Disclaimer: Ningún personaje conocido me pertenece, el motivo de este fic, es por que fue el primero que escribí, en este momento pienso que es bastante bobo, pero le tengo mucho cariño, así que si aun con las advertencias lo lees, te estaré muy agradecida. esta en proceso de re edición a ver si así queda menos ortera...
"Los Black nunca Mueren 2.O"
By: Ginna Isabella Ryddle
Cap.1 "Cartas y Recuerdos"
Diez años... Diez años habían transcurrido ya desde que Harry James Potter había visto ese lugar por última vez, y la emoción ante el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería se alzaba dentro de el tan potente y estremecedora como el primer día, con algunos vestigios casi imperceptibles ya de la famosa batalla final, el castillo lo recibía tan hermoso e imponente ante sus ojos como siempre.
Un escalofrió recorrió al ahora Joven y padre de familia de 27 años ¿cuánto había cambiado su vida? Y ese lugar seguía igual, con nostalgia recordó que su primogénito James estaba por entrar en 2 años. Un sentimiento de preocupación le atravesó el corazón al recordar que el motivo de su visita no era social.
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-¡Harry!- Fue ese agudo grito el que trajo al mundo de los vivos al patriarca Potter -¡Harry!-Insistió la voz más angustiada.
-Pero que ocurre...-inquirió adormilado el joven de cabello azabache al tiempo que se restregaba los ojos - ¡Ya voy Ginny!- Grito ante los insistentes llamados de su ahora esposa.
Desconcertado el ojiverde salió de su alcoba y empezó bajar las escaleras rumbo a la cocina de donde provenían los gritos. Lo que vio lo dejo helado, de alguna forma su hijo James de 9 años había subido a su pelirroja y embarazadísima madre encima de la nevera, volcando la mesa de roble con sus cuatro sillas y desperdigando la vajilla y trastos por doquier, algo sin duda difícil para un niño de 9 años. Y en medio del comedor entre restos de comida, trastes y plumas se encontraba James con cara de culpable mientras una lechuza parda le propinaba furioso picotazos.
-Buenos días pa…-Murmuro el niño de forma insegura, al tiempo que su mirada café se posaba en su padre.
-Ya veremos...- Respondió Harry de forma ligeramente divertida, al tiempo que le arrebataba su varita al pequeño y levitaba a su pelirroja favorita hasta dejarla a salvo en el suelo- ¿Que ocurrió aquí?- Pregunto dando otro vistazo a su maltrecha cocina.
-Pues TU hijo...- Empezó Ginny mientras le daba el beso de los buenos días, a Harry no le gusto como enfatizaba el "tu"- Vio que te llego una carta- Explico señalando a la furiosa lechuza que seguía en la cabeza del niño- Y decidió que sería buena idea llevártela- Dijo con aparente calma mientras se quitaba los restos de panque del cabello- Solo que la lechuza, tenia que entregar la carta personalmente, así que tomo tu varita y ya sabes...un accio! Por aquí..., otro por allá y listo!
-Todo un Potter...-Le dijo Harry mientras la abrazaba por la cintura- Aunque déjame decirte que la testarudez es mas bien Weasley...- Enseguida se arrepintió de sus palabras, Ginny le propino un coscorrón Molly Weasley marca registrada.
-Bueno, venga esa carta- Exclamo Harry aun con risas, intentando aligeran el ambiente, al abrir la carta la sonrisa se borro.
-Muy gracioso cielo…- Exclamo irónica la pelirroja mientras ponía orden con su varita-Corre a ducharte James, que iremos con tus abuelos, y tu Harry...¿Harry?
La pelirroja se dio la vuelta y vio el hombre de su vida sosteniendo el pergamino en un estado como de shock, James y la lechuza ya no estaban.
-¿Ocurre algo Harry?- Inquirió preocupada deteniendo momentáneamente la limpieza.
-Mira y juzga tu misma...- Contesto el interpelado saliendo de su sopor al tiempo que le tendía el pergamino, en sus ojos esmeraldas se leía la preocupación.
Ginny tomo la carta y se acerco a una silla recién levantada pues su voluminosa panza la cansaba con rapidez y empezó la lectura.
Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería
Director: Minerva McGonagall
(Orden de Merlín, Primera clase,
Gran Hechicera, Confederación
Internacional de magos)
Querido Señor Potter:
Todo el profesorado aquí manda saludos a usted y su familia, sin embargo el motivo de esta carta es por razones más complejas que un saludo y por falta de tiempo me brincare las formalidades.
Hace tres días un suceso extraordinario ocurrió en mi despacho y tenemos motivos para creer que el mundo mágico está en peligro otra vez, se que ya has pasado por mucho, y no tienes ninguna deuda con nadie, pero como siempre, esto se nos sale de las manos. Por este motivo pedimos su presencia el día 27 de Noviembre, por favor Harry, Albus te dejo una carta que creemos tiene que ver con esto.
Muy cordialmente.
Minerva McGonagall
P.d.- Un salud a Ginevra, y al pequeño James.
Al terminar la carta marido y mujer se miraron fijamente, el desconcierto y la preocupación se leía en sus ojos, no les quedo de otra mas que esperar al día indicado, y desear que esta vez fuera falsa alarma , y que Merlín fuera generoso.
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Tomando aire Harry se acerco a la verja de Cerdos alados que custodian los terrenos y estos se abrieron reconociéndolo como aliado.
Una nostalgia lo invadí mientras avanzaba el sendero, al mirar el lago y la cabaña de Hagrid ¿cuántas aventuras tuvo ahí?, sin darse cuenta ya estaba en el vestíbulo y una agradable sensación de familiaridad lo acompaño al pasar entre aulas, cuadros y estatuas. Al llegar ante la gárgola que custodia el despacho del director esta se hizo a un lado sin esperar contraseña, así que Harry subió las escaleras mientras otra sensación familiar menos agradable lo invadía.
Ir a ese despacho nunca fue buen augurio.
-Pasa Harry- Se escucho la voz de su ex-profesora sacándolo de sus cavilaciones- Te estábamos esperando- Y diciendo eso le dedico una sonrisa.
Fue entonces cuando Harry noto que no estaban solos, sentada del lado izq. Frente a la actual directora se encontraba una joven de unos diecisiete años que le devolvía la castaña mirada con sumo interés. Era una chica bastante guapa para ser sinceros- Aunque no tanto como mi Ginny- pensó Harry, era de tez clara ligeramente bronceada, aparentemente extranjera le indico su cerebro pues en Inglaterra hace frió así que los bronceados eran mas bien escasos, su cabello era castaño claro...no mas bien oscuro...rojizo...¿verde?...-¡Metamorfomaga!
-Que perspicaz- Comento la joven dándole una sonrisa, fue cuando se dio cuenta que había estado pensando en voz alta.
-Harry, ella es la señorita Black- Presento la directora de manera cortes- Señorita Black el señor Harry Potter.
Entonces la chica se levanto y le ofreció su mano. La directora por su parte tomo asiento detrás del escritorio y Harry noto que todos los cuadros los miraban con interés. Menos Dumbledore y Snape, cuyos marcos estaban vacios.
-Regina Black Sallas- Anuncio la joven con seguridad remarcando el segundo apellido- También tengo madre profesora- Puntualizo girando hacia la aludida.
Harry noto que era más alta de lo que parecía dada su complexión delgaducha, ya observándola mejor tenía algo que imponía, poseía una elegancia y seguridad extraña en alguien tan joven sin duda era una chica peculiar.
Entonces nuestro héroe noto un detalle.
-Black...no es un apellido común en ¿España?...- Menciono viendo a la chica de forma inquisitiva.
-México- Corrigió ella –No, no es un apellido común en mi país, mi padre es Ingles- Explico, al parecer la incomodaba el tema.
-Sirius no tuvo hijos- Exclamo tajante el pelinegro, pensando precipitadamente que era una especie de fraude sobre paternidad.
-No era el único Black…- Comento la joven mirándolo con cierta molestia, tal vez debió ser más prudente al hablar.
-¿Régulus?- Pregunto Harry sorprendido-Regina...ahora entiendo-Agrego contestándose a si mismo- Espera...el murió incluso antes que Sirius...- Termino desconcertado
-Es mi abuelo, mi padre se llamaba Sirius Augustus Black, alguna vez comento que le habían puesto así por un tío, que imagino es el Sirius al que tu te refieres-Dijo Regina en un tono que no dejaba lugar a preguntas.
-Efectivamente- Intervino la profesora McGonagall- Pero no es el motivo de su genealogía por lo que los cite aquí.
-Bien profesora, ahora si no entiendo nada- Se sincero Harry al tiempo que se sentaba.
Entonces la profesora inicio la explicación.
-Harry, creo que para que entiendas la magnitud de este asunto es necesario que te cuente los hechos tal y como pasaron, para esto te pido guardes silencio y no me interrumpas pues mi mente ya no es la de antes y a veces pierdo el hilo- Explico quitando un poco de hierro al ambiente.
Suspiro un poco como evocando los recuerdos y narro- Me encontraba revisando unos documentos en este mismo escritorio, desde la muerte de Albus nadie había movido más que lo necesario y pensé que ya era hora de almacenar el pasado, en esa tarea estaba cuando escuche un fogonazo, la verdad me asusto bastante, y mi sorpresa fue mayor al toparme Fawkes de lo más tranquilo en su percha con un pergamino en el pico, me acerque y tome la nota, para después ver como envuelto en otro fogonazo desaparecía.
Los cuadros de las paredes iniciaron una serie de murmullos comentando el hecho.
-Como imaginaras, después de que Albus nos abandonara, jamás creí volver a ver su Fénix, mucho menos recibir una carta- Explico McGonagall Al tiempo que sacaba un pergamino del escritorio y se lo tendía a su ex-alumno quien pasmado procedió a leer.
Querido Harry:
Si estas leyendo esta carta, es porque, aunque yo no logre vivir lo suficiente para verlo, vencimos, asi que, me duele inmensamente tener que envolverte una vez más en una situación como esta, pero espero entenderás, que algo más fuerte que nosotros te une a este camino.
Dentro de mi investigación para vencer a Ryddle encontré algo que tomara importancia hasta el día en que recibas este mensaje, al parecer el número de aciertos de Sybill asciende a cinco, coméntale a Minerva de mi parte que debería subirle el sueldo, cuando llegue el momento te será rebelada la profecía, mientras tanto, te pido cuides a Regina, su importancia con el tiempo lo sabrás, se que en este momento te preguntaras porque te asigno a ti su seguridad, Y ¿por qué no? Al igual que tu caso ella fue orillada a su destino por otros, incluso por su apellido, confió en ti Harry, ayúdala a encontrar su hogar.
Un saludo desde el mas acá…
APWBD
Un sentimiento muy familiar empezó a llegar a Harry, seguido de otros tantos, primero impotencia, porque una vez mas su mentor le ponía la respuesta frente a las narices detrás de una puerta cerrada, después el enojo de sentirse usado, y por último, al ver a la joven que debía cuidar de pronto ahí, sentada mirando sus pies impotente, sintió atendimiento, claro que sabía que podía sentir ella en ese momento, y se comprometió consigo mismo, para evitar que esa desconocida, corriera su misma suerte, ya había demasiado sacrificio de jóvenes como para toda una vida.
-Creo, que puedo manejarlo-Empezó aun no muy seguro de que aria- Hablare con Ginny, pero no creo que haya problema en que Regina viniera con mi familia, así seria mas fácil cuidarla-termino explicando- claro si no reimporta pasar con nosotros las navidades. Agrego de inmediato dirigiéndose a la aludida, quizás estaba tomando demasiadas decisiones por ella.
-Seria un honor Sr. Potter- Exclamo la joven mirando aun sin mucho entusiasmo hacia la Directora - ¿Qué opina usted profesora?-Cuestiono clavando sus ojos en la mujer.
-Me parece una excelente idea considerando tu situación, de ese modo pueden trabajar juntos y estas bien vigilada, además, quizás te venga bien no estar aquí en el castillo tu solo- Proclamo la McGonagall- Me alegra que todo se haya resuelto de forma tan satisfactoria por el momento, si hace el favor Srta. Black, retírese a su sala común a descansar y a notificar a su familia .
Regina se levanto obediente y haciendo una sutil reverencia salió de la oficina.
-Gracias Harry se que después de lo que te toco vivir lo que menos necesitas es esto- Comento comprensiva la profesora mirando hacia el cuadro de Dumbledore, seguramente cuestionándose también como tantos otros el modo de proceder de su antecesor.
-Justo por eso lo hago, se lo que es tener un peso así sobre ti, no me gustaría que nadie lo pasara, lo mínimo que puedo hacer es ayudar, solo falta ver que dice Ginny- Termino medio en broma, logrando que la mujer le mirara con cariño. La conversación se torno entonces a temas más mundanos, como las travesuras que ahora sucedían en la casa Potter y para horror de Argus Filch, pronto estarían en Hogwarts.
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Sean piadosos :(
