Zack se encontraba sentado en el sillón, teniendo su mirada puesta atentamente a la imagen que proyectaba el televisor, luego de cambiar diversas veces de canales no encontrando nada que ver; Al final se quedó viendo esa película, que en solo unos minutos le tocó su fibra sensible.

Sin poder evitarlo, sus ojos se cristalizaron, sintió un hueco en su corazón y las lágrimas se derramaron de sus ojos heterecromáticos. Gotas y gotas resbalando por sus mejillas, absorbidas por las vendas.

Estaba tan sumido en el ambiente que no notó cuando Ray se acercó a su lado y se sentó junto a él. Hasta que habló.

—Zack —pronunció.

—¿Qué? —gruñó fregándose las lágrimas con la manga de su campera, desviando la mirada de la que Ray de seguro le estaba mandando.

—¿Estas bien? —preguntó, sentándose a su lado.

—Lo estoy —refutó para mirar al frente y notar como la parte trágica seguía. Sus ojos arden al intentar contener las lágrimas que amenazan por salir y ve todo borroneado. Otra vez se friega con su manga.

De reojo puede notar como Ray, mira la película sin inmutarse; es una insensible. En cambio, él siente que sus ojos se humedecen, otra vez.

—Estas llorando.

—¿Quién diablos está llorando?

—Tú.

Él pronunció algo incomprensible, sintiendo como sus mejillas se encendieron por la vergüenza. En eso, apagó el televisor.

—¡Creo que me entro una basura en el ojo! —se excusó y volvió a fregarse, debía ser eso, piensa. Al sentir como arden.

—¿En los dos?

—¡Sí! —exclamó a todo pulmón, ante las preguntas sucesivas de Ray.

—Umm... —articuló— Ten —y le tendió una venda blanca.

—Gracias... —pero, luego se dio cuenta que era su venda, una que colgaba de su mano— ¡Asquerosoooo! —Dijo con profunda repugnancia— ¿Estas bromeando? ¡No voy usar mis vendas para secarme las lágrimas!

—Así que estas llorando.

Él no sabía que decir, además de que Zack tenía las vendas de su cara, húmedas.

—¡Cierra la boca! —replicó y se hundió en el sillón, humillado—¡Estoy bien! —refunfuñó.

Ray, en un gesto dulce; le acarició su pelo. Él sintió el suave y calmado tacto... A Zack, le hubiera gustado sentir esa mano antes, su mente ya no pensando en la película sino en su pasado.