Ann: ¡Konichiwa n0n!
Ro: ¡Ohayo n0n!
Ann: Finalmente me anime a realizar un Fic de esta pareja °¬°, así que sean amables Ne TT-TT
Ro: De acuerdo, aclaraciones u.u esta situación inusual y sumamente extraña no nos hace responsables de pérdida de neuronas oO, pues aunque Ann "dice" que esto contiene humor ¬¬UU, no puede asegurarlo u.u
Ann: Hai
De acuerdo, Yu Gi Oh no nos pertenece, todos los derechos reservados a su creador Kazuki Takahashi bla,bla,bla, y todas esas cosas que siempre toca repetir -.-
Homofobicos ¡HUYAN OO! YamixYugi Ne, luego no se quejen, ni digan que no lo advertí ¬¬
CAPITULO UNO: WHEN YOU'RE GONE
Primer día de primavera. Hermoso, alegre, de clima perfecto y alegres pajaritos que le cantaban regocijados al sol.
…tan endemoniadamente cursi.
Si aparecía un arcois con saltarines y felices conejitos al final, saltaría por una ventana.
Una oscura aura se cernía sobre un adolecente en particular. Este tricolor de cabellos rebeldes permanecía sentado en un rincón sombrío, murmurando incongruencias sobre su desgraciada vida.
-.-¿Creen que este bien?- susurro una joven a sus dos amigos junto a ella.
-.-No lo creo Tea ¿te parece que lo esté?- señalo el castaño
-.-Aclárenme algo- intervino un rubio en un susurro a ese círculo formado entre los tres- ¿Esas es un aura depresiva, o el reino de las sombras?
-.-¡Pero qué buena observación Joey! ¿Por qué no vas y le preguntas ñ---n?
PUM
Basto con una fuerte palmada en la espalda para que fuera obligado a caminar en busca del equilibrio que le impidiera dar de bruces al suelo, o en su defecto: sobre el tricolor.
-.-Hola Yami n¬nUU- saludo Joey con una sonrisa forzada. Mentalmente tomo nota sobre cobrar venganza. Tristan se la pagaría mas tarde.
El faraón con más de 3.000 años de antigüedad estaba sentado en el suelo con las piernas flexionadas contra el pecho, y los brazos alrededor para abrazarlas.
Hacía poco había conseguido un cuerpo, y como todo muchacho (en apariencia) de 17 años debía asistir al colegio.
-.-
…pero entre los recesos, Yami asustaba a sus compañeros de clase al sumergirse en las sombras. Incluso Joey retrocedió un paso por los fríos ojos violeta que recayeron en él una vez su dueño le miro de reojo.
-.-E…escucha viejo, los chicos y yo estamos preocupado ¿sabes?- señalo el rubio.
En la lejanía y convenientemente cerca de la puerta de salida. Tea y Tristan movieron una mano a modo de saludo una vez el faraón los observo en un tétrico y sombrío gesto que les hizo sonreír de miedo.
Claro que después sólo pudieron palidecer por esa oscuridad que podían jurar lo abarcaba todo. Él no parecía de muy buen humor… y ¿acaso ese era el ojo de Horus en su frente?
-.-¡Hola chicos!
Una exclamación alegre irrumpió en el salón. Ahí, Tea, Tristan y Joey vieron como la luz del sol regresaba. La oscuridad se replegó, y los tres amigos que se apiñaron hasta abrazarse juntos casi pudieron respirar el tétrico aire del reino de las sombras
Fue sorprendentemente rápido como todo se desvaneció tan pronto como Yugi entro al salón. Sin embargo, aun abrazados e incapaces de soltarse (principalmente porque el miedo les entumió los brazos) vieron a su pequeño amigo cruzar el salón hacia su oscuridad que le esperaba de pie junto a un asiento.
-.-Olvide que tú tenias el dinero de nuestros almuerzos- sonrió divertido de su propia torpeza.
-.-Ah sí…-divago Yami. Las manos en el bolsillo del pantalón buscaron por un breve instante- Aquí tienes aibou
-.-Gracias- dijo Yugi dando media vuelta, dispuesto a salir por donde entro- No tardo
Aseguro alegre sin detenerse. Aunque por un momento estuvo tentado a pararse a preguntarles a sus amigos porque además de estar pálidos, con los ojos bien abiertos como si hubieran visto un fantasma, se abrazaban de esa forma al otro extremo del salón (lo más lejos del faraón)
…pero a veces había cosas que era mejor no saber.
Así, el pequeño duelista salió. Los tres pobres infelices asustados, se tranquilizaron un poco para enfocarse con curiosidad en Yami.
…él había vuelto a sumergirse en las sombras. Y ahí de pie, mantenía la mirada oculta entre mechones de cabello.
-.-¿Crees que este poseído TT¬TT?- pregunto Tristan abrazado al rubio y su amiga
-.-Es probable TT¬TT- accedió Joey. Después de todo estaban frente a un chico de 3.000 años, cuyos duelos de sombras conocieron a la fuerza y dolorosas secuelas. Eso los hacías más abiertos a cualquier posibilidad.
Pero de los tres, fue Tea quien ladeo la cabeza. Parpadeo un par de veces en curiosidad para moverse despacio y soltarse de los otros.
-.¡Tea no!- llamo Joey por verla alejarse.
Ignorando la advertencia se acerco con cuidado. Tanteo su suerte sólo para saber hasta qué punto podía avanzar.
-.-Yami…-llamo gentil-… ¿estás bien?
La oscuridad se intensifico, dentro de poco ya no podrían distinguir nada. La castaña dejo de caminar. Trago duro, frunció el ceño y se forzó a continuar.
-.-¿Algo va mal entre ustedes?
Joey y Tristan prestaron atención. Si algo sucedía con el pequeño Moto definitivamente les concernía. Ya más seguros se acercaron.
-.-¿Están bien las cosas entre Yugi y tú?- insistió Tea al detenerse a pocos pasos.
Un frio viento se llevo la penumbra mientras Yami resoplo cansado.
-.-No se- determino sentándose en un pupitre cualquiera- Me está alejando.
De mala gana, apoyo el codo en la tabla del asiento, y el rostro en la mano. Sus ojos fríos e indiferentes no parecían del todo interesados en el tema.
Porque Yami era bueno cubriendo sus emociones, tanto así, que era difícil determinar si hablaban de algo trascendental.
-.-n¬nUU
Los demás sólo pudieron sonreír frente al brusco cambio de ánimo. De psicópata depresivo a indiferente. Tal vez deberían preocuparse de ello.
-.-Creo que exageras- dijo Tristan- No he notado nada extraño en Yugi
Los ojos violeta se afilaron en amenaza. Yami bufo harto. Como no iba a notar algo diferente en Yugi, era SU Hikari (en un sentido perfectamente fraternal, claro está)
Y si él decía que lo estaba alejando así era; aunque ignoraba el motivo. De hecho, desde que recupero su cuerpo el pequeño había comenzado a actuar así.
No sabía si acaso hizo algo para molestarlo, pero ahora no lo quería cerca.
-.-Esta bien, tranquilo, te creemos viejo- dijo Joey palmeándole la espalda debido a la repentina aparición de la oscuridad.
Con el ceño fruncido, el tricolor gruño por lo bajo. En realidad lo que le molestas de todo esto es que su Hikari no le digiera el motivo ¿acaso no eran amigos? ¿Dónde quedo esa maldita confianza que en más de una batalla los salvo? ¿Dónde quedo ese sentimiento de entrega ciega?
Uno perfectamente normal para un par de amigos.
-.-Lamento mucho la demora
…y hablando del diablo.
El pequeño duelista regreso con un par de emparedados y un refresco.
-.-Había mucha gente en la cafetería- sonrió acercándose- Escucha Yami, tengo que sacar unos libros de la biblioteca antes que suene la campaña ¿te importaría comer solo?
-.-Yo…
-.-¡Genial! No me tardo- exclamo Yugi alegre. Salió rápido por la puerta sólo para volver a asomarse- Por cierto, ya comí, no es necesario que me esperes ¿de acuerdo?
Con una última sonrisa salió del salón. Un momentáneo silencio envolvió el lugar, justo cuando el faraón giro en reproche hacia los otros.
-.-¡Eso no prueba nada òÔ!- se defendió Joey
-.-Hn- gruño Yami inconforme.
-.-Bueno, quizás eso no pruebe nada…-apoyo Tristan que curioso termino asomándose por la puerta-…pero ese definitivamente no es el camino a la biblioteca.
Como si hubiera dicho que Seto Kaiba bailaba con un tutu rosa, todos se apiñaron en la puerta para verlo caminar en sentido contrario.
Yami frunció el ceño. No estaba dispuesto a seguir en la incertidumbre.
-.-¡No, espera!- pidió Tea en un susurro cuando él fue tras su Hikari que había girado por una esquina.
-.-Vamos nosotros también- apoyo Tristan entusiasmado
-.-Viejo, esto parece una misión de espionaje- sonrió Joey divertido- Muévete Tea
-.-¡Pero chicos!- se quejo la castaña. Después sólo pudo hacer un resignado mohín de disgusto- Hombres
Podía darles un muy buen argumento sobre respetar la vida privada de los demás, pero no tenía ganas de ser ignorada. Refunfuñando fue tras ellos. Con cuidado llego hasta una esquina, donde asomados, lo vieron bajar las escaleras.
Sutil, Yami se movió, quienes le acompañaban le siguieron. Los cuatro se pegan a las paredes, zigzagueaban de vez en cuando, e incluso caminaba de puntitas y mantenía la distancia para no ser descubiertos.
Sólo les falto conseguir periódicos y gafas oscuras, pero con eso bastaba para llamar la atención. Los alumnos mal disimulaban su interés en el curioso grupo que iba a de un lado a otro.
-.-Normalmente adoro nuestros encuentros- comenzó una fría y estoica voz en ironía- Pero a juzgar la obviedad de la situación, me ahorrare los comentarios.
-.-Quieres callarte Kaiba ¬¬- reclamo Joey
-.-Lo haría Wheeler, pero a no ser que dejen de esconderse detrás mío, no pudo trabajar, y por ende seguiré hablando.
Una graciosa escena se formo en la extensa zona verde del colegio. Ahí, un CEO sentado en una de las muchas mesitas campestres, tenía a un pequeño grupo que se cubría detrás suyo como si de verdad pudiera ocultarlos.
Kaiba resoplo. Normalmente no gustaba de salir de la comodidad del salón, pero Mokuba insistió en que tomara algo de aire libre aun cuando llevar su laptop consigo (era lo máximo que podía pedir el menor de los Kaiba tratándose de su hermano)
No podía decir que era la última vez que le hacía caso a su hermanito, eso era mentira, pero si podía asegurar que la próxima vez pondría un cerca electrificada a su alrededor, o alzaría un muro si con eso evitaba que ese problemática se le acercara.
Bufo de mala gana y sólo por curiosidad observo lo que con tanto "disimulo" acechaban.
-.-…
¿Yugi?
Hmmm. Eso era curioso, por no decir sumamente inusual ¿Qué podrían estar tramando esos idiotas?
El CEO enarco una ceja en duda. Bueno, debía admitir que como buen observador cuyo IQ sobrepasa lo convencional, no tuvo que esforzarse demasiado para comprender.
Una cínica sonrisa curvo sus labios, especialmente al fijarse en el faraón. Quizás su día no iba a ser tan aburrido como pensó.
-.-Mire. Es el capitán del equipo de futbol- susurro Tristan, por el muchacho que se acercaba al pequeño Moto
-.-También está el de Kendo- señalo Joey- Y… ¿y ese quién es?
-.-Es el presidente del Club de arte- resoplo Tea
-.-¿Existe un Club de arte?- indago el rubio.
-.-Como siempre tú cultura deja mucho que desear Wheeler- dijo Kaiba sin despegar la mirada de su laptop-Pronto se abrirán las inscripciones para los club's, y todos ellos…-señalo con una mano, la otra seguía tecleando-…quieren a Yugi
Yami enarco una ceja. Muchas personas rodeaban a su Hikari, mientras él intentaba alejarse con un gesto amable…
…cosa que no fue suficiente cuando un chico de cabello negro paso un brazo alrededor de sus hombros, y lo alejo de la multitud con una gentil sonrisa.
El tricolor tuvo que erguirse un poco desde su "escondite" para seguirle el rastro.
-.-Por cierto… ¿les he comentado las insanas intenciones que tienen algunos?- comento Kaiba como quien no quiere la cosa.
-.-¡¿QUÉ ÒÔ?!- exclamaron todos. Joey y Yami especialmente alto una vez se incorporaron
Sin embargo ser el centro de atención les hizo volver a ocultarse detrás del castaño.
No es como si Kaiba quisiera ayudarles. Sólo que esta vez la verdad los torturaría mucho más que cualquier artimaña, sin mencionar que así podrían irse y dejarle trabajar.
-.-¿De qué estás hablando?- cuestiono Tea. Los ojos entrecerrados intentaban ver las malas intenciones en los demás.
El Neko resoplo. Había que estar ciego para no darse cuenta, o sólo ser idiota, como ese patético grupo. Pero como no quería perder demasiado tiempo con ellos, un grafico explicaría mejor la situación. Nada que un buen "dibujito" no pudiera hacer.
Ágil, giro la laptop sobre la mesa para mostrarles la pantalla.
Los ojos violeta de Yami leyeron primero despacio, después presurosos hasta sujetar fuerte la maquina como si la información fuera a ir a alguna parte.
-.-Así que ha pasado las últimas semanas buscando un club- señalo Tea sin dejar de lee.
-.-¿Quién es ese tal Kail?- pregunto Tristan. Según el grafico era el que más rondaba a su amigo.
-.-¿Qué importa? ¿Cuál es el primero al que hay que romperle la cara? – pregunto Joey incorporándose. Sus dedos tronaron en decisión de hacer cumplir su palabra.
¿Golpear? Oh no, golpear era demasiado fácil. El reino de las sombras por otro lado ofrecía la garantía de un buen trauma si le agregaba los monstruos adecuados. ..
…un par de dioses egipcios no estaban de más para quien osara en siquiera pensar en tocar a SU aibou.
Es decir, Yugi era su amigo ¿cierto? Como todo buen amigo debía de cuidar por quien lo ayudo con tanto esmero en el pasado (y todavía lo seguía haciendo)
Su Hikari era la persona más importante para él, en un sentido claramente fraternal ¬///¬
Y para salvaguardar su amigable relación ¡Mandaría al primer idiota que quisiera propasarse al reino de las sombras!
-.-Andando- dijo Yami
…esto era la guerra, sólo que los pobres infelices implicados en el asunto aun no lo sabían.
CONTINUARA:
Ann: o//o…ettoo…espero les haya gustado Ne n----n, se hizo lo que se pudo u¬uUU
Ro: Ne, sabemos que tiene una pequeña y minúscula insinuación YamixYugi u¬uUU, pero eso mejorara o.o. Ann lo promete n0n
Ann: Hai n---n
Para dejarme un Reviewer presionan el rectángulo de letras verdes que dice: "Reviewer this histoy/chapter" no hay necesidad de estar registrado en el Fanfiction, para que me dejen un Reviewer u.u, o si prefieren me escriben a mis e-mails los cuales encontraran en mi Profile, donde dice "Ann Saotomo" en la parte de arriba y ahí les sale n-n
Se despiden:
Ann Saotomo y Ro-Chan: ¡¡¡DESEÁNDLES UN FELIZ FIN DE AÑO NUEVO n0n!!