Espero que les guste, es mi primer fic en este fandom.
Disclaimer: Carrie pertenece a Stephen King.
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Feliz
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Carrie no se lo podía creer, Tommy Ross la había invitado al baile…pero, ¿y si solo era una broma? ¿Si todo esto solo era otra de las horribles cosas que le hacían Chris Hargensen, Tina Blake y sus otras compañeras? No le sorprendería, después de todo, ellas siempre le atormentaban.
Pero todo empeoró el día que ocurrió lo de las duchas. Incluso Sue Snell había participado en eso. En ese maldito día.
Eso le hacía pensar que lo ocurrido con Tommy momentos antes era mentira. Es decir, él era el novio de Sue ¿no?, esa era una razón más para no creerle, debería invitar a la chica que es su novia, no a ella. Él podría estar del lado de la rubia para hacerle sufrir como todas las demás.
…¿Pero y si no era así? ¡Demonios! ¿¡Por qué tenía que ser tan insegura?!
Y es que, esa mirada que el chico le dirigió al decirle si quería ir al baile con él, fue tan…no pudo haberle mentido con esos ojos ¿verdad?
No quería que fuera mentira.
No quería que todo fuese una simple y cruel broma.
Quería que fuese verdad. Quería que Tommy en verdad se haya interesado en ella, aunque sea un poco.
Lo suficiente como para que la invitación fuera real. Tenía miedo, sí. Tenía miedo de ilusionarse, hacer su mejor vestido para la noche del baile, arreglarse, peinarse, salir a la entrada de la casa y ver a Tommy Ross subido en el auto junto con Sue, Chris y Billy riéndose de ella. Burlándose de lo ingenua que era al creer que alguien como él la invitaría al baile, teniendo novia ya. Simplemente no lo soportaría. No eso.
Por otro lado, que le partiera un rayo si no se había sentido feliz al escucharlo decir que quería ir al baile con ella. Por un momento, se sintió especial. Aunque la realidad le haya caído encima como un balde de agua fría, alertándola de que probablemente todo era una farsa. Pero dejaría eso de lado.
Quería pasar tiempo con él, conocerlo, apreciarlo, e incluso tal vez, convertirse en alguien especial para él.
Quería ser feliz por esa noche, solo esa. Sin bromas crueles, sin su madre, sin armarios oscuros, sin poderes demoniacos, sin Chris Hargensen. Solo ella, Tommy y el baile.
Sabía que al día siguiente todo se habría acabado, sería el bicho raro antisocial de siempre, comería sola en el almuerzo, las chicas le molestarían de nuevo y ni bien llegase a casa tendría que tener cuidado de mostrar sus poderes frente a su madre. Pero estaba bien, porque habría tenido como recompensa esa noche. Esperaba que fuese fantástica.
Esperaba que esa noche fuera única e inolvidable en su vida. Si, esperaba que así fuera.
Especial.
No tuvo que pensarlo dos veces, aceptaría. Y se lo diría a su madre, sin importarle lo que le dijera al respecto. Ella iría. Estaba decidido. Se permitiría una noche de felicidad, aun si poseía poderes demoniacos seguía siendo humana, y como tal, tenía sentimientos.
Le diría que sí. Sí quería ir al baile con él. Si a Tommy Ross.
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Bueno, como ya les dije arriba, es el primer one-shot que hago de Carrie, y es que, joder, que me encantó el libro, se los recomiendo, es muy bueno. Como sea, me parece que Carrie no debió sufrir tanto, es decir, madre psicópata, chicas crueles y despiadadas, poderes, es demasiado. Y esa fue la causa por la que explotó finalmente, con mayor razón si es tímida. No es bueno guardarse nada, pero ella no tenía a nadie, así que al no encontrar ningún modo de expresarse, la broma de la sangre de cerdo fue el detonante para que Carrie eligiera la furia del momento, dando paso al odio, para desahogarse.
Bueno, creo que si sigo voy a spoilearles todo el libro :)
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Carol.