Todo pertenece a JK Rowling, excepto la trama.
hoOla a todos!...aunque no lo crean sigo viva, y después de seis meses de no publicar nada, aqui les dejo esta viñeta. Es una adaptación de una escena de teatro que una amiga escribió, basándose en una experiencia personal. Espero que les guste y que dejen reviews con su interpretación, ya que es una escena abstracta y me gustaría saber lo que les hizo pensar. Espero que disfruten lalectura!
Pasada la media noche se escucharon ruidos en el comedor. Ginny sale de su cuarto y baja las escaleras con la sensación de que algo no está bien.
La sala está en penumbra, iluminada tan sólo por un par de velas. Un hombre alto, rubio y robusto está de pie frente a uno de los sillones.
-No te quedes ahí parada, ¡ayúdame!
-Disculpa, es que no te había visto-, dice la chica pelirroja adormilada.
-Por favor apúrate…¡No puedo más!-, dice el chico buscando alrededor del sofá desesperadamente.
-Ahora si pides las cosas por favor, ¿verdad?
-¿Hasta cuando me lo vas a echar en cara?-. Se agacha, toma algo de debajo del sofá y lo guarda.
-Es que nunca me haces caso.
-Sabes que nunca ha tenido relevancia-, dijo él, acercándose poco a poco a ella.
-Claro que la tiene, además, ¿cómo entraste a la casa con la puerta cerrada?-. Ginny comenzó a asustarse.
-Deberías revisar mejor antes de dormir.
Él la tomó del brazo y la llevó a sentarse en las escaleras.
-¿Cuánto tiempo ha pasado?- dice el rubio.
-Tres meses, creo.
-¿Ahora si crees en la muerte?
-Todavía tengo mis dudas.
Él toma su mano y la lleva a su pecho; ella la quita y toma distancia.
-Si te doy el arma, ¿me matarías?
-…
-Puedo ver el miedo en tus ojos, bien sabes que no soy buena persona.
-En el fondo lo eres…
-Si en el fondo crees que soy buena persona, ¿por qué me temes? Anda, dime. Casi puedo oler tu miedo…¿qué pasa?...Lo que pasa es que has sido testigo de lo que soy capaz.
El silencio que siguió entre los dos parecía espectral.
-¡Buuuu!-. Ginny se asusta y brinca tropezando con la escalera. Asustada intenta controlarse y habla en susurros.
-Cállate que está dormida y va a despertarla.
-No puede estar dormida…está muerta…yo la maté…
Ginny se levantó y se alejó lentamente. Él continuó divagando.
-¿Dónde está? Todavía puedo verla ahí, bañada en sangre. ¡Yo la maté, yo la maté!
La pelirroja regresa a la escalera y sube un par de escalones. Desde ahí puede ver a Hermione con una expresión de incertidumbre pero a la vez tranquila, escuchando.
-Es mejor que te vayas antes de que ella baje. Aún hay tiempo.
-Quiero verla…¡ahora!
-No creo que quiera verte después de lo sucedido.
-Han pasado ya tres meses, algún día tendrá que perdonarme.
-¿La muerte perdona?
-No sé. Al menos puedo intentarlo.
-No creo que sea buena idea. Sólo la harás enojar más.
-Entonces mátame, ya no quiero vivir con esa culpa.
-No podría cargar con tu culpa y la mía…arréglate tú con ella.- Ginny le hace una seña a Hermione para que se acerque y ella lo hace lentamente.
-Está bien,- dice el rubio.-Sólo dame unos minutos, quiero pensar bien que voy a decirle. No quiero cometer más errores.
-Bueno, pues suerte. Y mejor deshazte de ese cuchillo, no quieres que malinterprete tus intenciones.
Ginny se pierde en la escalera, mientras que la otra chica llega con Draco, tomando su mano y llevándolo hacia el sofá.