Cap. 1 - La Muerte
Los primeros destellos del sol acariciaban la suave y pálida cara de la joven. Esta no podía dejar de recordar la pesadilla que tuvo esa misma noche. Ese niño castaño con un dolor inmenso en el. Le resultaba muy conocido pero no podía recordarlo.
Se levanto y fue seguido a el baño, se aclaro la cara, se desvistió y se metió la ducha. Cuando salió de la ducha se seco con una toalla blanca y se puso su habitual vestuario. Acto seguido bajo a desayunar.
-Ohayo gozai-masu Nana-chan – dijo Hinata no muy alegre.
- Ohayo Hinata-sama – dijo esta – Ocurre algo?
- No… Hoy vienen los ninjas de la arena hace varios meses que no les vemos.
- Los ninjas de la arena? – pregunto Nana.
- Si… Tendré que guiarles. Los demás estarán preparando su habitación y todo eso… - dijo Hinata.
- No estás alegre? - dijo la sirvienta – Bueno aquí tienes tu desayuno.
- Alegre? Pues la verdad si pero… - dijo esta mirando el te – Arigatto.
La joven casi no desayuno llevaba en la cabeza a esos 3 jóvenes Kankurou, Temari y Gaara…
"Un momento… – pensó Hinata – Gaara…"
Hinata corrió hacia su dormitorio y abrió su cajón, ahí tenía barios papeles pintados.
Cogió el segundo y se lo llevo a la calle.
- Gomen ne Nana-chan, tengo prisa – dijo la joven saliendo deprisa del clan.
Hinata fue directa a la puerta principal allí estaban Shikamaru y Naruto charlando.
- Heeeey! – grito Hinata no muy común en ella.
- Ey Hinata! – dijo el joven del pelo amarillo.
- Vinieron? – dijo la joven ojiblanca nerviosa.
- Porque tanta prisa por ver a Kankurou? – dijo Naruto con una risa burlona.
- Cuando vendrán! – dijo mirando fijamente a el moreno.
- Pues no se… Que se tomen su tiempo… - dijo Shikamaru tan tranquilo como siempre.
Se quedaron esperando en la entrada ablando de los senseis ,pero, Hinata no escuchaba solo miraba el dibujo que había hecho la noche anterior.
"Sera alguno de la arena… Que podrá decir el sueño?"
Hinata no paraba quieta estaba andando de un lado para otro. Por fin, llegaron.
- Bienvenidos – dijo Shikamaru tan frio como siempre.
- Gracias… - dijo un joven castaño.
- Tu… - dijo la joven mirando a el castaño- Eres tu…
- Hinata… que ocurre solo es Gaara – dijo Naruto extrañado.
Hinata miro su dibujo y lo comparo con el.
- Eres igual… - dijo Hinata.
Hinata echo a correr hacia el bosque mas cercano. Corria y corria, mas de lo que sus piernas le permitían. "Es el…" no dejaba de pensar en eso, su imagen chocaba contra su cerebro.
Hinata se encontró con Ino y Sakura, no les hizo caso.
- Que le ocurrirá a esta? – dijo la joven de la coleta.
- No se… - dijo la pelirrosa extrañada.
- Heeeeeey! – grito el rubio – Para donde se fue Hinata?
- Para el bosque – dijo Ino.
- Gracias - dijo Shikamaru mientras corrian.
Hinata solo apretaba el colgante que llevaba y pensaba la imagen de el joven castaño.
"Que significara mi sueño? Normalmente nunca sueño ese tipo de cosas… Pero realmente le llamare… pesadilla…" – pensó Hinata.
- Hinataaaaaaaaaaaa! – dijo el joven rubio.
- Aah! Narutoo… no grites tanto que vengo aquí por ti – dijo Shikamaru con una mirada amenazante.
- Ya.. haaa, sii… te entendí… - dijo Naruto sacudiendo sus manos de un lado a otro.
- Naruto… - dijo Hinata parándose y mirando para atrás.
- Dejamos solos a los ninjas de la arena… Venga ven que tu les tienes que guiar – dijo Naruto dándole la espanda a Hinata y empezando a andar.
- Oh… hai… Gomen ne… - dijo está mirando al suelo.
Cuando llegaron ahí estaban los tres ninjas esperando.
- Hermanito… arréglate la cara has asustado a la pobre chavalita – dijo Kankurou con una sonrisa burlona.
- Kankurou… No le gustaran los hombres o mejor dicho travestis que se maquillan no te esfuerzes intentando taparte – dijo Temari defendiendo a su hermano.
- Aha… No se peleen no fue nada – dijo Naruto intentando calmarlos.
- Bien pues os enseñare vuestras habitaciones – dijo Hinata temblando y muy palida.
- Bien pues no perdamos el tiempo – dijo el castaño.
- Gaara… esto son como vacaciones! Como que no perdamos el tiempo? – dijo Kankurou – Casi siempre actuas como en una misión.
- Bueno… - dijo interviniendo la joven ojiblanca – Venid por aquí…
Los cuatro fueron a la mansión Hokage donde ahí tenían sus habitaciones.
- Bien pues aquí se encuentra la de Temari, espero que te guste.
- Adios – dijo Temari entrando a su habitación temporánea.
Fueron dos habitaciones mas adelante.
- Bueno aquí se encuntra la de Kankurou , espero que te sea acogedora.
- Arigatto , me será muy acogedora si tu también bienes conmigo – dijo en un tono burlon.
- Adi…os – dijo Hinata alucinada.
"Ahora que ago… Me quede sola con… el.."
- Bueno… ven por aquí…. – dijo Hinata nerviosa.
Gaara no dijo nada solo la siguió. Despues de cuatro habitaciones se pararon.
- Bueno aquí esta la suya, espero que te guste – dijo Hinata mas aliviada.
- Bien, Sayonara – dijo Gaara tan frio como siempre.
- Sayonara… - dijo Hinata.
"Para que tengo una habitación si nisiquiera la voy a usar…" – pensó Gaara.
Hinata andaba con un paso muy amplio para que no se encontrara con nadie de los tres hermanos y fue directa hacia donde se encontraba la Hokage.
Toco la puerta.
- Pasa – dijo Tsunade.
- Ohayo gozai-masu Tsunade-sama – dijo Hinata – Los ninjas de la arena ya están en sus habitaciones.
- Bien Hinata, te puedes retirar – dijo Tsunade.
- Hai – dijo mirando a el hombre que estaba en frente de Tsunade.
Cerró la puerta y se dirigió a entrenar con su equipo.
- Hey Hinata ya llegaste – dijo Kiba.
- Konichiwa Kiba-kun, Shino-kun - dijo esta.
- Ohayo Hinata-chan – dijo Shino.
Empezaron a entrenar. Hinata golpeaba sus manos contra un cacho de árbol.
No se dieron cuenta de que había 2 ninjas de la roca espiándoles.
- Aaaaaaaaaaaaaahhhh! – grito Hinata – Socorroooo!
- Hinataaaa!! – grito Kiba – Shino avisemos a la Hokage.
- Hai – dijo Shino.
Los dos corrieron hacia la mansión Hokage. Tocaron la puerta bruscamente y entraron.
- Hokage! Gomen ne Hokage pero atraparon a Hinata. – dijo Kiba.
- Hinata? – dijo Kankurou.
- Esa chavalita que nos enseño las habitaciones? – dijo Temari.
- Oh.. Sois los ninjas de la arena no os había visto. – dijo Kiba.
- Bien pues, teneis que ir a rescatarla AHORA! – dijo Tsunade.
- Hai – dijeron Kiba y Shino.
- Nosotros también vamos? – dijo Kankurou.
- Si, id – dijo Tsunade.
Todos fueron corriendo hacia donde fueronlos ninjas de la roca.
- Por aquí – dijo Kiba.
- Se esconden en esa cueva – dijo Shino mirando a la cueva.
Estaba oscura y se escuchaban varios gritos.
- Aaaaaaaaaaaaaaaaaaahhh! Socorrooooooo! – decía una voz.
- Es la voz de Hinata! – dijo Kiba – Entremos!
- Hai… - dijo Kankurou.
Cuando entraron la voz se oia cada vez mas débil.
- Soo…coo…rrooo… Ayuda… - dijo Hinata.
- Hinataaaaaaaaaaa! – dijo Kiba.
Cuando los encontraron desaparecieron en una nube.
- Hinata… - dijo Kiba corriendo hacia ella – Benir…
Todos la rodearon y allí estaba ella con unos cortes, puñetazos y una apuñalada de un kunai.
- No… no respira…. – dijo Temari.
- No es posible… - dijo Kiba – No puede morir…
- Tenemos que llevarla a donde Tsunade rápido! – dijo Shino.
- Hai… - dijo Kankurou.
Cuando llegaron….
- Hokage! – dijo Kiba - Hinata..
- Que le pasa? – dijo Tsunade alertada.
- Hinata… - dijo Kiba otra vez.
- Shizune trae a los mejores ninjas médicos de la aldea. – dijo Tsunade.
- Pero… - dijo Kiba otra vez.
- Tranquilo… La salvaremos – dijo Tsunade triste – Haremos lo que podamos.
Kiba puso a Hinata en una camilla y se la llevaron a la UCI.
- Espero que se recupere… - dijo Temari.
- Hermanito traes mala suerte – dijo Kankurou.
- No hablemos de ti – dijo Gaara con una mirada amenazante.
Temari y Kankurou no paraban de mirar a Gaara. Notaban algo extraño en el.
