Sucede que solo lo que leen aquí es mío, a excepción de los personajes (de lo contrario, ya estaría nadando en dinero). Esto es de cafesitodeldia, porque ella sabe que es mi corazón. Siempre (¡siempre!) que le pregunto qué quiere que le escriba, me sale con alguna pareja que me saca de mi manta de seguridad: o es algo que EN MI VIDA he visto, o algo de lo que JAMÁS he escrito (lo cual es genial al mismo tiempo, porque me ayuda a saber de qué más puedo escribir y no estancarme).
En fin. Debo decir que no está revisado, porque normalmente ella es quien me ayuda con estas cosas, y como que hubiera sido extraño que ella misma beteara su regalo. So, si ven algo extraño o así, sigan leyendo e ignórenlo(?)
«She broke my heart»
Lo has arruinado
Se ha repetido esta frase una y otra vez hasta el cansancio desde que la dejó en el estacionamiento, después de romperle el corazón y marcharse. No podía flaquear delante de sus compañeros, sin importar lo mucho que eso le carcomiera la consciencia.
La ama, de eso está bien seguro, pero sabe que todos los ojos de su familia están sobre él y su palpable talento. Casi puede escuchar las burlas que soltarían en su casa sobre sus sentimientos. Hace mucho tiempo que se hizo a la idea de que no había espacio para enamorarse con una agenda tan apretada como la de él. Jesse St. James tienen prohibido corresponderle al amor.
Ahora, tiene que ignorar el dolor en su corazón al verla con el idiota de Finn en el centro comercial. Trata de engañarse a sí mismo, haciendo como si no existieran. No los veas, se repite internamente. Pero sabe que eso es totalmente imposible. Su Rachel Berry emana una luz difícil de ignorar. Es su estrella, la más brillante del cielo. Y en su fuero interno anhela que ella lo mire; desea que mande al demonio a Finn Hudson y regrese a sus brazos, de donde nunca se debió de alejar.
Sueña despierto, abrazándola y acariciando sus labios. Algo en su interior le grita que ella aún le ama. Esa vocecita que le dice que no pierda la esperanza, de que algún día podrán estar juntos otra vez, y que todo será perfecto.
En ese momento, Rachel gira la cabeza y sus ojos se encuentran. Siente ese calor en el pecho que le obliga a su corazón roto a seguir latiendo. Ella esboza una pequeña sonrisa: un tanto tímida, un tanto coqueta. Y por dentro, Jesse se llena de paz.
Rachel rompió su corazón, pero es la única que puede hacer que vuelva a latir de manera desbocada.
Cursi, pero muy yo
