*Disclaimer

No me pertenece Avatar , ni la leyenda de Aang ni la de Korra , blah blah blah. Si me pertenecieran de seguro habría más yuri ;)


Después de pasar 14 años en esa deprimente clínica mental de la nación del fuego , los doctores determinaron que la princesa estaba totalmente recuperada . Pero algunas cosas nunca cambian ,y ella seguía siendo desafiante, narcisista y cruel . La gente aún le teme , teme por todo el horror y la desgracia que trajo a su país . Después de todo lo que había hecho nadie quería escuchar siquiera su nombre ; Azula , la princesa loca, así la habían bautizado en la creciente nación de la llama eterna.

Ella , al contrario , no tenía quejas ni remordimientos sobre lo que hizo en el pasado . En su mente ella seguía siendo la verdadera heredera de la nación del fuego y no su estúpido hermano, razón no le faltaba . Zuko solía visitarla , esperando que algún día pudiesen ser como deben ser dos hermanos , pero Azula no cambió su actitud en lo más mínimo. Su hermano era el único a quien culpar , él y sus amigas Mai y Ty Lee quienes cobardemente la traicionaron. La princesa no olvidaba ni perdonaba, pero ya poco podía hacer cuando todos aclamaban al nuevo señor del fuego.

Durante 10 años , la princesa se acostumbró a su confinamiento ,apagó el llameante fuego de su ira y pensó en el lado positivo de las cosas, . Se sentía al menos segura de estar lejos de esa calaña y no ver el mundo que construyeron derrotándola y humillándola .Quizás su madre tuviera algo de razón y su destino estaba en otra parte, en el Reino de la Tierra, a dónde la transportaban ahora, hacia la nueva Ciudad República.

Esa noche llegó pronto , al fin la sacarían de ese hospital pero volverían a encerrarla , al menos sería un sitio donde no pudiese ver más que los barrotes y penumbras, su hermano había ordenado que fuese tratada como lo que era, una miembro de la familia real. "Puede que Zuzu se sintiese culpable después de todo" - eso pensaba . No podría tener su corona, pero al menos no la tratarían mas como escoria .Cuando el carro al final se detuvo agradeció el cese de los continuos baches del camino . La habían encerrado en una cámara congelada donde no podía controlar el fuego , y la encadenaron con fuertes grilletes especiales que cubrían sus manos por completo manteniéndolas frías, y que solo los maestros del metal podrían destruir.

La puerta se abrió y unos cuantos policías entraron en aquel carro, que era un mini infierno congelado, agarrándola firmemente . No sabían que si quisiera escapar lo habría hecho hace mucho tiempo . Las luces de la ciudad penetraron en sus ojos , ya acostumbrados a la oscuridad , forzándola a cerrarlos . Poco a poco fue divisando manchas y examinando a aquellas personas antes de que la sorpresa le invadiese . Frente a ella se encontraba aquella molesta chiquilla que andaba con El Avatar , solo la vio una o dos veces , lo suficiente para ver cuanto había cambiado desde entonces . Ahora era más alta que ella , pero aún con esos ojos que la inquietaban, no sabía el porqué .

-Bonito uniforme - exclamó con tono burlón

-Llévenla a la celda que hemos preparado , la 313, no le quiten los ojos de encima bajo ninguna circunstancia - ordenó la jefa

¡Ah!... Aquellos ojos vacíos que miraban al infinito no se olvidaban fácilmente , aún seguía preguntándose como podía siquiera caminar sin tropezarse, para ella no era tan fácil comprender como alguien ciego podía ser siquiera un maestro y tan poderoso en algunos aspectos .

Más tarde , esa noche

Pasos en la oscuridad , los guardias aún siguen en la puerta de su celda , aún hace frío , más frío que antes ; Tanto que no puede controlar su temblor y sus tirites ."Malditos bastardos , desearía que los metiesen bajo agua con rocas amarradas a sus cuerpos y que se ahogasen con el metal de sus armaduras oxidándose, clavándose en su piel" - pensaba. Los pasos llegaron hasta su puerta

-¿No estás asustada de mí?

-¿Porqué debería estarlo? - la sombra que se asomaba entre los barrotes de la puerta respondió, firmemente

-No lo sé - alzó la vista , desafiante - ¿Quizás, porque intenté aniquilar a tu pequeña panda de vengadores?

-No te tengo miedo - dijo calmada, aún "observando"

- ... Mucha gente cree que estoy loca ; incluso , mi propia madre pensaba que yo era un monstruo ¿Qué piensas tú sobre ello?

-Deja de auto-compadecerte. Es verdaderamente deprimente - interrumpió Toph, con voz seca. Azula abrió sus ojos como platos. ¿Cómo se atrevía a decirle aquello? Esa chica realmente no había cambiado su manera de ser , se había vuelto más tenaz, sin duda. Por primera vez en mucho tiempo la princesa pudo ver un destello de luz en los ojos ciegos de la mujer y sentir un escalofrío en su cuerpo que la hizo temer -Tu no estás loca , simplemente estás muy necesitada de cariño - volvió a decir dándose la vuelta

La jefa se marchó a paso rápido dejando a la princesa estupefacta , con solo el eco de su última frase retumbando entre los muros de la celda. ¿Cómo se atrevía? Azula estaba furiosa , pero no se atrevió a quitar esa expresión de estupefacción de su rostro, ni siquiera intentó lanzar fuego y retorcerse de rabia.

Después de todo, lo que había dicho Toph era verdad.

Continuará ...


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