Hola amigos, aquí GTH089 con otra historia que fue inspirada después de la espectacular presentación de nuevo Super Smash Ultimate, disfruten y datos al final del capítulo.
Resumen:
Después de ser invitada al nuevo Smash, Daisy tiene un desafortunado encuentro con cierto líder de los piratas espaciales y una máquina de tele transportación, pero no puede ser tan malo… ¿verdad?
Hola yo soy Daisy, Princesa de los piratas espaciales.
Capítulo 1 – La Princesa y el Dragón
En el reino de Sarasaland…
La mirada de la castaña se posaba con emoción ante la carta que sostenía en sus manos, sus pensamientos pasaban velozmente mientras leía con detenimiento las letras que para ella significaban el comienzo de algo mejor en su vida.
El gran símbolo rojo con la marca personal que usaba Master Hand para el llamado de sus combatientes hacía temblar las rodillas de la princesa del desierto, no por miedo sino por la alegría que la invadía.
"Bienvenida al Grupo Smash"
"Princesa Daisy de Sarasaland – Nuevo Peleador Oficial"
Simples y pocas palabras que hicieron que las lágrimas justificadas brotaran de la princesa, durante mucho tiempo había esperado ese momento y con los años se había llenado de decepción y angustia al ver que cada torneo pasaba sin ser invitada.
-¡DEMONIOS SI, POR FIN HA PASADO!- Daisy grito con emoción mientras levantaba los brazos en signo de victoria ganando gran conmoción de los presentes.
-¿Princesa está bien?- un Toad de color azul pregunto preocupado solo para ser levantado repentinamente por su soberana.
-¡Me han aceptado!, ¡este es el mejor día de mi maldita vida!- la castaña dijo sin importarle el leguaje poco apropiado para una princesa y sin soltar a su fiel súbdito, al mismo tiempo que lo abrazaba de la emoción estrujándolo con gran fuerza.
Daisy grito una vez más de emoción súbita al ver sentir que todos esos años deseando que Master Hand viera su potencial como toda una peleadora se hacían realidad. Mentiría al decir que no sentía envidia de Peach y Rosalina al ser ellas quien había sido seleccionadas para participar en un torneo de pelea y fuerza.
No es que pensara que sus dos amigas no fueran merecedoras de ello, ella sabía muy bien de las habilidades las princesas en la lucha y otros ámbitos, incluso al grado de preguntarse por qué Peach siempre se dejaba capturar por Bowser y no oponía resistencia, aunque dentro de sí sospechaba de que su amiga le gustaba la atención excesiva que cierto fontanero le daba al rescatarla.
Incluso no le sorprendía que los hermanos Mario participara en ese evento, aunque era esperarse del fontanero rojo gracias a su valentía y poder que demostraba en sus aventuras. La sorpresa era igualmente Luigi que a pesar de su evidente miedo comparable con la mayoría de los Toads, el fontanero verde había mostrado habilidad sin igual derrotando enemigos poderosos.
Bowser era de esperarse al ser un ser intimidante y de fuerza excesiva, eso sin incluir que era el enemigo mortal de Mario, los secuaces del Rey de las tierras Oscuras, los koopalings estaban incluidos… hasta su hijo pequeño Bowser Jr. había comenzado hacer su nombre en el mundo de las peleas aun siendo un niño pequeño para los estándares de un koopa.
El pequeño y tierno Yoshi demostraba que no solo era un objeto que podían tirar en un precipicio para llegar a un lugar más alto, sino que era una maquina efectiva de ataque. Incluso el apestoso y avaricioso Wario había sido invitado a pesar de lo desagradable y tramposo que podía ser.
Definitivamente tenía que participar en ese torneo, las ganas de ello la quemaban dentro de ella misma como un fuego incontrolable listo para estallar en un mar infernal y desatar su energía.
Aun así año tras año que el importante evento se realizaba y nunca había llegado a sus puertas una carta de invitación oficial hasta este mismo momento. Siempre era como ayudante junto con los otros seres y personas que no habían pasado las pruebas.
Ella sabía que tenía el potencial para medirse con los más grandes, siempre se sentía menospreciada en ese aspecto, incluso cuando había participado en tantas aventuras con Mario y sus amigos, deportes ridículamente extremos que no eran para personas normales, conductora de carreras en los más difíciles pistas, incluso había tratado las trampas mortales de Bowser que llamaba "Mini Juegos" en sus malditas "fiestas" a las que eran invitados.
Ella ya no era la débil princesa de un reino lejano que había sido capturada por un extraterrestre sicópata.
No, ahora ella tenía la oportunidad de medirse con los más habilidosos seres de todos los tiempos y no dejaría pasar ese momento por nada, aun si tenía que romper huesos y patear traseros de cualquiera que tratara de cambiar su opinión.
Pronto pasado los minutos la princesa recupero la compostura soltando al indefenso Toad que estaba inconsciente por la falta de oxígeno que había sufrido por el entusiasmo de su princesa.
-Upps… disculpa Blue - ella hablo al ver al pequeño Toad azul recuperar levemente la conciencia y lo tomo entre sus brazos para ponerlo de pie.
-No hay problema mi Princesa- el pequeño hongo dijo mostrando su lealtad que lo caracterizaba.
- Sabes que te he pedido que me llames Daisy, ¿acaso desafías a tu soberana y líder indiscutible de tu nación?, sabes que podría desterrarte por tu insubordinación- la marimacho hablo fingiendo un elevado tono de soberanía de la realeza ante la actitud del Toad, siendo que este siempre le llamaba de esa manera para molestar a quien consideraba su amigo.
-Sabe que no puedo mi princesa, como su Capotan de la Guardia Real tenemos códigos muy estrictos que seguir, incluso si tenemos que desobedecer su suprema autoridad- el hongo hablo tomando una pose firme poco mostrada en los Toads muy asustadizos.
Los dos se quedaron viendo un momento hasta que soltaron en risa al terminar esa fingida escena de un caballero y la princesa.
-Eres un pequeño engreído Blue – Daisy dijo dándole un pequeño golpe en el hombro al Toad que solo le dio un gesto de burla.
-Por favor, ayúdame a empacar mis cosas Blue, tengo que alistarme y para partir de inmediato- Ella dijo mientras le entregaba la carta al Toad.
-¿ir a dónde princesa?- El hongo dijo mientras leía con detenimiento la carta y las instrucciones precisas que contenía.
-¡HACIA LA VICTORIA INMINENTE!- Daisy grito mientras daba golpes imaginarios al aire e imaginaba sus hazañas en el futuro – ¡Y PARTIREMOS DE INMEDIATO!-
-Pero ¿y el reino?- el Toad intento hablar con la princesa pero esta ya se había ido muy lejos, ignorando que cuando los sueños se cumplen no todo es como se pensaba.
Ciudad Smash – Cede del Torneo Smash Bros
Horas después…
El enorme movimiento nocturno de la recién inaugurada ciudad Smash había comenzado fuerte y sin signos de bajar de ritmo, las enormes multitudes de turistas y recién habitantes que habían decidido trasladarse a la ciudad más concurrida del universo parecían extenderse por millares de Kilómetros que seguían creciendo sin cesar.
Cientos de especies diferentes de todo el universo parecían convivir sin problemas mientras comenzaban sus actividades nocturnas regulares de una enorme ciudad en crecimiento, la diversión, entretenimiento, educación por los museos, centros de alimentos, clubes nocturnos, centros comerciales y demás comercios llamaban a los posibles turistas y clientes a gastar su efectivo de cualquier sitio del universo en ellos.
Sin embargo dentro de todo ese movimiento singular se encontraban dos seres que acababan de transportarse a un sitio desconocido de la gran ciudad, para la Princesa y el Toad el impactante espectáculo de luces y movimiento de la noche eran particularmente sorprendentes y habían captado toda su atención.
-¡Esto es increíble!- la marimacho grito mientras giraba a ver sorprendida con eso grandes ojos azules los letreros luminosos y las diferentes especies que convivían en paz en un ambiente desconocido para ella.
Daisy no podía contener la emoción y quería correr hacia cualquier rumbo que captara su atención, cada lugar que alcanzaba a ver estaba tan lleno de vida y emociones que estaban esperando por ser descubiertas y ella era la chica indicada para revelar sus misterios.
Ella no podía contener su energía y estaba a punto de correr a cualquiera de esos sitios nuevos en esta ciudad, sin embargo antes de dar un paso más una voz la había traído a la realidad.
-Princesa, debemos presentarnos en los puestos de inscripción para dar de alta su asistencia- una voz de un Toad se escuchó haciendo que la princesa se detuviera de inmediato y volteara a ver a su pequeño asistente rodeado de maletas de equipaje y revisando un mapa del sitio.
-Oh… cierto- un tono de decepción paso por la princesa al ver que no podría disfrutar de todo lo que ofrecía este nuevo mundo, pero rápidamente eso desapareció al recordar porque estaba en este lugar en primer lugar.
-Vamos Blue, si vamos rápido aun podremos disfrutar de este increíble lugar y ver a nuestros amigos- la castaña hablo tomando una enorme maleta sin esfuerzo a pesar de las quejas de su asistente que insistía que una princesa no debía cargar con el equipaje.
-Princesa, insisto que debimos traer a mas ayudante para tratar con todas estas cosas- Blue dijo mientras trataba de ver por sobre la enorme pila de maletas sin mucho éxito.
-Tonterías, ellos están muy ocupados vigilando el reino en mi ausencia, ya tienen muchas ocupaciones como para obligarlos a cargar con esto… además somos poderosos combatientes del Smash y unas cuantas maletas no nos detendrán en nuestro destino a la gloria- la hiperactiva princesa tomo un par de equipaje extra para aligerar la carga de sus asistente.
-Usted nunca cambia…- una voz resignada sonó del Toad al ver el entusiasmo y energía característica de la soberana del desierto, aun así estaba agradecido por compartir la carga en partes iguales y darle espacio para guiar a su princesa hacia el centro de inscripción de los combatientes.
Daisy por su parte no podía pensar en otra cosa más que su reciente noticia, realmente se había apresurado por venir lo antes posible a este sitio, solo le había dado tiempo para asignar las ocupaciones a los Toads más sabios para el buen manejo del reino, incluso había olvidado contactar a sus amigos para informales de las noticas.
Se preguntaba cómo reaccionarían al saber que por fin era una combatiente, seguramente habría una fiesta de bienvenida con mucha diversión y emoción, conocería a todos los peleadores, legendarios héroes y villanos temibles que esperarían por conocerla y sufrir la derrota en sus manos.
Forjaría alianzas fuertes y rivalidades sanas con ellos, su nombre se levantaría sobre los demás y seria aclamada por los miles de fanáticos que querrán presenciar sus peleas y victorias. Aun así trataría de simpatizar con sus compañeros para ser amistades duraderas y rompería los corazones de los guapos guerreros que la admirarían por su destreza.
Pero sobre todo se mostraría así misma que no solo era una princesa de un reino pequeño en un desierto olvidado… NO… ella demostraría que era la mejor maldita princesa patea traseros del mejor y más grande Reino en un desierto olvidado.
-Será grandioso, estoy segura de ello- dijo con confianza mientras seguía al a su Toad personal caminar con dificultades en las calles llenas de gente.
Después de largos momentos de estar caminando y perdiéndose en el camino, la agotada princesa y el hongo habían llegado a un edificio realmente alto y tecnológicamente avanzado gracias a la amable asistencia de muchos puestos de información en la ciudad Smash.
El edifico parecía diferenciarse al resto gracias al enorme símbolo del logotipo del Smash y el aspecto serio que este representaba, a deferencia de cualquier otro edificio que prácticamente era una fiesta andante.
-vaya… me pregunto si habrá sido mala idea no llamar a Peach y Mario antes, esto se ve complicado…- la castaña se dijo a si misma al adentrarse en el reciento que en cierto modo era intimidante.
Dentro del lugar no era nada parecido al exterior alegre y lleno de vida, si no que parecían ser un aspecto de oficinas profesionales y una aduana de cualquier otro lugar. Dentro del recinto había numerosas personas de diferentes especies ayudando a lo que parecían ser los próximos asistentes y combatientes del torneo a regular el papeleo necesario para ingresar oficialmente al mundo Smash.
-Princesa por aquí- el hongo azul llamo la atención de la castaña para guiarla a lo que parecían ser unos Toads claramente traídos del reino champiñón de su amiga Peach.
-Saludos princesa Daisy, por favor permítanos ayudarla con su equipaje- uno de los Toad rojo dijo al mismo tiempo que un grupo de Koopas, Toads, humanos y otras especies de otros mundos que no reconocía comenzaban a retirar sus cosas con sorprendente rapidez.
-Nunca pensé ver que los habitantes del reino de Bowser y el reino champiñón trabajaran juntos- ella dijo sonriendo ante la idea de un mundo en relativa paz.
-Eso princesa es uno de los propósitos de Master Hand, el unir al universo para promover la paz con peleas espectaculares de los seres más poderosos… aunque rara la idea siempre ha dado éxito- un Toad al azar hablo mientras se retiraba con una pesada maleta.
-Tiene perfecto sentido para mí- la ojiazul hablo con confianza mientras volteaba a ver el lugar y buscando cual sería su siguiente paso para comenzar con esta aventura.
-Bien… ¿ahora qué debo hacer para conocer finalmente a mis nuevos compañeros del Smash?- Daisy hablo mientras tronaba los nudillos en signo de estar lista para cualquier cosa.
-Bueno… primero hay que llenar una serie de papeleo para afirmar su participación, luego tendrán que pasar al centro de trasportación para ser analizados y clasificar sus ataques de acuerdo a sus características físicas, después ello tomaran una prueba con los sujetos creados por Master Hand para probar su efectividad en batalla, después medirán sus habilidades con un miembro al azar del elenco oficial smash durante cinco minutos, sus habitaciones serán asignadas con su número de serie al ver el resultado de la pelea que…-
Daisy vio como el Toad rojo hablaba y hablaba sin parar y sintió sus ánimos caer hasta el suelo ante todo el procedimiento de aceptación, su amiga Peach nunca le había contado que era tan complicado y aburrido tener que ser un nuevo miembro del equipo Smash.
Si bien las peleas sonaban interesantes, tomaría mucho tiempo poder finalmente ver a sus amigos para presumir su nuevo puesto y empezar a formar su nombre en este lugar. Su cara de agonía se notaba en la expresiva princesa que comenzaba a quejarse internamente, cosa que no fue desapercibida por su asistente.
-Me parece que yo puedo encargarme del papeleo princesa- Blue hablo haciendo que la princesa hiperactiva cambiara su cara de fastidio a una de entusiasmo en tiempo record
-¿De verdad?- Ella dijo como un niño esperanzado de librarse de los deberes escolares… cosa que no era muy diferente en su reino, que siempre tenía que atenderlo y verificar que todo fuera correctamente antes de ir a salir corriendo a divertirse con cosas mejores como deportes extremos o carreras de autos.
-Si princesa, yo la llamare cuando sea hora de las pruebas de batalla- Él dijo sonriente al ver a su princesa con brillo de esperanza en sus ojos.
-Eres el mejor Blue, apúrate para poder demostrar de que estamos hechos- Ella con una gran sonrisa al ver alejarse a los Toads que comenzaban a cargar gran cantidad de papeles.
-Bien… ¿ahora qué debo hacer?- Ella dijo volteando a todos lados viendo como los diferentes seres de otros mundos continuaban con sus asuntos de papeleo ignorándola por completo.
Pronto a los pocos minutos del tiempo afectaron a la hiperactiva princesa que había optado por ir a unos asientos cercanos donde otros asistentes y peleadores hablan en sus respectivos idiomas extraños. Viéndose rodeada por un grupo de algo llamado "Pokemon" y unos niños combinados con algo como calamares, la princesa Daisy dejo que aburrimiento la abrumara una vez más.
-Bueno, viendo el lado positivo… no tengo que tratar con el papeleo extra... el de un solo reino es suficiente para mí- Ella dijo tratando de ocupar su atención en cualquier cosa que no fuera ver como el reloj avanzaba segundo a segundo.
Su mirada se posó en los puertos de tele transporte a lo lejos que eran destinados para analizar a los nuevos asistentes y peleadores, no podía distinguirlos bien pero podía reconocer a algunos de los antiguos combatientes como esos niños llamados los Ice Climbers y un Lobo estelar que parecía estar enojado por alguna razón desconocida.
Vio unos cuantos asistentes del torneo pasado como unos espadachines y seres mágicos de los cuales ya había olvidado su nombre… incluso vio a Waluigi formado. Resistiendo el impulso de ir a saludarlo se quedó en su asiento al ver la cara de insatisfacción que tenía el fontanero morado… seguramente no había calificado para peleador, ella misma había tenido esa mirada muchas veces con anterioridad.
-Que mal por el pobre Waluigi…- Ella dijo compadeciéndose del subestimado "enemigo" de Luigi – se bien cómo se siente amigo-
Aunque no eran amigos ni nada parecido ella podía respetarlo por sus habilidades en las mismas cosas que ella había participado, él era muy bueno e incluso había ganado torneos de teniss y Go karts importantes. Sin embargo su ambición y actitud similar a los de Wario siempre impedían que formaran una alianza buena y no ser más que simples conocidos.
-Bueno… no voy a ganar nada pensando en cosas así- La castaña sonrió al recordar algo que había estado haciendo antes de transportarse a la ciudad Smash desde su Reino en el desierto.
Sin nada de disimulo metió su mano en su vestido y saco un pequeño papel de la zona de su pecho ganando la atención de muchos de los machos de la zona. Sin importarle en lo absoluto lo que había hecho saco el papel bien doblado donde había hecho unas anotaciones personales.
-Cosas que debo hacer en el torneo smash- Ella leyó viendo como había puntos a seguir escritos con cuidado y un montón de dibujos mal hechos de ella misma golpeando a monstruos y guerreros del Smash, los cuales parecían haber sido dibujados por un niño pequeño.
Lista del éxito asegurado.
1.- Hacer una gran presentación a mis compañeros y no dejarse intimidar por nadie (no será difícil)
2.- Patear traseros y trituras huesos de mis enemigos (oh sí! nena ve por ellos !)
3.- Ganar el corazón de los fanáticos y los apuestos peleadores (ultimo opcional… nah!)
4.- Ganar el torneo y traer la fama al Reino de Sarasaland y sus dominios (LARGA VIDA A SARASALAND HELL YEAH !)
5.- Vencer a Master Hand y dominar el universo y todos sus mundos (opcional definitivamente…)
-mmm… Tal vez este último debería borrarlo- La pensativa princesa se dijo a si misma sumida en sus pensamientos e ignorando que el altavoz había comenzado a sonar y dar instrucciones a sus integrantes. El tumulto de gente comenzó a levantarse de sus asientos y comenzó a formarse en un centro de tele puerto cercano, la nueva ronda de clasificación de peleadores había comenzado.
-Princesa Daisy- Una voz capto la atención de la marimacho y volteo a ver a la persona que la llamaba, para su sorpresa este no era un Toad, sino un humano de aspecto simple causando una leve sorpresa en la princesa.
-Por favor princesa, sígame su pruebas están a punto de comenzar- El humano dijo guiando a la princesa a los puestos delanteros cercanos al tele puerto de clasificación. Por unos momentos silenciosos caminaron sin mucha comunicación hasta llegar casi al frente de la fila, sin embargo la curiosidad de Daisy pudo más que su emoción por comenzar sus pruebas.
-Disculpa, ¿Dónde está mi amigo Blue? Es un Toad de color azul, dijo que vendría para comenzar las pruebas juntos- Ella hablo sin darle muchas vueltas al asunto y yendo directo al punto.
-Su asistente tuvo que quedarse rellenando más papeleo y llegara en unos minutos, no tardara demasiado- Él dijo mientras mostraba el lugar asignado a la princesa, el cual fue justo detrás de cierta princesa de Hyrule que también era recién llegada.
-Bien…- Pronto el humano se alejó y se quedó en el segundo puesto en la fila, detrás de la princesa de Hyrule y delante de los niños calamares.
Minutos más pasaron lentamente para la castaña que no para de mirar a todos lados en busca de su amigo azul, realmente le molestaba pasar tanto tiempo sin hacer nada y más si no tenía a su amigo cerca para conversar un rato.
-¿Nerviosa?- Una voz hablo delante de ella captando su atención.
Justo delante de ella una hermosa mujer con atuendo reales simples pero hermosos de color blanco y rosa, una ornamenta de oro cubría partes de su cuerpo, con un bello color de pelo dorado opaco y una mirada humilde, ojos azules casi tan brillantes como los suyos y una sonrisa que compartía con ella.
-Para nada, estoy emocionada por estar aquí- Ella dijo con confianza haciendo que la princesa sonriera al ver la actitud despreocupada que no se veía en su reino mismo.
-Yo si lo estoy, es mi primera vez en el grupo Smash- La rubia dijo dejando ver que de verdad estaba algo nerviosa por estar a punto de entrar al tele puerto.
-Mi nombre es Daisy y también es mi primera vez en Smash, pero he esperado esto por tanto tiempo, quiero mostrar de lo que estoy hecha- La castaña dijo enérgicamente causando un poco más de nerviosismo en la rubia.
-Soy Zelda, yo realmente no quiero pelear, pero Master Hand nos prometió que ayudaría a nuestro reino a evitar la resurrección de cierto Mal que amenaza con destruirnos, siempre y cuando accedía a pelear…- La chica conocida Zelda ahora dijo en voz baja causando la simpatía y seriedad de la castaña.
-Oh… siento escuchar eso, tienes realmente problemas difíciles en tu propio mundo…- Ella dijo mostrando ese aspecto de seriedad genuina en la realeza en asuntos importantes –Momento… ¿eres la princesa Zelda?, entonces conoces a mi amiga la princesa Peach del reino Champiñón-
-¿Eh? no conozco a ninguna princesa con ese nombre y tampoco ningún reino así… pero me han dicho que hay muchas Zeldas de otros tiempo en este sitio, es comprensible que me confundan con facilidad…- La rubia dijo tratando de asimilar la complejidad de este nuevo mundo.
-Está bien, no te preocupes, por lo que me han contado Master Hand siempre ha cumplido sus promesas- Daisy dijo tomando por los hombros a la rubia con alegría
-Princesar Zelda, pase al centro de Tele puerto para su clasificación- La rubia volteo a ver como delante de ella una luz azul brillaba fuertemente dándole a entender que era su turno.
-Bueno… espero que tengas razón Daisy… tal vez esto sea lo mejor para mi pueblo- La princesa dijo un poco más animada viendo a la castaña que no bajaba su ánimo.
-¡Así se habla! Y más te vale que te cuides por que la princesa Daisy ha venido a ganar este torneo- Zelda miro sorprendida a la soberana del desierto solo para soltar una gran risa en el lugar.
-¡Hey! ¿De qué te estas riendo? – Daisy dijo un poco molesta viendo como parecían burlarse de ella.
- De nada… solo que es la primera vez que veo una princesa como tú y me entusiasma más estar aquí- La rubia dijo con sinceridad calmando a Daisy y haciéndola sonreír una vez más –Espero encontrarnos de nuevo pronto Princesa Daisy-
Y con eso Zelda cruzo el Tele puerto dejando sola a la marimacho que había avanzado entusiasmada por ser su turno, pero al mismo tiempo preocupada por su amigo Blue que aún no llegaba para entrar juntos hacia la siguiente aventura.
Sin embargo su alegría paso a desorientación cuando de la nada un gran estruendo se escuchó en la habitación causando una gran cantidad de gritos y luces rojas que daban la indicación que algo peligroso estaba sucediendo en el lugar.
-Qué demonios…- ella alcanzo a decir antes que una explosión de fuego inundara el lugar y una gran sombra de lo que parecía ser un dragón humanoide morado se alzaba imponentemente sobre la princesa.
Momentos antes…
Ridley, el líder de los piratas espaciales miraba con furia a las diferentes especies inferiores hacer cosas inútiles que eran un desperdicio definitivo de su tiempo, a cada segundo la sed de sangre y ganas de exterminar a cada sujeto de este recinto aumentaba alarmantemente.
Hasta hace poco tiempo había regresado de un enfrentamiento mortal con la detestable cazadora de recompensas Samus Aran y a pesar de haber perdido, pudo comenzar a regenerar su cuerpo con la ayuda de la tecnología de los piratas espaciales causando que su forma actual fuera menor de manera alarmante que en tiempos anteriores donde tenía todo su poder y media varios metros más.
Sin embargo para su sorpresa la cazadora había regresado a terminar el trabajo y aniquilarlo por completo. Esa repugnante forma de vida inferior había tenido la cobardía de llegar acompañada de sus secuaces, dentro de sí mismo sonrió al sentir las ganas de desmembrar a estos nuevos aliados de la infame cobarde cazadora.
Y eso había hecho, a pesar de estar en una pequeña y limitaba forma aún tenía la ventaja en cuanto al terreno, al ver al trio de detestables criaturas caminar sobre una pasarela metálica vio su oportunidad y sonrió con malicia lanzándose al ataque.
Su primera víctima parecía ser un androide de algún tipo desconocido, el ser azul no había tenido oportunidad y con un rápido movimiento de su cola había atravesado al robot causándole una muerte rápida para su disgusto, normalmente buscaba que sus víctimas sufrieran lo suficiente.
El segundo era una variante de humano vestido de rojo y azul al cual también tomo con su garra a velocidad sorprendente solo para sentir como aplastaba su cráneo y dejando inmóvil al instante, no había tenido oportunidad alguna de defenderse y sonrió vilmente al sentir otra víctima tomada por sus garras.
No era de sorprender que la cazadora ya lo estaba esperando con su cañón listo, pero a él no le importaba, simplemente la destruiría aun estando en esa forma pequeña y débil forma a su parecer. Tomando el sombrero de una de sus víctimas en sus garras dio una mirada de burla a la caza recompensas pero antes de siquiera atacarla una luz se hizo presente ante ellos.
En medio del recinto se había presentado una forma extraña, en forma de un guante blanco que se denominaba así mismo Master Hand, a él no le importó mucho eso y se lanzó al ataque solo para ser repelido y golpeado casi hasta la muerte por el misterioso ser en un tiempo sorprendentemente rápido.
Viendo su oportunidad la cazadora apunto su arma ante el dragón espacial, pero antes de recibir el tiro de gracia vio como el guante gigante tronaba los dedos y hacia desaparecer a la despreciable mujer. Intrigado por los sucesos y sin muchas opciones decidió escuchar a Master Hand en contra de su voluntad.
Ese ser… ese ser afirmaba ser un ser omnipotente… un dios… y lo peor es que podía respaldarlo.
Sin embargo este dios tenía un trato para él, había ordenado que peleara en su torneo donde muchos seres del universo competirían para ganar el derecho de ser llamado el mejor de los peleadores o seria desintegrado de la existencia para siempre. Ridley le importaba una mierda esas razones del dios, pero esas palabras habían llamado su atención.
Lo mejor del universo en un solo lugar y eso solo significaba que había nuevas cosas que obtener, mejores tecnologías, nuevas especies a que esclavizar y destruir, nuevos poderes el cual apoderarse y un lugar donde estaba esa maldita cazadora para ser destruida.
Y sobre todo el secreto del poder de este dios y él quería ese poder.
Había aceptado ingresar en su ridículo torneo pero hasta ahora solo lo habían mandado a una sede donde se elaboraba la burocracia y tenía que esperar para poder medirse y destruir a la cazadora. Y ese ridícula pérdida de tiempo lo estaba enfadando bastante.
Deseaba destruir y aniquilar toda la vida, conquistar esta patética tierra cuanto antes, pero en cambio tenía que esperar a que estas cosas parecidas a un hongo humanoide hicieran su trabajo. Pero entonces lo vio, el portal donde esperaba la cazadora y los poderes más grandes del universo al alcance de su garra y ya no podía aguantar más.
Sin decir nada mas Ridley se levantó de su puesto y cargo de energía en sus fauces soltándola en diferentes direcciones sin importarle que alguna de ellas eliminara a las formas inferiores, sus pasos comenzaron a sonar por todo el lugar mientras veía como el caos se esparcía por el lugar.
Con su cola puntiaguda mandaba a volar a las diferentes formas de vida sin mucho esfuerzo, algunos seres parecían hacerles frente pero era rápidamente derribados por la imponente criatura que solo buscaba avanzar hacia su objetivo.
Justo delante de él se encontraban unas criaturas de tipo humanoide combinado con unos calamares, pudo ver el terror en sus ojos infantiles y comenzó a saborear ese terror.
Viendo que parecían no defenderse comenzó a golpearlos con su cola volando a volar algunos, pronto ellos empezaban a contraatacar con alguna especie de líquido de colores que de hecho comenzaba a causarle gran cantidad de dolor en su piel.
Viendo que estos seres en número superior eran una mínima amenaza a tomar en cuenta decidió acabarlos de un golpe, juntando nuevamente energía en sus fauces arremetió contra los seres mandándolos a volar con grandes lesiones en el proceso.
Sin cerciorarse si estaban vivos o muertos continuo sus paso solo para detenerse ante uno de esos niños calamar que trataba de levantarse con dificultad. Sonriendo malignamente bajo su garra y tomo por la cabeza al ser de tono anaranjado y su sucia lengua paso por sus colmillos.
Hace mucho que no había comido algo y este ser inferior era un bocadillo perfecto.
-¡Hey tú! ¿Qué crees que estás haciendo sucia copia bastarda de yoshi?- Una voz irritante llamo la atención del líder de los piratas espaciales solo para mirar hacia abajo y ver lo que parecía ser un humano de género femenino de melena castaña, ropajes ridículos amarillos y un gesto de enfado ridículo incluso para los de su especie.
-Comiendo un bocadillo, ¿acaso eres estúpida o algo así humana?- El dragón hablo abriendo sus mandíbulas para darle una mortal mordida al Inkling pero pronto sintió un dolor en la parte inferior de su cuerpo obligándolo a soltar a la criatura.
Volteando para ver a su agresor vio de nuevo a la misma humana ahora con una especie de palo metálico la cual preparaba para otro golpe en su pierna. Sin pensarlo movió su cola para golpearla pero esta Daisy salto para golpearlo en el rostro alargado del pirata espacial.
Gritando de dolor vio como la humana se escabullía con su presa para pasársela a otra criatura que se llevó su alimento rápidamente. Con furia vio como el humano que se había opuesto ante el miraba con determinación aun sosteniendo la barra metal con fuerza.
Él iba a matar a este humano como la había hecho con tantos en las colonias que había asaltado anteriormente, no solo la mataría si no que la haría sufrir y gritar por una muerte rápida que nunca llegaría.
Ridley se abalanzo sobre la princesa, pero el pequeño espacio limitaba sus movimientos dándole al oportunidad a la castaña de golpearlo con su palo de golf, la marimacho había cambiado su actitud a una seria, pero no podía evitar sonreír al enfrentar a esta criatura que había herido a muchos peleadores y asistentes haciéndolos huir despavoridos, siendo ella la única que se había quedado a detener al monstruo.
Pero pronto noto que el gran tamaño de la bestia hacia que sus ataques fueran siendo ineficaces a cada golpe y pronto su palo de golf se había doblado por la dureza del dragón. Eso no la detendría, pronto su juego de ataque fue a patadas y golpes, con la misma potencia que los daba en esos partidos de futbol con sus amigos, muy vistosos pero potentes, tanto para hacer retroceder incluso al rey koopa.
-¿Qué te parece esto?- Ella dijo con confianza sin notar como la enorme garra de Ridley se abalanzaba contra de ella y estrujándola en un agarre mortal.
-Patética criatura ¿no sabes quién soy?- Ridley hablo acercando peligrosamente a la princesa a sus fauces, solo para recibir un fuerte puñetazo de la princesa que había tenido la fortuna de no quedar totalmente atrapada por su garra.
Aunque a Ridley no le había dolido ese golpe en lo absoluto ciertamente lo había sorprendido, siempre que aparecía en alguna colonia, algún grupo de soldados o seres alienígenos siempre se había acostumbrado a ser visto con miedo y desesperación.
Ahora aquí se encontraba con un ser inferior de una especie que había matado por miles, que lo miraba con furia y determinación, intentando liberarse y no para escapar, si no para enfrentarlo. Pronto sintió como uno de sus colmillo se aflojaba y con la garra que tenía libre la movió hacia su mandíbula y toco el colmillo que había sido golpeado causando que cayera al instante.
Ridley vio su diente en el suelo y aunque sabía que en cada uno de sus ataques a sus enemigos perdía una cantidad importante de colmillos y que estos volvían a regenerarse, no pudo evitar sentir un toque de ira al ver que este desecho de ser le había tirado un diente de un golpe, no le importaba que fuera suerte o habilidad, tenía que pagar al respecto.
Con furia levanto su mano y aventó a la princesa al comando de control del puerto de tele transporte haciendo que chispas salieran del centro de mandos que la maquina había sido dañada, para sorpresa de Ridley la princesa se había levantado y no lo veía con miedo, no… lo veía con gesto de desafío y felicidad, como retándolo y hacerle ver que no le tenía miedo.
-Piensas que eres muy fuerte ¿no?, he recibido peores palizas de Bowser en un juego de Tennis- dijo mientras escupía sangre de su boca hacia la dirección de Ridley.
-eres solo una lagartija sobre desarrolla, ¿acaso crees que te tengo miedo?- la castaña hablo mientras caminaba hacia la criatura.
-yo soy la Princesa Daisy, he venido a patear traseros y triturar huesos, no dejare que una lagartija escupe fuego me diga lo contrario- fue entonces que Daisy trono sus nudillos y su cuello lista para otra ronda.
Ridley vio esa mirada de decisión y por un momento pudo ver en ellos los ojos y la mirada de la cazadora, todo el odio, voluntad y desafío que se oponían ante su misión de destruir y gobernar lo que quedara del universo estaban en esos ojos y esa sonrisa engreída.
No pudiendo resistirlo se abalanzo sobre la princesa sin importarle que muriera con rapidez su presa, el necesitaba matarla y asegurarse de no ver esa mirada de nuevo.
Por un momento Daisy vio como el líder de los piratas espaciales se aproximaba con ira hacia ella y unos instantes en su mente pensó que era mala idea no haber corrido por ayuda y enfrentar esta situación con una mayor ventaja numérica.
Pero luego recordó el porque estaba en ese lugar, el de probarse a sí misma y mostrar que no era otra princesa en apuros, el de superarse en cada aspecto y a los demás que se encontrara… ella era una verdadera luchadora del Smash ahora.
-Este es el mejor día de mi maldita vida- se dijo a si misma al ver reflejada si figura en los ojos sin misericordia del Ridley.
Pero todo se fue a la mierda al sentir como sus huesos y órganos internos colapsaban con el impacto de la bestia, desconocido para los dos peleadores la dirección del impacto los había dirigido su rumbo del tele transporte anteriormente dañada por la pelea, metiendo a las dos figuras en la zona de clasificación al cual haber sido averiada gravemente en el ataque del pirata espacial ya no estaba preparada para transportar a dos seres al mismo tiempo.
Sin nada más los dos comenzaron a gritar del dolor al sentir como sus moléculas eran separadas para ser transportados sin poder hacer nada al respecto. Para todos los todos los que quedaban en el recinto solo podían oír el rugido de una bestia temible y el grito de una princesa antes de detenerse abruptamente seguido de una gran explosión de la máquina.
Y llevando a las dos figuras muy lejos donde se desconocía su destino.
Todo se mantuvo en silencio hasta que los pasos apresurados de varios sujetos se hicieron presentes, las figuras características de los principales personajes del Smash se hicieron presentes solo para ver el desastre causado.
-¿Qué demonios paso aquí?- uno de los miembros hablo solo para no recibir respuesta alguna.
FIN DEL CAPITULO 1…
Hola a todos, espero estén bien amigos y a los nuevos lectores que han leído este intento de historia.
Pues así después de la presentación del nuevo Smash y la asombrosa revelación de los personajes de la Princesa Daisy y Ridley quede impresionado y ansiando mas de este juego
Otros de mis personajes favoritos. Daisy se ve tan hermosa y genial, Ridley se ve como un desgraciado poderoso homicida así que era inevitable que hiciera una historia de ellos dos juntos.
Aun asi la inspiración salió de una imagen en tumblr que vi, imagen que es propiedad de supersatansister y del cual no tengo ningún derecho, pero que esta como portada de esta historia.
Otra inspiración fue la película de "The Fly" (o La Mosca en español) la cual si no la han visto básicamente trata de un científico se mete una máquina de teletransporte ignorando que había una mosca con él y al salir gana asombrosas habilidades sobrehumanas, pero por desgracia todo viene con un costo muy alto (sin spoilers).
Aunque no seguirá el rumbo de esa película hay que esperar para ver que cosas le deparara a nuestra princesa favorita.
GTH089 fuera…