Disclaimer: Kingdom Hearts no me pertenece, es de Square Enix.
Los personajes pertenecen a Tetsuya Nomura. Y los OC de mi creación.

Lo unico que es mio es la historia.
Espero que les guste. :)


Memorie Drawn

Capitulo 1

Malos Inicios


Creo que mi vida termino, en el momento en que murió mi hermana mayor.

- ¡Pero es lo que quiero hacer! - Reclama una joven rubia de 17 años

- No es lo que quieres hacer, es lo que Olette va a hacer, Naminé – Respondía la madre tratando de explicar a su obstinada hija.

Naminé Yuste. Desde que decidió no irse a estudiar Ciencias Marinas en Atlantica alegro enormemente a sus padres, pero la desilusión llego cuando les comunico que iría a la ciudad vecina a estudiar Diseño, entonces empezaron los meses difíciles. Y más cuando se enteraron que Olette Hirasawa, la mejor amiga de Naminé, también estudiaría ahí.

- El hecho de que Olette también vaya a esa universidad no quiere decir que solo vaya a seguirla. Me interesa esa carrera.

- Pero no es una carrera reconocida, Naminé - Razono la madre, pensando en el futuro de su hija – Que tal si tomaras un año sabático, o estudiaras Nutriología o Ciencias Marinas, siempre te habían interesado

- Antes – Reconoció Naminé – Pero ahora me interesa esto, por favor, dame la oportunidad – Rogo a su madre

- No, Naminé – Declaro firmemente – Tendrás que pensar mejor tu decisión, o terminare decidiendo por ti. Ahora ve a tu cuarto, no tarda en llegar tu hermano.

Naminé subió lentamente hacia su recamara, los ojos se le empezaban a humedecer. Siempre era la misma discusión, pero era la primera vez que la amenazaba tan abiertamente. Llego a su cuarto y se dejo caer pesadamente en la cama.

- ¿Por qué no me da la oportunidad? – Se preguntaba en voz alta observando el techo – Si tan solo me dejara intentarlo…

- Terminaras desmostándole que hiciste una buena elección – Completo una voz desde la puerta, se trataba de un joven pelirrojo de 27 años, el medio hermano de Naminé

- Axel, ¿Qué tanto escuchaste? – Pregunto la joven incorporándose un poco

- Lo suficiente – Contesto Axel acercándose a su hermana - ¿No crees que deberías hacer caso a mama?

- ¿¡Tu también Axel! – Exclamo Naminé sintiéndose traicionada - ¿¡Pensé que me apoyarías! – Se sentó apropiadamente en la cama

- Te apoyo, Naminé. ¿Pero quisiera saber porque cambiaste de decisión? – Cuestiono sentándose a un lado

- ¿A que te refieres?

- Hace un año estabas totalmente entusiasmada con la idea de estudiar Ciencias Marinas y mudarte a Atlantica. Ahora quieres estudiar Diseño, cuando nunca antes te viste interesada

- Las personas cambian, Axel. Yo cambie… – Contesto Naminé desviando la mirada

- ¿No me piensas contar, verdad? – Cuestiono Axel mirándola afligido – Esta bien, mañana tratare de hablar con mama, quizás la convenza.

- ¡Gracias, Axel! – Exclamo contenta abrazando a su hermano

- De nada – Dijo correspondiendo el abrazo – Voy a comer, me acompañas

- No, acabo de comer – Mintió Naminé, la verdad es que no quería encontrarse con su madre, Axel al parecer lo entendió porque le sonrió.

Estaba por salir cuando algo llamo su atención, se acerco al escritorio y encontró uno de los tantos dibujos de Naminé, lo curioso de este es que estaba sin terminar y ella siempre los terminaba.

- ¿Y esto? – Pregunto Axel enseñándole la hoja a Naminé - ¿Hace cuanto que lo empezaste?

- Hace algunos meses, he estado ocupada y no he podido acabarlo – Contesto sin mirar a Axel o el dibujo, estaba entretenida con un libro. Axel sin decir nada se acerco a Naminé, le acaricio la cabeza y la miro con ternura. La joven se extraño por el comportamiento de su hermano mayor, pero no dijo nada.

- Esfuérzate más, enana – Término de decir mientras salía de la habitación

- Si – Murmuro Naminé, fue directamente al escritorio y tomo el dibujo que había visto Axel, aun no tenía los detalles bien definidos, las personas no tenían rostro y solo de mirarlo le daba una profunda pena.

Era el retrato de sus hermanos, Axel, ella y su hermana mayor Xion. Xion había muerto hace 6 meses, tenía 29 años, para Naminé había sido una enorme conmoción, no solo porque era su hermana, sino también porque era la persona que más queria. Desde entonces no había vuelto a dibujar.

Sostuvo el dibujo un momento, aun sentía que no podía acabarlo, aun era muy pronto, los ojos se le humedecieron, amenazando con llorar. Negó con la cabeza, frotándose con rudeza los ojos, prometió que nunca lloraría y eso haría. Dejo el dibujo en el escritorio y fue directo a la cama, se tapo completamente con la sabanas, mientras reprimía las lagrimas que añoraban el pasado feliz, junto a su hermana.

Aun ahora… aun espero…

Naminé se encontraba sentada viendo el cielo por la ventana más próxima, estaba en el Instituto sin tomar atención a las clases, lucia el uniforme, el cual consistía en una camisa blanca de manga corta con corbata y falda escocesa color azul. Naminé miraba con detenimiento el cielo pero sin prestarle atención, se sentía perdida y no sabía que hacer.

- ¡Buenos días, Nami-chan! – Saludaba animadamente una joven castaña sacando a Naminé de sus pensamientos, esta sonrió levemente. Olette Hirasawa había sido transferida desde otra ciudad al principio de año y había quedado en el mismo grupo de Naminé, en el Departamento de Estudios Generales. Aunque ambas eran completamente diferentes se hicieron amigas cercanas. Naminé estaba feliz de tener a Olette cerca, aunque nunca tuvo el valor de comentarle lo de su hermana – Hiciste los deberes de matemáticas, yo aun no los comprendo del todo – Le comento mientras revisaba su bolso y sacaba una libreta – No entiendo al viejo ese, porque nos pone teorías tan difíciles – Le paso la libreta a Naminé y tomo asiento en la mesa cercana.

- Si dejaras de complicarte estoy segura que las entenderías, no son tan difíciles, sabes – Contesto tomando un bolígrafo y corrigiendo los problemas de Olette

- Luego me los explicaras – Dijo Olette, Naminé solo le sonrió - ¿Cómo van las cosas en tu casa? ¿Ya sacaron la ficha para la universidad?

- Sin progresos – Admitió la rubia negando con la cabeza - ¿Y tu?

- Fui con mis padres en la mañana, por eso he llegado tarde.

- Te hubieras tomado el dia, solo faltan dos clases para terminar – Comento regresándole la libreta

- Créeme que queria eso – Confeso Olette tumbándose en la mesa – Pero mi madre no me ha dejado, me trajo casi a rastras

- Buenos días, jóvenes – Saludo el profesor entrando a la clase, después observo su reloj de muñeca – O quizás sean buenas tardes

- El viejo… – Le susurro Olette a Naminé mientras se escondía en su asiento

- Señorita Hirasawa, me complace ver que ha venido a mi clase, si es tan amable – Le corto el profesor mientras extendía una mano indicándole que pasara al frente – Por favor, denos las respuestas de los problemas de ayer, sin ayuda de la señorita Yuste – Dijo señalando a Naminé. Olette bufo yendo al frente, maldiciendo por dentro. Naminé sonrió.

- Maldito viejo, porque solo me pasaba a mí al frente – Se quejaba Olette yendo con Naminé a la salida. Las clases habían terminado sin problemas, excepto por el hecho de que Olette tenía varios puntos negativos en matemáticas, principalmente por copiar a Naminé y por quejarse – Había otras 30 personas en la clase, porque solo a mí.

- Quizás está enamorado de ti – Bromeo Naminé ganándose una mirada asesina por parte de Olette – De acuerdo, lo siento, pésima broma. Es para que mejores en sus clases, solo trata de ayudarte

- Pero no es necesario que me pase al frente – Naminé solo suspiro – Oye Nami, ese chico te esta mirando – Naminé volteo hacia donde indicaba Olette y se encontró con Axel sonriéndole.

- Axel, ¿Qué haces aquí? – Pregunto acercándose seguida de Olette

- Vine a recogerte – Contesto simplemente - ¿Y ella es? – Pregunto señalando a Olette

- Me llamo Olette Hirasawa, tomamos algunas clases juntas – Contesto extendiendo una mano hacia Axel

- Axel Flynn, hermano de Naminé – Correspondió el saludo

- No tienen el mismo apellido – Comento Olette mirando a Naminé

- Somos medios hermanos – Respondió rápido Axel – Por parte de madre

- Ya veo, entonces tendrán cosas que hacer. Nos vemos mañana Nami-chan – Se despidió alegremente la castaña dejando solos a los hermanos

- Con que ella es la famosa Olette, no esperaba menos de ti, hermanita

- Cállate, Axel – Ordeno Naminé - ¿A que has venido?

- Ya te lo dije, he venido a recogerte – Naminé lo miro incrédula – También tengo noticias

- ¿Qué noticias?

- He hablado con mama, me pidió que te acompañara mañana a la universidad por la ficha. Al parecer te dará una oportunidad.

- ¡De lujo! – Exclamo emocionada Naminé

- Si, pero solo tendrás esta oportunidad, sino pasas el examen de acceso; harás un año sabático y al siguiente estudiaras lo que ella decida – Le advirtió Axel caminando junto a ella

- No importa, mientras haya una oportunidad – Comento muy segura de si

- Entonces será mejor que te prepares – Aconsejo Axel revolviéndole el cabello a Naminé

Al llegar, madre los esperaba a ambos en la sala.

- Naminé, Axel. Podrían venir un minuto – Les pregunto en cuanto los vio subir hacia sus cuartos.

- ¿Qué sucede? – Pregunto Naminé tomando asiento enfrente de ella, a lado de Axel

- Axel ya te comunico mi decisión, verdad – Naminé asintió – También que será una única oportunidad – Volvió a asentir – Espero que entiendas que esta decisión es muy difícil de aceptar para mí – La madre suspiro cogiendo aire – Tu padre hablo, quiere platicar contigo mañana.

- ¿Dijo sobre que? – Cuestiono Naminé a su madre

- No, te espera mañana en el café de siempre. A la misma hora

- De acuerdo, gracias.

- Me podrías dejar a solas con tu hermano, necesito preguntarle algunas cosas – Naminé se extraño por la petición, vio a Axel pero no le dijo nada. Sin perder tiempo salió de la sala hacia su cuarto.

- ¿Qué le dijiste exactamente a Naminé? – Cuestiono la madre a Axel, una vez Naminé hubo salido de la habitación

- Lo que me dijiste, mama

- Y respecto a tu decisión – Axel bajo la mirada

- No creo que sea necesario que lo sepa todavía, después de que entre a la universidad se lo diré – Respondió mirando por la ventana

- Pareces muy seguro de que entrara – Comento escéptica la madre

- Yo no estoy seguro – Admitió el joven mirando fijamente a su madre – Pero Naminé, si

- Ay, esa niña – Se lamentaba la madre con una mano en la sien – Hay veces en las que me pregunto que piensa

- Piensa en lo que le hace feliz – Reconoció Axel tumbándose en el sofá – Igual que lo hacia Xion

- Y Naminé, ¿Cómo está tomando lo de Xion? – Pregunto la madre cohibida

- Si tanto te interesa, pregúntale tu – Le respondió fríamente parándose del sofá yendo hacia la cocina

- ¿También lo has notado verdad, Axel? – Le pregunto madre antes de que abandonara la habitación – Naminé ya no me dice "mama"

- Si

Axel salió hacia la cocina, mientras la madre se cubría los ojos y un par de lágrimas salían de estos.

Desde la conversación con su madre, Naminé se había quedado dormida. Axel entro, con un plato en mano, viendo a su pequeña hermana completamente dormida, abrazando uno de los peluches que le había regalado Xion. Solo sonrió al verla así.

- Enana, despierta, hora de cenar – Dijo Axel dejando el plato sobre la pequeña mesa de café – Naminé, la cena – Volvió a decir esta vez sentándose en la cama junto a la joven y moviéndola un poco

- No tengo hambre – Murmuro esta aun dormida

- Tienes que comer, ayer no cenaste y hoy no has comido. Te puedes enfermar – Insistió moviéndola aun más

- Ok. Ya desperté – Murmuro tallándose los ojos – ¿Que es?

- Emparedados – Le mostro el plato – También hice algunas crepas, las deje en la cocina. ¿Quieres algunas?

- ¿Podrías traer algo de tomar?

- ¿Limonada?

- Si, gracias – Agradeció Naminé sentándose en el piso, junto a la mesa de café. Estuvo comiendo por unos minutos, mientras llego Axel con otra bandeja.

- Gracias – Volvió a agradecer agarrando una de las crepas - ¿Oye de que tanto hablaron allá abajo?

- Nada importante – Le contesto Axel sentándose junto a ella, Naminé comprendió que no debía preguntar más

- ¿A que hora nos iremos a la universidad? – Pregunto cambiando el tema

- La ciudad está algo lejos, nos iremos temprano. Así llegaras a tiempo a la cita con tu padre – Comento Axel revisando su reloj

- Es cierto, tengo que ver a papá – Comento decaída Naminé

- ¿No quieres verlo?

- Quiero verlo, hace mucho que no tenía noticias de él – Explica la joven mientras dibujaba círculos imaginarios en el aire con sus dedos – Pero ya no recuerdo como me comporto con el

- Solo se tu misma - Decía Axel acariciando suavemente la cabeza de Naminé – Será mejor que te acuestes, mañana será un dia muy largo – Se despidió depositando un beso en la frente a su hermana y saliendo de la habitación

- Pero… tampoco recuerdo como era yo… - Murmuro Naminé mirando al vacio abrazando con fuerza al peluche de Xion.


Primer capitulo, de esta historia que tenia desde hace meses. ¿Que les parece?

- Cualquier comentario que quieran dejarme, denle al globito amarillo de abajo... dejame un review, harás feliz a la autora :) -

¡Hasta Pronto!