Hola de nuevo! :DD para los que no me conocen todavía mi nombre es Mitsu Neko,
una autora novata que viene a dejar sus intentos de fanfics -w-
Bueno, para esta ocasión vengo a dejar mi primer fanfic que contara con muchos capítulos *u* (Ya que el primero fue un One-shot)
Espero que sea de su agrado y por favor dejen sus reviews ;u; ya sea para dar su opinión sobre el fico
o simplemente para aconsejar ^u^
Aquí les dejo el prologo un tanto cortito, pero prometo actualizarlo pronto para el primer capitulo u
disfrútenlo! (Pareja: LenxMiku :D)
"¿Lazos de sangre?"
Prólogo:
En un pequeño parque en el centro de la ciudad una tranquila mujer de cabellos rubios y ojos dorados se encontraba sentada en una de las bancas de ahí viendo tranquilamente a sus gemelos de apenas unos 9 meses y 21 días de nacidos jugando en un corral diseñado especialmente para los bebes de su edad.
La rubia no les quitaba la vista de encima, a pesar de que el lugar contaba con mucha seguridad y vigilancia no quería que algo malo les pasara a sus pequeños.
Mientras veía muy atenta a sus hijos no se percato de una mujer que tomaba asiento a su lado. Ella miro de reojo a la desconocida que traía una carriola consigo y quito la manta que le tapaba dejando en descubierto a la criatura que yacía durmiendo ahí.
-Es hermosa- Sonrió cálidamente la madre de los gemelos a la otra mujer refiriéndose a la hija de esta quien la vio un poco confundida y luego correspondió el tierno gesto.
-Gracias... ¿Los de ahí son sus niños?- apuntaba con la mirada a los gemelos.
-Si apenas son unos pequeños pero son todos unos diablillos- Soltó una risa ingenua- ¿Qué edad tiene su hija?
-Oh, pues apenas va cumplir 2 años.
-¿En serio? Se ve más pequeña, es todo una lindura.
-Muchas gracias- Se animaba la ojerosa mujer de cabellos turquesa.- ¿Le gustaría cargarla?
-¿No es problema?
-¡Claro que no!- le sonrió gentilmente haciendo que la rubia entrara en confianza.-tenga...
La madre de los gemelos vio con ternura a la bebe que había en sus brazos. Cabello verde azulado como el de su madre, ojos color esmeralda que brillaban con encanto pero lo que más le gusto fue aquella hermosa sonrisa que le regalo al instante en que sus miradas se encontraron.
-Creo que le agrada...- La rubia no dijo nada, aun veía maravillada la sonrisa de la niña.- ¿Le importaría cuidármela un minuto mientras voy rápidamente a sacar dinero al banco de aquí cerca?
-oh claro- reaccionó al fin.- si con gusto, no se preocupe.
-Muchas gracias- sonrió la peliturquesa para luego acercarse donde su hija y depositarle un pequeño beso en su cabecita mientras le ponía una cadenita dorada con un emblema en forma de corazón.- Adiós mi pequeña...
Diciendo esto último la madre se fue... Para no volver.
La ojiambar espero por horas que ella regresara pero no lo hizo. Como si fuera poco su hija empezó a llorar por su madre que no se encontraba. No dudo en arrullarla hasta dejarla dormida y ponerla nuevamente en su carriola. La rubia tomo de sus gemelos y de la pequeña peliturquesa y regreso a casa.
-¡¿Podrías explicarme esto?!- el esposo de la mujer estaba en shock. Llegar a casa para encontrar a su esposa con un nuevo bebe que no era suyo, era inaceptable.
-Lo siento tanto amor pero... ¿Que querías que hiciera? Es que no podía dejarla ahí sola, abandonada, es solo una niña.
-Tienes un corazón muy grande...-concluyo el padre de los gemelos tomando asiento junto a su esposa cansado y agotado por su largo día de trabajo.- ¿Y qué haremos con ella...?- empezó a acariciar la cabecita de la bebe.
-Pues llevarla con la policía hasta que alguien de su familia la reclame...
- Tal vez o...-la bebe sostuvo su dedo sonriéndole.- podríamos adoptarla como nuestra hija.
-Querido... ¿Hablas en serio...?
-¿Por qué no? Nadie asegura que alguien la reclamara, la darán en adopción ¿y qué...? ¿Qué clase de vida tendría? No sería feliz... Aparte mira esa sonrisa...
-Es hermosa ¿verdad? Sería la hermana mayor de Rin y Len.
-¡Exacto! - ambos estaban emocionados con la idea.- ¿y qué nombre le pondremos...?
La rubia pensó y luego vio la cadenita dorada que la bebe tenia. Chupaba el emblema en forma de corazón, lo saco de su boca y vio lo que había escrito en el.
-Se llamara Miku... Mi querida hija Miku- le deposito un beso en su frente para luego arrullarla y dejarla dormida.
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Con el paso del tiempo Miku, Rin y Len crecieron normalmente creyendo que eran hermanos de sangre. Los tres eran muy queridos, no había hermanos más unidos que ellos.
Al principio Miku contaba con su propia habitación y los gemelos compartían una durmiendo en sus literas; pero al llegar Rin a cierta edad sus padres creyeron que no era correcto que siguiera con su hermano así que se mudo con su hermana peliturquesa. Tal vez la única consecuencia fue que Len ya no pasaba más tiempo con ellas pero de el resto todo estaba bien... O eso parecía.
Cuando Miku cumplió los 14 y los gemelos tenían 12 su padre falleció de cáncer dejando a su esposa viuda y única a cargo de sus 3 hijos. Miku no y tardo en ofrecerse a ayudarla, así que mientras ella trabajaba la peliturquesa se quedaba a cargo en casa a cuidar a los gemelos.
Cuatro años después de aquel desafortunado suceso la vida de los "hermanos" aun continuaba... pero ¿Por cuánto tiempo podrá seguir esta dulce mentira...?
Bueno hasta aquí les dejo :3 esperen el primer capitulo pronto, Mitsui Neko fuera! X3
