¡Hola, gente! ¡Esta vez sí! Aquí tenemos el primer capítulo de 'El diamante negro', la secuela que realmente se merecía 'I.L.Y.I.'. Antes de comenzar, decir que este capítulo es como un prólogo de la verdadera aventura, que comenzará a partir del segundo capítulo. También avisar que se mantiene el mismo reparto de personajes de la historia 'fallida', con lo que esto sigue siendo un crossover triple.
¡Y sin más dilaciones, que comience el espectáculo! ¡Espero que les guste!
Disclaimer: Los personajes de esta historia pertenecen a: Dan Povenmire, Jeff 'Swampy' Marsh, Gosho Aoyama, Paola Farfán, Eliana Moreno y Melty94.
Phineas y Ferb: I.L.Y.I. 2: El diamante negro
Capítulo 1: Horas previas
Phineas Flynn abrió lentamente los ojos. La última vez que los tenía abiertos, había decidido descansar un poco, ya se había levantado a las cuatro de la mañana para tomar un avión. Él, sus hermanos Ferb y Candace, sus padres y su ornitorrinco Perry iban a pasar una semana de vacaciones en Isla Huracán, una isla situada cerca de la costa argentina. Fue una decisión unánime, todo para desconectar del mundo habitual tras la increíble aventura acontecida unas semanas antes.
Phineas estaba sentado en el centro de la quinta fila de asientos del avión; el suyo era el 5B. A su derecha, junto a la ventanilla, se sentaba su hermano Ferb, que estaba leyendo 'El perro de Baskerville'. Y a su izquierda, a ver si adivinan quién había. Si habían pensado en Isabella, han acertado. La morena dormía plácidamente en su asiento, con una sonrisa en el rostro. Phineas ya ni se acordaba de que la había invitado para compensarla por lo mal que lo pasó semanas antes. El pelirrojo la miró sonriente. No sabía cuando era más bonita, si cuando dormía, o cuando estaba despierta. Lo que sí sabía es que ambos eran muy felices desde que eran novios. Entonces, Phineas fijó su atención en el colgante que llevaba Isa en el cuello. Era medio corazón de oro, con el nombre del pelirrojo grabado encima. Se sentía muy feliz al saber que ese regalo le había gustado tanto. Pero pensaba que quizá podía hacer algo más por ella.
-Ferb, ¿cuánto falta para llegar?- le preguntó el pelirrojo a su hermano.
-Creo que unas dos horas.- respondió este.
Entonces, Phineas le quitó con mucho cuidado el colgante a Isa.
-Si las cuentas no me fallan, será tiempo suficiente para hacerle otro favor a Isabella. Ferb, saca tu kit de herramientas de joyero. Ya sé lo que vamos a hacer en estas dos horas.- dijo Phineas.
El chico del pelo verde levantó el pulgar izquierdo en señal de afirmación y ambos se pusieron manos a la obra para 'modificar' el colgante de Isa y, de paso, también el de Phineas.
Aprovecho este momento para hacer un llamamiento. Si alguien encuentra traducida al español la obra de la usuaria de deviantArt KicsterAsh, 'Phineas and Ferb: The Seer', que por favor me mande un mensaje lo más rápido posible. ¡Muchas gracias!
Bueno, prosigamos con nuestra historia.
Unas cuantas filas más atrás, en el asiento 11B, un chico con gafas estaba muy concentrado leyendo una novela de misterio. Llevaba puesta una camiseta de entrenamiento del F.C. Barcelona, la amarilla sin mangas y con la publicidad de 'Qatar Foundation'. También vestía unos pantalones deportivos negros y unas deportivas rojas y blancas. Su pelo era moreno y corto. Debía tener unos 7 u 8 años. El chico estaba tan sumergido en lectura, que no se percató de que una niña (más o menos de su edad) con un bonito vestido rojo y el pelo largo y castaño trataba de llamar su atención.
-Conan, ¿vienes a jugar a cartas? Solo faltas tú.
El chico levantó la vista del libro y miró a aquella niña, que estaba justo detrás de su asiento.
-¿Podrías esperarte un momento, Ayumi? Es que ahora llega la parte más interesante del libro.- explicó el niño.
-¡Venga, ven! ¡Será muy divertido, seguro!- insistió Ayumi.
-Está bien… Ahora voy.- acabó respondiendo resignado Conan.
Conan Edogawa se dirigió hacia donde estaban sus amigos con la cabeza llena de pensamientos, nombres y lugares. Y es que él ocultaba un gran secreto.
Explicación sacada del artículo de Wikipedia de 'Detective Conan'
El detective juvenil más famoso de Japón, el estudiante de secundaria ShinichiKudo, se encuentra en un parque de atracciones junto a su amiga de la infancia RanMouri, de la que está secretamente enamorado. Allí, después de resolver un nuevo caso, se separa de su amiga y presencia un intercambio sospechoso entre uno de los hombres vestidos de negro que eran presentes en el caso anterior y un hombre. Mientras los espiaba, Shinichi es atacado por la espalda por el compañero del hombre de negro, y le administran un veneno con el fin de matarlo. Sin embargo el veneno tuvo un efecto inesperado: el cuerpo de Shinichi pasó a convertirse en el de un niño de 6 años.
Ahora, haciéndose llamar ConanEdogawa y ocultando su verdadera identidad con tal de proteger a los suyos y a él mismo de los Hombres de negro, el joven detective se traslada a casa de Ran y su padre: el detective KogoroMouri. Ninguno de ellos sabe que Conan es, en realidad, Shinichi y éste utilizará su secreto para resolver los casos del propio Mouri en su nombre y sin que nadie lo sepa. Ni el propio Kogoro.
Volviendo a las filas delanteras, Phineas y Ferb estaban a punto de terminar la 'reparación' de los colgantes de Isa y el pelirrojo, mientras la morena seguía durmiendo.
-Míralos… Incluso dentro de un avión no pueden estarse quietos.- se dijo Candace, que los miraba muy concentrada desde su asiento, el 5D.
-Hija, no te preocupes. Seguro que no es nada.- le dijo su madre, Linda, que estaba a su lado.
-Bueno, yo por si acaso voy a comprobarlo.- dijo la pelirroja mientras se levantaba de su asiento.
Justo en ese momento, Phineas y Ferb habían acabado las modificaciones de los colgantes.
-¡Bien! ¡Ya está terminado!- dijo Phineas con alegría.
Entonces, Isabella se despertó mientras Candace se acercaba a sus hermanos.
-Vaya, por fin se ha levantado la Bella Durmiente.- comentó sarcástica la pelirroja.
-Por favor, no seas desagradable.- le comentó su hermano pelirrojo.
Isabella bostezó y entonces le dio un beso en la mejilla a su novio.
-Hola, Phineas. ¿Qué estás haciendo?- le preguntó Isa como casi siempre.
-Pues esta vez he estado modificando nuestros colgantes. Mira, he instalado un localizador que irá emitiendo pitidos según la proximidad del otro imán. Funciona en un radio de unos 10 kilómetros.- explicó Phineas a su novia.
La chica se quedó maravillada con lo que era capaz de hacer su novio.
-¡Oh, Phineas, eres increíble! ¡Te quiero tanto!- gritó Isa y le dio un fuerte abrazo al pelirrojo.
Phineas, que tenía un destornillador en la mano izquierda, se vio sorprendido por el abrazo de su novia y soltó el destornillador, que fue a parar en medio del pasillo del avión. Pero con tan mala suerte que Conan, que se había levantado para 'estirar las piernas', lo pisó, se resbaló y se estampó de morros contra el suelo. Por suerte, no se le rompieron las gafas de milagro. Phineas se preocupó por él.
-¡Lo siento mucho! ¿Estás bien?- preguntó el pelirrojo mientras le extendía la mano para ayudarle a levantarse.
Pero a Conan le había pillado por sorpresa ese destornillador en el suelo y estaba muy enfadado. Así que se levantó, le apartó la mano a Phineas y sin dirigirle la mirada se volvió a su asiento con la nariz enrojecida por el golpe. Phineas se había quedado sin palabras.
-¡Será posible! ¡Menudo carácter! ¡Es que de verdad hay cada persona en el mundo que…!- se quejaba el pelirrojo.
Y el viaje continuó sin más incidencias.
¡Vaya comienzo para nuestra historia! ¿Qué les deparará tanto a Phineas como a Conan su estancia en Isla Huracán? ¿Volverán a verse las caras? Lo sabremos en el próximo capítulo, 'La leyenda del diamante'.