Disclaimer: Todo pertenece a Jotaká.

Este fic participa en el Reto Especial: "¡La Batalla de Victoire!" del foro Scorly: Enemies, Friends and Lovers.


Saber esperar

Por: Daenerys Black


Ella había sido la primera. La primera hija, la primera nieta y la primera sobrina. Por eso cuando su mamá le dice que va a tener una hermanita o hermanito se pone un poco celosa. Ella no quiere a un bebé que llore y no la deje dormir. Y por supuesto no quiere a alguien que le arrebate el amor de sus papás.

Este sentimiento no persistió durante mucho tiempo. Una tarde, cuando veía una película muggle en la que aparecía un niño que iba a tener un hermanito, se entusiasmó con la idea. Si era una niña podrían jugar a las muñecas y si era niño jugaría con él a los autos, aunque no le gustaran los autos.

Los primeros meses del embarazo no fueron muy diferentes para Victoire, pero a medida que la panza de su mamá iba creciendo, el entusiasmo de la niña lo hacía también. Algunos veces se sentaba al lado de su mamá y le leía al pequeño bebé –porque sí, iba a ser un niño–, o más bien le contaba lo que pasaba en los dibujos. Todavía no aprendía a leer.

La panza de su mamá ya estaba muy grande y Victoire temía que explotara y el bebé saliera volando. Preocupada, se acercó a su papá y le contó su inquietud. Este riendo y revolviéndole el cabello rubio le dijo que era normal que la barriga de su mamá estuviera así de grande y que eso significaba que faltaba poco para que el bebé naciera. Más entusiasma que antes, Victoire le preguntaba todos los días a su mamá si el bebé ya iba a nacer. Al principio, Fleur la miraba con ternura y le respondía que faltaba poco, luego su temperamento veela salió a flote y la castigó por ser tan preguntona y hostigosa. Llorando fue a refugiarse a los brazos de su papá. Bill le dijo que tenía que ser paciente con mamá porque cuando las mujeres estaban embarazadas eran más sensibles y también le dijo que tenía que aprender a esperar. Secándose las lágrimas con la manga de su chaleco, le dijo que iba a tratar.

Finalmente había llegado el día. Toda la familia Weasley estaba reunida en los pasillos de San Mungo a la espera del nuevo integrante a esta gran familia. Victoire comía una barra de chocolate y caminaba por todas partes, demasiado ansiosa como para sentarse. El medimago que había atendido a su mamá, salió de la habitación en donde estaba y dijo que todo había salido bien y que podían entrar a ver al bebé, de a pocos. Victoire entró corriendo, tirando la barra de chocolate. Se subió a una silla para poder apreciar mejor al bebé. No era gran cosa, pensó. Era pequeño y no tenía pelo. No podrían jugar a los autos si era tan pequeño… Alto ¡Era una niña!

Victoire sonrió ampliamente, mostrando todos sus dientes de leche. La espera había valido la pena.


Vic es tan inocente que cree que los bebés nacen grandes :3 No sé en qué categoría de "batalla" entraría este fic, batalla a la espera maybe(?

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