¡Hi! Con varios días de atraso pero aquí llega el regalo para mi AI:
Jeannine Matweus, querida espero que te guste. De las tres opciones fue la que más me convenció.
En total son dos OS y un drabble (que subiré en unos minutos aquí mismo).
Espero que os guste y ¡a leer! :)
Disclaimer: Todo lo reconocible de Harry Potter es propiedad de JotaKá.
Este fic ha sido creado para el "Amigo Invisible 2016" del foro " Hogwarts a través de los años". Así mismo, debe ir dedicado a la persona que es su Amigo Invisible.
Advertencia (si es que se le puede llamar así): La visión de la menstruación aquí dada es un tanto exagerada, pero creo que un personaje como Pansy concuerda bastante xD
Título oficial del capítulo: La menstruación.
Título original del capítulo: La menstruación/regla/período/amiga o como lo queráis llamar, desde el punto de vista de Pansy Parkinson.
— Eh, Pansy —la llamó Daphne insegura.
— ¿Qué? —preguntó la chica con brusquedad—. Venga Daphne que no tengo todo el día.
— Quede en darle una charla a las chicas de primero y segundo sobre la menstruación pero tengo que ir a otro sitio, ¿te puedes encargar?
— No —le contestó.
— Pansy —suplicó.
— ¿Por qué debería hacerlo? No es mi culpa que Nott y tú no podáis aguantar ni un jodido día sin follar.
Las mejillas de la otra chica se tiñeron de un ligero rojo.
— No es eso —contestó.
— Una mierda. No soy ciega ni sorda, Daphne. Os vi hablando y escuche como te decía que te esperaba en el claro del bosque.
— Vale, sí. Quedé con Theo en el bosque —confesó—. Y sí, es para jodidamente follar.
La pelinegra arqueó una ceja y sonrió burlona.
— ¿En el bosque? ¿En serio? Estáis enfermos.
La Slytherin iba a replicar cuando Pansy volvió a hablar
— Daré la jodida charla pero tendrás que hacer algo por mí.
— ¿El qué? —inquirió con desconfianza.
— Tendrás que dejarme la casa de verano que te regalaron tus padres al menos un mes.
— ¿Disculpa?
— Vamos Daphne, no eres la única que tiene derecho a follar con su novio.
— No sabía que salías con Draco.
La chica se empezó a reír causando que Greengrass frunciera el ceño.
— ¿Quién dijo que fuera Draco el chico que voy a llevar?
— ¿Entonces a quién vas a llevar?
— ¿Te importa? —cuestionó—. Daré la charla que es lo importante, las preguntas te las guardas. ¿Hay trato o no?
Daphne suspiró hastiada y asintió.
— Vale, hay trato.
La pelinegra sonrió falsamente cuando llegó al aula dónde estaban las chicas reunidas para la charla. Pansy se sentó sobre una de las mesas y esperó a que las jóvenes se callaran para empezar.
— Vale, Daphne se ha ido a follar al bosque así que me toca a mí daros la charlita sobre la mierda esta —explicó secamente.
Las alumnas se miraron entre sí antes de asentir temerosas ante la Slytherin.
— Seguro que os han contado eso de que cuando os viene la regla, menstruación, amiga del mes, el período o la forma en la que lo llaméis, por primera vez os convertís en mujeres. ¡Oh ya estás hecha una mujer!, os dirán. Pues una puta mentira. Que les jodan a esas personas que te felicitan cuando esto ocurre. Sí, que les jodan y bien duro.
Las chicas miraban sorprendidas a Pansy, sus ojos abiertos desmesuradamente ante las palabras para nada delicadas dichas por la joven.
— Y os preguntaréis, ¿por qué dices eso, Pansy? Básicamente porque que te venga la jodida regla es lo peor que te puede pasar. Te dolerá la barriga, llenarás de sangre las jodidas bragas y tendrás que estar cada dos por tres con esa puñetera sensación de que estás manchando todo.
Las Slytherin tragaron saliva e intercambiaron miradas horrorizadas por las cosas que Pansy les contaba.
— Que te sientas y piensas que has manchado la silla por lo que te quedas sentada con el corazón latiéndote a mil. Que estas caminando y tienes la horrible sensación de que al sentarte la falda se ha manchado y vas con una "hermosa" marca oscura en tu jodida ropa —prosiguió Pansy, divertida por las caras de la chicas—. Pero no, lo peor no es eso. Lo peor es el dolor. Ese puto dolor que se implanta en el bajo vientre, esa puñetera sensación de tener piedras aplastándote el vientre y esa jodida espada que se clava en tu espalda, porque sí, también te duele la espalda.
Como acto reflejo las manos de las chicas se dirigieron hasta su barriga, sus rostros formando una mueca ante la horrible sensación que la más mayor les estaba describiendo.
— ¡Pero cuidado, niñas! No vayáis a la enfermería con Pomfrey porque recibiréis la puñetera frase: ¡Eres una exagerada! —dijo con desprecio—. ¿Y por qué dice eso? Porque el puñetero carcamal de la enfermería está tan seco que ya no debe ni recordar que es la regla y por eso para ella un jodido dolor como el que os vendrá con la regla es una exageración, porque ya no siente nada, es lo bueno de ser Matusalén.
En otra ocasión, seguramente, hubieran reído hasta que sus tripas doliesen y las lágrimas bajasen por sus rostros, pero parecían haber olvidado que era reír, sus mentes se encontraban ocupadas tratando de procesar todo lo que Pansy le decía sobre el horrible momento que les tocaría pasar una y otra vez.
— Olvidar lo que os han dicho sobre la regla, lo de ser mujer y todo eso. Todo eso es pura mentira. Es algo doloroso que con suerte no te durará más de una semana, tenéis que volveros precavidas y llevar siempre compresas con ustedes, aunque os recomiendo los tampones, son más cómodos.
— ¿Tampones? ¿Compresas? ¿Qué es eso exactamente? —preguntó una de ellas con espanto ante esos nombres.
La Slytherin sonrió y de la pequeña bolsita que había llevado consigo sacó una compresa.
— Esto, queridas mías, es una compresa. —Las chicas asintieron, observando como la pelinegra la abría para enseñárselas—. Como veis tiene una parte pegajosa y otra más "blandita", bueno, pues la parte con el pegamento la colocáis en la zona de vuestras bragas que da directamente a esa zona que nos define como mujeres. La pegáis bien, le quitáis el plástico que mantiene las alas pegadas. —La joven fue enseñando todos los pasos—. Y las colocáis de esta manera.
— ¿Y el tampón? —preguntó una rubia.
— Ese es más sencillo. ¿Veis este tubito? Tiráis de él hasta el máximo, una vez hecho lo colocáis en vuestra vagina y lo introducís poco a poco, cuando ya esté dentro presionáis este tubo —las jóvenes miraron atentas al tampón que Pansy tenía en las manos, tratando de memorizar sus indicaciones—. Así saldrá la cosa esta blanca y podréis extraer los dos tubitos de plástico dejando solo lo que es el tampón en sí y el hilito que os ayudará a quitároslo.
— ¿El hilito se tiene que quedar por fuera? —preguntó una chica, su cara igual de horrorizada que la de las demás.
— Sí, es la única manera que tenéis para quitaros el tampón, de otra forma estáis jodidas.
Las chicas asintieron con una mueca de disgusto y comenzaron a murmurar entre ellas.
— ¿Dudas?
Al ver que muchas negaban con la cabeza Pansy se levantó y se dirigió a la puerta del aula, cuando estaba a punto de largarse algo pasó por su mente y se giró con una sonrisa malvada en sus labios.
— ¡Ah! Y una cosa más —las niñas le miraron, atentas—. No os libraréis de ella hasta dentro de treinta o treinta y cinco años desde que os venga.
Algunas soltaron gritos horrorizados ante las horribles expectativas.
— Y después os llegará la menopausia, que es igual o peor que la regla. Pero eso queridas niñas, es otra historia.
Soltando una risa entre dientes la Slytherin salió del aula, más que satisfecha de, seguramente, haber traumatizado a esas crías.
— ¿Cómo fue todo? —inquirió Daphne al ver a Pansy.
— Bien —contestó la pelinegra.
— ¿Segura?
— ¡Pansy! —la llamó una niña corriendo hacia ella.
— ¿Qué?
— En caso de que vayamos al carcamal reseco por el dolor, ¿qué debemos pedirle?
— Con que le digas que te ha venido la regla y no soportas el dolor ella buscará que darte.
— ¡Vale, gracias!
La niña se despidió uniéndose a un grupo de chicas de su misma casa.
— ¿A qué viene eso? ¿Carcamal reseco? ¿Dolor? ¿Qué les has contado?
— La verdad.
— ¿La verdad según Pansy Parkinson?
— Exacto.
Daphne se llevó las manos a la cara con frustración.
— Las has traumatizado, a saber que les has dicho.
Pansy rodó los ojos alejándose de su amiga, pero se volteó al ver como otra chica se acercaba pero esta vez a Daphne.
— Daphne —murmuró una niña.
— Dime.
— La menopausia, ¿es algo malo? ¿Hace daño? ¿Sangras también? ¿Hay pastillas?
Los ojos azules de la chica Greengrass se clavaron en su amiga que se reía de manera histérica a unos metros de ella.
— ¡Pansy Parkinson te voy a matar!
¡Y ya está! Realmente no sé si estoy cumpliendo con los de que los personajes sean muy canon xD Al principio iba a ser un OS súper largo de los Merodeadores pero no son personajes que se me den bien tratar y terminó en desastre JAJAJAJA
Bueno, espero que os haya gustado y en unos minutos nos vemos con otro.
Besos y abrazos,
AliciaBlackM.
PD: ¡REVIEWS y GO!