaria en la escuela local. Mis padres tuvieron un divorcio complicado cuando yo tenía 6 años y aun me cuesta volver a recordar esos años. El año pasado decidí mudarme con mi padre, Charlie Swan, el jefe de la policía aquí en Forks, debido a que mi relación con mi madre luego de su matrimonio con un tipo llamado Phil, se volvió prácticamente horrible para ambas, así que llegue a la conclusión de que la mejor decisión era venir a Forks con mi papá. No se puede decir que nuestra relación es perfecta, porque para ser sincera es muy incómoda, pero es mejor que vivir en mi antiguo hogar en Phoenix. Sinceramente, creo que todos estamos mejor así.

Como lo mencioné anteriormente, estoy en mi último año de secundaria y no estoy pensando en ir a la universidad aun, pues no tengo el dinero suficiente como para independizarme.

Me vestí para el colegio y bajé a la cocina para desayunar, donde mi padre me espera leyendo el periódico y ocasionalmente dándole mordiscos a su emparedado.

- Buenos días, papá. – Dije con un tono desanimado mientras me preparo un emparedado.

- Buenos días, Bella. Te tengo noticias. – Mi padre dijo dejando el periódico de lado y mirándome a los ojos. Asentí con la cabeza esperando a que continúe. – Creo que he encontrado un muy buen empleo para ti. Por lo menos para lo que te queda del año y debas ir a la universidad. – El dijo y yo fruncí el ceño, preguntándome de que se trataba.

- ¿De qué trabajo estamos hablando? – Le pregunté visiblemente interesada.

- Uno como niñera. – Al momento en el que dice esto, rio amargamente; él sabe que no me gustan los niños. – No he olvidado que eso de los niños te predispone, pero es un trabajo muy importante. Trabajarías para el productor de cine y músico Edward Cullen, y puede que te paguen mucho. Si yo fuera tú, le daría una oportunidad. – Dice encogiéndose de hombros. Muerdo mi labio inferior pensando en si debo aceptar o no. Mi padre tiene razón, tal vez este Edward Cullen me pague lo suficiente para independizarme el año que viene.

- Está bien, papá, pero no puedo garantizarte nada. Esto lo hago únicamente porque quiero ir a la universidad e independizarme, por nada más. – Le aseguro. El asiente con la cabeza y se levanta.

- Tengo que irme, Bella. Llámame si necesitas algo. – Dijo saliendo por la puerta de la cocina. No me molesté en decirle 'está bien' o 'no hay problema'; no tendría sentido. Terminé de desayunar y me fui al colegio.

Estaba en camino a casa del tal Edward Cullen en el viejo pick-up que me regaló mi papá a principio de año. No es el mejor auto, pero por lo menos tengo transporte. Me dirigía por las afueras de Forks siguiendo la dirección que estaba en el periódico y finalmente la encontré. Vi una casa enorme, con amplios ventanales que le dan un estilo abierto. Creo que es un buen ambiente de trabajo, quizás mi papá tenía razón. Baje del auto y me dirigí a la puerta de entrada. Toque dos veces y en poco tiempo un joven vestido de mayordomo atendió a la puerta.

- Buenas tardes. – Dijo sin abrir la puerta del todo. Sonreí ligeramente y le mostré al joven el anuncio en el periódico.

- Buenas tardes. Mi nombre es Bella Swan y he venido aquí por el anuncio de trabajo. Estoy interesada en trabajar aquí. – Dije sin titubear.

- Oh, pase. Mi nombre es Mike y he trabajado aquí por casi un año. La llevare al despacho del señor. Sígame – Dijo caminando a través del pasillo. Lo acompañé en silencio hasta que llegamos a la escalera.

- ¿Por qué les ha sido tan difícil encontrar una buena niñera? – Le pregunté siguiéndolo escalón por escalón.

- Desde que la señora murió hace unos meses, la niña Renesmee se ha visto muy afectada, pues a menudo grita y llora porque quiere a su mamá, y se vuelve insoportable. Desde que murió la señora, hemos tenido 6 niñeras diferentes y el señor está desesperado por encontrar una buena. Espero que usted lo sea. – Tragué saliva audiblemente y pasé una mano por mi cabello. Tampoco sabía que Edward Cullen era viudo. Tal vez esto sería más difícil que lo que creí. Al final de la escalera y después otro pasillo, llegamos a la puerta del despacho.

Mike toca la puerta y una voz proveniente de adentro dice 'Pase'. Mike abre la puerta y avanza. Dentro del despacho, más bien pequeño, hay un escritorio y un anaquel con libros. Sentado tras el escritorio, se encuentra el tan mencionado Edward Cullen, y me impresiono al verlo. La persona que veo es un hombre bastante joven, alto, de pelo color bronce que parecía tener mente propia y tez muy blanca, la cual hacia contraste con su saco de vestir negro que escondía una camisa gris.

- Señor, una joven ha venido porque está interesada en el trabajo de niñera. – Mike dijo. Cullen continuó mirando la pantalla de su laptop antes de responder.

- Dígale que pase. – Respondió con voz aterciopelada y sin mostrar interés. Entre en el despacho lentamente. – Tome asiento. – Dijo mirándome a los ojos. Los suyos eran verdes y tenía una mirada penetrante, tanto, que me demoró unos momentos procesar lo que me había dicho y finalmente sentarme frente a su escritorio. Se sentó rectamente con mirada expectativa.

- Mi nombre es Isabella Swan. Como le han dicho, estoy interesada y personalmente creo que tengo lo necesario para el trabajo. – Le dije firmemente, a lo que él suspiró profundamente y se reclinó sobre el escritorio.

- Bueno, Isabella, ¿tienes algo de experiencia con niños?—Edward preguntó.

- No, no la tengo. Pero no me es necesaria. Tengo la actitud fuerte que se necesita para lidiar con niños difíciles. – Dije con una seguridad que no es nueva en mí. Siempre la he tenido.

- Eso no lo dudo… Mis hijos han sufrido mucho desde que mi esposa Tanya falleció y lo principal que quiero es tener a alguien que los entienda. Si estás dispuesta a darles a mis hijos una oportunidad, entonces habría que probarte. Mi hija Renesmee no es mala o problemática, solo quiere que le devuelvan a su madre, y eso no se puede evitar, es una niña. Si tú le puedes dar aunque sea un poco de ese cariño o le puedes mostrar una manera de sobrellevar lo que no tiene, todo mejorará. Va a ser difícil con ella, pero tengo mis esperanzas. Ahora, Isabella, ¿estás dispuesta a tomar el trabajo? – Dijo clavándome esa mirada penetrante que es capaz de hipnotizar. En ese momento, supe cual era mi respuesta.

- Lo haré. ¿Cuándo empiezo?—Le pregunté. Sus ojos se iluminaron, pero sus demás facciones no mostraron expresión alguna.

- Mañana estaría bien. ¿Puedes?—Preguntó.

- Seguro, no hay problema. – Dije. Él asintió con la cabeza y se levanto después de mí. Abrió la puerta de su despacho y me hizo un gesto para que saliera. Sonreí amablemente y salí del despacho. Mike me esperaba afuera.

- Señorita, ¿Cómo le fue?—Me pregunto sonriendo.

- Bien, empiezo mañana. – Dije encogiéndome de hombros y sonriendo ligeramente. Salí de la casa y desde mi auto pude ver a una niña con el pelo bronce ondulado mirándome curiosamente. Esa debía ser Renesmee. Le sonreí levemente antes de salir en mi auto.

De camino a casa solo pude pensar en cómo me intrigaba Edward Cullen. Lo aterciopelada que era su voz, lo distante que era, como podía entender los problemas que nadie más ha podido entender en su pequeña hija, como no expresó emoción alguna. No llegó a sonreírme ni cuando le dije que tomaba el trabajo, pero sus ojos sí me sonrieron.

Definitivamente, mañana seria un día interesante.

Que piensan? Bueno? Malo??? Por favor escribanme un review!!

Gracias por leerlo!!!