La fria brisa ondeaba su cabello plateado, la luna siendo testigo de la prescencia de aquel peculiar grupo, una pequeña niña humana de cabellos oscuros y ojos castaños, un yokai rana con un Baculo de dos cabezas, un yokai dragon de dos cabezas, y un hermoso e imponente yokai peliplateado, de ojos dorados, tez blanca, en su rostro se encuentran dos franjas, una azul y la otra violeta, y una media luna color azul. En sus hombros poseía una estola decorándolos.

Rin: Amo Sesshomaru, ¿Puede ir Rin por algo de comer? "preguntó la pequeña niña"

Jaken: No molestes al amo Sesshomaru Rin "espetó serio"

Rin: Pero tengo hambre!

Jaken: Mocosa impertinente, eres débil por eso no puedes seguirnos al amo y a mí, también a Ah Un "con aires altaneros" Eres una carga!

Rin se detuvo abrúptamente, mirando con tristeza y miedo a la vez a Sesshomaru. El aludido fulminó con su mirada a Jaken, quien tembló. "Misteriosamente" una piedra cayó en la cabeza del yokai rana.

Rin: Señor Sesshomaru, ¿Rin es una carga para usted?

Sesshomaru: …... Rin

Rin: ¿Si?

Sesshomaru: Haz lo que quieras

Rin: Siiiii!

Esa frase claramente la había invitado a cumplir sus deseos, si quedarse del lado de su amo o ya no.

Jaken podía notar, algo muy extraño por cierto, el nerviosismo de su amo. Siempre era un yokai con un semblante frio, pero ahora parecia con... ¿Temor?

Jaken: Amo Sesshomaru, ¿Se encuentra todo bien? "preguntó"

Sesshomaru: …...-

Jaken: ¿Amo?

Sesshomaru: Llevate a Rin lejos "ordenó con una voz fria"

Jaken: ¿Qué? ¿Por qué amo?

Sesshomaru: Hazlo o te mataré!

La rana tembló pero obedeció.

Rin: ¿Volvera pronto? Amo Sesshomaru "preguntó con tristeza"

Sesshomaru: Si

Jaken subió a Rin en Ah Un, dándole una ultima mirada preocupada a su amo. Sin más que decir se perdió en la oscuridad de la noche, junto con el dragón y la niña.

En cuanto a Sesshomaru, el puso su mirada estoica y escrutó lentamente todo sus alrededores.

Sesshomaru: Deja de esconderte "ordenó al aire"

Se escucharon unas risas que reconocía muy bien, se heló y se desconcertó a la vez. ¿Cómo podía seguir él vivo?

¿?: Jajaja pero si tenía que ser Sesshomaru Taisho. Buenas noches jeje

El yokai hizo su aparición desde detras de los árboles, aquella figura termino de convercerlo, si ,no cabía duda. Aquel cabello morado hasta la cintura, sus ojos verdes y llenos de maldad, su tez un tanto oscura, aquellas escamas rojas en sus manos... era él.

Sesshomaru: Ryukotsusei! "bramó con rabia"

Ryukotsusei: Vaya vaya, pero si el cachorro inu me recuerda "completamente divertido y dramatizando"

Sesshomaru: ¿Cómo es que estas vivo? Si Inuyasha te destruyo con Bakuryuha!

Ryukotsusei: ¿Aquel estupido hibrido? See, pudo haberme destruido pero... ¿Siempre existe algun metodo para volver? "preguntó cínico"

Sesshomaru: Maldito "gruñó"

El volver a ver a ese hombre le traia recuerdos dolorosos que no queria volver a pensar. La imagen de su amado, o más bien de su amor no correspondido.

Padre

Sesshomaru: ¿Cómo es que estas vivo? Y peor aun, ¿Qué quieres?

Ryukotsusei: Oh vaya, al parecer no te alegras de verme. A caso, si fuera el maldito de Inu No Taisho, ¿Estarías más feliz? "riéndose"

Sesshomaru apretó los puños con impotencia, odiaba que se burlaran de él, más aun de sus sentimientos, los que tanto intentaba ocultar. Aquel estupido amor que tenía por su padre, si amor. Le habia dolido cuando habia sido rechazado, cómo si el dolor quemara a travez de sus venas y un nudo se instalara en su garganta, estableciendo su residencia en esta. Más aun al recordar la burla de su padre, enamorarse de una persona y que esta no te corresponda... más aun que te trate como de idiota y en tu cara se revolcase con una humana, que tiempo despues dió a luz a un hanyou. ENCIMA SU PADRE HABÍA DADO SU VIDA POR SALVARLOS!.

Ryukotsusei: Te quedastes sin palabras, debo admitir que Inu No Taisho si fue cruel aquella vez...

Sesshomaru gruñó de impaciencia. El dragón sonreía abiertamente, de manera burlona y superior.

Ryukotsusei: Oh cariño vamos, de seguro estaras feliz de verlo de nuevo...uh oh, ¿Estaras feliz o simplemente te sentiras... ¿triste o nostalgico? Jaja patético

Sesshomaru: ¿A qué has venido? "a punto de perder el control sobre si mismo"

Ryukotsusei: A ofrecerte un trato "poniéndose serio"

Sesshomaru: ¿Trato? "incrédulo"

Ryukotsusei: Un juego, los kamis han decidido realizar un juego entre los dos yokais considerados mas fuertes en la historia, yo e Inu No Taisho, consiste en enfrentar nuevamente a nuestras fuerzas... el que gane volvera a la vida, es por eso que quiero que estes de mi lado

La quijada de Sesshomaru estaba por el suelo, aquello parecia una simple broma, pero estaba ahí, Ryukotsusei, el segundo yokais considerado mas poderoso proponiéndole una ¿alianza?

Sesshomaru: Jump, ¿Por qué estaría de tu lado?

Ryukotsusei: ¿Estarías nuevamente del lado de él acaso? Vaya, que idiota, Inu No Taisho de seguro te usara para ganar, y tu mejor que nadie lo sabe, el te humilló despues de todo

Sesshomaru: "dolido, pero sabiendo que esas palabras eran ciertas", Grrr, yo no tengo porque ayudar a ninguno, me enfocare en matar a Naraku, no tengo necesidad de meterme en la pelea de dos idiotas!

Se reprendía mentalmente por no poder controlarse correctamente, pero el odio y dolor que pensó que había enterrado estaba volviendo, y eso lo enfurecía.

Ryukotsusei: Jajaja vaya, el gran Sesshomaru ignorando una épica batalla asi por pelear con un hibrido

Sesshomaru: No me importa cual de ustedes reviva, por mi quédensen ambos en el infierno!

Ryukotsusei: Bueno venía por eso, para decirte que ganare, y que quiero que seamos aliados, no enemigos. Tú cómo Lord del Oeste deberas pensar con la cabeza fría, esperare tu decisión en el palacio del Norte, mi región. Te espero.

Una ráfaga de veneno rodeó al dragon, Sesshomaru lo vio alejarse. El corazón del peliplateado estaba en su propia mano, ¿Qué hacer? ¿Estrujarlo luchando para su padre, recordando todo aquello y sintiendo cerca suyo a aquel amor imposible? ¿O simplemente congelarlo luchando contra su padre, del lado de Ryukotsusei?

Cayó de rodillas, sintiéndose patético y con mucho dolor latente en su pecho. Si el dragón ya se encontraba allí significaba que Inu No Taisho también. Un escalofrio de espanto le recorrió la espalda, aquella voces resonando en su cabeza, torturándolo nuevamente.

RECUERDO DE SESSHOMARU: Pov. narradora

Se encontraba muy nervioso, sus manos temblaban al pensar aquello. Ese día al fin había decidido confesarle sus sentimientos a su padre, los cuales reprimía dentro suyo desde hace años. Siempre lo había amado, su cabellera plateada atada en una coleta alta, sus hipnotizantes ojos dorados, su tez bronceada, todo de él.

Calmándose un poco dió unos suaves golpes en la puerta de la oficina de Inu No Taisho. Al escucharse un "pase" obedeció al instante. Al entrar y cerrar la puerta lo vio sentado detras de su escritorio, leyendo unos pergaminos.

Inu No Taisho: Sesshomaru, ¿Qué ocurre? "sin levantar la vista de su lectura"

Incluso escuchar su voz le hacía nervioso, reuniendo todo el valor que pudo le dijo.

Sesshomaru: Padre, yo... yo hace tiempo que quería decirte esto... es que...

No sabía cómo decirlo, realmente era vergonzoso y nunca lo había hecho. El padre levantó la mirada y lo miró molesto, cosa que resulto extraño para el cachorro aunque a la vez lo intimidaba.

Inu No Taisho: ¿Por qué titubeas? Un príncipe Inu y mucho menos mi hijo puede mostrar tal debilidad! "exclamó con el ceño fruncido"

Sesshomaru: Lo siento padre, yo sólo quería decirte que... ese hace tiempo, me gustas, yo... te amo

Se mordió el labio inferior nervioso de lo que pudiese estar pensando su padre, quien había quedado en shock y sus ojos estaban abiertos más de lo normal.

Pasaron unos dos o tres minutos en silencio incomodo, Inu No Taisho no reaccionaba y eso le asustaba. Reprimió un quejido cuando su padre se levantó y lo abofeteó duramente, haciendo que su labio sangrase un poco. Angustiado cuestionó.

Sesshomaru: ¿Padre? "con un hilo de voz"

Inu No Taisho: ¿ERES IDIOTA O QUÉ? Dime que oí mal y realmente no estabas diciendo que te sientes atraido por un hombre "mirándolo con asco" y más conmigo, TU PADRE! Eres un insolente con solo pensarlo, yo nunca haría incesto y menos con un hombre. "lo tomó fuertemente de la cabellera, haciéndole quejarse" Me das asco, no puedo creerlo de ti, pense que realmente podría considerarte un hijo, sigue pensando cosas asi y realmente no te reconocere... "hizo una pausa" DESAPARECE YA DE MI VISTA, NO ERES DIGNO SIQUIERA DE ESTAR EN ESTE PALACIO, Y MUCHO MENOS DEL PUESTO DE PRÍNCIPE QUE CARGA A TUS ESPALDAS, NO QUIERO VERTE EN UN TIEMPO, HAZ LO QUE QUIERAS, FOLLA CON CUALQUIER HOMBRE PERO NO QUIERO SENTIR TU AROMA POR AQUÍ HASTA QUE SE TE PASE LA ESTUPIDES! Y a mi la repulsión que siento por esto.

Antes de liberar sus cabellos plateados volvió a abofetearlo para enfatizar su punto. Las lágrimas estaban formadas ya en los ojos de Sesshomaru, pero este muy herido y sintiendo su corazón partido en mil pedazos se negaba a dejarlas correr por sus perfectas mejillas. Escuchar directamente de la boca de Inu No Taisho que no lo amaba, más aun, lo aborrecia, le dolía muchisimo, y las ganas de llorar y gritar eran muy fuertes.

Inu No Taisho lo aventó al suelo.

Inu No Taisho: Incluso si yo fuera gay no me atrevería a tocarte, eres un ser repugnante, igual a tu madre, se creen la gran cosa cuando en realidad no son absolutamente nada, solo idiotas arrogantes protegidos detras de un ejército. ¿Qué es lo que te hizo pensar que te respondería que me gustabas?

Para ese momento las lágrimas ya no habían sido contenidas por Sesshomaru, sentía tanto dolor interno que simplemente quería morir. Aquellas palabras le dolían tanto, comparado con dolor físico, que mutilen cada parte de tu cuerpo se acercaba a solo un diez por ciento del dolor que sintió en el alma.

Inu No Taisho: Encima lloras! Estas humillándote más aun de lo que lo has hecho, me has decepcionado mucho con esto, por lo menos pensé que podría recibir cachorros de tu parte, pero al parecer prefieres estar con un hombre... debería darte vergüenza tus acciones y pensamientos. Vete de aquí y no vuelvas hasta que cambies de parecer! Eres sólo un niño infantil que no merece mi piedad ni la de nadie!

Lo tomó del cuello, estampándolo contra una pared, mirándolo ahora con una sonrisa burlona en sus facciones.

Inu No Taisho: Asi que te gustan los hombres, ¿A caso te gusta el sabor de un miembro en tu boca o dentro de ti? ¿Se siente bien, eh Sesshomaru, sentir un pene entrando en tu interior? eres patético!

Escuchar directamente de la boca de Inu No Taisho que no lo amaba, mas aun, lo aborrecía, le dolía muchísimo, y las ganas de llorar y gritar eran muy fuertes. Más el escuchar todas esas burlas.

Sesshomaru no podía creer que su padre se estuviese burlando de sus sentimientos, diciendo tales cosas.

Inu No Taisho: Sabes, allí fuera existen muchos mas hombres a los que puedes pedirle que te hagan eso, total, no tienes siquiera dignidad. Y ahora vete, no quiero verte.

Finalizando sus palabras tomó de los cabellos nuevamente a su hijo, arrastrándolo hasta la puerta, para luego lanzarlo fuera. Sabía que aquella "conversación" la habría escuchado toda la servidumbre,y no se extrañó, apenas tres días despues, aquellas palabras esparcidas por todas las regiones.

FIN DE RECUERDOS

El recuerdo de aquella tarde había convertido de sus mejillas caudales, sus cálidas lágrimas se derramaban hasta incluso empapar sus prendas y manos. El peor día de su vida, ni hablar. Parecían espinas de rosas clavársele en la piel, lo duro que había sido con él. Desde ese día su relación había cambiado, Sesshomaru había huido de casa por 5 meses completos, hasta que a sus oidos llegaron los rumores de la amante humana de su padre, y del hijo hanyou bastardo que esta esperaba, la humana y su padre habían sido amantes desde antes de su confesión. Cuando había llegado al norte de su región, donde una inmensa playa lo caracterizaba, lo había encontrado, con una herida que dañaba a su corazón. La preocupación, dolor y rabia hacía él nuevamente le hicieron aquella vez apretar los puños.

RECUERDO DE SESSHOMARU: Pov. narrador

Sus garras desgarraban la piel de su mano, algunas pequeñas gotas de sangre caían lentamente. Inu No Taisho se había percatado de su prescencia y lo sabía.

Inu No Taisho: Sesshomaru...volvistes

Sesshomaru: ¿Insistes en ir, Inu No Taisho?

La herida era aun muy dolorosa como para llamarlo "padre", simplemente el recordar sus burlas y rechazo amenazaban ante hacerlo sucumbir con el dolor nuevamente.

A sus oidos tambien había llegado la batalla contra su peor enemigo, Ryukotsusei, y el hecho de que el nacimiento del bastardo sería ese día.

Inu No Taisho: ¿Me detendras?

Sesshomaru: Esta en ti tomar la desición, si prefieres morir por una humana y un hanyou no puedo detenerte. Y tampoco quiero hacerlo.

Inu No Taisho: Ya veo, y si, ire por ellos. Tu seras el nuevo Lord de la región, despues de todo

La voz de ambos yokais era estoica, al igual que sus rostros.

Sesshomaru: Jump, pensé que era poco digno para serlo "con sarcasmo" Por lo menos mi dignidad abarca el hecho de que no me atrevo a reproducirme con un despreciable humano ¿No es asi?

Inu No Taisho: Digno o no digno son tus responsabilidades

Sesshomaru: Entonces entregame a Colmillo de Acero, para seguir el camino hacia el poder, cómo seria digno de un yokai de mi posición "escupió sin piedad"

Inu No Taisho: ¿Camino de poder? Dime, ¿Tienes alguien a quien proteger?

Estaba incredulo, Sesshomaru sentía sus venas ardir de rabia y dolor.

Sesshomaru: ¿Alguien a quien proteger? Para mí, Sesshomaru, eso es totalmente innecesario!

No había mas palabras por decir, Sesshomaru observó a su padre transformarse y salir de allí, directo a su muerte. Ver a su persona amada recorrer el camino a su muerte le dolió tanto que unas nuevas lagrimas formaron camino en sus paálidas mejillas. Su padre no lo amaba, sólo lo consideraba un heredero y nada más, todo lo contrario a él. Lo había humillado y rechazado, y aun asi... seguia amándolo.

FIN DE RECUERDO

Sesshomaru: Padre...

Por otra parte...

Kagome: ABAJOOO! "Se escuchó el grito de la sacerdotiza de cabellos castaños"

Un hanyou de cabellos plateados, hermosos ojos dorados, orejitas tiernas de perro y un kimono rojo hecho de ratas de fuego, fue azotado duramente contra el suelo.

Inuyasha: ¿Por queeeeé? "preguntó desde el suelo"

Sango: Siempre desprecias la comida de mi amiga, nunca cambiaras!

La bella exterminadora de piel blanca, cabellos negros y ojos marrones espetó, viendo molesta al hanyou, aunque por dentro se divertía mucho con esas escenas.

Inuyasha: Feh!

Miroku: Ten un poco mas de consideración Inuyasha

El monje de ojos azules y una maldición en su mano dijo, mientras tocaba el trasero de Sango.

Plaf.

Shippo: Son mala influecia para mí "dijo el zorrito de ojos y cabellos claros"

Kagome: Eres un tonto Inuyasha!

La sacerdotiza salió corriendo adentrándose al bosque, ignorando el pedido de Sango, Miroku y Shippo para que regresara. Unas lágrimas se formaron en sus ojos, no por el simple hecho de el desprecio Inuyasha hacia su comida, sino por que de una u otra forma siempre lograba compararla con esa maldita de Kikyo. Sabia que ella la superaba en fuerza, belleza y demás (escritora: a mi parecer, es mentira ^^), pero no soportaba que la persona que amaba estuviese siempre comparándola.

Corría con sus ojos cerrados, aun asi con la oscuridad de la noche no podría ver mucho, pero peor es nada. Gritó cuando de repente el suelo no estaba más y caía a travez de un precipicio. Cerró los ojos herméticamente esperando el impacto, pero nunca llegó. Todo lo contrario, su cuerpo chocó contra algo comodo y blanco, al abrir los ojos se percató de que esta sobre una gran cosa blanca, estilo lo que Sesshomaru llevaba en el hombro. Luego de que no estaban en tierra firme sino volando. ¿Sesshomaru? Se pregunto a si misma.

Kagome: ¿Sesshomaru? "preguntó, confundiéndose por la cabellera plateada y el kimono, sin poder verle el rostro a su ¿salvador?

Cuando el hombre la miró ella pudo notar el desconcierto en mirada, y confirmó efectivamente que ese hombre no era Sesshomaru, aunque si muy parecido a Inuyasha y compartía carácteristicas con el primero.

¿?: ¿Conoces a mi hijo, Sesshomaru?