Pequeños y felices recuerdos

Guardería de Inglaterra.

Buenos días niños – dijo una maestra joven de pelo rubio con su uniforme de clase-

Buenos días mis. Lucy – se escucharon las voces de los pequeños niños que no revesaban ni los 5 años-

Hoy vamos a hacer algo especial, vamos a dibujar a nuestra mascota – les dijo con animo, mientras los niños al escucharla sus ojos brillaron. Todos los pequeños empezaron a trabajar pero en especial un niña muy especial que a pesar de tener 5 años ya era la heredera de una gran compañía.

Integra hellsing dibujaba con solo crayones negros y rojos con gran animo, fue casi la ultima en terminar, cosa rara que no solía pasar.

Enséñame tu dibujito integra- se agacho la maestra para verla a su altura-

Aquí esta – se lo enseño con alegría, pero al verlo la maestra se asusto mucho que cayo de espalda-

Integra, que es esto – dijo con miedo y enojo

Mi perrito – dijo inocente

Eso no es un perro… integra – toma el dibujo- llamare a tu tutor espera en la digresión

SIP – dijo tristemente caminando Asia aquel salón. Mientras la maestra tomo el teléfono y llamo a la mansión de los hellsing.

Hola – sonó una voz masculina y cansada al otro lado del auricular-

Hola, quisiera avisarle que es importante que venga a platicar conmigo, es sobre su niña integra hellsing – dijo calmada

Eh?... yo… bueno ya vio – y colgaron el teléfono, la maestra fue a la dirección y espero al tutor-

Pasaron 30 minutos y de la puerta llego un hombre de traje negro, lentes oscuros y su cabello era no tan largo de color negro, camino Asia el escritorio de la directora pero un bultito pequeño lo detuvo.

Aluppy! – Grito la pequeña integra abrasándose a la pierna del mayor-

Hola, pequeña – revolvió su cabello- y dígame maestra para que quisieran verme

Bien señor, mire el dibujo de integra- le da el cuaderno de integra y se quedo casi impresionado- emm… bueno entiendo, y no se preocupe lo arreglare, vámonos integra- toma a la niña de la mano y con la otra su pequeña mochila.

Sube todo a la limosina y se queda viendo el cuaderno.

Es para ti aluppy – con una gran sonrisa en la cara-

Gracias pequeñas – revuelve su cabello-

*tiempo actual*

Jajajaja, como no recordar ese día – reía alucard mirando un dibujo viejo, aquel dibujo era un perro negro con 6 ojos rojos y con dientes afilados, la viva imagen de cerberos-