Hola a todos, esta historia esta siendo editada (por fin) ya que bastante falta le hacía demos gracias a hyoz por esto! Gracias!.

Y bueno espero que aquellos que no la hayan leído la disfruten y aquellos que ya la leyeron pues la disfruten aún más!

Disclaimer: Una ley superior es una traducción del fanfiction A Higher Law de Nynaeve80 por Mira Black Lupin. Nada es mío, la historia y todos los personajes les pertenecen a J.K. Rowling & Nynaeve80 en mi profile podrán encontrar el link a la historia original en inglés.

- - - - - - - - - Una ley superior - - - - - - - - - -


(A Higher Law)

Capítulo 1. Noticias Alarmantes

Hermione cruzó la puerta del número 12 de Grimmauld Place, apenas tomándose tiempo para cerrarla detrás de ella. Se movió tan rápido que la madre de Sirius apenas y tuvo tiempo de gritarle cuando ya había cruzado zumbando el marco. Había una reunión de la Orden que comenzaba en cinco minutos y estaba determinada a no llegar tarde.

Aún era un miembro reciente en la Orden y habían algunas personas que sentían que no estaba a la par, independientemente de lo que hubiera hecho en el pasado. El llegar tarde a la reunión solo haría que hubieran más negativas hacia su persona.

Redujo la velocidad de su paso antes de entrar al comedor donde la reunión se estaba llevando a cabo. Cuando atravesó la puerta cuido de mantener su expresión tranquila y relajada, y visualizó a una de sus mayores adversarias…Nymphadora Tonks. Hermione la ignoro y deliberadamente escogió un asiento a la derecha de Harry, lo más lejos de ella como fuera posible.

Cuando conoció a Tonks por primera vez, la mujer mayor fue amable y divertida, siempre con una sonrisa en su rostro. Seguía siendo así… con todos excepto con Hermione. No podía entender lo que había hecho para molestar a Tonks, pero era evidente que la mujer ya no disfrutaba de su presencia. Harry y Ron incluso lo habían notado, lo cual era un testimonio de lo evidentes que eran sus acciones. Ellos eran sus mejores amigos, pero no estaban hechos exactamente del material de Sherlock Holmes.

Casi se rió de su pensamiento acerca del detective de la literatura muggle, pero mantuvo sus rasgos inexpresivos. Sus deseos de ser considerada una adulta superaban cualquier otra cosa en ese momento. Tonks fue por mucho, la más franca en mantener a Hermione, Harry y Ron fuera de la Orden, pero Hermione tenia la sensación de que era algo más personal con ella. Tonks había hecho más de una declaración en el sentido de que Hermione todavía era una bebé, y que simplemente no estaba lista para el "trabajo real". Desesperadamente había querido hechizar a la Auror, pero sabía que si lo hacia solo le daría crédito a las declaraciones de Tonks. En cambio, estaba decidida a actuar de manera tan madura como le fuera posible, incluso si maldecía en silencio a la metamorfaga en su mente.

Remus Lupin y Kingsley Shacklebolt llegaron momentos más tarde, y la cara de Tonks inmediatamente se iluminó. Le avisó a Remus con voz ruidosa que le había guardado un asiento. Kingsley sólo le sonrió antes de sentarse al lado de Hermione. Ella se dio cuenta de la mirada con fulgor que le disparo Remus a Kingsley antes de sentarse junto a Tonks, quien llevaba en ese momento el cabello largo, hasta los hombros, de un brillante color rosa.

— Pobre tonto — refunfuñó Kingsley para si mismo, con una sonrisa.

— ¿Por qué fue eso? — le susurró al Auror. Él era un hombre grande y ella siempre se había sentido un poco intimidada por él, hasta que comenzó su formación para Auror. Él le había sido de gran apoyo y fue el primero en oponerse a Tonks cuando objeto la presencia de Hermione. Después de esto, se había convertido rápidamente en una de las personas favoritas de Hermione.

Kingsley le echó un vistazo antes de responder con diversión — Solo digamos que Remus con gusto negociaría asientos conmigo ahora mismo.

Antes de que pudiera preguntarle que es lo exactamente quería decir, Dumbledore llamó a la Orden a reunión. Ella se enderezó rápidamente y dirigió su atención a su antiguo profesor. No fue hace mucho que habían asistido a su entierro, solo para descubrir que su muerte había sido simplemente un plan para sacar a los Mortífagos de sus escondites. Ellos tuvieron que regresar después de un año, justo después de que Voldemort fue asesinado por Harry. Lamentablemente, no todos los seguidores de Voldemort fueron encontrados, de ahí la necesidad de que la Orden siguiera existiendo. Mientras que los Mortífagos habían disminuido en número, todavía habían algunos funcionarios de alto rango en el Ministerio que estaban bajo vigilancia de la Orden.

— Empecemos con las buenas noticias, ¿de acuerdo? — el anciano sonrió, sus ojos centellearon un poco. Continuó relatando la captura de tres ex-Mortífagos. Ahora todos cumplían cadena perpetua en Azkaban. El cuarto hombre había optado por quitarse la vida en lugar de cumplir sentencia en prisión. Los prisioneros no habían sido reclutas superiores de Voldemort, sino lacayos de bajo nivel, pero aun así todavía era alentador librar al mundo mágico de esos peligrosos criminales.

— Ahora, las noticias más desagradables. — Dumbledore hizo una pausa, mirando a Remus con lo que parecía ser una mezcla de compasión y pesar. — Como ustedes saben Marcus Lestrange, antiguo Mortífago, aún conserva su puesto en el Ministerio. Recientemente ha puesto en práctica algunas leyes que, me temo, pueden ser un signo de difíciles tiempos por venir.

Todos los miembros presentes permanecieron en silencio, mirando fijamente a Dumbledore esperando a que continuara. — Tal parece que apunto a uno de los nuestros –hombres lobo. — con sus palabras, todos miraron a Remus. Hermione rápidamente miro a Dumbledore de nuevo, comprendiendo a Remus, que probablemente estaba avergonzado de ser señalado. Él no estaba precisamente orgulloso de su condición, y siempre parecía incómodo cuando se mencionaba.

— Como ustedes saben, los hombres lobo tienden a vivir más tiempo que la mayoría de los magos, y poseen cualidades

curativas muy inusuales. Al parecer, el Ministerio está esperando para hacer uso de estas ventajas.

Antes de que pudiera continuar, Tonks gritó: — No podemos dejarlos tener a Remus, Albus. ¡Tienes que hacer algo! Por qué no nosotros…

El viejo mago la interrumpió a la mitad de su enfático discurso, para alivio de Hermione. — Nadie se esta llevando a Remus, Nymphadora. — Hermione se rió por dentro, sabiendo cuánto odiaba Tonks que la llamaran por su nombre de pila. — Sin embargo, exigen que todos los hombres lobo sanos transmitan algunas de sus cualidades.

Hermione pensó que Dumbledore parecía ligeramente incómodo con aquella última oración, pero la pregunta de Remus rompió el resto de sus pensamientos. — ¿Se refiere a que tengo que infectar a otros con mi licantropía? — su voz estuvo llena de lo que sonó a terror, y su rostro se puso mortalmente pálido. Su corazón inmediatamente se dirigió hacia el hombre lobo. Él había afrontado a numerosos opositores en la guerra, y nunca había mostrado ni la mitad del miedo que tenía en su cara ahora.

— No, no, mi querido muchacho. Nada de eso. — lo tranquilizó Albus. Remus suspiró y relajó los hombros. — La ley se refiere en realidad a… la crianza. — Las cejas de Remus se alzaron, pero Albus continúo antes de que alguien lo pudiera interrumpir. — El Ministerio les esta requiriendo a los hombres lobo que se emparejen con una bruja o mago dentro de los próximos dos meses.