¡Ohayo! Eh vuelto ahora con esta loca y divertida historia.
Ammm Ranma 1\2 aparte de ser un clásico es un anime con los que muchos crecimos en mí caso así fue. Simplemente lo amo, me dio por retomarlo, leí el manga, vi las pelis como todos los capítulos y ovas claro está, este fue el resultado, ya que quede decepcionada con él final del manga, yo necesitaba más. Mi loca cabeza no dejo de torturarme y este fue el resultado.
Espero que sea de su agrado, porque lo escribí con mucho kokoro. Esto lo hice basándome en el final del Manga, es final que imaginó, que quise compartir y que subiré en varios capítulos.
Los personajes no son míos son propiedad RUMIKO TAKAHASHI, yo solo los utilizo para darle forma a esta loca historia; la cual es recomendada para mayores de edad, por el lenguaje altisonante que podrá contener, como el Lemon. A los que han leído mis fics de Naruto, sabrán lo que se avecina, drama, mucho drama, locas ideas y lemonosidad.
Y bien que lo disfruten.
AMAMÉ O DÉJAME
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*AKANE*
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El cielo era tan azul, el viento soplaba cálidamente en mí cara y mí incertidumbre era la misma, habían pasado dos años desde que se interrumpido la boda, mi boda la espera boda entre Ranma y yo. Y las cosas se veían sin rumbo yo me estaba desalentando en pensar que quizás ese día nunca llegaría y que mi paciencia se estaba agotando. Estaba tan fastidiada de la misma situación Xiampu, Ukyo, Kodachi y cuanta loca se sumara a la misma competencia. Y Ranma aunque a su manera intentaba evitarlas, quería que me diera mi lugar como era debido, sabía de su trabajo para mostrar sus emociones, sabía de lo tímido que podía ser en público. Y que a su manera realmente me amaba, a nadie más había llamado su prometida, sus celos los confirmaban y la declaración en la fosas de jusenkyo lo reafirmaban, tantas cosas que habíamos vivido juntos, podía decirlo sin importar sonar soberbia que nadie lo conocía mejor yo, que nadie lo aceptaba y amaba como yo, con todos sus defectos como virtudes, de igual manera yo sabía que Ranma era capaz de entender muchas cosas, tan solo con una mirada. Después de tanto, ¿Entonces cual era el problema en pedírmelo? A que fuera él que me dijera, quiero casarme contigo, ¿Cuál era el inconveniente a reconocer abiertamente que me amaba?, ¿a caso todo esto será tiempo perdido?, ¿o realmente eran alucinaciones mías?, no podía ser así, mi corazón se aferraban a los recuerdos, cuando casi me dice lo que sentía a fuera de la casa de Kuno, o cuando le grito a Kirin que yo era su prometida, en la isla de las doncellas "Akane es mía y se casara con migo", podía repetir en mi cabeza un y mil veces su frases sus detalles, pero entonces era a caso más fuerte el orgullo o tomar la decisión.
-¡Ranma mi amor!, ven, vuelve, mira las deliciosas galletas que te prepare.
-Aléjate de mí, Kodachi vete
Lo mismo de siempre, lo mismo, me limpie las lagrimas de frustración y justo cuando iba a entrando a la casa las demás aparecieron, tenía un año en clases de cocina por él, para poder llenarme de su sonrisa. Pero todo parecía en vano.
-Suéltalo es mío
-Estás Loca Xiampú es mío.
Se sumaban al alboroto Xiampu y Ukyo.
-No déjenme váyanse.
-Zaasssss
-¡Están locas!
Les gritaba Ranma convertido en mujer después de caer al estanque.
-¡Akane!
Grito como de costumbre, pero no quería discutir no quería repetir la patética pelea de siempre, estaba tan cansada de lo mismo, tan harta, me sentía estancada en el tiempo. ¿Así sería siempre?, ¿Aún casada con Ranma esto sería a diario? Las revoltosas siguieron peleando y yo simplemente me dirigí a mi habitación. Mire con tristeza a Ranma. Mire su rostro contrariado, y él tío Genma como mi padre salían ante el alboroto. Repitieron mi nombre varias ocasiones, pero realmente no quería hablar, no quería saber nada.
-¡Akane! ¿Estás bien?
Levante la cabeza de la almohada para contestarle a Kasumi, realmente si con alguien podía desahogarme era con ella.
-Pasa por pavor.
-¿Qué pasa Akane?, abajo papá está preocupado por ti.
-¿y Ranma?
-No lose, salió huyendo mientras todas las demás salían corriendo detrás de él como de costumbre.
Las lágrimas volvieron a brotar de mis mejillas, su salado sabor llego a mi boca al emitir palabra.
-Eso es lo que tengo, él. Kasumi, siempre él. Ya no puedo lo eh apoyado, lo eh esperado, lo amo tal y como es, eh tenido una paciencia abismal, pero han sido dos años, ¡dos años! Desde que se cancelo la boda, por ellas y por todo lo demás, dos años desde la última vez que me dijo que me amaba. Y siento que ya no puedo y que mí paciencia se está agotando, necesito más, quiero más. Quiero escucharlo de su boca y saber que es la relación que piensa que tenemos, ¿Por qué no las pone en su lugar? Cada que intentamos tener una cita normal, aparecen ellas o el Hapossai o Kuno. Quiero solo un momento escucharlo.
-¿vez lo que pasa por ser tan orgullosa?
Pronunció Kasumi, mientras me abrazaba
-Ese es el problema tuyo y de Ranma, ambos en muchos sentidos son tan iguales. Incluyendo el orgullo, si él no se abre contigo tienes que hacerlo tú, y todo esto que sientes es porque ya estas empezando a verlo con los ojos de una mujer.
-Recuerdas cuando hablaste conmigo, ¿para qué me diera cuenta de lo que Tofú sentía por mí?
-Si- Le respondí sin dejar de llorar, en ella, esas lagrimas eran mi desahogo a tanto orgullo, era como si un cántaro lleno de agua se hubiera roto, y no parara hasta derramar todo su liquido.
-Así es como tienes que abrirte con Ranma y decirle todo lo que sientes, después de todo si quieren ser realmente una pareja tiene que buscar la manera de comunicarse. Ahora piénsalo Ranma es tan terco y obstinado, pero de alguna u otra manera siempre tiene detalles contigo que con él resto no, pon las cosas en un balanza y no seas tan injusta Akane, ambos tiene la misma responsabilidad en esto y lo que los está separando es el orgullo. Abre tu corazón con él.
Un sollozo salió de mi boca y sentí un poco de consuelo.
-Kasumi ¿querida dónde estás?
-Ya voy- Sentí como Kasumi besaba mi frente.
-Vamos animo Akane, tengo que ir Tofu me está buscando.
Escuche cuando la puerta se cerraba, y pensaba en la contrariedades de la vida hace un año Kasumi y el Doctor Tofu, eran marido y mujer. Habían dejado todos los obstáculos atrás y él se había mudado ya que nadie en la familia quería que Kasumi se fuera.
Estaba tan cansada de esta misma rutina pero estaba en mis manos, ponerle remedio, me observe fijamente en el espejo, con mi cabello revuelto, los ojos algo hinchados y el mismo suéter amarillo de niña, entonces retumbo en mi mente "como una mujer", en eso Kasumi tenía razón con los ojos de una mujer por Dios ya teníamos veinte años y no podíamos seguir de la misma manera, tenía que encontrar la manera de buscar un equilibrio y claro que no me daría por vencida, pero ahora cambiaría de estrategia le demostraría que tan marimacho podía ser. Quizás un cambio de rutina me sentaría bien, casi espontáneamente baje las escaleras, y mire la mirada inquietante de Ranma esperando un grito mío o alguna escena como era costumbre, pero simplemente quedo helado cuando pase de largo.
-Papá ¿y la tía nodoka?
Todos me miraban
-No lo se
-Aquí estoy cariño- Pronuncio entrando del jardín.
-¿Podemos Hablar?
-Claro
Me siguió hasta mí cuarto, mientras los demás solo me observaban y la cara de preocupación de Ranma acrecentaba.
Antes de que si quiera pudiera pronunciar palabra
-Lo vi todo, ¿por fin te decidiste?
-Sí, ya estoy lista
-Perfecto empezaremos mañana mismo, este niño ya es tiempo que ponga las cosas claras. Ranma créeme que te quiere Akane, pero es orgulloso y obcecado, mucho más que su padre y yo, simplemente, necesita valorar lo que tiene. Cuando no sienta estable lo que considera cien por ciento seguro, tendrá que actuar como el hombre varonil que es.
Y era cierto el orgullo de Ranma lo llevaba a hacer muchas estupideces, sin recodar el trago amargo cuando paso lo de la joya con Xiampú, solo recordarlo me daban ganas de matarlo, por engreimiento casi fue capaz de declararle un amor falso, porque su hombría no se lo permitía.
-Imagínate si por su orgullo hace y dice estupideces, que será cuando sea por la mujer que ama.
-De eso no estoy muy segura.
-¿pues no lo dudes Akane?, tu eres su prometida y la única que le ha dado ese lugar a pesar de su cabezonería.
-¡Así que vámonos de compras!
- Si- tome mi bolso y salí de mi habitación con la que se suponía sería mi suegra. Esta era la última oportunidad y comenzar a compórtame como una mujer, la mujer que le demostraría que jamás podría ser remplazada.
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Mire con nostalgia mi suerte amarillo, estaba oscureciendo y no había tocado palabra con Ranma en todo el día, ya era realmente tarde, ni siquiera había tomado algo para cenar, ya que estaba alistando todo para mañana, y alguna idea de donde él estuviera metido tampoco.
Regresamos del centro comercial más tarde de lo que pensábamos y eso solo le aumentaba la intriga a los demás. Pero tenía que sacar mi estrés.
Me cambie y camine directamente al dojo, después de estar practicando más de una hora, caí rendida al piso. Cerré mis ojos y mi nariz se invadió de esa aroma inconfundible, Ranma.
Me estaba mirando directamente contrariado.
-Hola
-Hola- Le conteste sin ninguna reacción emotiva.
-Perdón no sabía que te interrumpía.
-Para nada eh terminado- le exprese poniéndome de pie- buenas noches.
-Akane espera
-Dime-voltee a mirarlo antes de salir de dojo
-¿Sigues enfadada?
-Nunca estuve enfadada, nunca entiendes nada, simplemente me canse- cerré y me dirigí directamente al baño.
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Eran las siete en punto y yo ya estaba lista, me miraba en el espejo y no me reconocía, realmente ya no parecía una niña, la tia Nodoka tenía razón, era lo que necesitaba. Actuar y vestir como lo que ya era una mujer, aunque los tacones no eran muy cómodos. La falda de tubo negra se veía hermosa, en conjunto con mi blusa de manga larga color blanca perla y ese ligero escote en v, resaltaba lo que Ranma nombraba pecho plano, mi pelo ya llegaba a los hombros y simplemente lo ondule un poco recogiéndolo en media cola, un poco de labial rojo algo de rímel, los tacones y estaba lista. Mi primer día de empleo, aunque solo fuera temporal, no importaba suplir a alguien ya era un comienzo, toda mi vida creí no salir de la casa quedarme exclusivamente en el dojo, pero después de todo, para eso me había graduado en el colegio. Y era momento de demostrar que era mujer capaz de ganarse su dinero y ser responsable. Y que no esperaría a Ranma eternamente aunque mi corazón no pudiera con ello.
Había sido una suerte que gracias al Dr. Tofu me dieran la contracción en esa clínica especializada en medina alternativa china, estaría en el departamento de finanzas y realmente me parecía perfecto, no fui la estudiante primera de la clase pero si sobresaliente y las matemáticas se me daban muy bien.
Tome mi bolso, cuando escuche el grito tan peculiar de Kasumi.
-El desayuno está servido.
Tendría que buscar la manera de involucrarme más con las cosas de casa.
-¡Akane!
Escuche el grito unísonamente de los presentes, mientras la tía Nodoka me sonreía de oreja a oreja. Ranma le había aventado todo el arroz en la cara al tío Genma.
-Buenos días
-¿Porque estas vestida a así Akane?
-¿Te gusta?- me anime a preguntar, a pesar de los demás presentes, todos miraban fijamente a Ranma.
-¡Claro que no!, prefiero tu ropa normal, eso no va contigo Akane, no va con un rudo marimacho.
Sentí como algo se quebraba dentro de mí y respire profundamente, todos hicieron sus platos a un lado esperando que estampara a Ranma contra la mesa, pero simplemente me puse de pie.
-Gracias, padre regresare después de medio día, mi turno termina a las 3.
-No tienes porque hacerlo, pero suerte mi pequeña.
-Pazzzzzz
Escuche el estruendoso ruido, y supe que la tía Nodoka había estampado a Ranma contra la mesa.
Justo terminaba de cruzar la puerta y me colocaba los tacones, cuando observe a Ranma correr atrás de mí.
Simplemente camine sin prestarle atención.
-Espera Akane, espera.
-¿Qué quieres?
-¿Turno en qué?
-¿Es todo lo que quieres?, tengo un trabajo, y si me permites voy a llegar tarde
-¿Por qué no me lo dijiste?
-¿Para qué? Para escuchar cómo te reirías de mí, o buscarías la manera de ofenderme, puedes ir a jugar con Xiampu o alguna de ellas como es tú costumbre.
-No, Akane, espera ¿es que acaso sigues molesta?, ¿estás celosa?, que no entiendes que no es mi culpa.
-Sigues sin entender nada Ranma, descuida que de ahora en adelante este marimacho se hace completamente aún lado, para que hagas lo que te plazca.
-¿entender que Akane?, nunca entiendo porque te pones así.
-Ese es el problema tú nunca entiendes nada- Se puso atónito al ver que no había ningún golpe o grosería para él de mi parte como era costumbre, mire de reojo como se quedaba ahí plasmado, mientras yo caminaba lentamente.
-¡Akane! Mi amor te quiero, te vez hermosa, ¿estás así de linda para tener una cita conmigo tu amado Kuno?
Ni siquiera me moleste en contestarle, mandándolo a volar de una patada como era costumbre, ese kuno, ¿de dónde diablos aparecía tan de repente?
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Había sido un día maravilloso, me anime al sentir como la brisa fresca me llegaba a la cara, me había encantado mi primer día laboral, entre tanto que aprender, memorizar revisar, la apatía que sentía por el tema de Ranma había quedado de lado, mi cabeza lo había bloqueado. Camine a casa con calma observando todo a detalle. Y hasta suerte tenía mi jefe era una persona madura, sin olvidar que muy guapo, hay que cosas pensaba, en fin, era raro pensar en algo que no fuera mi disque prometido.
-Akane ¿Eres tú?
-¿Qué quieres Xiampú?- le conteste secamente al ver cómo me observaba a detalle de arriba abajo, como intentando descifrar lo que sucedía.
- Ni pienses que así vas a engatusar a mi Ranma, no eras tan hermosa como Xiampú.
Le pase de largo.
-Te estoy hablando, ¡esto no ha terminado Akane!
Y ahí estaba pataleando, encima de su bicicleta, no me iba a poner a su nivel, si había alguien experta en la engatusada era ella.
Seguí respirando profundo y por fin llegue a casa.
-¿Cómo te fue mí querida niña?- Me pronunciaba Nodoka sentada, en el comedor con una taza de té, con mí tío Genma convertido en panda justo de una lado de ella.
-Maravilloso tía Nodoka, tenías razón, necesitaba salir de la rutina- Le propine un abrazo y no había señales Ranma por ningún lado, me sentía un hoja al viento así que me puse un mandil, no quise cambiarme así que simplente entre a la cocina. No había señal de Kasumi o los demás, así que decidí hacerme un aperitivo para la cena. Ya que era obvio que ellos tenían poco de haber comido.
-Prendí la radio y al ritmo de música saque varios ingredientes, cerré mis ojos y pensé lo que Kasumi me había dicho "piensa en lo que nos decía mamá, cocina con el corazón, siente los ingredientes con cada uno de tus sentidos, piensa en algo que hizo feliz, en lo que quieres transmitir mientras cocinas"
Con toda la paciencia del mundo picaba ingredientes, mezclaba, y deje de ver la cocina como un campo de batalla si no centro para relajarme, y pensar en algo que me hizo feliz. Y mi me mente me transporto a esa Navidad en la que observábamos el cielo con Ranma y el ciento de estrellas fugaces caer, como a pesar de estar Kasumi y Naviki presentes, me había abrazado mientras portaba el desastre de bufanda que le había hecho. Me refugie en sus brazos y el ritmo de su corazón era la más bella melodía. Y la alarma me saco de transe, saque el pollo del horno, apague el arroz y prepare una sencilla ensalada.
-Y andábamos cortando rábanos y unos chiflábamos y otros cantábamos.
-¡Vuelva acá viejo cochino, asqueroso!
Sin duda era Ranma y el maestro Hapossai que había regresado.
-Pero que cocha pacha, huele delicioso, Akane ¿tú lo cocinaste?
-¡SI!
-Qué delicioso va oler, ni que nada, ¿a quién piensas martirizar con tu comida?, si es para mí no pienso comerme nada.
Apreté con fuerza el cuchillo que aun tenía en la mano. Lo solté, dejándolo en la barra me quite el mandil, y camine en dirección justa a donde estaban ellos.
-Ándale ahora si se enojó-Agregaba el maestro Hapossai, y sin mencionar palabra simplemente les pase de largo, si una mirada sin una sola palabra subí a mi recamara.
-Akane, oye Akane espera.
Escuche como Ranma me llamaba antes de cerrarle la puerta en la nariz.
¿Por qué ahora me afectaba tanto?, si yo sabía que él era así, ¡fácil! porque ya quería más, necesitaba sus gestos cariñosos necesitaba que diéramos el siguiente caso. ¿Necesitaba estar al borde de la muerte para que volviera a decirme algo tan lindo como en Yusenkyo?
Fue cuando resonó en mi cabeza "intente muchas veces decirte lo que en verdad sentía, pero siempre lo echaba a perder y solo terminaba molestándote o haciéndote enfadar, pero esa nunca fue mi intención; ¡despierta Akane! Hay algo que debo decirte, eh esperado mucho para hacerlo y ya no puedo esperar más, Akane necesito que me escuches ahora quiero decirte, quiero decirte que yooo, que yooo ¡Te amo Akane!", el nudo en mi corazón se retomo y tenía que ser paciente, tenía que dejar mis niñerías atrás y demostrarle que me lastimaba esta situación pero no por orgullo si no porque lo amaba. Ranma tenía que amarme o olvidarme.
-Tok tok
Dos golpecitos me sacaron del mi transe y mire a Ranma en la ventana entrar.
-¿Qué tienes Akane?
-Nada- Le dije secamente volviendo a hundir mi rostro en la almohada.
-Siempre con tus groserías, ¿dime qué te pasa?
-Tú hablándome de groserías a mí.
Levante el rostro y mire como se acercaba a mí.
-¿Lloraste Akane?
-No
-Siempre tan obcecada, ¿Hasta cuándo pensabas decirme lo que sentías?
El rubor me subió a las mejillas
-¿A qué te refieres?
-Ayer
¿Ayer?..., Kasumi, pensé. Su cara se torno color carmesí, confirmando mi sospecha, quería golpearlo, pero en lugar de eso en un gesto muy infantil volví a hundirme en la almohada. Me había espiado, había escuchado todo lo que le había hablado con mi hermana.
-Akane hey, no vas huir de esto, tenemos que hablar.
-Así hablar, ¿hablar? Cuando tú eres el que nunca dice nada, ni siquiera a esas locas les puedes poner un alto.
Enfadada me puse de pie, lance la almohada, y dispuesta a salir de la habitación. Reprochándome por dentro, que era lo primero que me había prometido.
Sentí como me jaloneo, el impulso me coloco gusto en sus brazos, y el rubor subió a mi cara.
-Siempre tan terca, ¿estás celosa Akane?
-¡Claro que no!
-Entonces ¿Por qué te enojas?, porque siempre tienes que ser tan orgullosa, ¿Por qué no reconoces que estas celosa?
¿Y ahora?... ¿Qué le decía?
-No es bueno que te la paces haciendo esos berrinches, te vez fea cuando estas de berrinchuda. Nadie va a querer casarse con una chiquilla tan fea y terca.
-¡Vez!, si quieres saber que tengo eso sabrás, estoy harta Ranma harta, de tus groserías de intentar ser paciente y tú una y otra vez lo hechas a perder. Hasta cuando tendré mi lugar, hasta cuando me dejaras de ver como un marimacho como tú dices.
-Akane, yo, yooo lo siento, esa nunca fue mi intención.
-Tú nunca fue tu intención, me ha lastimado bastante y francamente me tiene harta.
Sentí como me estrechada contra él.
-Como siempre a insultarme, y para que lo sepas nadie te está diciendo que te case…
Y antes de que pudiera terminar palabra, me puso la mano en la boca.
-Terca, eres tan terca, orgullosa, Kasumi tiene razón, en muchas cosas somos tan parecidos. Pero para tu fortuna yo amo a esa chiquilla tan fea y berrinchuda.
Me quede estática, ¿Qué escuche bien?
-Sé que muchas veces no te digo las cosas, pero debes de entender Akane yo a mí manera intento demostrártelas. Casi siempre soy una persona seca en ese sentido, pero tú lo has notado, cuando creí que te perdía en la Isla del loco ese que secuestraba doncellas, o cuando revente de los celos al sentir que te perdía por Shinosuke. No soy el tipo cursi que anda divulgando las cosas, prefiero dejarlo para nosotros solos. Además no eres la única que ha tenido que soportar cosas así, te recuerdo a Kuno o los diversos tipejos que se sentían sobre un derecho sobre ti.
-Sí, pero yo jamásssss.
-Ya calla y escúchame necia. Para mí no es tan fácil ser tan cortante y tajante, a pesar de todo mi padre me ha enseñado a no ser grosero con las mujeres. Y tú has visto cómo está la situación, así que si lo que quieres es que ponga las cosas en su lugar perfecto, pero va a ser a mí manera, porque yo tampoco estoy dispuesto a que sigan acosando a mi prometida. Esta mañana realmente me sorprendiste al verte tan hermosa, pero estalle de celos, yo no necesito que uses tacones o ropa tan insinuadora para verte hermosa, Akane yo te eh visto de mil maneras, pero tú eres recatada y muy respetuosa en lo que a esas cosas se refiere, nunca has sido del tipo de mujer que seduce o engatusa a un hombre como Xiampú y eso es algo más que me enamoro de ti, esa inocencia salvaje.
Ranma, mi corazón palpitaba tan fuerte que estaba segura que él podría escucharlo.
-Mi madre me había dado esto, y si, ahora si es el anillo, solo buscaba la manera de dártelo, y Akane quiero que lo uses, quiero que esto sea oficial, quiero que se dispersen tus dudas, porque no quiero volver a tener esa sensación de que te estoy perdiendo, todo se acomodara y encontraremos la manera de casarnos, si que todos se entrometan, pero así como has creído en mí. Hazlo más que nunca por favor y si me lastimó que no me comentaras los de tu trabajo, pero confió en ti, y si el plan de mi madre funciono, porque al verte tan seca conmigo, al verte pasar por mi lado sin ni siquiera mirarme con rabia, fue el golpe más bajo para mi orgullo, puedo con cualquier cosa menos con tu indiferencia. Y si te espié, pero es que no tenía el valor para saber directamente que estaba pasando.
Abrí poco a poco los ojos al escuchar el clic, y mire el anillo el fino anillo de compromiso en oro, con un pequeño diamante rosa en su centro, era tan sencillo pero hermoso a la vez y sentí que las lágrimas volvían a derramarse por mi cara.
-¿Y ahora porque lloras?, Akane
- También te amo- dije tomando algo de impulso y confiada de que el con su mano izquierda seguía tomándome por la cintura, me puse de puntitas para alcanzarlo y verlo directamente a los ojos, observe su sonrojo.
-Akaaaneee- Pronuncio entre cortamente y sentí lo cálido de su aliento en mi labio superior, sentí los botones de su camisa china roja, cuando me estrecho más fuerte a él.
-Hace tanto que quiero hacer esto, que ya no puedo. Ahora no hay nadie que interrumpa.
-Hazlo
Cerré mis ojos, y sentí, así es sentí como sus labios chocaban con los míos, dos tontos pocos experimentados, después de tantas peleas y orgullo, se permitían besarse, por fin habíamos derribado las barreras, pero me sentía deliciosamente vulnerable en sus brazos.
Sentía como movió sus labios, para poder acceder a mi boca. Su sabor, si su sabor se mezcló con el mío, sentí como su respiración se acelera como la mía, me abrazaba tan fuerte de la cintura como yo de cuello, era un ritmo lento, que me permitía sentir la humedad de sus labios, el mismo nerviosismo que yo sentía Ranma lo compartía y aun así ahí estábamos, aprendiendo a amarnos.
-Sabes a fresas.
Me pronuncio, mientras se sentaba en la cama conmigo en sus piernas.
-Siempre supe que tendrías ese delicioso sabor dulce, berrinchuda.
Y antes de poder responderle me tomo por la nunca, y nuestras bocas se volvieron una nuevamente. El tiempo se hizo inexistente, solo quería besarlo hasta que me dolieran los labios, reclamar todos esos besos que ambos nos negamos por obstinados, había pensado tantas veces en este momento.
-Caramba ¡pero que cocha pacha!
-¡Ese es mi hijo!
-Hasta que por fin le pusiste velocidad mi querido Ranma
-Esta foto valdrá mil yens
-Pero que Varonil
Nos separamos bruscamente, pero él no soltaba mi mano, ambos estamos anonadados, ante el flash de la cámara. Enfrente el maestro Haposai, el tio Genma y la tia Nodoka, Kasumi y sin olvidar a Naviki y mi padre.
-Por fin habrá boda- Decía mi padre con cataratas de llanto.
-Claro que habrá boda
-¡Ranma!- dijimos unísonamente
-¡Pero dejen de espiarnos!
Grito furioso y automáticamente pusieron cara de susto, en cuanto él se puso de pie, todos salieron corriendo y cerrando la puerta estruendosamente la misma que no había escuchado abrirse. Soltó un suspiro ahogado y sentí como levantaba un poco mi mano y deslizaba el anillo.
-No te lo quites por favor
Beso mi frente y seguía cuestionándome si esto era cierto.
-Tenemos que dormir ya es muy noche, mañana hay mucho por hacer.
-Espera no te vayas…
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Y bien hasta aquí la primera parte, realmente no sé cuántas partes vayan a ser, ya que hay varios puntos que quiero destacar, primero que nada que realmente la relación de este par floreció más de lo que se aprecia en el anime, en el manga hay momentos realmente hermosos, donde se aprecia el deseo de Ranma a besar a Akane, como ella de besarlo, e inclusive se muestra como se ven como pareja, los celos son más notorios por ambos y realmente los dos se encuentran enamorados con sus virtudes y defectos. A tal punto que Ranma en su último viaje carga con lo más valioso que él dice tener; una foto de Akane. Yo deseaba ver un desarrollo del Final, así que no me quedo más que narrarlo con mi loca mente, para sacarlo de mi sistema y para esto basarme en el mismo anime. Desarrollar las demás parejas, el momento que Ranma se hace cargo del Dojo, la boda, los hijos, yo que se jejeje todo eso que se nos negó.
Me baso para la edad en el hecho que en el anime en un capítulo Akane prepara un pastel de aniversario de dos años, para Ranma y estoy sumando dos años más después de la boda; para no verlos tan pubertos, si no en su concepto de Hombre y Mujer, que crecieron amándose, obstinadamente pero amándose.
En fin que lo disfruten, no tarde en actualizar ya que estaba algo avanzado, espero sus comentarios como dudas.
P.D. Me disculpo por cualquier falta de ortografía que hubiera.
P.D. Advierto no todo sera color de rosa jajajaja.
Esto es dedicado para todos los Fans de Ranma que como yo solo deseaban ver a este par Amarse.
