Siento mi alrededor desmoronarse, fragmentos de mi vida cual espejo roto se reparten a mi alrededor.

¿Dónde estoy? ¿Qué es esto?

Todo en mi mente es un caos.

Sin poder evitarlo me fije en uno de esos fragmentos luminosos y una amarga y nostálgica sonrisa se plasmó en mi rostro…

-Lucy..-pronunciaron mis labios levemente recordando a esa ruidosa rubia que tan indispensable se había vuelto para mí, rememorando ante mis ojos como nos conocimos-Gray…Erza,Happy..-todos mis recuerdos pasaban ante mi como si de una proyección se tratara, buenos, malas, todos juntos afrontando lo que nos echaran encima ero siempre apoyándonos mutuamente, nunca nos dimos por vencidos.

Me sentía…raro…un cálido sentimiento se extendía en mi pecho haciendo que me concentre en el , el único haz de luz cálida en ese terrible vacío que me rodeaba.

Fuego…igneel…

Poco a poco más recuerdos fueron apareciendo ante mí, nuestras eternas batallas, nuestras destrucciones o como invadíamos el espacio personal de Lucy, casi lo olvidaba…estaba allí tras recibir un ataque que iba en dirección a la rubia.

-No me arrepiento…¡lo volvería a hacer! -Aun flotando en ese espacio sonreí con todas mis ganas, estaba feliz, después de todo protegí a una de las personas más importantes en mi vida- Que hubiera pasado…si nunca hubiera llegado a Fairy tail…?-pienso al mirar los recuerdos y estos parecieron modificarse al escucharme.

Pronto deje de verme en ellos y como algunos se rompían en pedazos, vi a Lucy siendo vendida por el falso salamander, a Hielitos tranquilo y sereno y al bullicioso gremio que estaba acostumbrado más tranquilo que de costumbre les faltaba…yo.

Tampoco vi a Happy, ni a Gajeel por ninguna parte, supongo que influí en demasiadas vidas…no puedo evitar sonreír al darme cuenta…de que soy un elemento indispensable de esta gran familia.

Poco a poco la Luz que anteriormente me rodeo se hizo más fuerte haciéndome cerrar momentáneamente los ojos para después abrirlos con pesar y con un sabor a hierro en la boca.

Lo primero que vi fue a ellos…a mi familia, mi equipo con expresiones de dolor que conseguían partirme el alma.

Ya estoy de vuelta! Que hambre!-sonreí como siempre llamando la atención de todos que no pudieron evitar sonreír ante mi ocurrencia tras semejante golpe con el que preocupe a todos, sobre todo a cierta rubia que aún no me soltaba y que me envolvía con su dulce aroma.

-¡Nunca vuelvas a hacer algo parecido bakka!-sus lágrimas caían cálidas sobre mis mejillas al seguir recostado sobre sus piernas-eres un elemento indispensable para nosotros-con una triste mirada me soltó y no pude más que sonreír y abrazarla

-Ya todo paso Luce~, siempre estaré con vosotros…después de todo soy importante en esta gran familia que formamos-la sonrisa no abandonaba mis labios al recordar como seria todo sin mí, ese elemento que en un principio puede parecer prescindible pero que al final sin él no saldría nada bueno, ese era yo…Natsu Dragneel.