Hola~ ^^
Aquí os traigo el fic regalo de Foro de Mortal Kombat: Who's Next?
La persona a la que le entrego este fic con mucho cariño es Hakendo Mitsuronairi, espero que te gu'te :3
Pero he de decir… que me costó mucho visualizarlo por los personajes en si y el que no soy muy navideña me preocupaba pero ahora está bien.
Aviso de que es un universo alterno donde:
- Nadie murió
-Edenia está separada del Outworld y lo gobierna Kitana y Mileena en Otworld.
-Sub-Zero fue robot.
Y nada, simplemente quiero desearos una FELIZ NAVIDAD :D
DISCLAIMER: Mortal Kombat no me pertenece. Solo mis OC's.
CAPÍTULO 1 (RECURDOS DE CUANDO TE DETESTABA).
—Déjame beber en paz, a ver si me ahogo en la bebida definitivamente—, dijo con voz ronca y casi inentendible un hombre de unos treinta y algo años con gafas de sol, que a juzgar por la frase estaba tan borracho como el Demoman de TF2... pero sin tanta soltura ni clase, obviamente.
—Pues con más razón me quedo. Por muy gracioso que pareciese el verte borracho, pasó a lo preocupante y degradante por el décimo trago Johnny—, expresó molesto pero preocupado un hombre de misma edad con un traje del SWAT, que internamente daba gracias el que no hubiera ni un solo alma en el bar a excepción de siempre irremplazable barman silencioso y a su vida.
En ese momento el miembro de la unidad de élite fue sacado de sus pensamientos por un golpe sonoro por parte de su borracho "amigo" en la barra de madera de pino a dos manos. Este luego soltó un suspiro casi forzado que dejó un tufo a chupitos de alcohol que un poco más y tira al suelo al otro de lo fuerte que era.
—Pues mira, si tan cómico te pareció eso Stryker, podrías haber sido listo y grabarlo; tendrías visitas a mogollón—, volvió a hablar Cage sonriendo de manera doloroso haciendo énfasis en la última palabra moviendo los brazos como un loco. Pero se calmó y añadió: —Además… la gente se parte la caja con el sufrimiento ajeno… especialmente el mío.
La última sentencia dejó atónito a Kurtis. Vale, Johnny podía ser odioso, engreído y otras muchas cosas, pero también era un gran guerrero, con pasión en lo que hace, amigable, cariñoso… Le costaba creer que con todo lo que había hecho la gente lo siguiera ninguneando.
¿Qué hizo exactamente? Nada destacable… simplemente salvar al mundo.
Bueno no solo, él también estuvo, él y todos sus amigos. Aún lo recordaba como si fuera ayer, el evento de hacía dos años que puso su mundo patas arriba, y de qué manera.
El día de la invasión estaba evacuando a la gente de un edificio en llamas junto a su mejor amigo y compañero Kabal, por cortesía del shokan Kintaro, cuando este último quemó a su amigo vivo sin aparente compasión. Cegado por la ira, arremetió con todo lo que tenía a la bestia atigrada y lo venció con demasiada facilidad, pero Kabal no estaba a la vista cuando fue a atenderlo.
Recordaba cuando el mismísimo Dios del Trueno y protector oficial de la Tierra, Raiden, apareció de la nada y se lo llevó a un sitio que nunca había visto con gente un tanto… pintoresca: un hombre con brazos de metal, tres ninjas, uno amarillo, otro azul y otro gris; un robot color mostaza, un chamán, dos monjes shaolines, uno con un sombrero con filo y otro descamisado; tres mujeres con ropa muy… expositora de carne, un ciego con una espada que eso le rompió muchos esquemas internos y por fin dos personas aparentemente normales, una rubia preciosa y tipo con aires de estrella de cine de Hollywood.
—"Hasta que les salgan tentáculos y antenas prefiero pensar que son normales porque con el pedazo circo que se está montando…" —, fue el pensamiento de Kurtis al primer minuto de llegar, entre otros muchos.
Al día siguiente de su incursión en el equipo, Kabal reapareció y con una horrida sorpresa: su cuerpo quedó enteramente desfigurado por las llamas y sus pulmones inservibles, por lo que se vio condenado a usar una máscara conectada a un tanque de aire. El shock fue a corto plazo porque a pesar de su aspecto, eso no cambiaba el hecho de que era Kabal, su mejor amigo, y siempre lo sería.
Por otro lado, a lo que se refería a salvar el mundo de criaturas propias de los cómics de ciencia ficción, para Stryker parecía casi una misión imposible; es decir, habían juntado a un buen grupo de desconocidos y les pedían que salvaran el mundo así como así. No le entraba en la cabeza ni a presión.
Pero durante los días en los que combatían a los "monstruos", lo que al principio le pareció un grupo de gente rocambolesca acabaron siendo personas importantes en su vida.
A cada pequeña batalla ganada, era un paso más a la victoria y destrucción de Shao Kanh y también, se formaban lazos entre los guerreros.
Bien Stryker no interactuaba mucho con los shaolines Kung Lao y Liu Kang, pero podía hablar con ellos tranquilamente. Jax, el de los brazos de metal, le caía genuinamente bien, que no era que no le cayera bien nadie, pero la personalidad del moreno de piel le agradaba y su amor a su mundo y determinación era cables en su forma de luchar. Con Smoke, el ninja de humo, siempre se podía contar; podía sentir el dolor de Sub-Zero, el ninja azul, por la pérdida de su hermano, él también perdió a un hermano en la guerra, pero admiraba más el que no odiase a su asesino que para ironía de la vida y su sorpresa era el ninja amarillo, Scorpion; aún podía recordar las carcajadas de Kuai Liang por la cara de pasmado que puso. Con Cyrax tampoco interactuó mucho al principio por el hecho de no saber que decirle a un humano al que habían robotizado a la fuerza, realmente incómodo, pero cuando habló con él resultó que era alguien con mucho sentido del humor y agradable, como si nunca hubiera cambiado, y ahí fue cuando se dio cuando de que nunca había cambiado y se sintió estúpido por no haberlo descubierto igual de pronto que con Kabal. Nightwolf era al que uno podía pedir consejo o como veía la situación y este te respondía con total sinceridad, algo que agradecía. Con las mujeres… cambiaba la cosa. Las edenianas le traían loco en un comienzo porque le costaba mirarlas a la cara con ropa tan… en fin, que dejaba mucho lugar a la imaginación; para suerte de su aguante viril, Kitana y Jade ya tenían interés por los shaolines y Sindel aún amaba a su difunto esposo. Pero no solo eran caras bonitas a pesar de ser más viejas que Matusalén. Kitana era precisa y disciplinada, Jade era sutil y fuerte y Sindel poderosa y decidida. Pero siempre sintió más aprecio hacia Sonya Blade, la única humana. Pero no se confundir, porque era un aprecio de muy buenos amigos. Siempre podía contar con ella y ella con él.
Ahora una aclaración, Stryker no es alguien especialmente sociable, el que tuviera interacción con los demás fue gracias mayoritariamente a Kabal y Sonya. Pero nunca jamás, jamás, JAMÁS de los jamases… le había caído una persona tan mal como Johnny Cage. Egocéntrico, repelente, sin sentido del humor, pegajoso como él solo, sin seriedad… Todo lo que detestaba con supremacía, y Cage lo llevaba a un nivel que le extrañaba que nadie lo hubiese matado ya, hasta llegó a preguntar: "¿Cómo puñetas hacéis para no ahogarlo?"; solo recibió tres respuestas:
1ª. "Porque en el fondo es un tío majo"
2ª "Porque no se callaría ni debajo del agua"
3ª "Porque lucha bien"
La primera y la segunda le asustaron. "Majo" no es una palabra que usaría y si quisiera que callase definitivamente con semejante respuesta ya estaba descartado el ahogamiento "accidental". En cuanto a la tercera, por mucho que le costara, debía admitirlo: Johnny Cage era uno de los mejores guerreros que tenían; aún lo sigue siendo, incluso podría decir que ha mejorado en muchos aspectos… sí no fuese por su patético aspecto causado por el alcohol en su sistema.
Pero a pesar de lo muy bueno que fuera en el kombate o sus buenas intenciones tras las chistes horribles, nunca llegó al punto odiarlo. Hasta cierto día.
Habían derrotado a una guerrilla pequeña de guerreros enemigos en un intento desesperado de detenerlos.
—Me da que Shao Kanh se está desesperando, cada vez nos vienen más magullados—, dijo algo altareno el actor que miraba divertido a los cuerpos inmóviles o débiles de sus enemigos.
—Pues si es así, quizá la victoria esté más cerca de la que creemos—, pensó abiertamente Kung Lao.
—No os confiéis guerreros de la Tierra, nunca se sabe cuándo podría ocurrir lo inesperado—. Por sus palabras, Raiden no parecía muy convencido por tan poca resistencia por parte del conquistador.
Stryker estaba de acuerdo con Raiden aunque no lo dijese en voz alta y si algo le decía el instinto y la experiencia era que lo demasiado fácil casi siempre implicaba el inicio de la tormenta.
—Haces bien en desconfiar Raidencito.
Una voz de mujer, cantarina pero madura, rompió el absurdo silencio de la ciudad en ruinas.
— ¿Quién eres? ¡Muéstrate! —, demandó el Dios, chispas saliendo de sus palmas mientras todos se ponían en guardia.
—Como quieras—, accedió la dama misteriosa.
La mujer apareció envuelta en un manto de espesa bruma, y en el momento en el que esta se disipó se pudo observa que media metro setenta y cuatro, vestía como chamana, la piel era del tono del chocolate al igual que sus ojos, su cara estaba pintada pero se podían notar pecas, su pelo era laceo de un tono marrón rocoso, portaba un arco y flechas y venía fumando de una pipa artesana, que era de donde provenía toda esa bruma de intenso olor.
— ¿Pilla? ¡Pero cuanto tiempo sin verte!—. El que habló fue Nightwolf, quien abrazó a la tal Pilla y ella le correspondió. Aunque el chamán se alejó un poco. —Es bueno saber que no has cambiado nada, apestas a pipa.
—Pues claro querido, estoy segura de que me conoces lo suficientemente bien para saber que yo nunca dejo de fumar, incluso en plena invasión las costumbres no se deberían perder—, y con eso dicho dio una calada, ignorando a todos los ojos confusos que la miraban.
Hasta que Raiden habló.
—Nightwolf, ¿quién es tu… amiga?
—Maestro Raiden y amigos, ella es Pilla, una chamana del Outworld que conocí hace mucho tiempo—presentó con una mano en el hombro de Pilla.
— ¿Hay chamanes en el Outworld? —, preguntó interesado Stryker.
—Yep, pocos pero los hay. Antes de Shao Kanh los había a montones pero después… bueno, os podéis hacer una idea—, y dio otra calada, pero con la mirada en el cielo naranja lleno de polvo y olor a fuego y sangre. En su mirada astuta había un sentimiento: morriña. Kurtis se sintió mal por haber preguntado. —Hey, pero no todo es tan malo, al menos no tengo tanta competencia.
— ¿No quieres vengarte de Shao Kanh? —, obviamente Scorpion solo piensa en venganza y parece que es la solución a todo para él, una de las razones por la que Stryker no se juntaba ni se junta con él.
— ¿Para qué? Uno puede intentar vengarse, ¿pero qué pasa con todas esas oportunidades de un nuevo comienzo perdidas? Na-ah, esta servidora no va a malgastar su valioso tiempo en estúpidas venganzas; además que fue hace eones, dime para qué carajos necesito yo vengarme de algo que ocurrió antes de que naciese, a ver dime.
El ninja amarillo se la quedó viendo con expresión aparentemente neutra, lo cual sacó venas en la frente de la chamana, y se puso roja de furia cuando este desapareció envuelto en llamas.
—Pero será pedazo de mamón… ¡VUELVE AQUÍ COPIA BARATA DE BOB ESPONJA Y TE METERÉ LA PIPA POR EL OJAL Y SIN AMOR, COMPRENSIÓN NI TERNURA! —, comenzó a gritar amenazas la morena de piel, con una cara que asustaría a Onaga si estuviera en el lugar de Scorpion.
—No creo que te vaya a hacer caso con amenazas Pilla y POR EL AMOR DE DIOS, ¡AYUDADME A SUJETARLA!—gritó alarmado Nightwolf que agarraba a la otra por la cadera pero le costaba horrores.
Fueron Jax y Stryker los que la agarraron por las piernas pero ni aún así conseguían mucho.
— ¡¿Pero cuanta fuerza puede tener una puta chamana?! —, bramó el policía anonadado y asustado por la posibilidad de que cumpliera semejante espantajo.
Mientras el resto ayudaba de la mejor forma posible: riéndose a punta pala.
— ¡Podías ayudar un poquito, ¿no os parece?! —, casi demandó Jax irritado.
—Ni de coña, esto es lo más gracioso que he visto desde que Smoke pilló a Jade desnuda—, dijo Johnny entre risas.
— ¡Fue un accidente! —, replicó el ninja, rojo del bochorno, aunque no se arrepentía de nada.
— ¡No me vayas a joder Cage, levanta tu trasero de actor ahora mismo! —, exigió el policía, que un poco más y le reventaba una arteria.
—Um, deja que consulte mi agenda… que te parece… nunca—, y puso cara de troll.
— ¡ERES UN NIÑO GRANDE, INCLUSO TU RISA SUENA IGUAL AL DE UNO! —, bramó sin pensar, furioso por la actitud del otro.
—Ese comentario ha sido muy cruel y… esa risa no es mía.
La última frase hizo el silencio. Y en efecto, esa risa infantil no era del actor, pero fuera de quien fuera se estaba partiendo el pectoral de la risa.
—Oh, es verdad—recordó Pilla, que ya hacía un rato que se había calmado—La razón por la que vine es que estáis en peligro.
— ¡¿QUÉ?! —, exclamó con una mezcla de pánico y rabia Raiden.
—Tranquilo Raidencito, no es algo que no se pueda evitar, pero vais a necesitar ayuda extra. Y aquí es cuando entramos nosotros.
— ¿Perdona? ¿"Nosotros"? —preguntó Kitana.
—Así es cielo. ¡Perisa! ¡Akaname! —llamó Pilla sin mirar a su espalda a las dos figuras que salieron de detrás del edificio, dando otra calada a la pipa. Eran dos figuras bajitas, de un metro sesenta y seis y un metro sesenta y nueve respectivamente. Una era una chica albina con el cabello ondulado hasta los hombros de ojos rojos tirando a rosa, piel pálida que parecía enferma, top negro enganchado al cuello por una cinta plateada, una serpiente tatuada en la zona del ombligo descubierto, una pieza de tela negra con detalles rosa palo(*), vendas en las piernas y botines con dobladillo negros; la otra parecía un chico, pero no podían estar seguros porque era prácticamente una masa de "petróleo" con forma humana, tenía "pelo" pinchudo, ojos redondos que emitían luz amarilla al igual que su boca que tenía forma de dientes de sierra, sus brazos eran un tanto amorfos porque cuando empiezas a verlos desde los hombros la anchura del brazo va aumentando hasta el punto de formar garras gigantes, su cuerpo era como es de un humano joven y no llevaba ropa. —Chicos, estos son Perisa—, presentó Pilla pasando un brazo por el hombro de la albina que saludo tímidamente, —y Akaname—, e hizo el mismo gesto con el otro.
Stryker no pudo evitar mirarlos fijamente, le resultaban incluso más extraños que los shokan o los mismísimos tarkatanos, que ya era decir.
Perisa se dio cuenta de que la observaba y quizá se lo imaginó, pero sus ojos emitieron un brillo blanco que fue seguido de una risilla pícara y a la vez dulce. Kurtis no pudo evitar sonrojarse, ¿le estaba insinuando, o burlándose de su descaro?
—"Si por aquel entonces hubiera sabido lo que significaba, quizá…"—. Kurtis salió de su mundo de recuerdos cuando notó dos manos tibias en su rostro. Cage lo miraba de manera dulce.
— ¿Qué pensabas Stryki? —, preguntó con tono pícaro pero un poco menos gangoso el actor. Para alivio del otro, Cage había pedido un agua para refrescarse un poco.
—Nada. Venga vámonos—, indicó Stryker como madre.
— ¿Qué? Vamos Stryki dímelo~
El actor seguía pidiendo y el agente seguía diciendo que no era nada. Hasta que Cage se quedó en silencio, el otro no volvió a abrir la boca.
— ¿Ocurre alg—
Pero fue interrumpido por unos labios que a pesar del estado actual de su dueño, lo besaba de firme pero delicada, como siempre lo hacía. Como sabía que le gustaba.
—Si no me lo cuentas por lo menos me llevo un beso—, rió alegre Johnny, más cuando vio a su novio sonrojado.
—C-Cállate…—, dijo haciéndose el molesto, pero no le duró mucho porque comenzó a sonreír. —Si querías uno habérmelo dicho—, y le tomó la mano para llevárselo del bar, —"Quizá si lo hubiera sabido, no hubiese acabado así… Tsk, seguramente no me hubiese gustado la idea como ahora gusta".
¿Qué tal? :3
Espero de corazón que os hay gustado este primer capi, especialmente a ti Hakendo ^^
Pilla y Perisa son muy distintas a mi fic "Mortal Kombat 11" físicamente y Akaname tiene un pasado distinto (se expondrá en el siguiente). Comentadme que os parecieron :)
(*) Esa pieza de ropa es igual a la de Sareena en MKX pero los detalles rosa palo (no sabía cómo llamarlo XD, si alguien lo sabe que lo diga please ;3;).
El fic se basa en el punto de vista de Stryker, por lo que los pensamientos (los diálogos entre "..") serán solo de él, y veremos cómo evoluciona la relación entre él y Johnny viajando por los recuerdos de Kurtis (si sigo así me acabará gustando la pareja y todo XD). Supongo que me basé en la idea de "Del odio al amor hay un paso".
Reviews, consejos y críticas constructivas son bien recibidos en este rinconcito y os deseo suerte con los fic regalo a todos. Oh, y si hay faltas perdónenme, son como una enfermedad D:
Merīkurisumasu!~ :D
