La Oscuridad me envolvió
La Oscuridad me envolvió
No sé cómo es que ha sucedido todo. Por mucho tiempo pensé que mi corazón, mi vida y mi tiempo estaban dedicados a Jack… ¡Cuánto lo amaba!... al menos eso era lo que yo creía.
Los unicornios pudieron salvarse, ha pasado casi un año de lo sucedido, pero, por alguna razón no he podido olvidar a mi señor…Darkness. La primera vez que lo vi sentí un poco de miedo, pero al escuchar su voz tan profunda y sus palabras tan dulces, mis temores se fueron disipando poco a poco…¿por qué lo rechacé? El me ofreció lo que ningún hombre había hecho, nisiquiera Jack puede ofrecerme lo que él en bandeja de oro me proponía.
Nunca sabré lo que es ser una mujer amada por un "hombre" como él…El ya no existe, ha muerto ya que la Luz terminó con su vida.
¿en qué estás pensando Lily? –
en nada! – fue lo que atiné a contestar, no me había dado cuenta que estaba tan sumergida en mis pensamientos.
es que parecías como ida, te hablé varias veces pero no me contestabas.
Discúlpame Jack, es que estaba recordando lo que sucedió con los unicornios hace ya tiempo, ¿te acuerdas?
La cara de Jack se ensombreció un poco y puso una mirada que hacía mucho no veía en él. – sí, lo recuerdo muy bien, pero sabes? Es algo que ya no quisiera recordar, afortunadamente todo salió bien, te liberamos a ti de las garras de la Oscuridad y a los unicornios también -.
sí, es verdad. De nuevo quiero agradecerte por eso Jack – tomé su mano suavemente y la besé.
No tienes nada que agradecer Lily, lo hice por amor hacia ti –.
Nos sonreímos mutuamente y Jack se acercó a mí lentamente hasta fundirnos en un tierno beso. Los besos de mi amado Jack eran dulces, tiernos, con mucha suavidad y delicadeza, cada vez que él lo hacía sentía un bienestar en mi corazón y que nada podría lastimarme. Pero mientras nos besábamos, de nuevo pensé en Darkness… ¿cómo serían sus besos? Me hubiera gustado probarlos.
Después de unos momentos nos separamos, le dije que tenía que ir a mi castillo porque ya estaba oscureciendo y ya era hora de cenar.
Me propuso vernos al día siguiente y yo acepté con mucho gusto.
Corrí hasta llegar a mi casa, mi padre ya me estaba esperando para la cena en la cual charlamos alegremente. Al terminar me despedí de él para irme a mi habitación y poder pensar tranquilamente. ¿ Por qué no podía dejar de pensar en él? Creo que antes de morir el puso un hechizo sobre mí, no había momento en el que no invadiera mi ser y deseara estar con él, en sus brazos, tenía una inmensa curiosidad por tocar su roja y ardiente piel, apretar sus poderosos y fuertes brazos y aunque físicamente no era tan atractivo, tenía deseos de acariciar su rostro y ver en sus ojos algo que tal vez en su vida nunca había sentido.
Poco a poco fui desabotonando mi vestido para poder ponerme mi ropa de dormir, mi mamá me había regalado una bata un tanto provocativa… - la usarás cuando sea tu noche de bodas – me dijo – a los hombres les gusta estas cosas y en ti se verá hermosa -. Era una bata blanca con tela muy transparente, al ponérmela pude notar el contorno de mi silueta, la forma de mis senos, mis largas y delgadas piernas…- sí que es muy provocativa, pero me gusta, le gustaría a mi señor Darkness? – volví a pensar en él, delineé con mis manos toda mi figura pensando en que eran las manos de Darkness las que me acariciaban hasta que paré en seco, reflexioné sobre lo que estaba haciendo y me sentí avergonzada por mis pensamientos tan pecaminosos y sobre todo pensaba en Jack… él no merece que esté pensando en otro hombre cuando le he dicho que lo amo … aunque no estaba muy segura de eso, lo quería…claro que sí! Pero ya no estaba tan segura de amarlo.
Me dirigí a mi cama y la destendí, me acosté sobre ella, cerré mis ojos y ya no supe de mí por ese día.
Hola! No sé cuántos vayan a leer este fic, si no es nadie, no importa! Desde hace tiempo he querido hacerlo. Gracias!
