-Shhh, nos van a descubrir !
- Soubi-chan tengo miedo , no quiero hacerlo!
- No digas eso ... Claro que quieres hacerlo es solo que no sabes que quieres hacerlo por qué crees que no quieres . Ahora guarda silencio!
No sabría por dónde comenzar así que comenzaré por la parte que me parece más divertida y esa es mi familia , mi madre se llama Chouko Agatsuma es dueña del mayor imperio de telecomunicaciones no sólo de Japón sino el mismísimo continente asiático y el cual ahora mismo ha expandido por Europa , África y en un par de meses a América . Usualmente ella no está en casa conmigo ya que se la pasa viajando de un sitio a otro por los negocios y se podría pensar que soy muy desdichado e infeliz por eso pero...Por dios! Vamos a ser sinceros ya que la ocasión lo amerita , quien con 88 millones de yenes mensuales a su disposición podría llamarse infeliz ? Yo no! Además se que mi mama me ama por sobre todas la cosas ya que ella siempre me lo demuestra no sólo con dinero o con regalos , ella me dice todo el tiempo que sí me sintiera solo por no poder estar ella , con mucho gusto me llevaría con ella ; así que no podría culpar a mi mama y sus ausencias por qué como verán no es esa una solución . Además de mi amada mama también hay otros factores que hacen que mi vida sea plenamente feliz y eso es este pequeño miedoso de cabellos negros cual ébano y de ojos azules tan profundos que me dejan sin respiración y él es ... ... ... Aoyagi Seimei .
Si, lo confieso que hace un año que llegó a mi casa en calidad de bulto por qué no hacía otra cosa que temblar de miedo por todo y por nada , realmente le detestaba pero ahora , esas orejitas temblorosas y esa voz insegura me reconforta , quizás Aoyagi Seimei es mi consciencia si es que tengo una ... El es el miedo que a veces hace falta para sobrevivir. Su padre es un hombre muy serio , el señor Kaidou Kio, es asistente de mi mama , y Seimei es su hijo que tuvo fuera del matrimonio y por el cual mi pequeño Seimei lleva el apellido de su madre , esta falleció y fue entonces cuando el señor Kaiudou se enteró que tenía a Seimei y como viaja para todas partes con mi madre ; ella le ofreció que podía dejar al pequeño Seimei en mi casa y conmigo ... Pésima idea ! No , no, no me mal entiendan es solo que con ese carácter tan miedoso era más que obvio que Seimei iba a caer los primeros meses bajo mi yugo con todo tipo de bromas pesadas y de mal gusto como hacerle comer tierra del jardín , tirarlo una decena de veces a la fuente , a la piscina o al lago . Dejarlo encerrado en la alacena por horas , en los armarios por días y cazarlo como un león por los jardines escopeta en mano , escopeta de dardos de caucho por supuesto . En fin Seimei tuvo que soportar tortuosas pruebas para poder ser parte de mi club , el cual hasta esa fecha sólo contaba con un miembro o sea yo! Cuando me canse de hacerle la vida imposible a Seimei , entonces le adopte como una mascota ... Era tan lindo , sus ojos enormes y profundos , su colita y sus orejas . Seimei me gustaba mucho y comencé a expresarle mi amor ... Aún recuerdo la primera vez que le bese , este se había caído y lloraba como un bebe por qué tenía un raspado en la rodilla ...
- Seimei estás bien?
- Me duele Oni-chan!
- A ver ... Déjame ver - le dije intentando que cediera un poco de espacio , y cuando al fin pude ver , tenía una rodilla raspada y con unas cuantas gotitas de su sangre - vamos no es nada solo un raspón.
- No! Me duele , ya no quiero jugar a esto oni-chan.
- Vamos no seas bebe ! - dije yo intentando calmarle pero este lucia tan adorable con ese gesto de que iba a romper a llorar de nuevo que no pude resistirme -está bien Seimei , te voy a dar un remedio para que se te quite el dolor ...
- En... En serio? - dijo este entre sollozos que me hicieron sentir un fuego interior inexplicable , su hermoso rostro me producía una especie de placer que antes yo nunca había sentido .
- Si ! Pero cierra los ojos .
- No me vas a pegar una palmada en la cabeza como la otra vez verdad?
- No!
- Tampoco me llenaras el pantalón de piedras ?
- No!
- Ni subir mi ropa interior hasta mis hombros o si?
- Seimei!- dije casi perdiendo la paciencia , entonces este obedeció y cerró los ojos .