Es muy probable que pocas personas entiendan este fic si no han leído las dos especies de "precuelas": "Los GRANDES momentos de Draco Malfoy" y "Los otros GRANDES momentos de Draco Malfoy", pero en caso de no haberlos leído, no te preocupes, porque este fic no es una continuación de los OS mencionados. En caso de que te interese este fic pero quieras hacerte una idea de lo que va a pasar sin necesidad de leerte los fics mencionados, te haré un resumen: Draco Malfoy se ha casado con Hermione Granger y están muy enamorados, pero a pesar de toda la felicidad que siente hay algo que lo entorpece todo: Astoria Greengrass, su ex, que ahora es vegana, budista, ecológica y una fiel defensora de los derechos de los animales y que siempre consigue meterlo en líos.
Creé a esta Astoria como una nueva forma de divertirme, pero por alguna razón no me la quito de la cabeza desde entonces, estoy total y absolutamente enamorada de esta versión del personaje que he creado. Así que he decidido crear una serie de capítulos (mínimo siete, no sé si habrá más) aprovechando el reto basado en prompts del foro El mapa del mortífago (link directo en mi perfil!) para poder explotarla por completo. Sí, va a haber Dramione (muchísimo, de hecho, no lo puedo evitar), pero la innegable protagonista va a ser Astoria Greengrass.
Espero que lo disfrutéis.
PD: De ninguna forma esta es una burla a las personas que creen en todo lo que Astoria cree y defiende en esta historia. Sólo es una pequeña parodia, una forma de daros algo de voz pero, sobre todo, una forma de torturar a Draco y Hermione porque ellos, de una forma u otra, siempre van a acabar salpicados por las cosas de esta Astoria.
Harry Potter es obra de Jotaká Erre.
Este fic participa en el Reto "Slytherin y las verdades ocultas" del foro "El Mapa del Mortífago"
Ser vegana.
(y otras formas de destrozarle la vida a Draco y Hermione Malfoy)
I. Amortencia.
―Estoy total y absolutamente indignada.
Astoria, descalza y con el pelo recogido e infinidad de trenzas, aparece en la puerta de su despacho.
―A mí me indigna tu presencia, Astoria.
La castaña hace oídos sordos a sus palabras y se sienta en una de las sillas al estilo indio. Si la señora Greengrass la viera se sentiría horrorizada. ¿Cómo una jovencita con una educación y unos modales tan exquisitos puede sentar así en presencia de un hombre? ¡O de cualquier persona!
―Hoy he enviado al departamento de Control y Regulación de las Criaturas Mágicas una solicitud para que se empiece una campaña de protección para las ratas de doble cola azul.
Draco levanta la cabeza de sus archivos y la mira con una ceja alzada.
―¿Por qué quieres protegerlas?
―¡Porque uno de los componente de la Amortencia es una derivación del tejido de esos animales!
Draco frunce el ceño todavía más y niega brevemente con la cabeza.
―En absoluto. La Amortencia no lleva ningún componente animal. Lleva canela, unas cuantas hierbas que sólo pueden recogerse durante la luna llena, salvia de manzano, limón, el venenos de trece hongos diferentes y un componente a base de hierbas.
Astoria prefiere no admirarlo por todo lo que acaba de decir porque supone (espera) que todo lo que sabe es gracias a que está casado con Hermione Granger.
Perdón. Hermione Malfoy.
―Exacto. Componente de hierbas. ¿Sabes cómo consiguen que ese componente no se estropee?
―¿Con un hechizo conservador? ― pregunta él de forma retórica como si ella fuese estúpida.
―¡Pues no! ¡Se hace con un filtro que se consigue después de matar y torturar a esas pobres criaturas!
―Dudo que se torturen y maten.
―Bueno ― concede ella echándose para atrás en su asiento ― Puede que sólo les quiten algo de pelo para añadirlo a un filtro. ¡Pero aún así, es explotación animal!
―No, no lo es. No se daña al animal en ningún momento. Además, ¿para qué vienes a contármelo? A mi no me interesan tus estupideces, Astoria.
―Tú estás casado con Hermione.
―Lo estoy ― le dan ganas de vomitar sólo con escuchar el azucarado orgullo que resuena en la voz de su ex.
―Y estudió derecho, ¿verdad?
Draco se queda callado mirándola fijamente hasta que alza el brazo y la señala con un dedo amenazador.
―No.
Pero a Astoria eso le importa un pepino ecológico. Ella quiere salvar a las ratas de doble cola azul. Y lo va a conseguir con la ayuda de una de las mejores abogadas de toda la sociedad mágica.
ººº
―Bien. Veamos si lo he entendido... Quieres que recojamos firmas para que se establezca una norma con el fin de proteger a las ratas de doble cola azul para que no se utilice su pelaje a la hora de crear el filtro que conserva la mezcla de aceite de hierbas que se utiliza en la producción de Amortencia.
―Correcto.
Hermione se lleva las manos a la sien y resopla ruidosamente. Se levanta con cuidado y coloca una mano en la parte baja de su espalda para colocar bien su espalda. Quizás Draco tiene razón. Quizás debería dejar de trabajar ahora que está embarazada de siete meses.
La mujer se pone ligeramente de puntillas y agarra un tomo sin a penas mirarlo. Cuando vuelve a la mesa lo abre y vuelve a sentarse con todo el cuidado del mundo.
―Sinceramente no creo que podamos hacer gran cosa con tu caso, Astoria. Básicamente porque la Amortencia es una poción que sólo se permite usar en las aulas de enseñanza. Su uso es totalmente ilegal.
―Pero ese aceite de hierbas también se emplea en los filtros amorosos temporales y con efectos muy moderados.
Hermione entrecierra los ojos con cuidado y mira fijamente a la mujer que tiene delante.
―¿Estás segura?
Astoria saca de su minúsculo bolso de cáñamo un montón de papeles y los coloca todos ordenadamente sobre el pulcro escritorio de la embarazada.
―He estado investigando.
―¿Eres consciente de que la gran mayoría de la sociedad mágica va a pensar que esto es absurdo? Vamos, piénsalo: sólo cogen de dos a tres pelos del animal para crear el filtro que conserva permanentemente el aceite de hierbas, Astoria. No le hacemos daño al animal en ningún momento.
Astoria la mira fijamente durante un buen rato y recoge sus palabras sin mediar palabra.
―Tu eras una gran persona, Hermione. Luchaste por los elfos domésticos. Por que tuvieran un sueldo y derechos. ¡Y hasta ropa! Estar con Draco te ha quitado todos tus valores. Cuánto lo siento.
―¡Hey! ― ladra Hermione con los labios y el ceño fruncidos ― No he perdido mis valores, sólo te digo que esto podría llevar meses, años, o incluso no llevarse a cabo nunca!
―¡Los muggles han conseguido crear preservativos aptos para veganos!
―¡Pero si tú ni si quiera usas condones! ¡Usas pociones anticonceptivas!
―¡Tés anticonceptivos!
―Que no te protegen de nada y que tienen un margen de error del veintisiete porciento.
―Veintiséis y medio.
―Discutir contigo es exasperante, querida.
ººº
Seis semanas después (Domingo).
Hogar de Draco y Hermione Malfoy.
―Hace mucho tiempo que no te quejas de Astoria.
El rubio tuerce levemente los labios y le coloca la jarra de zumo de naranja cerca a Hermione cuando su mujer se sienta en su sitio habitual en la mesa de la cocina.
―Y espero que siga siendo así durante otras seis semanas. Seguramente se ha ido con sus amiguitos a algún retiro espiritual de esos que tanto le gustan para quejarse de la producción de filtros conservadores o alguna chorrada más.
―Creo que fuimos muy duros con ella... Entiendo que es un poco, um, absurdo luchar contra la producción de ese filtro conservante porque no se le hace daño al animal, pero es importante para ella.
―Hermione, te quiero, te respeto como mujer y como la madre mi heredero
―Heredera.
―... pero me niego a darle la razón a Astoria en otra de sus chorradas. Y va a ser varón. Los genes Malfoy siempre dan varones.
―Ya bueno, tengamos en cuenta que muy probablemente el matrimonio de tus padres y el nuestro sea el único de toda tu familia que no cuente con lazos endogámicos, así que muy probablemente rompamos con esa costumbre.
Draco frunce todavía más el ceño y abre la boca llena de huevos revueltos para decirle a su mujer lo que opina de su diatribas pero, de repente, llega el correo.
Se levanta y acoge las dos lechuzas que le traen el la correspondencia y las noticias frescas, recién salidas de la imprenta. Paga a cada animal y se da la vuelta. Le entrega a Hermione un montón de cartas para ella y se queda con su propio montoncito. Deja El Brujo Ecológico y El Profeta sobre la mesa y se dispone a seguir desayunando.
―¿Astoria...?
―¿Qué pasa? ¿Ha vuelto a mandar na postal desde China? Ojalá se pierda allí entre los monasterios y no vuelva a verla ― murmura él dándole un mordisco a su tostada de jalea ― Me ponfe de lof nerviof.
―No, no... Draco, mira... Astoria está en la portada de ambos periódicos...
Draco se atraganta con su tostada masticada nada más ver los periódicos que su mujer sostiene frente a él. Ambos periódicos cuentan con la misma foto (Astoria, desnuda, sujetando una caja llena de ratas de cola doble azul sobre su cabeza, gritando infinidad de cosas a los viandantes frente al Ministerio) pero con encabezados y artículos muy diferentes.
El Profeta
La joven Greengrass se vuelve loca y habla del derecho de las ratas a no ser explotadas.
Ayer por la tarde, durante la hora punta, la joven Astoria, hermana pequeña de la heredera de la familia Greengrass, Daphnee, ha sido detenida después de armar un escándalo descomunal en plena plaza del Ministerio.
La joven, completamente desnuda y con claros signos de no haber visitado un centro de estética para depilarse desde hace mucho tiempo, se instaló en pleno centro de la plaza del Ministerio con el fin de interpelar a los viadantes y trabajadores para hablarles de los derechos de los animales mágicos.
Varios testigos aseguran que la joven parecía drogada y que, además, se atrevió incluso a agredir a diferentes personalidades del gobierno cuando estos no le hacían caso.
Al parecer, y según una testigo que ha querido permanecer en el anonimato, la joven Greengrass, al darse cuenta de que con palabras no conseguiría nada, procedió a arrancarse la ropa para llamar la atención de todos y, así, poder gritarle al mundo sus deseos.
Luchó como una leona cuando el cuerpo de seguridad del Ministerio decidió pedirle que acabase de una buena vez con sus diatribas y que, por favor, se cubriese, pero la joven adoptó una actitud violenta y se negó, amenazando con hacer volar en pedazos el lugar.
Sin duda un escándalo bochornoso para la familia Greengrass.
―Rita Skeeter
El Brujo Ecológico
Astoria Greengrass vuelve a lucha por el derecho de las pobres criaturas indefensas explotadas por la producción de filtros conservadores.
Ayer por la tarde tuve la desgracia de ser testigo de una situación total de abuso por parte de las autoridades gubernamentales londinenses contra nuestra querida amiga Astoria Greengrass quien, como ya sabrán, es una de las principales accionistas de este periódico y a la que toda la producción y realización tenemos en estima.
Estoy segura de que sabrán que Astoria pertenece a una muy importante familia, pero al parecer ni si quiera eso es capaz de que protegerla de los abusos y la censura que pretenden no hacerse eco de sus sabias palabras.
El mes pasado publicamos un artículo completo sobre el por qué se deben erradicar los filtros de conservación, así que cuando les diga el motivo por el cual Astoria ha sido detenida (bajo los cargos de "escándalo público" "exhibicionismo" y "alteración del orden") estoy segura de que arderán de pura ira: Astoria se manifestaba en la plaza del Ministerio con el fin de pedir que se deje de comercializar este filtro de conservación que se produce con el pelaje de cientos de miles de ratas de doble cola azul.
Desde la redacción de El Brujo Ecológico le pedimos encarecidamente a Hermione Malfoy, de soltera Granger, heroína de guerra, amiga de Astoria y abogada, que por favor tome entre sus manos el caso de Astoria y nos ayude a salvarla a ella y a las ratas de doble cola azul.
―Meredith Porridge.
Draco abre más los ojos y mira fijamente a su mujer después de que haya terminado de leer ambos artículos.
―Recuerdame por qué estamos suscritos a ese periódico, Granger, porque no lo entiendo. Ni si quiera somos ecológicos.
―Reciclamos.
―Porque tu madre nos obliga.
―¡Es bueno hacerlo, Draco!
―Bueno, me da igual. Me niego a que defiendas a Astoria. Ella sola se ha metido en este lío y-
De repente cuatro lechuzas llaman a la vez en la ventana de la cocina. Draco resopla y abre la ventana para recoger la correspondencias. Todas ellas llevan el nombre de su mujer menos una, que es para él.
Hermione se limpia los labios con su servilleta y recoge las tres cartas que le entrega Draco.
Señora Malfoy,
le rogamos encarecidamente que saque a nuestra escandalosa hija del cuartel de aurores.
―Jeremy y Marie Greengrass.
Hermione,
mamá y papá van a enviarte una carta para pedirte que me saques de aquí. No lo hagas, estoy luchando por lo que creOH DIOS MÍO ACABO DE VER PASAR UNA CUCARACHA, TIENES QUE SACARME DE AQUÍ.
Granger,
por lo que más quieras, deja que mi hermana se pudra en la cárcel. Necesito unas vacaciones.
―Daphnee.
―¿Qué dice tu carta, Draco?
Ella observa a su marido murmurar un sinfín de palabrotas mientras mete cincuenta galeones en un sobre. Ella frunce el ceño y coge la notita que ha recibido tu marido.
¿De verdad creíste que Astoria estaría alejada de las rejas más de tres meses después de la que armó en el desfile de moda anual de Madame Malikn? Pobre iluso... Espero mis cincuenta galeones en las próximas 24 horas, pringado.
―Blaise.
―Draco, te he dicho mil veces que dejes de apostar sobre la vida de Astoria, nos vas a arruinar.