JONATHAN & MARTHA KENT
Hola a todos, espero disfruten mucho de la historia, siempre que veo a los padres de Clark creo que son grandes personas y me encantaría hacer toda una historia donde indiquen como se conocieron y como es que llegaron a estar juntos. Ir descubriendo sus valores y sus miedos pues son personajes iconicos y realmente son quienes formaron a Superman dándole esa humanidad y valores que no todos poseen.
Los personajes no me pertenecen y esta historia no tiene ningún afán de lucro.
Si les gusta, les invito a seguirla y comenten algo por favor, para saber si les agrada o no. Así mismo visiten mis otras historias, estoy segura que si esta les agrada las otras también.
Dejo como ambientación la siguiente melodía y así la pueden buscar en Youtube.
Platina Jazz - Gravity (from Wolf's Rain)
Capítulo 1. Una invitada especial.
Una nueva integrante se había unido a la familia Kent, que, por mucho tiempo tenían cenando en familia en navidad solo sus dos integrantes restantes, Martha y Clark Kent. Así que ambos se encontraban emocionados por el acontecimiento y es que la novia de Clark, Lois, rompería esas solitarias cenas de familia que a pesar que las disfrutaban, seguían siendo algo tristes, tal vez esta chica había llegado para quedarse en ellas el resto de la vida de los Kent.
Martha veía muy enamorado a su hijo de aquella reportera y la verdad le agradaba verlo así, además parecía una buena chica, aunque de carácter fuerte, eso se notaba incluso por lo arriesgada que es al sacar una buena nota, tal vez eso es algo de las cosas que le agrado a Clark, que es valiente además que confiable, pues ahora Lois conocía la verdad acerca de su hijo y también guardaba el secreto.
Todo esto pasaba en la mente de Martha mientras acomodaba las cosas para la cena navideña, su hijo dijo que traerían la tarta de manzana como postre, así que le había dejado un lugar muy céntrico muy cerca del pavo relleno y los arándanos. Entonces escucho ruidos en la puerta de la casa, seguidos por la acostumbrada voz de Clark.- ¡Mamá, ya llegamos!- Decía mientras le abría la puerta de la casa a Lois para que entren a la casa.
La señora Kent se quitó el mandil, lo colgó en el gancho para este en la cocina y salió a recibir a su hijo, la casa estaba inundada de olor a comida caliente, un extraño olor familiar y acogedor que bueno, Lois no estaba acostumbrada, su vida había sido bastante nómada debido a la profesión de su padre de modo que Clark y su familia le parecían un sueño.- Bienvenidos.- La voz de la madre de Clark hizo reaccionar a Lois regalándole una de sus mejores sonrisas, la verdad era que ambas mujeres estaban un poco nerviosas de conocerse al fin.
Clark fue al encuentro de su madre y la abrazó alzándola un poco mientras esta le daba un beso en la mejilla.- ¡Bienvenido hijo, feliz navidad!- Para luego reír un poco, Clark siempre había sido así de cariñoso con ella, más desde que se mudo a Metropolís y se convirtió en Superman. Y Martha valoraba el sacrificio de su hijo y su valentía, con cada encuentro siempre temía por la vida de su muchacho, como no hacerlo si es lo único que le queda en la vida, sin embargo siempre supo que el regalo de Clark al entrar a su vida, no sería solo para ella, sino para toda la humanidad, algo que Jonathan y ella tenían muy presente desde el día que su hijo los encontró.
Al bajarla, esta le acomodo el cabello y miro hacia Lois, para luego acercársele y abrazarla.- Bienvenida hija, esta es tu casa.- Dijo sincera y sencillamente la anfitriona de la casa. Los ojos de Lois se agrandaron y tardó en reaccionar, pero correspondió al abrazo de la madre de su novio. Toda esta actitud era muy diferente a lo que ella estaba acostumbrada a pasar las navidades, que eran usualmente trabajando en algún reportaje, o reuniéndose con su hermana y su padre, en una cena al estilo militar donde primero tenían que pararse firmes y dar su reporte de su tiempo en servicio como lo llamaba el General Lane.- Gracias por la invitación.- Susurro apenas la reportera que se estaba sintiendo una niña pequeña y es que la costumbre del trabajo, estaba tanto en ella que seguía un caso esa noche, un posible intento de un atentado para robo de un avión comercial, sin embargo, Clark le hizo ver que todo iría bien y que sería bueno que sus dos mujeres más queridas se conocieran, además que si algo pasaba, él iría personalmente a arreglarlo y le daría la nota a ella, si así lo deseaba, era navidad, tenían que disfrutar un momento en familia.
La anfitriona de la casa les pidió que se pusieran cómodos y les ofreció algo de beber, esa noche había mucho frio así que un poco de chocolate caliente les vino perfecto, Clark había encendido la tele y dejado en un programa navideño para disfrutar de las melodías. Sin embargo Lois estaba parada frente a una repisa junto a la chimenea donde veía una foto de los Kent todos juntos, el papá de Clark lucia muy orgulloso de él abrazándolo, de hecho cada uno lo flanqueaba en el abrazó, sin embargo su mirada de complicidad con la señora Martha era evidente, era como si supieran que habían criado a el mejor hombre que habían conocido en toda su vida. Y Clark apenas había salido de su graduación de preparatoria.
Cuando escucho que casi terminaba de servir la bebida, Clark fue a ayudar a su mamá con las bebidas.- Vamos hijo yo puedo sola.- El hombre reía y se negaba.- Déjame a mí, que tu ya hiciste mucho, de perdido que yo lo lleve. Pero cuando llegaron encontraron a una Lois inmersa en la foto y es que se preguntaba cómo eran los padres de Clark Kent para haber criado a un hombre con todos esos ideales y valores, que hasta era difícil de creer que existiera y solo es un sueño.
¿Lois?- Pregunto Clark, estando a su lado, la reportera se sobresalto dando un pequeño salto.- ¡Clark!- Dijo poniéndose un poco roja al ver que solo la estaban esperando a ella para retomar la convivencia familiar.- Perdón.- Dijo mientras tomaba la taza de chocolate que Clark le tendía. Yendo a tomar asiento junto con él en esa sala tan clásica, que sin duda tenia años con ellos. Al dar un sorbo a la bebida, para tranquilizarse un momento, entonces se dio cuenta del espacio dejado en la mesa y recordó que le había dicho a Clark que ellos llevarían el postre, cada vez se ponía más y más roja y esperaba que la taza sea lo suficientemente grande como para que le tapara la cara.
Tanto Clark como Martha notaron el cambio y por inercia siguieron su vista, viendo también el espacio vacío y ambos comprendieron. Clark comenzó a reír pues entendía que es lo que estaba pasandole por la cabeza a su novia y Martha se apresuró a decir.- Hija, no te preocupes, no pasa nada… Es solo una tarta… Podemos arreglárnoslas con lo que hay.
Sin embargo la risa de Clark se fue apagando y su ceño se comenzó a fruncir, cosa que llamo la atención de ambas mujeres.- ¿Qué ocurre? – Preguntó Lois, pero al parpadear ninguna de las dos lo vieron y solo sintieron una ráfaga de aire que cruzaba al lado de ellas, tumbando unas cuantas servilletas que había llevado Martha para quitarse la espuma del chocolate. Entonces sus dudas fueron respondidas unos minutos después, pues la programación fue interrumpida porque efectivamente un acto terrorista estaba ocurriendo y no solo era un vuelo que robaron sino que se habían apoderado del aeropuerto de metrópolis.
Clark lo arreglará, no te preocupes.- Dijo Martha aun con el corazón en la mano, esperando que no suceda nada malo.
S-si… también lo creo.- Mencionó Lois apagando el televisor, pues sabía que no era bueno mantener una atmósfera de tensión en la velada, aunque evidentemente ambas ya estaban nerviosas. Pero Lois tenía todas las ganas de tomar su auto e ir a cubrir la entrevista. Por otro lado sería una grosería enorme para Martha dejándola sola después de todo el esfuerzo que había hecho.
¿Quieres ir verdad?- Preguntó Martha a Lois sin más.
¿Se me nota?- Pregunto con cierta vergüenza ante la madre de Clark. Recibiendo el asentimiento de la señora Kent como respuesta.
Bueno es que… siempre lo he hecho, no me quedo a esperar la noticia, siempre la vivo. Pero Clark me trajo aquí sabiendo que esto podía ocurrir y quería que la conociera. Así que puedo prescindir del trabajo por una vez. – Recibiendo una cálida sonrisa de Martha.
Estoy acostumbrada a estar sola desde que Jonathan ya no está conmigo, podría entender si quieres ir y cubrir tu reportaje. Pero agradezco la sinceridad y el que nos estés dando ese espacio familiar en tu vida. Lo podemos valorar mucho Clark y yo. El casi siempre viene a verme, se que le preocupa que este sola y sé que no quería que la navidad la pasara sola, ya que casi siempre parte a ayudar a alguien, pero siempre llega a tiempo para la hora de la cena, las doce de la madrugada. Creo que en parte era eso y nos sintiéramos en familia.
Entonces no hablemos de preocupaciones y trabajo.- Dijo sin más la reportera.- Déjeme entender y conocer a los padres del hombre más maravilloso del mundo. ¿Podría hablarme de usted y el señor Kent? ¿Cómo se conocieron? ¿Cómo es que encontraron a Clark?
Martha sabía del esfuerzo que estaba haciendo esa chica por no irse y seguir con su carrera, todo por amor a su hijo, así que tomo asiento y la invitó a hacer lo mismo.- Bien, entonces te contaré todo con una historia que te mantendrá sentada aquí a mi lado, sabiendo que Clark estará en unos minutos con nosotros disfrutando la cena y todo estará bien muy pronto, pero será digna de que te quedes aquí disfrutando de una noche en familia. Ponte cómoda Lois, que esto puede durar un largo tiempo.
Soy toda oídos Martha.- Dijo la reportera en un tono muy profesional, volviendo a tomar asiento para escuchar con atención la historia que su suegra estaba a punto de contarle. La hitoria de los Kent.
Fue entonces que Martha cerró sus ojos y rememoró sus vivencias. La historia de Jonathan y Martha Kent.- Bien hija, porque la verdad, es toda una sorpresa como es que él y yo quedamos juntos. Éramos de distintas ciudades y distintos mundos y la verdad fue muy difícil hacer entender a todos que lo nuestro era amor verdadero.
Fue así que Lois comenzó a escuchar la historia de amor más dulce que había escuchado en toda su vida.
