Disclamer: Estos personajes no me pertenecen.
Lo Que Dicen Sobre Mi
Capitulo 1. El Príncipe del Elizabeth High School.
Clow Hiraguizawa era conocido internacionalmente como el mejor inversionista, el mejor empresario y el mejor presidente en cuanto al mundo de las financias. Era un as en su trabajo e inmensamente rico. En todo lo que era su emporio, había que contar además los14 hoteles (todos de cinco estrellas) dispersados por todos los países del mundo y en los paraísos mas soñados por las personas: Cancún, Hawai, California, Sicilia…A todo eso hay que sumarle además los centros comerciales, supermercados, y algún que otro gimnasio de máxima calidad.
Conocido como un empresario de mente fría, algunos no dudaban que también el corazón lo tuviera congelado. Si un trabajador le era ineficaz, lo despedía sin miramientos. A él lo que le importaba eran sus negocios, que fueran eficaces para su público y disponer para ellos lo mejor.
Muchos conocidos del famosísimo empresario comentaban cuanto había cambiado el hombre a raíz de la inesperada muerte de su esposa. Fue una mujer singular, hermosa y caritativa que no dudaba en darle a quien lo necesitara todo su cariño y apoyo. Sin embargo la señora Elizabeth Hiraguizawa, aunque lucho con toda su alma por superar el cáncer de mama que la acechaba desde hacía más de dos años, no pudo con él. Desde aquel momento Clow no fue el mismo.
Había decidido construirle a su memoria un instituto, el cual llamaría Elisabeth High School. Era uno de los mejores instituto de Japón y muchos estudiantes daban lo mejor de sí mismos para entrar en el.
Murió dejando a un marido viudo y a un hijo sin madre.
El señor Hiraguizawa tenía un solo hijo y su nombre era Eriol Hiraguizawa.
Acababa de cumplir los 18 años y asistía al instituto que portaba el nombre de su madre. Sus ojos eran azules y su pelo oscuro, con reflejos color zafiro, eran iguales a los de su padre y era llamado desde su ingreso al instituto El Príncipe Omnipotente e Intocable del Elizabeth High School.
Nadie, ni alumnos ni profesores, discutían sus palabras.
Lo que decía Eriol iba a misa.
Su palabra era ley.
El profesorado no tenía quejas en cuanto a las calificaciones del muchacho, estas brillan por sí misma, pero tampoco podían hacer nada para impedir que el chico llegase a clases a la hora que a él se le antojaba, si no querían sufrir sobre su cuerpo la ira del presidente de los emporios Hiraguizawa.
Quien se atreviera a poner un dedo sobre Eriol Hiraguizawa, desearía estar muerto más que enfrentarse a los abobados y al propio Clow.
Así que no era extraño pensar en Eriol como un Dios. Los alumnos hacían lo posible por alejarse de él, cuanto menos contacto hubiera mejor para ellos. Eriol no solo era el hijo de una importantísima persona, si no también un chico muy, muy peligroso.
Justo cuando ingreso al instituto, un joven que andaba despistado, chocó con él.
-Yo…yo-yo…l-lo siento¡lo siento de verás!- se disculpo el chico. Apenas podía articular palabra y más mudo se quedo aun cuando vio el semblante helado del peli-azul.
Su sentencia estaba dictada.
Como su padre, a Eriol le rodeaba un aire de frialdad estremecedor, era calculador y muy tenaz. Ese aire de impotente y arrogante lo llevaba en la sangre, su perfil era el de un aristócrata inglés. Irónico y sarcástico, cualquier chico que lo molestara (y para él, en el termino molestar también iba incluido miradas poco amables) estaba fuera del instituto en un abrir y cerrar de ojos.
Sin embargo con las chicas era un poco mas…digamos, tolerante. Sabía el miedo que producía en algunas y el morbo que producía en otras. El chico no pasaba desapercibidos los cuchicheos que se formaban cuando el pasaba por un pasillo atestado de féminas o los sonrojos repentino de cualquier niña a la que hubiera sonreído. Por supuesto que su ego estaba por las nubes, siendo así superior al resto.
En resumen, Eriol era un chico malo. (Uyy, chico malo, xD, el malo maloso xD xD)
El timbre del instituto anunciaba el comienzo de las clases, los alumnos que llegaban tarde iban corriendo, sin apenas tener aire en sus pulmones, para que el profesor de turno no le echara un sermón a cerca de la puntualidad. Entre ellos se encontraba Sakura Kinomoto.
Una linda castaña de ojos esmeraldas, amable y simpática que con una sola sonrisa hacía derretir a más de uno.
-"Joo¡Otra vez tarde no!"- se quejaba la chica- "¿Por qué diablos el idiota de mi hermano no me llamó?" – Sakura era la menor del matrimonio Kinomoto, su hermano, mayor por 6 años, era un ídolo de masas en su instituto, muchas chicas encontraban a Touya Kinomoto como un amor de hombre- "¿Y que les verán¡Si es odioso!"
Y es que todas y cada una de las mañanas su "querido" hermano le hacía siempre la misma jugarreta, ella le pedía por favor que la despertara para no llegar tarde y el joven galeno se pasaba su palabra por el arco del triunfo, riéndose de ella cuando la veía apurada para llegar a clases.
-¡Buenos Días!- grito, abriendo la puerta de golpe.
Los alumnos, nada más verla entrar rompieron en carcajadas.
-Sakura- la delegada del curso, Naoko Yanaguizawa se dirigió a ella- El profesor Terada aun no ha llegado.
La joven cerezo se dejo caer, su correr había sido en vano- ¿Y eso porque?
-Está en la dirección, hablando con la nueva alumna que ingresa hoy mismo en nuestra clase.
Kinomoto dejo su mochila en su asiento mientras respondía a Naoko- ¿nueva alumna?
-Si, ha llegado hace poco a la capital de Japón. Por lo que he oído antes vivía en Osaka.
-Ya podría ser un alumno…y bien guapo- suspiro la trigueña.
-¿Un alumno…y bien guapo?- una voz se dejo escuchar a sus espaldas- ¿Para qué si ya me tienes a mi?
La chica se irritó nada más oírlo, detrás de ella se sentaba su peor dolor de cabeza, su piedra en el zapato, el chico más miserable que había conocido desde hacía años.
Shaoran Li.
-¿Tu guapo?- preguntó con sarcasmo- perdón Li, pero no se si te has mirado a un espejo últimamente.
-Todos los días, mi hermosa Sakura
-Kinomoto, para ti, soy Kinomoto- dijo cortante, y dándole la espalada al chino se sentó en su pupitre deseosa de que el profesor llegara de una buena vez.
Gruñó, aquel era Li, Shaoran Li, de nacionalidad china, tenía el pelo castaño y los ojos color ámbar, alto y con un físico atlético, no por ello era el capitán de fútbol. Para Sakura no era más que un chico pedante y presumido, mujeriego a más no poder. Y lo odiaba, desde que lo vio por primera vez no le cayó bien.
Con esa estúpida sonrisa, se creía que podía tener a cualquier chica a sus pies… ¡pues estaba muy equivocado sin con ella iba a probar sus técnicas de seducción!
Parecía que el maestro la había escuchado, porque en ese preciso momento entró, seguido de una chica morena.
-Chicos, sentaos- ordenó al ver el revuelo que en la clase había montado- Buenos Días.
-Buenos Días profesor- respondieron al unísono.
-Hoy ha ingresado una nueva alumna, su nombre es Tomoyo Daidouji, viene de Osaka, espero que os llevéis bien con ella.
La joven dio un paso al frente y realizo una correcta reverencia: Espero que nos llevemos bien- dijo, y sonrió, sonrió de una manera que hizo suspirar a más de uno.
-Te sentarás al lado de la señorita Kinomoto, por favor, levante la mano.
Sakura hizo lo que le mando el maestro y así, la joven que se llamaba Tomoyo pudo dirigirse a su pupitre.
En el corto camino que había ente la mesa del profesor y la que ahora correspondía a la nueva alumna toda la clase estuvo en silencio, pendiente de ella. Era una chica realmente bonita, con los ojos como el color de la amatista y el pelo como el ébano, lago y acabado en lindos bucles. La piel era bastante blanca y daba la sensación de ser una chica delicada y de buen corazón con esa cara que parecía decir que no había roto ni un plato en toda su vida.
-Hola, soy Sakura Kinomoto, pero puedes llamarme Sakura- susurró la castaña con una graciosa sonrisa
-Hola, yo soy Tomoyo Daidouji, y dime Tomoyo, por favor- la recién llegada le correspondió la sonrisa- espero que seamos buenas amigas.
Sakura asintió contenta, percibiendo en el tono de Tomoyo algo de timidez. Normal, era nueva y se encontraba sola- Estaré encantada de serlo.
-Yo soy Shaoran Li- La esmeralda rodó los ojos al ver que el chino también se metió en la conversación por la cara- pero puedes llamarme cariño, mi cielo, amor mío…como desees.
A Tomoyo le recorrió una gota por la frente al ver la actitud del chico: esto…Li esta bien…
-¿Y porque no Li-kun¿O Shaorancito? Creo que nos vamos a llevar bien, lindura- añadió guiñándole un ojo.
-No le eches cuenta al degenerado este, está mal de la cabeza.
-¡Oh vamos Sakurita¿No me digas que estas celosa?
-¡Yo?- la chica alzo un poco el tono de voz- jeje, yo celosa de ti…creo que ni estando muerta, Li-kun- Arrastró las ultimas palabras.
Tomoyo miro divertida la escena, parecía que su compañera no tragaba del todo a aquel joven, por lo menos ya había hablado con una de sus compañeras y parecía ser una buena chica.
El mal trago había pasado y es que para Tomoyo aquello era todo nuevo. De estar viviendo en Osaka con sus padres a tenerse que mudar a la capital del país por el traslado de su comercio.
Sus padres eran los encargados de una tienda de regalos propia. Habían decidió mudarse a Tokio para que su única hija recibiera una buena educación y que mejor instituto que el Elizabeth High School.
Abandonó su ciudad natal, sus amigos de toda la vida y su casa para comenzar una buena.
-"Solo espero que el negocio de papa y mama vaya bien"- se dijo la amatista. Pero ya era hora de volver a la clase y dejar las nubes.
Cuando la clase acabó, Sakura se ofreció para enseñarle las instalaciones.
-Ahora tenemos una hora libre y después habrá Filosofía, aprovecharé para enseñarte el instituto.
Tomoyo agradeció enormemente el detalle de su compañera.
-Esperen mis dos damiselas, no podéis ir solas, los buitres os acecharan, yo os acompañaré- El castaño se interpuso entre las chicas.
-¿Los buitres?- preguntó Sakura malhumorada- ¡Habla por ti! - Y dicho esto tomo la mano de la amatista y se la llevo a rastras fuera de la clase.
-En realidad esta loquita por mi, estoy cada día mas seguro- se decía en voz alta el chino, mientras que el resto de la clase lo miraba con cara de "Si claro, eso es lo que tu quisieras"
Sakura llevo a Tomoyo a los distintos gimnasios, hablándole además de todos los clubes a los que se podía apuntar: Yo estoy en el de voleibol, se la pasa muy bien y además soy animadora de nuestro equipo de fútbol. Tú podrías hacer las pruebas para animadora Tomoyo.
-La verdad los deportes siempre se me dieron mal…-Tomoyo sonrió al recordar como en una prueba de atletismo, antes de que sonara el disparo ya estaba cansada- Pero creo que si me apuntare a algún club de canto o coro.
-¿Te gusta cantar?
-Si, es un pasatiempo
-¿Y tocas algún instrumento?
-Bueno, el piano pero muy poco.
-¡Entonces serás bienvenida en el club de coro! Si quieres en el recreo te acompaño para apuntarte.
-Muchas gracias por tu ayuda Sakura.
-No hay que darlas, ven te voy a enseñar ahora donde esta la cafetería ¡Es como la de un hotel!
Un joven oji-azul iba caminando más que tranquilamente por la entrada del instituto. Daba zancadas largas y pausadas, como si no tuviera prisa por llegar a la siguiente clase que estaba por comenzar…total… ¿Qué podía tener de interesante la filosofía? Incluso pensó en ir a la cafetería y exigirle al cocinero que le preparara un desayuno completo, pero esa idea la descarto al no tener ni pizca de hambre.
Aquella mañana se había levantado a las 9, y ya se había perdido la primera hora de clases. Una aburrida clase de lengua con el profesor Terada, cada vez lo tenía mas claro, si ese hombre no hacía sus clases más amenas, estaba por despedirlo.
Con toda la parsimonia del mundo se vistió y bajo a desayunar como dios manda, un desayuno con su zumo, su leche, su café, su tostada y todos los manjares que un niño como él tenía derecho a probar antes de asistir a un duro día de instituto.
-Vaya, vaya, hasta que te da por aparecer- la voz de Shaoran lo hizo salir de sus cavilaciones.
-Es que el horario de hoy no me llamaba realmente la atención, pero total, si me quedaba en casa me aburriría el doble.
Shaoran era el único ser del instituto que tenía el suficiente valor como para acercarse a Eriol, es más podía ser su único amigo.
-Amigo, pues deberías de haberte levanto temprano esta mañana.
-¿Y eso porque?- el chico frunció el ceño la sonrisa de tonto que tenía el castaño.
-Ha llegado a nuestra clase una nueva alumna.
-¿Una nueva alumna¿Y que tiene de especial?- preguntó con indiferencia.
-Es preciosa, tiene unos ojos bellísimos, deberías de haberla visto.
-¿Ya le pones los cuernos a Kinomoto sin estar saliendo con ella?
-Eriol- Shaoran se puso serio- saber de sobra que Sakura es la mejor para mí, la única…pero mientras se me resiste no me importa andar de florituras con otras chicas.
-Eres único- el inglés no pudo evitar sonreír por las ocurrencias de su compañero- vamos ya a clases, antes de que al pesado de filosofía se le ponga la vena de la sien a temblar de la rabia.
Ambos jóvenes emprendieron el camino a su aula, Shaoran deseando de ver de nuevo a Sakura y a la tal Tomoyo Daidouji, y Eriol deseoso de escoger su víctima para ese día.
-Y eso es todo, ya te enseñe el instituto completo, las jardines los veras después, durante el recreo.
-Es hermoso ¿Y quien es el responsable del edificio?
-Pues Clow Hiraguizawa.
-¿Hiraguizawa?
-Exacto¿te suena?
-De haberlo visto en revistas y periódicos-. Tomoyo se llevo una mano al mentón, intentando recordar su rostro- dicen que es uno de los hombres mas ricos del planeta.
-Normal, con todos esos negocios que tiene. Este instituto lleva el nombre de su difunta esposa.
-¿A si? No tenía ni idea, creo que es un bonito gesto.
-Si que lo es… ¡ah! Ya que hablamos del señor Hiraguizawa, debo hacerte una advertencia.
Tomoyo la miro preocupada.
-El hijo de Hiraguizawa va a nuestra clase.
-¿Y que con eso?- la amatista pestañeo al ver la importancia que le daba Sakura a una cosa que ella la veía normal.
-Debes tener cuidado con él, es peligroso. Nadie es capaz de acercársele excepto cierto idiota que ya te diré quien es. No es un chico normal, es malo, si haces algo que no es de su agrado ten por seguro que lo mínimo que puede hacer es echarte de la escuela.
-¡Eso es terrible!
-Pero no es lo peor que a hecho, a humillado a tantos alumnos que ya he perdido la cuenta, y todo por ser el hijo de quien es…
-Gracias por haberme advertido, Sakura, ten por seguro de que no pienso acercarme al tal Eriol Hiraguizawa.
-Para algo estamos las amigas- dijo Sakura, y entre risas y cuchicheos volvieron al aula.
Abrieron la puerta corrediza y con sorpresa vieron que el profesor Yamamoto ya había llegado y les indicaba a los alumnos que abrieran de una buena vez el libro.
-Sentimos llegar tarde…-se disculpo Sakura.
-No te preocupes Kinomoto, ya me dijeron que estabas con la nueva alumna, pasad las dos y sentaos. Estamos en la página 53- se volvió a la nívea- Eres Tomoyo Daidouji ¿cierto?
-Si, así es…
-Perfecto, ve a tu pupitre.
La joven amatista se dio algo de prisa, no quería que por ser su primer día ya le regañaran. Y tanta fue la prisa que se dio que no reparo en la mirada zafiro que en aquellos momentos la escaneaban.
-Muy bien- anunció el profesor después de estar media hora leyendo a Platón- ya sabéis lo que a mi me gusta los exámenes sorpresa ¿verdad? Pues cerrad ahora mismo vuestros libros y quiero ver encima de la mesa tan solo el bolígrafo.
Toda la clase lanzó un ¿QUEEE? Estaba de broma, probablemente estaba de broma ¡No podía poner un examen sorpresa¡No ese día!
-Profesor, vamos, hay una alumna nueva ¿no puedes tener compasión?- pregunto un chico que parecía estar dormido, Yamazaki.
-Aunque Daidouji sea nueva no importa, así sabré su nivel de filosofía.
A pesar de las quejas de los alumnos el profesor no cedió a quitar la prueba.
-"Mira que tengo mala suerte"- se decía Tomoyo- "Ser el primer día de clases y tener un examen sorpresa…"- si, vale se estaba quejando, pero única pregunta de la que constaba el examen la estaba contestando- "Y para colmo Sakura me ha dicho que tenga cuidado con Eriol Hiraguizawa…¡pero si no se como es! "
Suspiro.
Sin previo aviso vio que su bolígrafo dejaba de escribir… ¡Genial¡Lo que le faltaba¿Tenia que ser en aquellos momentos? Y para colmo no tenía un bolígrafo de recambio.
Se volvió a Sakura con la esperanza de que le prestara uno, pero estaba como ida…en las nubes, en la luna…o ella sabía donde porque por más que la llamaba la joven no parecía escucharla.
Miro a Shaoran, pero este estaba en el mismo plan que Sakura, es más a Tomoyo le dio la sensación de que el muchacho estaba durmiendo…con los ojos abiertos. A saber lo que pasaba por la mente del castaño en aquellos momentos.
Giro su cabeza a la derecha en busca de su otro compañero, el tal Yamazaki. Este chico estaba peor que Li ¡Dormía en clase hasta con los ojos cerrados¡Aquello se pasaba de la raya¿Es que nadie le echaba cuenta al examen?
Solo quedaba su compañero de atrás.
Así que con cuidado de que no la viera el profesor, se giro hacia él. Un joven con el pelo azulado y ojos zafiros cubiertos por unas elegantes gafas, se encontraba con la mirada clavada en el examen. Al menos si que había una persona humana en aquella clase que si que se preocupaba por el examen.
Carraspeo un poco. Ahora que lo pensaba era la primera vez que lo veía, no había asistido a las dos primeras horas.
Vio como él si que tenía dos bolígrafos de repuesto sobre la mesa.
-Perdón- hablo todo lo bajito que podía- esto…se me acabo el boli… ¿me podrías prestar uno?
Observo como el joven lentamente iba alzando la vista hasta ella. El resultado fue que se vio atrapada por dos ojos azules fríos como dagas.
-¿Cómo dices?- le hablo el chico en un susurro estremecedor.
-Un bolígrafo…para escribir, es que se me acabo el mío y…
De repente vio como el joven ante ella se irguió en el asiento, en su mirada había reflejado una extraña diversión.
¿Qué le podría ser tan gracioso?
Y además dibujo en su rostro una maliciosa sonrisa. Antes de que Tomoyo reaccionara, aquel joven exclamó¡¡Profesor¡Daidouji esta copiando de mi examen!
Continuará.
¡Hola¿Qué tal estáis? Pues ya me veis a mí, aquí con otro ExT jejeje es que se me vino la idea y ¡pum! No podía aguantar…de veras lo siento, pero bueno, aquí la servidora siempre va a acabar sus fics, así que no preocuparse.
El fic de Mi Querido Hermanastro ya mismo subiré otro capitulo, y el de Sawn Lake pasado mañana estará listo el segundo capitulo.
Por favor decidme que tal esta el fic para continuarlo o borrarlo xD, besos a todas -
Basi O.o
