Disclaimer: Naruto es de Kishimoto

Este fic participa en el reto ¡Yo no escogí el título!

Del foro : La aldea oculta entre las hojas

Shisui sonrío coquetamente y esto a cierta muchacha de anteojos le dio igual. Ciertamente el muchacho del clan uchiha no era con quien quería meterse en una reunión organizada por la misma familia prominente de konoha a finales de diciembre

Incomoda por el tipo de vestido que está usando se abraza a si misma un cierto periodo de tiempo antes de que por su mente cruzase la idea de regresar al salón principal. Shiho bien sabe que no les atractiva para los hombres, no tiene curvas perfectas ni el aspecto adecuado al igual que el carácter para flirtear con cualquiera. Una suave brisa la saca de los turbios pensamientos, fijándose en las estrellas que se asoman en el firmamento, por un momento olvida el vestido barato de la boutique que compró recientemente en la mañana y se permite sentar en unos escalones, observando aún el cielo.

Una risilla profunda y descarada se logró escuchar. Shiho se ruborizó hasta las orejas dispuesta a regresar a la fiesta para no hacer el ridiculo. No alzó la mirada en ningún instante antes de que una mano agarrara con fuerza su brazo para detenerla.

—Esperaba verla...

—¿Perdone?

La mirada de Shisui uchiha la toma desprevenida por completo. Se siente fea enfrente del hombre enternado y bien apuesto, rehuyó cobardemente de la hipnotizante mirada del pelinegro.

—Yo fui quien pidió su presencia aquí

Por algún motivo esto le causó más disgusto que agrado. Conocia bien de su reputación al mismo tiempo de que siempre después de las misiones andaba con cualquiera de la aldea y obviamente Shiho no iba a ser una más del montón

—¿Me necesita para algo?

—No te apresures M' Lady... Te quiero para muchas cosas... Pero empecemos desde cero... Tutéame.

Ofendida por el tono sugerente del hombre, Shiho se vio obligada a romper el agarre

—No me interesa tener nada con usted. A-a penas lo conozco—dijo con recelo

—Es mejor conocernos en el proceso. Voy directo al grano, te vi en la calle y me gustaste

Con cada palabra que salía de la boca del Uchiha, acorralaba más a la pobre chica de anteojos. Sus palabras se convirtieron en susurros acaramelados y la rubia sentía sus rodillas de gelatina, no pensó que terminaría aprisionada por el hombre más deseado de toda la aldea y menos se veia cayendo ante los encantos de semejante partido.

—Es im-imposible—se quejó poniendo una de sus manos en el pecho de Shisui

—M' Lady. Somos capaces de crear un mundo donde todo es posible

El murmullo de los invitados se vio paralizado para los dos escondidos en un pasillo en desuso. Shiho bajó el rostro avergonzada por lo que estaba a punto de pasar, sintiendo unos dedos afectuosos llenos de calidez que la obligaron a alzar la vista hacia el rostro masculino, estando a pocos milímetros de besarla.

Beso. Simplemente fue eso, no uno de esos intensos que se imagina Shiho, si no un común y corriente roce de labios. Encontró respuesta en la mirada divertida y atrevida del Uchiha, que como excusa puso

—Hay un muérdago. No debes preocuparte, ya me aseguraré que alcances la gloria con otro tipo de besos!

—¡Degenerado!