2 a.m

Siempre hay un momento del día en el que puedes ser tú mismo, en el que puedes quitarte esa máscara con la que te ven todos y ser quien en verdad eres, sin mentiras, sin hacer lo que los demás esperan que hagas, no existe nada, nada más que tú y ese momento para mí es cuando el reloj marca las 2 a.m.

Es en esa hora cuando ya no puedo engañarme más, y comienzo a pensar sobre lo que soy, lo que fui, lo que seré, pero sobre todo…lo que no pude ser…

Mis pensamientos van en dirección a una persona a la que sigo extrañando, a la que sigo amando, aunque lo niegue fervientemente el resto del día, aunque diga que ya no me importa, porque sé que todo es una vil mentira.

Aún recuerdo la fiesta de graduación, fue muy emotiva, aunque todos estábamos alegres esa noche también se podía apreciar un ápice de tristeza, todos sabíamos que esa iba a ser nuestra última noche juntos, ya que todos tomarían caminos separados al día siguiente.

Una de las personas que se iría de Hillwood fui yo, decidí viajar a Inglaterra para estudiar Literatura y convertirme en una gran novelista; en el aeropuerto sólo me despedían 6 personas, de las cuales 3 eran mi familia: Bob, Miriam y Olga, la última no dejaba de abrazarme y llorar repitiendo la misma frase: "Mi hermanita bebé se va". Otra de las personas que estaba despidiéndome ese día era Phoebe, obviamente, mi amiga no dejaba de darme palabras de ánimo y decir que le escribiera todos los días, a su lado se encontraba Gerald, por supuesto que solo fue para acompañar a Phoebe, pero al parecer los planetas se alinearon ese día y pudimos despedirnos sin insultarnos para alegría de Phoebe. La última persona fuiste tú, aún no podía creer que estuvieras ahí, y cómo creerlo si todo el tiempo que estuvimos juntos me la pasaba molestándote a más no poder, pero a ti no te importó, no es de sorprenderse, de igual forma me diste palabras de ánimo y ese fue el único momento en el que de verdad creí que podía hacerlo, mi vuelo fue anunciado, era hora de partir pero antes de que pudiera avanzar me detuviste y me abrazaste, yo no sabía cómo reaccionar, no quería cometer una locura que acabaría matando el momento, pero en vez de eso correspondí tu abrazo. Tomé mi equipaje y me despedí de todos con un "Adios" y subí al avión que me llevaría a la continuación de esta historia de mi vida.

Ya han pasado varios años desde esa amarga despedida, solo fue un momento breve, pero para mí fue lo más tierno que me pudo haber pasado, aunque sólo lo haya sido para mí.

Nuestras vidas siguieron su rumbo, me hubiera gustado que en algún punto se unieran, pero a veces no todo va como lo planeamos.

No he sabido nada de ti desde entonces y siempre a esta hora me empiezo a preguntar qué haces, cómo estas, qué ha sido de tu vida y por último mi pequeña esperanza que lucha por no desvanecerse… ¿pensarás en mí?

Lentamente voy cerrando los ojos siendo atrapada por Morfeo y en lo último que pienso antes de perder mi conciencia…es en ti.

Hola! ¿Cómo han estado? Aquí Elaine con una nueva historia, créanme a veces mi inspiración me juega una mala broma, pero eso no me detuvo…mucho…en fin espero que les haya gustado :3 los quiero chicos y nos veremos en una nueva historia. Hasta luego!

Elaine