Era tranquilizador todo aquello.
El día a día en la academia de Kuoh, realmente no era de lo más impresionante, pero si bien era algo que la mayoría no esperaría de una escuela elitista como aquella, por lo cual solo generaba una atmosfera más rara en aquel lugar.
El sol si bien permanecía en el cielo, el calor de este era menor, quizá sea por las nubes que están tapando la mayor parte del cielo o el hecho de que ya estaba siendo la hora para que el sol desapareciera. Dejando en aquel momento una luz naranja en el lugar debido al atardecer que era presente.
Bajo aquel atardecer, en la tierra, se encontraba una persona recostada en el suelo, ignorando la yerba y el pasto a su alrededor, solo estaba el allí mirando el cielo con tranquilidad, o al menos eso era lo que podría llegar a parecer, puesto que la persona en cuestión contaba con un ojo hinchado y varias contusiones alrededor de la cara, solo aquellas a la vista, dejando en total un cuerpo algo magullado.
Aquella figura mostraba de todo menos una intensión de ponerse de pie o irse a otro lugar, de hecho, tampoco es como si él pudiera irse a cualquier lugar en ese momento.
Tal vez la paliza después de que él hubiera espiado el vestidor a las chicas que pertenecían al club de kendo había sido algo más brutal y con más fuerza que normalmente solía ser.
Aquella persona no pudo evitar sonreír al pensar en aquello, los momentos en los cuales pudo ver algo tan hermoso, seguían en su cabeza a pesar de los golpes que presento esta, luego de que la paliza fuera realizada. Realmente él era un pervertido en toda la regla.
Quizá era un pervertido que podía llegar a soportar una paliza que no era ni medio normal para una persona normal y corriente, pero su estado no era el mejor de en aquel momento, después de todo, ser golpeado tantas veces y con tanta fuerza de manera cotidiana tiene su límite y carga al cuerpo. La persona en el suelo sonrió con más tranquilidad cuando el pensamiento de que las chicas del club de kendo se lucieron en esta ocasión cuando él iba a recibir como ellas les gustaba nombrarlo "castigo divino"
Él pudo escuchar como la alarma que indicaba que el recreo finalizo fue escuchada, pero él estaba cómodo, bastante a su parecer, tal vez fue el hecho de que no sintió como la sangre salía de parte de una herida en su cabeza o quizá por el sueño repentino.
―Quizá una siesta no haga mal…―fue lo único que la persona susurro para sí mismo mientras su expresión se apagaba y cerraba los ojos, él quería dormir, no es que aquella persona estuviera muy lesionada, solo demasiado cansada.
La última campanada sonó al instante que indicaba que las clases del día de hoy fueron finalizadas. Lo cual como en cada ocasión hizo que la alegría general por la finalización de jornada se expandiera, fue especial motivador para las chicas en su mayor parte, puesto que terminaba con el día a día de las miradas de sus compañeros, no solo aquello, sino que para ellas había llegado a ser un buen día a partir de cierta hora, más específicamente después del recreo, Issei no había regresado a las horas siguientes de clase, quizá al igual que la felicidad naciente, broto junto con el desconcierto.
Quizá aquel castaño pervertido fuera aquello, un pervertido sin remedio con una obsesión que rayaba la locura, lo cual él nunca tuvo problema para expresar a los cuatro vientos.
Eso sumado al hecho de que había un pequeño grupo, casi nulo, pero existente, de personas que sabían que él castaño era pervertido, más no estúpido como realmente aparentaba a cada momento que podía, solo genero una duda más por el hecho de que él estuvo presente las primeras horas de clase y el profesor no había indicado de que fue retirado, todo fue extraño. Pero siendo aquel pervertido el tema, nadie dedico ninguna preocupación genuina por el castaño.
―Realmente hoy fue un día tranquilo hasta cierto punto―fue el comentario seguido de un suspiro dado por una joven de cabello castaño con el uniforme de la academia dando a entender que era de Kuoh.
―De alguna manera se podría decir―fue la respuesta de una joven de cabello color rosa con una tonalidad clara, aquella peli rosa se encontraba caminando junto a la castaña, llevaba el mismo uniforme que esta, siendo esta también parte de la academia de Kuoh, ambas iban hacia la salida de la academia con total tranquilidad.
La peli rosa levanto su mochila unos instantes para acomodarlo bien, cuando hizo aquel movimiento sintió un vacio en un lugar que no espero, al instante de aquello se quedo parada con una cara de susto, haciendo todo aquello ante la mirada de desconcierto de parte de la castaña a su lado. La peli rosa al terminar su búsqueda en la mochila, abrió los ojos de sobre manera.
― ¿He? ―el susurro de confusión fue audible para la castaña.
― ¿Qué sucede? ―la peli marrón miro con cierta preocupación a su acompañante.
―Creo que deje mi celular en los vestidores…―la peli rosa no dudo mucho en responder, seguido de aquello dio un suspiró de cansancio―puedes continuar sin mí, después de todo dijiste que tiene algo que hacer, no te preocupes es solo ir a recuperarlo―prosiguió la peli rosa mientras que al ver el asentimiento de parte de la castaña, decidió entrar de nuevo a la academia mientras tenía en mente lo descuidada que fue.
Conforme siguió su camino en la academia, a la hora de pasar por el patio que llevaba a los vestidores noto una figura color negro un poco cerca de los vestidores, más no le dio importancia en aquel momento tenía algo en mente, por lo cual decidió ignorarlo y seguir.
Una vez cuando todo termino y ella estaba en los vestidores femeninos, después de unos minutos encontró lo que vino a buscar, suspirando con alivio, al instante en que tuvo aquel artefacto en sus manos desbloqueo el móvil para notar como no tenía ninguna notificación, quitando aquello de su mente decidió abandonar el lugar y seguir con su camino vuelta a casa.
Conforme la peli rosa iba caminando, pensó por unos momentos acerca de la figura que había visto hace unos minutos cerca del lugar, decidió ir hacia la ubicación donde aun podía ver la misma figura en la misma posición, ella no sabía si era un perro o algo así, de igual manera decidió ir a ver que se suponía que era, no importaba mucho el tiempo que tarde, puesto que de igual manera ella ya iba atrasada.
Grata fue la sorpresa que la peli rosa obtuvo al notar cómo se trataba del castaño pervertido de siempre, lo primero que hizo fue darle una mirada confusa para poco después una de cansancio y asco, la peli rosa observo el rostro del castaño, y frunció el seño cuando los pensamientos de que, él era bastante agradable a la vista salieron, en su vida lo admitiría o siquiera quería volver a pensar aquello.
Un poco antes de voltearse y proceder a irse, noto algo en su rostro, se acerco un poco más para poder observar con detalle, viendo de que se trataba, había una línea de sangre seca que iba desde el comienzo de su cabello, descendiendo por su frente y terminando en forma de lo que serian gotas hacia el cuello de su camisa.
Ella hizo memoria momentáneamente de que después del receso, más bien justo después de la paliza que todas las chicas le dieron, con único fin de ponerlo en su lugar, el castaño frente a ella desapareció.
A pesar de que no quería hacerlo, se acerco un poco más en la dirección del chico que ahora se encontraba en el suelo todo para comenzar un intento para despertarlo y ver si se encontraba bien, aquel intento de despertar, fue provocado por unas patadas sin nada de interés al brazo del castaño, haciendo que este se agite sí, pero no obtuvo resultados.
— ¿Issei-san? —La peli rosa pregunto cortante mientras que seguía con su intento de que el castaño reaccionara, pero no fue así.
Un poco más preocupada de lo que le gustaría, se agacho a la altura del suelo para mover la cabeza del castaño, conforme hizo eso, le dio curiosidad al sentir algo frio en su mano junto con la sensación de de que algo pegajoso. Sin querer saber que era, dudo a la hora de levantar la mano que ella había puesto en la cabeza del castaño, cuando pudo observar su mano noto el líquido carmesí que rodeaba su mano.
Esta vez sin que ella lo supiera, se desespero un poco al notar como no había respondido el castaño y la sangre que había, ella apoyo ambos brazos en los hombros del castaño mientras que se arrodillaba al lado de este, puso la cabeza en pecho notando su respiración, la preocupación que sentía era más bien dirigida al hecho de que ella fue parte de lo que pudiera llegar a matar al castaño, al sentir escuchar los latidos del castaño, se tranquilizo, esa preocupación se fue agrandando de igual manera.
Hasta que por fin el castaño había respondido, con un susurro.
—Huele bien…—en todo el tiempo en que la peli rosa había intentado despertar eso fue lo primero que escucho de parte del castaño, fue allí que se dio cuenta de la cercanía que había.
Rodo los ojos con cansancio por el comentario obviamente pervertido que había venido de parte del castaño, la joven decidió darle una sacudida más al castaña para poder comprobar todo. Y en efecto, esta vez el joven se había empezado a despertar, de a poco, cuando Issei empezó a abrir los ojos, noto como se encontró con unos ojos color ámbar que lo observaban.
— ¿Katase…-chan? —pregunto al ver a la joven a su lado, Katase cuando noto que él castaño se empezaba a despertar volvió a sentarse a su lado, levantándose la posición que había estado con anterioridad. Katase noto como poco después de mencionar su nombre, el castaño se empezó a levantar poniéndose de pie, cuando Issei termino de enderezarse, Katase escucho el crujir de los huesos del cuerpo del castaño, por cualquiera movimiento el crujir de estos era audible, haciendo que la mirada de disgusto de la peli rosa volviera.
Issei suspiro mientras se reponía, todo ante la vista de la peli rosa que aun estaba sentada en el suelo, el castaño no dudo y se quito la ropa, la parte superior más específicamente el chaleco del instituto.
— ¡¿Qué mierda haces maldito pervertido?! —La pregunta agresiva de la peli rosa, más la sorpresa de esta hizo que su posición de estar sentada en sus piernas fuera cambiada al hecho de que ella caía de lleno al suelo mientras observaba con asco y desinterés al castaño que aun seguía en lo suyo, al instante que ella toco por completo el suelo y la forma en la que cayó se sintió indefensa, el miedo empezó a formarse en la peli rosa , recordó con quien estaba y no dudo en la posibilidad de que él castaño la violara.
—Se siente raro el tener la sangre en el cuerpo, han mejorado bastante ahora sí que duele mucho—comento Issei al momento de quitarse su camisa solo unos momentos estando sin nada en la parte superior para poco después colocarse la chaqueta de instituto la cual era color marron oscuro rosando el negro, cerro el cierra de esta y dejo en su mano su camisa blanca con varias manchas rojas esparcidas en esta.
Katase no hizo la vista gorda al ver la camisa del castaño, llevo uno de sus dedos a su boca y mordió su uña nerviosa ante los pensamientos que tuvo.
"¿Se suponía que toda esa sangre era por nuestra culpa? ¿Siempre él terminaba así?, si esto era un maldito juego de venganza, no entiendo porque llegamos a este punto"
— ¿Enserio estas bien? —ella se recrimino mentalmente por el tono de voz tan preocupado que uso, pero cuando pensó todo aquello, por más diminuto que ella sintiera, se sentía culpable.
— ¿He? —el castaño comento sorprendido mientras abría los ojos de sobre manera, aquella acción la hizo a modo de que no había escuchado correctamente lo que la peli rosa había dicho, para que la situación de incomodidad se completara, la peli rosa sintió como el castaño se le quedo viendo con la misma expresión un buen rato sin hacer o decir nada.
—Responde pedazo de basura—La peli rosa había recuperado su tono duro, ella se agradecía mentalmente por aquello.
—Sí, estoy bien, es solo que me sorprende que una de las personas que me hizo esto, ahora mágicamente este preocupada, bastante irónico realmente jajajaja—conforme Issei termino de decir aquellas palabras se rio al final, la situación de todo aquello ya era graciosa en su mente.
Issei noto la manera dura en que la peli rosa lo miraba desde suelo, lo pensó unos segundos pero decidió hacer la idea que tenía en mente, estiro su mano hacia Katase a modo de darle a entender que le ayudaría para poder ponerse de pie.
— ¿Quieres que tome tú mano a sabiendas de lo que haces con ella? —la peli rosa fue cortante y algo agresiva, más de igual manera no se había levantado por su propia cuenta aun.
—Si te hace sentir mejor puedo, puedo pensar en ti la próxima vez que lo haga—comento el castaño sonriendo por el pensamiento que tuvo en ese mismo momento, de hecho la imagen de la peli rosa en el suelo ayudo a su fantasía.
—Dime que es la maldita broma lo que acabas de decir—Katase le dedico una mirada fulminante al momento en que el asco hacia él castaño aumentaba, pero sus pensamientos rondaban en "sigo hablando con el pervertido…acabo de caer bajo"
—No aguantas nada, yo que pensaba que podríamos ser amigos…eso dolió mucho Katase-chan—Issei exclamo mientras fingía haber sido herido, acto de ello llevo una de sus manos a su donde estaba su corazón y fingir dolor.
— ¿Amigos? —Katase lo miro curiosa—no te hagas ideas tontas, prefiero andar con una roca que contigo, solo eres un pervertido de feria nada—sentencio la peli rosa, el tono tranquilo con la mirada de asco que le dio a Issei, fue más que suficiente para dar a entender sus pensamientos respecto el chiste de la propuesta de amistad del castaño.
— ¡Cuanta maldad¡ —exclamo mientras llevaba ambas manos a su pecho a modo de mostrar que tanto le habían dolido las palabras, pero todo aquello solo molesto a Katase, puesto que el castaño seguía burlándose de ella, sin si quiera inmutarse en lo más mínimo por las palabras que había mencionado.
— ¿Realmente me preocupe por ti? —Katase observo al castaño, mientras golpeaba la mano que aun tenia enfrente a ella, mientras que se ponía de pie y agarraba el boken que tenía en su espalda.
—bueno dejando todo aquello, si estabas preocupada por mi ¿Puedo aprovechar y ver su hermoso Oppai? —en todo este tiempo aquellas palabras del castaño fueron las más serias que la peli rosa escucho, por lo cual solo hizo que ella se enoje más.
Esta vez la peli rosa no dudo en lo que iba a hacer, tomo su postura con la espada en mano y se preparo para dar un golpe en el costado justo en las costillas, aquella iba dedicado a Issei, había esperado que al menos intentara evitar el golpe, ella esperaba que se cubriera o algo así en un vano intento de mitigar el daño, pero lo que no tenía previsto era que el castaño agarrara la espada de madera mientras estaba siendo dirigida a su costado. Todo aquello con la mano desnuda.
—Oye…—el castaño llamo mientras la mirada de burla y perversión se iba—ya no hay clases, los profesores ya se retiraron por lo cual, ya no hay restricciones—él castaño la miro de forma molesta—el que deje que me golpeen ¿Enserio hace pensar de que soy débil, no es así? —susurro mientras miraba a la peli rosa.
—mi boken…tú no deberías ser capaz de parar el golpe, como mierda hiciste para…—antes de que la peli rosa pudiera terminar Issei se movió cerca, golpeando la mano de la chica que sujetaba el boken, más seguido de aquello con un movimiento de pies derribo a la chica dejándola de nuevo en el suelo, Katase tenía los ojos abiertos la sorpresa no termino allí sino que el castaño agarro el Boken de la peli rosa y lo clavo en suelo cerca del lugar donde estaban, pero no lo suficiente mente cerca para estar al alcance de la peli rosa.
De hecho al observar el boken noto como este presentaba una cantidad de sangre en la parte exacta donde…Al instante la joven observo la mano izquierda del castaño de la cual salían gotas de un liquido carmesí que ella sabía bien que era, la peli rosa entendió que el castaño si bien detuvo su estocada, fue a un precio, noto como también unos dedos del castaño se encontraban torcidos en una dirección difícil de recrear de manera natural, todo eso con una mirada cansada y una expresión dolida.
A pesar de aquello, ella estaba más que asustada, ahora se encontraba desarmada y frente al mayor pervertido que la academia había tenido. Ella quiso levantarse, más no fue posible porque en el momento en que lo intento Issei había saltando encima de ella poniendo sus manos en sus muñecas evitando aquello, se había quedado encima de la peli rosa. Katase tembló por el miedo y se dejo rendir por este, más cuando vio como el rostro del castaño iba acercándose más y más, ella ante la suposición de lo que creía que iba a suceder, cerró los ojos con fuerza mientras volteaba su cabeza, eso mientras apretaba los labios con fuerza, en un esfuerza vano de evitar lo que se que viniese, sintió un suave roce en su mejilla provocando mayor miedo, casi al instante de aquello fue soltada.
Abrió los ojos de sobre manera mientras que sintió que fue soltada, el peso que había sentido hace unos momentos también había desaparecido, vio hacia arriba encontrándose con el castaño ya de pie, ella lo observo unos segundos más antes de preguntar algo, por extraño que pareciera.
— ¿No vas a violarme? —Katase al instante se reprendió al notar lo que había dicho, más al observar el rostro del joven frente a ella noto como este tenía una mirada amable, sin burlas, sin signos de lujuria, solo amable.
—Créeme si te digo, que me gustaría hacer muchas cosas por ti, algunas demasiado buenas que ni siquiera sé cómo me aguanto, pero no haría nada de aquello sin el permiso de la persona, quizá sea un pervertido de feria parecido a un pedazo de basura pero aun tengo moral—comento Issei mientras sonreía y volvía a tender su mano a la peli rosa.
Ella si bien, no espero una respuesta tan profundo y…asquerosa, pudo recalcar que quizá aquel pervertido no era tan mala persona como realmente se pensase, al menos a la hora de los rumores de que si te quedabas solo con el chico tenias una violación asegurada, al menos en eso estaba demostrado que no, después de todo ¿Quién recibe una mirada tan calmada y amable de parte de Issei?
Dudando un poco levanto su mano y tomo la del castaño, la cual la ayudo a ponerse de pie.
—Me sorprende que aceptes mi mano, debería pensar en ti la próxima vez, después de todo ya tengo material—las burlas pervertidas del castaño volvieron.
Katase rodo los ojos, ya era tarde tenía que volver a casa, más ella sabía que no era buena idea ir sola. Tomando su boken en mano observo por el rabillo del ojo como el castaño maldecía en voz baja mientras que se tocaba la mano izquierda, al parecer había tenido una cortadura en la palma además de los dedos dislocados.
Katase suspiro con cansancio y molestia, se odiaba a si mima por lo que iba a preguntar, pero por primera vez en mucho tiempos sintió pena por el castaño.
—Oye idiota—bueno, la forma de llamar de la peli rosa no mejoro. Pero de igual manera sirvió para ganar la atención del castaño, el cual la miro tranquilamente en ese momento, como si el dolor que reflejo hace unos instantes a espaldas de la joven no existiera.
— ¿Me acompañas a casa? —Fue la pregunta de Katase.
Bueno esto se podría considerar el prologo, por lo cual espero que si han llegado hasta aquí, lo hallan disfrutado, esta pareja era algo que tenía en mente desde hace un buen tiempo, no sé si ahora existirá algo como esto pero bueno, desde hace un tiempo que me quede desactualizado de fanfiction, desde que todo el mundo empezó a usar la traición de de Rias, no lo juzgo yo en su momento hice algo también.
Pero bueno, esto no va a ser una Harem, no hay peros ni nada, se queda como pareja normal, no quiero ir por las ramas con personajes a medio desarrollar en cada arco solo para ser reemplazados por uno nuevo, pero bueno me extendí un poco.
No se olviden dejar un Riview, ustedes lo hacen si es que les gusto el fic, y yo subo capitulo, buen trato ¿No?
Siempre me gusto alguna que otra cosa loca, quiero ver qué tal le va a esta idea, si no es como creo simplemente lo dejare, bueno así que…
Darker201 fuera.
