INTRODUCCION:

El clima andaba caprichoso esas fechas, llovía constantemente a pesar de ser verano aunque claro, esto no sea sinónimo de vacaciones para un joven en particular cual sagrada rutina del día a día se dirigía a su "santuario", un tocador abarrotado de la más infinita gama de cosméticos de ultima generación lo mejor de lo mejor…

-No me mires, no me mires, no me, no me, no me mires no me mires, no me mires déjalo ya, que hoy no me he puesto el maquilla-je-je-je…– cantaba aquel joven mientras minuciosamente se delineaba sus ojos almendrados frente al espejo, cada pequeño trozo del delineador enmarcaba más sus casi perfectas facciones, concentrándose a cada milímetro en el ojo, las pestañas, el ébano iba y venía , en un descuido su lápiz se resbalo de sus dedos, este siguió el recorrido del lápiz sobre el lavadero perdiendo la concentración sobre su reflejo, al retornar su atención a este, se percato de la figura ajena a su rostro formada en el cristal, su expresión de descompuso frente a este hallazgo, busco señales en su propio rostro, percatándose de sus formas y notando de que no en si que él haya cambiado, sino que no era él en si, debido a que si hubiera sido su mismo reflejo, hubiera seguido sus movimientos y la expresión de terror de su rostro, aquel rostro…ese ser de forma tan maquiavélicamente aniñado, ojos llameantes posados posesivamente sobre él, mirándolo con aires desconocidos para él, mejillas rosadas y deformadas frente la macabra sonrisa que formaban sus labios, unos llenos casi rojos, cabellos desordenados de color rubio intenso cayendo sin orden definido hacia costados de su rostro y otros acomodados delicadamente sobre sus finos hombros, sólo estaba a la vista hacia medio busto, estaba cubierta por un capa negra, él en un acto inconciente guiado por su curiosidad rozo el espejo, apenas mantuvo ese roce sus dedos fueron entrelazados a otros suaves atrayéndolo hacia ella y yacía en otro lugar completamente distinto a su baño, esta dio otra carcajada burlona mientras a pasos presurosos y agigantados se dirigía a un portón por el que cual se visualizaba su baño…fue todo tan rápido, ella ingreso por esa puerta, para que esta ultima desaparezca como si nunca hubiera estado ahí, antes de que Bill pudiera siquiera reaccionar se encontró flotando entre tinieblas, con el miedo recorriéndole las venas. La oscuridad reinante lo estaba desquiciando cuando a lo lejos diviso una luz, una pequeña luz de esperanza se presentó ante él, sin siquiera pensarlo Bill tomo camino hacia dicha luz sin preguntarse aun cuál era su destino…