Título: Tabú.
Autor: Darling Diamond, (Kya, May, como vosotras deseáis llamarme).
Género: Romance/Drama.
Summary: Su amor es un imposible. Sus historias están llenas de pecado y obstáculos. A la vista de los demás ellos cometían un Tabú, pero para ellos era solo amor, un amor profundo y mal visto. [A.U, OoC, Lemon, Incesto].
Parejas: SasuHina. NaruSaku. ShikaTema. GaaMatsu. SaiIno. Si alguna de estas parejas no es de tu agrado te recomiendo retirarte por donde viniste, gracias.
Disclaimer: Los personajes del universo de Naruto le pertenecen a Masashi Kishimoto. Solo la trama, el escenario y uno que otro personaje me pertenece.
Advertencias: Esto no será largo. Relaciones Incestuosas. Mal vocabulario. Pedofilia (Leve). Contenido más que subido de tono.
Tabú
Prólogo
•
•
•
Movía sus caderas de manera erótica, causando más que placer en sus estudiantes. Sonrió al ver como tragaban grueso e intentaban ocultar los bultos que crecían bajo sus pantalones.
"¡Ha! Mocosos, solo eso son" Pensó con cinismo la despampanante rubia que entraba en el aula número 12, profesora de literatura en la Universidad Horimiya, Sabaku no Temari.
Fijo su vista al fondo, allí —como todas las mañanas de los jueves— estaba Shikamaru Nara, el vago de la clase. Los primeros días ella se había tomado el tiempo de ir y despertarlo, pero el desgraciado solo le decía: "Problemática".
¿Le molestaba ese apodo?
No mucho, lo que le hacía hervir la sangre era la indiferencia en su mirar. Él no la había admirado, él no la había intentado seducir con palabras pedantes. Aquel azabache ignoro su presencia, como si fuera cualquier chica.
Él era diferente; y le atraía. Era su estudiante, pero de lo que le importaba a Temari, aquel vago se vería bien en su cama. Sería como un muy bien merecido trofeo.
• • •
Naruto gruño con una evidente molestia. Maldijo hasta el piso por el cual caminaba. Observó cómo cada persona realizaba una reverencia frente a él, y se irritó aún más.
Cuantas veces les había dicho que no hacían falta tantas formalidades, que él era como cualquiera —con un cargo más alto, con mejor sueldo, más atractivo—.
—Naru-baka —el rubio sonrió ante tal apodo, solo una persona lo llamaba de tal manera: su secretaria y mejor amiga. Sakura Haruno—. Tienes una reunión, ¡ya! ¿Te volviste a quedar dormido, idiota? Te dije que debías…
Él dejo de escuchar su regaño matutino, observó con mucha atención los labios de la peli-rosa, guardándose cada detalle, desde ese color tan tentativo, hasta la manera en la que se movían, se preguntó si alguna vez tendría el honor de probarlos.
Uzumaki Naruto tenía una gran atracción hacía Sakura, una muy clara para todo el mundo, hasta para su jefe. El cual gozó cuando le contó una de las clausuras de la empresa.
"Las relaciones entre el personal están completamente prohibidas, si algo así ocurriese no dudare en despedirlos a ambos".
—… ¿Naruto me estas escuchando? —no fue la pregunta lo que le hizo prestar atención, fue más bien el golpe en su frente.
—Sakura-chan, ese dolió mucho 'ttebayo.
Él amaba su trabajo, pero a Sakura le amaba en un nivel mucho mayor. Que aquel viejo gruñón que tenía por jefe que se fuera al demonio, él conseguiría que Sakura le amara.
• • •
Cuando su hermana mayor le había comentado sobre un puesto en el Academia Horimiya jamás pensó que fuera como profesor de secundaria. De tal manera que ya había pasado un mes y aun no se acostumbraba a darles clases a niños de 12 años, eran molestos.
Percibió a alguien a su lado, Matsuri, su estudiante adelantada de 11 años.
— ¿Ocurre algo Matsuri? —a pesar de odiar dicho trabajo debía tratar con delicadeza a sus estudiantes, o por lo mínimo intentarlo.
La joven castaña tragó grueso —. Profesor, ¿puede agacharse…? por favor.
Gaara hizo lo que la pequeña pidió. Se sorprendió cuando sintió una presión sobre sus labios.
¡Una niña de 11 años le dio un beso! ¡En los labios! ¡Y no cualquier niña, no, su estudiante!
Cuando la pequeña con una tímida sonrisa se alejó corriendo él volteó hacia todos lados, buscando a cualquiera que haya visto la demostración de afecto que Matsuri dio. Pudo respirar tranquilo, nadie estaba allí.
• • •
Alisó el vestido con sus manos, volvió a revisarse frente al espejo.
Su cabellera rubia estaba suelta con aquel particular mechón cubriendo el lado izquierdo de su cara, su vestido sin mangas de un simple color azul turquesa y escote recto. Suspiró con alivio, se veía hermosa. Y no era que ella lo dudara, Ino estaba consciente de lo hermosa y sensual que era. Esta nerviosa.
Pero tenía el derecho de estarlo, hoy conocería al hermano de su prometido.
Muchos habían dicho que era muy joven para saber si quería permanecer al lado de Shin para siempre, pero aquello que ella sentía era amor, un profundo amor.
La puerta de la recamara fue abierta, extendió su sonrisa aún más; allí estaba él, tan perfecto como siempre, con esa impecable sonrisa que era solo para ella.
—Es hora de irnos ya, Ino.
— ¡Espera un poco! —exclamó. Buscó en su mesa de noche unos pendientes, cuando los tuvo en sus manos suspiró, dándose ánimos —. Listo, ¡Vamos!
Todo el camino al dichoso restaurante solo conversaron sobre qué clase de chico era Sai. Quien era mayor que Ino por solo meses, estudiante de arte.
Ino se sentía nerviosa a cada paso que daba, no quería arruinarlo con el único familiar de Shin.
• • •
El frio calaba entre sus huesos, notó que la calidad cobija que siempre estaba sobre él ahora estaba enroscada entre las piernas de su pequeña hermana, Hinata.
Se fijó en el reloj de la pared: 07:26 a.m.
Lanzó un quejido al aire, frotó su rostro con frustración. Movió a Hinata con algo de brusquedad, esta simplemente hizo un movimiento con sus manos, murmurando algo inentendible para Sasuke.
—Hina, hora de despertar. —Sus intentos eran en vano, la morena no hacía ningún ademán por querer hacerle caso a su hermano mayor.
El ceño ya fruncido de Sasuke se intensificó, refunfuñó varios insultos mientras se levantaba con la intención de sacar a su vaga hermana de los brazos del cruel Morfeo. Unos golpes contra la puerta lo interrumpieron, su día no estaba comenzando bien, el único que tocaba esa puerta con suavidad —una muy molesta a su opinión— era Itachi.
Se preparó para los regaños de él, abrió la puerta y allí lo vio, de pié con su imperturbable sonrisa amable.
"Igual a ella" Comparó en su mente.
—Sabes que… —Itachi fue interrumpido abruptamente por su pequeña hermanita, quien frotándose los ojos y murmurando un "Nii-san, fue mi culpa, no de Sasu", todas esas acciones lo dejaron vulnerable —. Tú eres realmente tierna, tonta.
Sasuke gruñó al ver como su hermano posaba una de sus manos en el cabello de Hinata y la despeinaba, tal como lo hacía su Padre con ambos.
Cuando ambos abandonaron su habitación pudo respirar tranquilo. Hinata nunca perdía la costumbre de invadir su habitación en mitad de la noche, y a Itachi nunca le agrado eso. Su hermano era verdaderamente inteligente, él se había dado cuenta de los sentimientos que Sasuke había desarrollado por su hermana, nada fraternales, verdaderamente.
•
•
•
Nota de Kya:
Mi perversa mente o pudo evitar idearse todo esto. Y todo por una tarea, para que vean, en clases uno aprende mucho.
En fin, TODAS las relaciones que aparecerán aquí (o por lo menos las principales) serán relaciones que la gente encuentran como Tabú, de allí el título.
¡Espero que realmente disfruten leyendo esto!
Mil besos y dulces abrazos cibernéticos ~