Prólogo

—¿En que tanto piensas, Maki? —preguntó su compañera de clases.

—En como el tiempo no perdona a uno.

Tras esa contestación la chica pelirroja tomó sus cosas y salió del salón de clases.

¿Por qué le contesto de esa manera? No lo sabía. Sólo quería despejar la mente. Olvidar que por un momento, ella no tenía que cargar un peso sobre sus hombros. Maldecía la hora en que nació primogénita. Tenía una fortuna, construida a base del trabajo de sus padres pero se sentía sola, en la preparatoria le iba bien, pero últimamente, su mente estaba divagando.

¿Sus amigas se habrán dado cuenta?

Lo más probable es que sí. Umi y Hanayo eran muy perspicaces y observadoras, por ende sabían que algo le estaba sucediendo. Movió la cabeza negando todo pensamiento y siguió caminando.

Tenía pensado no ir al club, quería quedarse debajo de algún árbol del patio trasero escondida, meditando sobre su situación. No es que no quisiera asumir la responsabilidad que tiene pero simplemente, no le apetecía tomar las riendas del hospital de su papá, ya que había abierto sus ojos demasiado tarde y ya no podría escapar.

Ella quería cantar aquellas canciones con sus amigas, verlas sonreír, quitarles un poco el peso de sus responsabilidades, tocar aquel hermoso piano, ver a Honoka con una hermosa sonrisa aquella que había perdido con el paso del tiempo, tocar en el famoso Tokyo Dome por segunda vez. Escuchar los gritos de sus fans, escuchar su nombre en el mítico Domo.

Camino por los lugares que se sabía de memoria. Conocía el instituto como la palma de su mano. Sabía que Hanayo y Rin se iban a preocupar, y Umi a enojarse porque no se iba aparecer, pero no le importaba, ya nada le importaba.

Ya nada tenía sentido en su vida, todo había cambiado cuando aquel pequeño deseo egoísta de su amiga de salvar la escuela se cumpliera. Pensamientos iban y venían, unos peores que otros; quería gritar y decir basta. Su otro yo la controlaba. Ese yo que Umi le enseño a como manejarlo en aquellas clases de concentración que le dió casi a fuerzas cuando tuviese una situación complicada.

Como en estos momentos...

Al llegar al árbol entre casi escondido por algunos pequeños arbustos, se asombro de ver a su amiga, la que últimamente le preocupaba más que ella misma, Kousaka Honoka. La más infantil del grupo, o así es como la había catalogado junto con Nico y Rin, tan despreocupada e inmadura.

Notó algo raro en ella: estaba callada y su mirada perdida, se acercó hasta quedar casi a su lado, la ex-líder no se daba por enterada que había otra persona invadiendo su espacio personal o al menos, eso hacía creer.

—No te quedes ahí parada, Maki-chan. Ven y siéntate.

Maki lo hizo sin decir ni una sola palabra.

El silencio invadía cada espacio que rodeaba a ambas chicas. Por un momento pensó que todo lo que estaba viviendo era mentira pero la realidad la golpeaba de tal manera, que hacía que viera que nada era producto de su imaginación, siempre fue fuerte, y en esos momentos no se dejaría vencer por algo mínimo.

Sus pensamientos viajaban ninguno se quedaba, y su alma tranquila hasta en ese momento, empezaría a inquietarse. No se imaginaba que la situación empezaría a salirse de control. Que tal vez, el mañana sería tarde y que lo que una vez soñó no se haría realidad.

Porque ya nada estaba bajo su control. Ella no controlaba el destino, el destino la controlaba a ella a su antojó. Cerró los ojos, buscando alivio para su inquieto y adolorido corazón, buscaba paz mas no la hallaba.

El móvil sonaba con insistencia. No contesto ni una sola llamada, ni siquiera miro quien era la persona que llamaba con insistencia no le importaba, cerró sus ojos y puso su mente en blanco, se dejo llevar por la brisa que removía tiernamente sus cabellos rojizos. Su corazón latía para su gusto demasiado lento como si en cualquier momento se fuera a detener.

Quería llorar, pero no podía.

Quería gritar, pero algo se lo impedía.

—Supongo que no tienes planeado ir al club ni asistir a las siguientes horas de clases, ¿verdad, Maki-chan?

—¿Cómo es que adivinas?

—Intuición, querida amiga. Intuición, ¿o tal vez sea porque te conozco desde hace poco más de un año?

—¿Tu... vas hacer lo mismo?

—Si…

Kousaka Honoka se había convertido en una estudiante modelo, al igual que sus senpais, pero cuando se proponía las cosas cuando quería llegar al objetivo, se empeñaba con todas sus fuerzas para lograrlo. Pero eso fue hace dos años. Ahora, ella era diferente una Honoka que dejó de ser ingenua, despreocupada e infantil. ¿Qué pasó para que cambiara tanto? Ella tenía un secreto, uno que lo llevaba guardado con mucho recelo. Ni siquiera sus amigas de la infancia lo sabían. ¿Para qué preocuparlas?

La ex-lider jamás se imagino que aquella experiencia le cambiaría la vida. Y la perspectiva de la vida, del mundo real, fue aquella que la llevo a conocer otro mundo, uno el cual sus amigas no lo conocían y no querían que lo hicieran. ¿Se puede ser más idiota cuando se esta enamorada? Al parecer sí.

Todo en la vida es posible se acomodó un poco en el tronco del árbol y cerró los ojos. Aquellos azulados como el mismo cielo que tanto cautivaban, ya no tenían brillo, y estaban apagados.

Maki contrastaba notablemente con Honoka. Ambas demostraban sus personalidades, al momento de usar sus palabras, canciones y uniformes, o eso es ahora. Mientras la pelirroja usaba su uniforme bien puesto, el moño rojo en su lugar y bien acomodando; la pelijengibre tenía el saco desabotonado y el moño verde apenas sobrepuesto

Sentadas bajo la sombra del árbol, aquél hermoso y frondoso árbol que había vivido con ellas sus experiencias, ambas pensaban que sus vidas habían cambiado notablemente. Ya no reían, estaban más serias, y en el instituto, la parte académica era exelente para cierta pelirroja, y muy buena para la pelijengibre. ¿Lo hacían por llamar la atención de ambas chicas que le gustaban? Tal vez sí, tal vez no. Aquello no se sabrá jamás, y ellas no estaban dispuestas a confesar la verdad.

Si algo molestaba a Maki, era el hospital de su padre.

En algún momento pensó que sería su primo el que asumiría el cargo de aquel negocio familiar de la gran familia Nishikino. Él pasaba más tiempo ahí que ella, pero al final las cosas no salieron como se tenía previsto. No sabía si tendría que dejar de tocar el piano, lo más probable es que así sea, para adentrarse por completo en el mundo de los negocios y de la medicina. Estaba dolida por esa decisión, pero no quedaba más remedio.

—¡Maki! ¡Honoka! —Umi y Kotori las llamaron, apenas las encontraron, se habían saltado clases y no habían ido al club.

—¿Si? —la pelirroja ni se inmuto en abrir sus ojos amatista.

—¿Se pueden saber por qué no han ido a clases ni han ido al club?

—Oh Umi-chan pareces nuestra madre regañándonos —contesto con simpleza, Honoka—. Simplemente… no nos apetecía ir para allá, aquí estamos bien, eso es todo.

Umi estaba más que sorprendida al igual que Kotori, ella jamás le había contestado asi. En los ojos azules de Honoka, había cierto brillo de tristeza y de perversión. ¿Dónde había quedado la Honoka infantil? ¿Qué fue lo que ella vivió, para que sea otra? Nadie sabría esas respuestas, sus amigas simplemente se sentaron junto al par, y no dijeron ni una sola palabra más. Dejaron que el viento moviera suavemente sus cabellos, y que la brisa, besara sus rostros.

Así quedaron las cuatro, sentadas debajo de aquel árbol, sin saber que el destino les tenía una sorpresa guardada, para ellas y para sus tres amigas mayores que ya no estaban a su lado.

La vida es de sacrificios. Debes dejar de hacer tus deseos, para cumplir a toda costa, los deseos del otro.

Familia, siempre será familia, hasta que alguien, con valor, rompe la cadena para ser feliz.

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Hola chicos hace tiempo que no subo ni actualizo nada jajajaja hasta yo mismo lo entiendo pero bueno

muy poco se acordaran "la verdad no lo creo" de este que solo subí tres capítulos y lo borré todo porque vieron NozoNico y me empezaron a criticar y decir cosas muy feas "-soy un poco, mucho muy sentimental-" :'v

"en esos tiempos todavía no aceptaban cualquier ship que no fuera NicoMaki, KotoUmi y NozoEli"

y pues me sentí mal lo borré y ya tenía todo completo :v pero mi hermano y un amigo me animaron a volverlo a subir espero que me den su apoyo ya está completo así que será cada semana el capítulo uwu