Last Resort
RESUMEN: Pansy Parkinson, la chica más atractiva de Hogwarts, tiene un plan para apoderarse de los dos chicos más codiciados del colegio.
Capítulo 1.- El filtro amoroso
La biblioteca de Hogwarts albergaba miles de libros: desde novelas muggles hasta libros mágicos con recetas de amor; mismas que estaban sumamente prohibidas para los alumnos del colegio. Pero para Pansy Parkinson, un letrero de "SECCIÓN PROHIBIDA" no era un obstáculo.
Cuando por fin logró entrar a la sección prohibida y encontrar el libro que necesitaba, salió corriendo de la biblioteca hacia la sala común de Slytherin, no sin antes cerciorarse de que todo estuviera en orden para que nadie sospechara del robo que había cometido.
Al llegar a la sala común, se sentó en la mesa para estudiar la poción que necesitaba.
-¿Qué haces estudiando Pansy¿Eso no va en contra de las leyes de la naturaleza?
-Lárgate de aquí Zabinni, estoy muy ocupada.-Dijo Pansy cerrando rápidamente el grueso libro y empujando a el moreno hacia su cuarto.
-Uffff, casi me descubre… No puedo permitir que nadie se entere de esto, será mejor que me vaya a dormir, mañana buscaré los ingredientes… -Pensó la chica mientras recogía los pergaminos y libros que estaban tirados en el suelo.
AL día siguiente, Pansy se despertó muy temprano, se vistió y salió de la sala común más fría y tenebrosa del colegio. Antes había escrito en un pedazo de pergamino los ingredientes que necesitaba y se dirigió hacia el despacho de Snape; estaba a punto de cometer su segundo crimen de la semana. Subió tres pisos caminando despacio y procurando no hacer ruido para no despertar a las personas de los cuadros. No había nadie despierto en el castillo excepto los elfos domésticos que trabajaban en la cocina.
Todavía no salía el sol cuando llegó al aula de pociones. Con cuidado, abrió la puerta del despacho de Snape y encontró el armario en donde el profesor guardaba los ingredientes y libros que utilizaban en la clase.
Tomó las cuatro colas de rata, los ocho escarabajos verdes y los seis gramos de arena blanca que necesitaba. Después, se dirigió al aula y tomó dos calderos pequeños. Dividió los ingredientes en dos partes iguales y los metió a los calderos. Agregó agua a cada uno y revolvió la mezcla con su varita al rededor de veinte minutos hasta que la poción estabas lista.
Pansy trataba de hacer un filtro amoroso para conquistar a el héroe del colegio, Harry Potter y al amor platónico de toda su vida, Draco Malfoy.
Ya tenía todo listo, sólo le faltaba un ingrediente muy importante: cabello de los dos chicos.
Conseguir los de Draco no era tan difícil, lo único que tenía que hacer era colarse al cuarto del rubio y tomar algunos de su cepillo o su almohada. Pero los de Harry… ¿Cómo?
Tratando de pensar en una solución Pansy se sentó en el piso del pasillo y cerró los ojos por un momento… tenía mucho sueño… iba a cerrar los ojos sólo un minuto…
- Parkinson despierta, estás en el pasillo y estorbas, despierta…
Pansy abrió los ojos y lo primero que vio fue a un muchacho de cabello negro y ojos verdes que le hablaba. Creyó que estaba soñando, todo era tan bonito en ese momento…
-¡Apártate de mi vista Potter! –Gritó la Slytherin al darse cuenta de la situación tan vergonzosa en la que estaba
- Está bien, está bien –Dijo Harry mientras se daba la vuelta para irse.
-¡Qué tonta soy, me quedé dormida en el pasillo! Lo bueno es que no me vio nadie más que Potter – Pensó Pansy mientras se paraba -¡Dios mío, ésta es la oportunidad perfecta! Necesito un plan…
-¡Potter espera¡Necesito hablar contigo! –Gritó la chica mientras corría hacia Harry –Sé que has estado hablando mal de mi y quiero un explicación ahora.
-No sé de lo que hablas, creo que sigues dormida.
-¿Cómo de que no sabes? – Dijo la chica al mismo tiempo que se lanzaba sobre Harry tomándolo de los cabellos.
- ¿QUÉ TE PASA¡ESTÁS LOCA! – Gritó Potter quitándose a Pansy de encima -¡NO SE TE OCURRA VOLVERME A TOCAR, LOCA!
-¡Ja! Fue difícil, pero al menos ya tengo todos los ingredientes. –Dijo Pansy cuando Harry ya estaba lo suficientemente lejos como para oírla.
La chica sonrió al ver que en su mano derecha había tres cabellos negros. Ahora ya estaba todo listo.
Ya era tarde para regresar a la sala común y entrar al cuarto de Draco, así que decidió ir al comedor a desayunar algo, había sido una mañana muy larga.