Todos los derechos reservados son de Naoko Takeuchi.
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AQUEL VIEJO SENTIMIENTO
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CAPITULO 1
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Una fecha muy difícil de asimilar.
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Corría el mes de mayo.
Las lluvias nebulosas oscurecían el cielo de Tokio en este mediodía candente.
Una esbelta joven de cabello corto y azul, con una gafas que opacaban su preciosa mirada, corría presurosa por la avenida principal que cercaba el parque nro. 10.
En una mano balanceaba su Iphone y traiga colgada una cartera al hombro.
Estaba buscando a alguien.
—Maldición—pensó Amy—. A estas alturas jamás lo encontraré y no atiende el celular, Yaten se enfadará y me moriré de vergüenza ante Taiki por llevarle respuestas insuficientes.
Llevaba prisa.
De pronto, recostado en uno de los árboles, con un cigarrillo en la boca y con una guitarra a sus pies, divisó a su objetivo.
Un joven alto, de unos 25 años, esbelto, de profundos ojos zafiros, ahora cubierta por oscuros anteojos y con una distintiva coleta que enmarcaba una larga cabellera azabache.
—Señor Kou—gritó Amy—. Ni se imagina como lo he estado buscando, usted apagó su celular y llevo rato intentándolo ubicar.
El pelinegro la miró, sacando el cigarro de su boca y espetó:
— ¿Y ahora que pasó? ¿Por qué ese escándalo? ¿ que no te dije que no quería que me molestaran?
—Lo lamento Señor Kou—respondió Amy algo jadeante por haber corrido tanto y tomaba aire—. Los señores Taiki y Yaten decidieron adelantar la conferencia de prensa de anuncio del lanzamiento de los dvds de los conciertos y comenzara en exactamente en 3 horas y vengo a buscarlo para que pueda prepararse-
Seiya la miró.
Amy era su asistente personal.
Sin duda, a veces lo exasperaba con su atención excesiva de los detalles pero sin duda la tenacidad y competencia de ella le habían salvado el pescuezo en numerosas ocasiones.
Seiya era uno de los miembros de una de las bandas musicales más exitosas de Japón.
Era la voz principal de Three Lights.
Grupo que habia fundado con sus dos hermanos Yaten Y Taiki.
Yaten tocaba la guitarra y se encargaba de trabajar las partituras con los músicos que los acompañaban.
Taiki tocaba el piano y era el coautor de la mayoría de las composiciones que conformaban el repertorio del Grupo.
Amy siguió diciendo:
―Además, hay otro tema que debe saber. Volvió a llamar el abogado Tenoh―con voz ligeramente más pausada, porque el hecho de haber sido asistente de Seiya durante más de 6 años la facultaba a diferenciar perfectamente cuando algo en verdad le dolía a su Jefe.
― ¿Tenoh?―espetó Seiya―. El nuevo abogado de divorcios de Bombón, supongo―añadió mientras volvía a poner el cigarro en la boca.
―Si, en efecto es el nuevo abogado de la señora Serena, obviamente no le di tu teléfono celular, pero si me pidió una cita contigo y quedé en regresarle la llamada―dijo Amy―.Ahora ya vayámonos Señor Kou, debemos prepararlo para la conferencia, ya está el equipo de vestuario esperándolo.
Seiya se incorporó, tomó la guitarra del suelo y arrojó el cigarro y se puso en marcha con su asistente rumbo al Convertible estacionado a la vuelta del Parque.
―Ok, señora Mizuno, como tú digas, mientras tanto me vas a explicar ¿cómo demonios hiciste para encontrarme aquí?, si me aseguré de apagar el GPS.
―Te conozco y sé que son fechas horribles para ti y este bendito parque es lo único que te calma―respondió Amy.
Los años que pasó trabajando con él, le daban ese permiso para hablarle de esa forma.
A pesar de muchas cosas, él consideraba a Amy como una hermana. Aunque la chica insistiese en poner distancia entre los dos.
De verdad la apreciaba.
Mientras subía al vehículo, lo encendía y tomaba rumbo al puesto comando principal de Three Lights, con Amy sentada al lado quien no paraba de hablarle de la agenda de la conferencia.
Seiya no la oía.
En verdad, eran fechas horribles para él.
Sumado a la llamada de aquel abogado Tenoh.
Ese día se cumplían exactamente 12 meses de estar separado de su esposa.
Serena Tsukino, quien también era la madre de su hija Chibi Chibi, fruto de ese matrimonio, y quien también estaba a pocos días de cumplir el primer año de vida.
El nacimiento de la niña vino a opacar en parte el profundo dolor que le ocasionó la separación con su madre.
Ella lo habia echado de su vida de la manera más déspota...y todo por un maldito malentendido...
Él, gracias, a su dinero e influencia habia podido batear los intentos de iniciar el trámite de divorcio que quería impulsarle su ex mujer.
Le dolía demasiado.
Aun.
Lo que más lo lastimaba es que la única mujer a la que el habia amado, no le hubiera tenido confianza.
Ni tampoco el valor para poder escucharle.
Se escudó en abogados y en jamás dejarse encontrar.
Lo cual le costaba mucho, porque él la conocía tanto que sabía al dedillo cuales eran los lugares favoritos donde ella podría estar
¿Cuál era ese maldito malentendido?
Pues que Serena lo habia encontrado durmiendo en un Hotel De Paris, con Michiru Kaioh, una amiga y colega de él ,que se dedicaba a tocar el Violín.
La escena habia sido horrible.
Sumado al hecho de que en ese momento su ex esposa tenía un avanzado estado de embarazo.
S-S
Al otro lado de la ciudad, tendida en una hamaca dispuesta en el Jardín de la Casa, estaba una peculiar mujer, de largos cabellos rubios sostenidos en 2 odangos.
Tenía unos 25 años.
Muy esbelta y bien formada, dormitando un sueño sin terminar, hasta que el llanto de un bebé la sacó de su letargo y la hizo incorporarse velozmente.
Se calzó las sandalias y entró en la Primera Sala de la Casa, donde habia dispuesto una improvisada cuna para acostar a su pequeña hija en un lugar donde pudiera oírla, mientas ella salía al jardín a recostarse en la hamaca.
―Chibi Chibi, ¿ahora que pasa?―preguntaba la rubia mientras la levantaba de la cuna―.Si acabas de tomarte toda tu botella de leche, ¿no me digas que tienes hambre de nuevo?
Era un milagro maternal.
Al mero contacto con su madre, la niña dejó de llorar y se acurrucó a ella.
Era una bebe de casi un año de edad, con los mismos ojos azules de su madre y vislumbraba hermosos mechones rosa en la cabeza, lo que delataba el hermoso color que tendría su cabello
Era la hija que habia tenido con su marido, mejor dicho ex... Seiya Kou, de quien estaba distanciada hacia un año.
Justamente hoy se cumplía ese año desde aquel horrible dio donde comprobó que su esposo la engañaba.
Intento apartar esos pensamientos de su cabeza.
Pero simplemente no podía hacerlo.
No habia un solo maldito día que no pensara en ello.
Tembló de un coraje disipado, pero la imagen de la dulce bebé dormida en sus brazos amortiguó esas sensaciones.
Volvió a bajarla a la cuna, cuando comprobó que seguía dormida.
En ese momento su celular empezó a sonar.
Atendió.
Era Mina, una de sus mejores amigas y…también era su ex cuñada.
Ella era la esposa de Yaten Kou, el hermano de Seiya.
¿Porque todo tenía que tener conexión con ese hombre?
―Serena―argüía Mina desde el otro lado de la línea―. Ya estoy haciendo los pedidos al Catering y me tome la libertad de pedir que agreguen postres adicionales de Crema de Durazno al Menú, así para variarla de los dulces tradicionales.
―Por mi está bien―contestó Serena―. Pero recuerda que solo es el cumpleaños de una bebé que ni siquiera creo que llegue a estar despierta.
―No importa―espetó Mina―. Es el cumpleaños de mi sobrina y me asegurare que todos traigan regalos bonitos, fíjate que registré la lista de regalos en la tienda esa de juguetes especializados de la que te habia hablado, así nos libramos de que nos traigan regalos horribles que espanten a Chibi Chibi.
―Si tú lo dices―sonreía la rubia al oír los pequeños dilemas de Mina―. Oye, ¿a que no sabes a quien me encontré el otro día en el Café Crown? pues a Darién Chiba, ¿lo recuerdas, verdad?, bueno, termínanos platicando y terminé invitándolo a la fiesta y vendrá.
― ¿En serio?―apuntó Mina―. ¿Qué quieres que te diga? ,ese hombre nunca me cayó bien y cuando desaparecido de escena hasta me alegré, era un tarado conmigo, no puedo creer que lo hayas invitado.
Serena sonrió.
Darién habia tratado de escandalosa e inmadura a Mina en numerosas ocasiones en aquella época cuando trataban con él.
Ellas estaban en el último de preparatoria y ya eran las mejores amigas desde ese tiempo.
Él en cambio era un universitario de la carrera de Administración.
Luego habia terminado alejándose cuando un chico ingresó a la vida de Serena cambiándolo todo .Ese chico era Seiya Kou.
― ¿Serena?―insistió Mina―. ¿Me estás oyendo?
Eso la quitó de su ensoñación y la hizo volver a la realidad.
―Sí, loca―contestó Serena―.Estoy aquí
―Bueno, porque también debemos hablar de otro tema y sé que no te gusta, pero sabes que no puedes prohibirle a Seiya que esté presente en la fiesta y él está al tanto de todo―dijo Mina.
Verlo de nuevo...
¿Cuánto tiempo ya que no lo veía en persona frente a frente?
―Claro que no Mina, que sea un idiota no le quita que sea un gran padre para Chibi Chibi, no podría prohibírselo―sentenció Serena
―Bien―contestó Mina―. Tengo que colgar, Yaten me está llamando al Celular y ya sabes lo celoso que es, te marco después o llámame por si quieres salir a tomar algo. También soy consciente de que no es una día memorable para ti― terminó reconociendo la joven ex cuñada de Serena.
Lo dijo en clara alusión a los sucesos que desencadenaron su separación y su inminente divorcio.
Serena se despidió de su amiga y se sentó en el sillón de lado de la cuna donde reposaba su hijita.
Seiya estaría presente en la fiesta y eso era suficiente motivo para desencadenarle todo tipo de sensaciones.
Habían compartido juntos una amistad desde que se conocieron a los 17 años, cuando él ingresó a la preparatoria donde ella asistía.
Y terminó por volverse su mejor amigo.
Era el chico más guapo de la Escuela. ¡Diablos!, todavía lo era.
Era el dulce bohemio que llevaba su guitarra a todas partes y todas suspiraban rendidas ante su irresistible carisma y ese imán que lo volvía tan atrayente y sociable.
Hasta que un día, ella haciendo carrera universitaria en Publicidad y él ,ya con una carrera formada por haberse convertido en una de las luminarias musicales con Three Lights asombraron al mundo de las revistas al comprometerse a los 22 años casándose pocos días después.
Fue un matrimonio por amor. Un gran amor.
Serena dio una media sonrisa amarga al sentirse así.
Porque recordó todo lo que les habia costado a ambos admitir que se amaban.
Ella siempre fue una chica insegura.
Justamente esto habia uno de los detonantes del fracaso de aquel matrimonio.
Buscó el cigarrillo que tenía en el bolso y lo encendió.
Hoy era un día particularmente amargo...Necesitaba fumar...
¿Pero en que basura estaba pensando?
―El verdadero detonante de que sea una mujer separada a los 25 años, es que el imbécil me engañó, me rompió el maldito corazón―razonó furiosa y arrojando el cigarro de la boca.
La verdad ese hábito le daba asco.
Pero no podía evitar querer hacerlo.
Más cuando pensaba en él. Ese maldito malnacido de Seiya Kou.
Y sí, siempre todo tendría conexión con él.
Tenían una hija en común.
Su mejor amiga estaba casada con el hermano de Él.
El primer single de él,"Nagareboshi",de Three Lights, que compuso Seiya hace unos años fue hecho dedicado íntegramente a ella y para su desgracia, este tema musical era considerado como una especie de himno de culto en Japón y siempre estaba vigente, ya sea como música funcional en sitios publicos, hasta como tema principal de películas o series de Tv.
Sin contar que junto a su grupo, eran tapa constante de revistas de todo género incluidas aquellas del periodismo amarillo que no dejaban de atribuirles a ellos todos los romances que se podrían a llegar a imaginar.
Esas malditas revistas. Ya podrán imaginarse el efecto que daban en ella esta basura, siendo como era una mujer tan insegura de sí misma, casada con uno de los hombres más codiciados por las mujeres y que habia ayudado a sembrar la semilla más oscura de confusión y duda en su matrimonio.
Y a pesar de que él siempre le mostró infinita paciencia e intentaba mostrarle que intentara verse de la misma forma que él la veía.
Se sentía estafada.
Igual descubrió que él la engañaba.
Confirmando para siempre aquella oscura semilla.
Al menos eso creía aquella bonita rubia, con mirada cristalizada.
―Este abogado Tenoh prometió que antes de terminar el mes estaría divorciada―pensaba Serena―. Es el quinto letrado que veo y parecía bastante sagaz, es la única forma en la que legalmente dejaré de llevar el apellido de ese hombre a cuestas.
Tal vez así dejaría de pensar tanto en él.
CONTINUARÁ.
EDICIÓN: Mayo 2016, 11.
Juro que sólo en este primer episodio encontré mucho por editar. Aún asi no lo cambié mucho, para que quede la esencia del viejo fic, que fue el primero de la linea de long fics que escribí y cuando estaba tan enamorada de Usasei.