Ginny Weasley, una chica de veinticinco años, pelirroja, y con una figura bastante atractiva, iba rápidamente en un coche dirección al pentágono. A pesar de su corta edad, había conseguido el grado de detective, dentro de los policías de la armada. Había tenido la suerte de cumplir con éxito un par de misiones importantes, y que Minerva McGonagall la anterior detective, la cual había acogido a Ginny bajo su ala como su alumna favorita, se había retirado hace solo un par de meses. Esta sería su primera misión importante como líder del equipo. Su equipo eran las personas que iban con ella en el coche, su hermano Ron, al que estaba un poco enrabietado porque su hermana menor tenía un rango superior a él, Luna Lovegood, una chica bastante rara, pero era muy buena investigadora cuando se centraba, y por último, Hermione Granger, ella realmente no era de su equipo, ya pertenecía al JAG, pero habían tenido la idea de unir al equipo de investigación un abogado, pues ella no se quejaba, además le caía bien, la que esperaba que fuese su próxima suegra.

Entraron al despacho del secretario de defensa, Albus Dumbledore, para recibir las ordenes para su próxima investigación. Ginny estaba muy nerviosa, nunca haba tratado directamente con este hombre, el cual era una leyenda dentro del ejercito, aparte de ser muy querido. Se decía que podría haber llegado a ser presidente, pero que él no quería nada más que dirigir el ejército, y la política se la dejasen a otro. Echando un rápido vistazo al despacho, rápidamente se dio cuenta que hay había más gente importante de la que esperaba. En un primer vistazo, reconoció a varios generales importantes del ejercito, pero también estaba allí, la vicepresidenta, Dolores Umbridge, eso sí que no se lo esperaba, si estaba allí la vicepresidenta significaba que esto fuera lo que fuese era muy gordo. Saludo a todos como es debido y se coloco delante del escrito de Dumbledore.

-Descanse detective.- Le dijo el viejo con una sonrisa bonachona,- Tome asiento, mi vieja amiga Minerva, me había dicho que eras joven, pero no imaginaba que tanto.

-Gracias señor.- Le conteste mientras me sentaba.- Pero me imagino que no me habrá hecho llamar para hablar simplemente verdad.

-No, es cierto me temo que los términos de nuestro primer encuentro no son los mejores, si nos disculpan.- Dijo Dumbledore, al resto de los presentes, los generales después de despedirse simplemente se fueron, pero no fue el caso de la vicepresidenta.

-Me da igual lo que digas, Dumbledore, la misión ya esta asignada, Y si te opones tu y la detective tendrán que buscar un nuevo trabajo.- Pero que he hecho yo ahora, grito la cabeza de Ginny, y esto no ayudo en nada a sus nervios ya que no todos los días te amenaza con despedirte la vicepresidenta de los estados unidos.

Cuando Dumbledore y ella por fin se quedaron solos, el viejo se reclino en su silla y entrelazo los dedos de sus manos en su regazo antes de hablar.- Siento que te hayas visto involucrada en esto, pero esta misión es muy importante, y peligrosa, y necesito que la ejecute alguien de confianza, y en ti confía gente en la que yo confió, por lo que yo confiare plenamente en ti.

-Muchas gracias, señor.- Dije mientras mi mente daba vueltas, quien aparte de Minerva podría haberle hablado de mi a Dumbledore.- Prometo no defraudarle.

-No, no lo harás, eso seguro.- Respondió él con una sonrisa.- El tema que vamos a tratar es muy peligroso, Lord Voldemort, planea mover mucho dinero en unos convoy, pero eso no nos preocupa mucho, lo que más nos preocupa es que se rumorea, que con el dinero también un maletín, con códigos de datos de activación de nuestros cazas.

-Como?- Pregunto ahora una preocupada Ginny.- Si eso es cierto, significa que podrían los cazas para su propio uso. Eso sería terrible. Aun asi no sabía que habíamos perdido tan preciada información.

-Pues me temo que es cierto, hace un par de años, se perdió ese maletín en medio del atlántico, el presidente dio por destruida tan preciada información, y no dejo que la información se filtrara, yo mismo me he enterado hace tan solo un par de horas. Pero dejemos los problemas políticos aparte, hay que recuperar esos archivos de datos.

-No sería mejor inutilizarlos, señor.- Pregunto Ginny.

-Lo seria, pero será como última opción, ya hacer eso nos dejaría sin apoyo de nuestros cazas durante un gran periodo de tiempo, ya que habría que cambiar el de todos, es decir, casi empezar de cero.

-Y que se requiere de mi?- Pregunto la detective.

-Como habrás podido comprobar, la vicepresidenta, no quería que nadie fuera de esta sala se enterara de tales cosas, ella mismo ha asignado un equipo, que se hacen llamar carroñeros, para que lleven a cabo tal misión. Pero personalmente no me fio de ellos, ya que ellos no pertenecen al ejercito, sino que son unos mercenarios. Por desgracia me es imposible, por lo menos legalmente, asignar la misión al quipo que yo querría que llevara a cabo la misión, pero si puedo asignarte a ti que supervises el trabajo de los mercenarios, y con esa escusa te enviaremos a Iraq, que es donde se realizara el transporte, y donde ya se encuentra el equipo.

-Entonces he de ponerme al servicio de esas personas y ayudarles a conseguir los datos?

-Si, y no.- Dijo el secretario.- Solo quiero que los supervises, y también quiero que cuando llegues a la base allí, entres en contacto, con un grupo de amigos comunes, ellos podrán darte más información que yo acerca de esos mercenarios, y también podrán ayudarte a quedarte con los datos una vez estén en nuestro poder para que los traigas aquí.

-Y quienes serán estas personas?- Pregunto Ginny, intentando pensar en quien podía conocer que estuviese desplegado en Iraq, sabia de una persona, pero era una persona con la que hacía dos años, que no había hablado, y la cual intentaba quitar de su mente a toda costa.

-Los merodeadores por supuesto.- Dijo el anciano con una sonrisa, y el mundo de Ginny casi se va al garete a escuchar esas palabras, tendría que volver a enfrentarlo después de dos años, y no había manera de librarse.

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Tres horas después

Todo su equipo junto a ella, se encontraban en un avión rumbo a Iraq, Ron estaba muy ilusionado con la misión, aunque todavía no supiera de que se tratara, el simple hecho de que los mandaran a Iraq, ir allí sin duda alguna sería un buen punto para s curriculum, Luna como siempre parecía muy tranquila, en cambio Hermione estaba sudando de los nervios, cuando le ofrecieron la idea de convertirse en una agente y abogada, la idea le entusiasmo un poco, ya que eso le daría opción de hacer algo más que estar sentada en un despacho y estudiar los casos desde allí. Pero nadie le había dicho nada de ir a un lugar donde una guerra se estaba llevando a cabo. Ginny por su parte, ir a Iraq no le preocupaba, lo que le preocupaba era como iba poder soportar mirarle otra vez a los ojos.

Dos años habían pasado desde que ella había huido cortando toda relación con él, una decisión en los que había momentos que alababa y otros en los que despreciaba, no podía negar que lo echaba de menos, pero en ese momento no estaba preparaba para eso. Todos los miedos le habían asaltado cuando lo habían herido, y cuando el volvió a irse a otra misión ella ya no pudo mas, no podía soportar ser la mujer o novia, de alguien y no saber si llegaría a casa vivo. Asi que huyo. Y eso haría le pasaría factura lo sabía. Inhalo y exhalo aire un par de veces y le conto a su quipo lo que había sucedido dentro del despacho de Dumbledore.

-Bueno y que sabemos de esas personas?- Pregunto Ron, el cual ya no parecía tan entusiasmado con la misión, ahora que sabía que se jugaban el puesto.

-Sobre los carroñeros, solo que su líder es un hombre llamado Fenrir Greyback. El cual tiene un expediente para ser un asesino a sueldo y un traidor.

-Y confían en él?- Pregunto Hermione.- Porque no dejar que sea un equipo de inteligencia militar quien se encargue de esto y no unos mercenarios.

-Política.- Respondió Luna.- Si el ejercito toma parte en esto, saldrá a la luz, que perdieron esa información y se la quedaron callada. En cambio usando mercenarios, se les pagara y dejaran la información allí, nadie creería que el gobierno ha dejado una misión asi de importante en manos de unos mercenarios.

-Y nosotros?- Pregunto Ron.- No habría el mismo problema si nos involucran a nosotros?

-No, si nosotros decimos alguna palabra, ya podemos empezar a buscar un país diferente al que irnos a vivir, porque no volveremos a encontrar trabajo en América, por lo menos un trabajo importante.

-Y que sabemos acerca de esos merodeadores, he buscado en mis archivos, y casi todo acerca de ellos es confidencial, solo sé que son un grupo de inteligencia militar, el mejor por lo que me han dicho.

-Eso no se lo digas a ellos.- Dijo Ginny.- Aunque realmente sean los mejores, nunca me dejarían en paz si se lo dijese.

-Porque no te dejarían en paz? Sabes algo sobre ellos? Que te ha dicho Dumbledore?- Pregunto Hermione, tan rápidamente que no dejaba espacio entre las preguntas como siempre que quería saber más información.

-Dumbledore no me ha dicho nada acerca de ellos, no era necesario.- prosiguió al ver la caras inquisitivas de sus compañeros.- Los conozco personalmente, y dudo que haya nadie que los conozca mejor que yo.

-Y eso?- Pregunto Ron.

-Cuando estuve en realizando mi entrenamiento, los conocí, en esos cinco años llegue a conocerlos bastante bien a todos ellos.

-Como?- Pregunto Hermione, y cuando todos le miraron raro.- Quiero decir los miembros de equipos como esos suelen ser muy reservados, ni siquiera suelen usar su verdadero nombre.

-Enseguida lo sabrás.- Dijo Ginny.- ahora os daré la información acerca de ellos. Tres Rangers y un Navy Seal de los estados unidos. Y todos han destacado dentro de ese cuerpo. Son cuatro, y entre ellos se complementan a la perfección. La única mujer del equipo, el capitán Nymphadora Tonks, todos le llaman Tonks, es una de las mejores, si no es la mejor piloto de combate de todo el ejército, tiene 31 años, y la reconoceréis rápidamente por su peinado. Suele llevar el pelo de algún color extravagante, la última vez que la vi, tenía el pelo verde lima.- Esto causo unas risitas por parte de su equipo.

-Porque hace eso.- Dijo Ron mientras reía.- Normal que este en el ejército, ningún hombre se fijara en ella con ese pelo.

-Eso crees.- Dije con una sonrisa picarona.- Seguro que se te cae la baba al verla, tiene el cuerpo de una modelo.

Esto causo que Ron negara con la cabeza, y Hermione murmuraba varias cosas por lo bajo, todavía no eran pareja, pero si Ginny tenía algo que decir al respeto lo serian.

-Luego está el Cabo Remus Lupin, conocido como Lunático, 40 años, es el genio del equipo, puede arreglar cualquier cosa, y sus ideas son impresionante, parece McGiver, es un buen soldado en el cuerpo a cuerpo, y es el Seal, no hay nadie mejor en agua. Por desgracia a cogido un poco miedo a volar, supongo que volar con Tonks puede tener ese efecto de vez en cuando. Solo es Cabo, porque tuvo unos problemas políticos, que hicieron que lo echaran del ejercito hace unos 15 años, y solo ha sido readmitido hace poco, pero no ha perdido nada, y sigue estando en plena forma.

-El líder, por lo menos en rango, el Coronel Sirius Black, conocido como Canuto, de la misma edad que Lupin, fueron juntos a la academia, al igual que su amigo hace 15 años dejo el ejército para dedicarse a cuidar a su ahijado, lo hizo lo mejor posible, es un mujeriego, asi que cuidado.- Esto último lo dijo mirando a las chicas de su equipo.- Es el musculo del equipo, un magnifico soldado.

-Por ultimo Teniente Harry James Potter, le llaman Sable, tiene 26 años.

-26 años y ya es teniente.- Dijo Hermione incrédula.- De quien es hijo.

-No se ha ganado asi el grado, es buenísimo, no hay nadie mejor que él.- Dijo Ginny.- Nunca duda, actúa por impulsos sin pensar dos veces y casi siempre acierta. Desde pequeño quiso ser lo que es hoy en día, y entreno en consecuencia con 16 años era capaz de pasar todas las pruebas de los Rangers, se graduó en la academia con solo 18 años, sin hacer los entrenamientos solo los exámenes, y entro en servicio rápidamente, la causa de que los merodeadores volvieran al ejercito, es el ahijado del Coronel. Huérfano a los 3 años, se crio con Sirius, y es un milagro que saliera asi. Es el cerebro detrás del equipo, el que planea todo, y un guerrero certero con la mejor puntería que he visto en mi vida.

-Todavía no nos has dicho de que los conoces.- Dijo Ron.

-Cuando empecé mi entrenamiento conocí a Sable en la academia, nos hicimos amigos, empezó a entrenar conmigo, me enseño muchas cosas, el explicaba mientras lo hacía y yo aprendía. Cada día que pasaba nos uníamos más, y al final paso lo inevitable. Me enamore de él.

-Que!- Exclamo Ron.- Como que te enamoraste, porque yo no sabía eso.

-Hay muchas cosas que no sabes, Ron!- Exclamo su hermana menor.

-Y él?- Pregunto Hermione.

-Al principio, no creo que me amase, cuando lo conocí era un poco mujeriego.

-El muy capullo!- Exclamo Ron.

-Nunca me oculto esa cara suya, yo lo sabía, aun asi decidí probar, llegado el momento el también se comprometió, me amaba estoy casi segura de ello. Cuando dije en casa que había dejado la base y estaba viviendo en una casa, fue cuando me fui a vivir con él.

-Que estuviste viviendo con quien!- Exclamo Ron el cual estaba furioso.

-Sí, estuve viviendo durante dos años con Harry, no pensarías que era virgen hoy en día, y no digas nada porque sé que tu no lo eres.

-Pues deberías serlo. El muy capullo, te uso y luego te tiro cuando se aburrió.

-Como acabo todo?- Pregunto Luna.

-Había meses en los que él estaba fuera, en misiones.- Aclaro la pelirroja.- Una vez, incluso llego herido, hay empezaron los problemas, la distancia que había entre sus misiones eran tan grandes, que al final me afecto y me fui. A él no le gusto, pero lo acepto.

-O sea tu lo dejaste.- Dijo Ron.

-Si me ofrecieron el puesto en Washington y acepte, me fui y corte la relación, asi que puedes decir que yo lo utilicé a él. Y ahora que tengo que enfrentarlo otra vez, no sé si podre irme tan impune.

-Por eso tienes mayor rango que nosotros?- Pregunto Luna.- Tu entrenamiento fue más extenso.

-Bastante más.- Respondió Ginny.- Casi me entrenaron como a un Ranger, y además fui a un par de sus misiones, eso subió muchos puntos, y creo que Dumbledore les tiene en alta estima, y le hablaron bien de mí.

-Tanto importa si hablan bien de ti. Odio que importe tanto a quien conozcas para moverte en este mundo.- Dijo Hermione con un bufido.

-No importa a quien conozcas, sino de que.- Dijo Ginny con una sonrisa.- Esa fue la contestación que me dio Sable. Esos cabrones, pueden conseguir la cualquier cosa en cualquier sitio, se mueven a las mil maravillas en el mercado negro.

-Pero eso es ilegal!- Exclamo Hermione.

-Poco lo importa al ejército si es ilegal, o legal, en Washington miran los resultados, y en eso ellos son los mejores, que ellos se muevan mucho por ámbitos ilegales, no les importa, siempre y cuando no hagan nada muy grave. Es más estoy segura, que en la base a la que vamos, hay muchas cosas allí, que debería haber, y que los agentes allí hacen la vista gorda por que ellos también se benefician, asi es la vida real en una base, los listos se hacen una fortuna si saben moverse.

-Los conoces bien.- Dijo Luna.

-Fui la novia de uno de ellos durante tres años y medio, y si no me hubiese ido probablemente seria a esta altura la señora Potter, asi que si los conozco.

-Aun asi voy a partirle la cara a ese capullo.- Dijo Ron.- Por tocar a mi hermanita.

-No vas a hacer tal cosa.- Dijo Ginny seriamente.

-Vas a proteger a tu antiguo chico, cuantos más ha habido y que no lo sepa, eso me molesta mucho sabes, tienes novios y yo ni lo sé.- Se quejo Ron mientras le miraba dolido, ahora que ya habían acabado el tema de trabajo podía abordar el tema personal.

-El ultimo chico al que bese fue a Harry, no he tenido más novios ni ligues, y por si te interesa, el primer y único chico con el que acosté a sido él. No he tenido tiempo para más relaciones ni nada más.- Dijo Ginny.

-Aun asi devaste habérnoslo presentado, o por lo menos mencionarlo.- Se quejo Ron.

-Sable no es la clase de persona a la que quieres presentar como novio a tus padres.- Dijo Ginny.- Es justo todo lo contrario a lo que vosotros querríais para mí.

-Por algo será entonces, ya ves como acabo.- Con esto se dirigió a la cabina del avión.

-Tan mal hubiera sido, mencionarlo si no querrías presentarlo?- Pregunto Hermione.

-Si les hubiera dicho que tenia novio, un Ranger nada más y nada menos, el cual se iba en misiones peligrosas a sitios inimaginables, aparte de que a primera vista ya no les habría gustado.

-Porque?- Pregunto ahora Luna.

-Bueno de lejos, la impresión seria buena, el problema hubiesen sido algunos detalles. Harry, a día de hoy es el hombre más guapo que he visto en persona. Vosotros conocéis a mi madre, y habréis escuchado las historias de cuando Bill y Charlie se pusieron pendientes.- Ante esto ambas asintieron.- Pues imaginaros lo que pasaría si mi novio tendría tatuajes.

-Tatuajes.- Exclamo Luna.- No pensé que te gustasen los chicos con tatuajes.

-Yo tampoco, sobre todo viendo la forma en la que madre nos crio.- Respondió Ginny.- Pero no pude evitar que esos tatuajes me gustaran.

-Seguro que podríais explicárselo, al fin y al cabo, como ritual de graduación de los Ranger tienen ponerse ese tatuaje en el brazo, si quería sir Ranger no tenía opción.

-Podríamos explicar ese, pero no los otros.- Dijo Ginny con una sonrisa recordándolos.

-Cuantos más tiene?- Pregunto Luna.

-Tres más, todos ellos tienen significado especial.

-Y que son?- Pregunto Luna.

-Tendréis que verlos. Asi serán más bonitos.