Capítulo uno.
Sucedió después de la boda de Naruto. Él seguía investigando, recorriendo los países y resolviendo disputas locales como un místico ermitaño. Justo en esos momentos terminaba una misión encargada por su viejo sensei, Kakashi, y después de eso tenía en mente hacer una visita a Konoha y quedarse unos días. Luego partiría de nuevo y continuaría con la labor que parecía nunca acabar.
Pero se tomaría al menos una semana. Había algunos asuntos con nombre y apellido que debía atender, o al menos echarles un vistazo. El primero era Naruto; a ese idiota no lo cambiaba ni el matrimonio, y últimamente había adoptado una costumbre que le jodía cada vez más. El rubio siempre, al final de sus reportes innecesarios, le escribía una posdata corta pero filosa. Y ahí estaba el otro asunto con nombre y apellido: "PD Sakura-chan es muy popular con los chicos", "PD Alguien le llevó flores a Sakura-chan", "PD A Sakura-chan la ven mucho con un doctor", "PD Creo que Sakura-chan está embarazada"... Etcétera etcétera...
Claro que sabía que el idiota mentía, y aún así, a veces se llevaba un pequeño susto que jamás admitiría. No se imaginaba a Sakura saliendo con alguien más, pero sí que debía haber alguien más queriendo salir con ella. No era un ignorante. Antes ya ha visto cómo le coqueteaban a la pelirosa, cuando eran más jóvenes, aunque en ese tiempo no suponía un gran problema.
Pero ahora le molesta pensarlo.
Es consciente del amor que ella profesa hacia él y quiere confiar en eso, en que Sakura no se cansará de esperarlo y estará para darle la bienvenida siempre. Se aferraba a ese ideal por más egoísta que sea. Sin embargo, Naruto lograba sacarlo de ese equilibrio mental que practica desde hace unos años y lo hace dudar. ¿Y si Sakura un día decide que él no es digno de sus sentimientos? Tanto daño hecho, tantas lágrimas y malos ratos... Si eso pasara, respetaría su elección.
Así que debía evitarlo. Porque para él, Sakura era su futuro y esperanza, y tristemente no sabía cómo decírselo. Por eso iría a Konoha. Para verla y además recordarle a los buitres que él podía volver en cualquier momento.
Cuando la misión ya está hecha, emprende el camino a Konoha sin demorar más tiempo. No se salva de los ligeros nervios ni de sus fantasías donde resulta que Naruto no mintió. Varias veces se tiene que calmar recordando su despedida, la mirada brillante de Sakura y la silenciosa promesa. Tiene que confiar en eso.
Faltaban dos días más de viaje cuando el halcón voló sobre su cabeza en círculos. Era un mensaje de Kakashi, y temió que lo mandara de urgencia a otro lugar, porque eso arruinaría todo lo que hasta ahora ha venido pensando.
Pero lee el pergamino y entonces aquello ya no es tan malo.
[ Sasuke, vuelve a Konoha de inmediato. Sakura ha desaparecido.]
Directo como el golpe más certero. Hace tiempo que su corazón no se detiene y encoge de esa manera, siente que el suelo está por desaparecer bajo sus pies. Y la imagina a ella en las puertas de Konoha, dándole la bienvenida con la sonrisa más brillante y con calidez hogareña en sus ojos verdes. Luego Sakura se desvanece en lo desconocido.
Se supone que tardaría dos días, pero llegó a Konoha esa misma noche.
Buenas~ Aviso que los capítulos serán cortos, estilo drabbles, y sí, es todo Sasusaku :) Espero que le den una oportunidad y me dejen sus comentarios y apoyo.
Gracias~ (: