Hola, gracias por entrar en este Drabble, espero les guste.

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Editado 04/03/2018.

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Disclaimer: Naruto y todos sus personajes son propiedad de Masashi Kishimoto. La historia es mía y la publico sin ánimos de lucro.

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Resignación

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La tristeza inundaba mi alma cada vez que finalizaba la jornada laboral, era más fácil quedarse en la torre del Hokage haciendo cualquier cosa, siempre había informes por revisar, misiones por organizar, una forma de ocupar mi tiempo, de matarlo, por así decirlo, tiempo que me sobraba desde que tú ya no estabas.

Llegar a casa y sentir frío de la soledad calarme los huesos, era una tortura a la que me debía acostumbrar.

¡Cómo acostumbrarme a tu ausencia, Temari!, si tu presencia aún la siento en cada rincón de nuestro hogar.

¡Cómo no recordar tus besos de bienvenida!, después de un exhaustivo día laboral.

Sin duda eran los momentos más felices de mi vida, porque siempre me recibías con una bella sonrisa. Sin embargo, el cruel destino no quiso seguir regalándome esa dicha, te arrebató de mis brazos, te arrancó de mi lado, dejándome completamente desolado.

Mi pesar aumentaba mientras caminaba rumbo a nuestra habitación. Entrar en ésta era un verdadero martirio para mi corazón; verla tan vacía, ya sin vida, porque la pasión y la alegría se esfumaron con tu partida.

¡Cómo no sentir nostalgia al mirar nuestra cama!, donde cada noche profesamos todo lo que sentíamos, el amor, la ternura, la pasión, la locura. Tantos encuentros que compartimos, mujer, de los cuales, no quedaba nada, sólo remembranzas de días felices, que con tristeza ahora evocaba.

«Resignación», era la palabra que siempre escuchaba de mis compañeros y amigos. ¡Qué fácil era para ellos decirlo y tan difícil para mí aceptarlo!

—Mujer, ¿por qué te fuiste tan pronto? —me hago esa pregunta, sabiendo que no obtendré respuesta.

—¿Por qué tuvo que pasarte a ti ? —susurré acongojado. El azar del destino, quizás mala fortuna, no lo sabía. Nunca estuviste enferma, pero un aneurisma cerebral fulminante, no te avisa, simplemente llega.

«Resignación», mi mente podría aceptarlo aunque no mi corazón, pero en el fondo de mi alma sabía que debía conformarme, ya que había una razón más que suficiente para seguir adelante.

El sonido de la puerta me sacó de mis cavilaciones.

—Hola Shikamaru —acotó, mi madre—, te sentí llegar, pero no pude ir a recibirte, estaba haciendo dormir a Shikadai.

—¿Cómo estás mamá? —traté de sonreír, no quería preocuparla más.

—Bien, mejor que tú por lo que veo —me miró con cariño—, no es necesario que finjas conmigo, bien sabes que pasé por lo mismo.

—Es imposible engañarte —musité con melancolía —. ¿Cómo se ha portado Shikadai?, ¿te ha hecho rabiar?

—Es un vago igual que tú, no tiene energías para hacer rabiar a nadie —sonreí de medio lado ante ese comentario —. Da unos pasitos en el jardín y se cansa; se sienta y observa detenidamente las flores y las plantas, tal como lo hacía su madre.

—Será un Nara problemático —mantuve la sonrisa, contiendo mis lágrimas.

—Sí, hijo, así será—me habló dulcemente con sus ojos llorosos —. Junto a él superarás tu duelo. La aceptación tarda, Shikamaru, pero llega, sobre todo si tienes en quien aferrarte para continuar.

—Gracias por todo, mamá —la abracé con fuerza, no pude evitar derramar mis lágrimas.

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FIN

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Gracias por leer, cualquier sugerencia, crítica, felicitación o bombazo, envíalo a través de un review; me encantan.

No es mi estilo escribir este tipo de relato, pero fue algo que surgió de repente.

Saludos y buen fin de semana.