Disclaimer: Los personajes de Shingeki no Kyojin no me pertenecen; le pertenecen a Hajime Isayama . Si fueran míos, marco no hubiera muerto TwT
Alguna vez te has sentido vacío? .Como si dentro no tuvieras nada, como si fueras solo un cascaron roto incapaz de sentir emociones . Levi se sentía así, desde que nació se dio cuenta de que era diferente de los demás. El veía a los demás niños en su escuela, como estos reían, lloraban y amaban; pero él no podía sentir nada.
Al principio, la primera vez que noto esta diferencia, se asustó. Debe haber algo malo en mí, pensaba siempre, realmente debo de tener algo malo. Hablar con los adultos siempre había sido inútil, ellos nunca lo escuchaban o solo tomaban como chiste todo lo que él decía. A causa de esto el desarrollo una actitud fría y distante hacia las demás personas. Crear algún lazo emocional con alguien le resultaba inútil ya que él no entendería sus sentimientos.
El único momento en que sentía emociones era cuando dormía y soñaba. Vagos recuerdos llegaban a la noche en forma de pesadillas y sueños cálidos en el que era querido. Soñaba con monstruos gigantes que aterrorizaban a la gente, podía sentir el dolor, la desesperación y el horror de aquel momento; el odiaba aquellos pesadillas, ya que a la mañana siguiente, podía seguir sintiendo el olor a muerte. Otras veces soñaba con alguien que le decía que lo seguiría para siempre y que lo amaba, estos sueños eran sus favorito, sentirse reconocido por alguien siempre fue su anhelo.
Ahora él era un adulto y todo le parecía más fácil. Ya que ahora no debía dar explicaciones a nadie por ninguna decisión de su vida. Vivir sin problemas morir rápido y de forma natural era lo que él esperaba de su vida. Tenía un trabajo de ejecutivo en una de las mejores empresas de Francia, en el que ganaba un buen dineral que nunca usaba. Mi vida ya está lista si sigo así no tendré problemas, pensaba.
Pero la vida nunca dejara que sus hijos sufran de soledad y por eso le concedió a Levi algo que el anhelaba pero que se negaba a admitir que necesitaba. A alguien con quien comparta su vida.
Fue una mañana de otoño cuando sucedió; Levi se había levantado extremadamente temprano y como su trabajo empezaba a las 9 am, decidió dar una vuelta (luego de desayunar) por el parque que se encontraba cerca de su departamento. Muchas veces se dijo que iría a pasear por ese lugar pero nunca se dio el momento, muy ocupado se repetía cada vez que pensaba en ir.
Caminaba mientras admiraba los árboles y flores que surgían de la tierra haciéndose notar. Varios minutos pasaron y Levi seguía embobado con aquel lugar tan tranquilo hasta que vio que alguien dormía entre los iris que brotaban en un sector. Se acercó al lugar dispuesto a insultar a quien se atrevía a dañar tan hermosas flores y entonces lo vio.
Era un joven de unos 20 años de una tez un poco morena, su color de cabello era chocolate y para disgusto de Levi, se notaba que el joven era más alto que él. Entonces observo más de cerca, acercándose sin hacer ruido por miedo a despertarlo, vestía con unos jeans negro, una camisa amarilla y una campera gris. El joven que dormitaba era muy apuesto, lo que fue una sorpresa para él ya que nunca le interesaron ni los hombre ni las mujeres, más allá de eso el sentía que lo conocía, por eso fue que se asustó cuando al verlo su corazón latió, con una fuerza que nunca experimento.
Se acercaba más y más, hasta que de golpe, el joven abrió los ojos. Levi nunca vio un color verde tan hermoso como esos, haciendo que su corazón lata con más fuerza todavía. Y de repente el ojiverde hablo
-Quién eres?
Levi estaba en shock y sin poder articular una sola palabra. El joven se sentó, miro a Levi de arriba abajo y dijo con una sonrisa
-Es muy peligroso para que los niños pasee por aquí a estas horas
El pelinegro casi inconsciente, al sentir que nombraban su estatura o el simple hecho de que el otro lo decía con una sonrisa, le dio un gran golpe en la frente. Haciendo que el castaño se desmayara y callera nuevamente sobre los iris. Levi vio lo que había hecho y recuperando el habla dijo:
-Mierda, me pase.
Y así fue el primer encuentro entre Levi y Eren. Quien pensaría que levantarse temprano fue posiblemente la mejor decisión que tomo en la vida
