Título: The Open Door.
Número de palabras: 567.
Personajes/Pairing: Michael x Julia.
Disclaimer: Smash no me pertenece, pertenece a su respectiva creadora y a la NBC.
Smash ha finalizado y quería contribuir de alguna manera al fandom. El final da para mucho material, pero me he decantado por Julia y Michael porque los adoro 3 Es una lástima que hayan cancelado esta magnifica serie (y continue Glee, que lleva unas temporadas que...), pero me quedo con que han sabido terminarla a lo grande.
THE OPEN DOOR
Julia sabe mejor que nadie lo que es equivocarse.
Siempre le ha dicho a su hijo Leo que no hay nada malo en ello. Fallar es aprender de los errores y mejorar. Ella misma se equivocó muchas veces antes de escribir Heaven on Heart junto a su inseparable compañero Tom e iniciar su exitoso ascenso en Broadway.
El problema es cuando caes una y otra vez en la misma piedra, casi rozando lo patológico.
Y es que no es ningún secreto para su mejor amigo y más fiel confidente, que Julia es un desastre en las relaciones personales. La facilidad con la que escribe letras y diálogos desaparece cuando se trata de manifestar sus propios sentimientos. Quizás por vergüenza a admitirlos o por miedo a salir herida, pero prefiere ocultarse en su capullo de folios y tinta antes que enfrentar la situación.
Ahora Julia sabe que, a veces, hay que ser valiente y cerrar algunas puertas. No por orgullo ni por soberbia, sino porque ya no llevan a ninguna parte.
Aunque quiso a Frank y no se arrepiente del tiempo que pasaron juntos, no es la persona con la que estaba destinada a pasar el resto de su vida. Le llevó demasiado tiempo ser honesta consigo misma, y eso provocó que acabara haciéndole daño a él y a Leo, casi destruyendo lo que, al fin y al cabo, siempre iba a ser su familia.
Después de eso el destino le presentó a Peter Gillman, un dramaturgo con el que bastaba una mirada para que saltaran chispas… en el peor sentido. Cualquier argumento por parte del atractivo escritor derivaba en una intensa discusión en la que ninguno estaba dispuesto a ceder. En el fondo le gustaba que constantemente la estuviera probando, pero Julia sabía que entre ellos no había nada más. Declinó su oferta de irse a Londres con él, y Peter desapareció de su vida de la misma manera en que había entrado, como una repentina brisa de aire fresco.
Cuando se reencontró con Scott, pensó que era la oportunidad perfecta para pagar por su traición. Sin embargo, volvió a equivocarse, esta vez dándose cuenta de cómo era realmente el director. Julia ríe, pensando que al final no se había equivocado cerrándole la puerta la primera vez.
Michael abrió la puerta aquella noche sin esperar que tras ella se encontrara Julia, la mujer que le había robado el sueño tantas noches y por la que tanto había perdido. Se quedó mirándola, sin saber muy bien qué hacer o decir, hasta que ella le extendió una carta.
Cuando terminó de leerla, no podía creer que aquello estuviera sucediendo realmente. Levantó la mirada, buscando los ojos de Julia, la cual trataba de contener las lágrimas mientras intentaba, sin éxito, esbozar una sonrisa.
"Perdóname, Michael."
El actor sonrió, sintiendo también cómo se le aguaban los ojos. Aún con la carta en la mano, buscó el rostro de la compositora y la besó. Un roce que había esperado ansioso desde la última vez que se vieron, como si no hubiese pasado el tiempo.
Finalmente Julia se había dado cuenta de que había una puerta que, por más que pasara el tiempo, por más que insistiera en cerrar, siempre permanecería abierta. Había tardado demasiado en darse cuenta de que Michael era la persona que quería a su lado, y ahora sólo deseaba disfrutar de su compañía.
Que esa puerta jamás se cerrase.
