-ah!- oigo gemir, me acerco preocupado a la cama de quien he oído el gemido.
Es mi hermana pequeña como sospechaba.
-Haruna te encuentras mal – le pregunto temeroso, ya que nosotros somos pobres, bueno nosotros y casi toda la población, todo por culpa del Capitolio, pero Haruna es lo importante ahora.
-No, es solo que tuve una pesadilla- me dijo eso me alivia, nosotros no podemos permitirnos ningún medicamento, ni siquiera para el resfriado.
-Dime ¿que soñabas?- le pregunto, me parece que la puedo ayudar a que se le pase el susto.
-Soñaba que me elegían para los juegos del Hambre- eso me pillo desprevenido, su fantasía se puede hacer realidad, en los juegos se suelen escoger a propósito a niños para hacerlos mas "interesantes".
-Yo no lo permitiré, así que estate tranquila… no te elegirán- le dijo abrazándola, Haruna es mi hermana y por eso no le permitiré a nadie dañarla.
Ya es por la mañana y tengo que hacer mi "trabajo especial", así que voy a los limites de mi distrito, que por cierto es el parece que no me presente soy Yuuto Kido, tengo 14 años y soy bastante rebelde respecto a las normas impuestas por el Capitolio.
Cojo un arco que tengo bien escondido y salta la vieja verja asiendo caso omiso a la señal de "Peligro, 10 Voltios", solo yo y una persona especial sabemos que esa vaya no esta eloctrucutada. Después de cruzar la valla me siento realmente libre, debo darme prisa ya que si algún nuevo agente de la paz me ve por aquí y llama al Capitolio me torturarían hasta que muriera. Cuando ya estoy lo suficiente lejos, me rió de sus nombres. ¿Agentes de la paz? Nunca han traído ninguna clase de paz a los distritos. Y tenían distritos entre los que elegir. En vez de traer paz trajeron injusticias y muerte como la del distrito 13 y la de mi padre. Será… mejor no despistarme si quiero conseguir buenas presas. ¡BINGO! Un ciervo, apunto mi flecha con bastante delicadeza y silencio, ya que los ciervos tienen un oído bastante sensible.
-¿Qué harás con el?-dice una persona tras de mi, lo suficientemente alto como para alertar a mi presa. Bajo del árbol en el que me subí para tener mas puntería y mi alerta-presas me sigue.
-Tal vez cambiarlo para conseguir comida-le respondo una vez en tierra firme. El se ríe de mí.
-Claro Kido y ha Endo el "agente jefe de la paz del distrito 12" le encantara que te retrases.-dice con sarcasmo.
-¿Y eso porque?-Le pregunto retóricamente.
-¿No te acuerdas?-Me dice preocupado. Pongo cara de no entender y el suspira-Kido hoy es el día de la cosecha-mi cara no cambia, así que me lo concreta mas-hoy son las elecciones de los Juegos del Hambre.
Mis piernas se activan automáticamente por esa frase y corro como nunca. Espero llegar a tiempo
