Hola a todos. Vengo con un nuevo Fic! Realmente espero les guste.


Recuerdo tus alas.

Parte 1.

El viento soplaba con fuerza en Clousdale. Sus fuertes y precisas ráfagas agitaban las nubes y provocaban corrientes de aire tan poderosas, que era imposible para cualquier pegaso, resistir la necesidad de volar, en especial si se trata de un Wonderbolt.

Soarin, un pegaso de melena negra como el ébano, pelaje azul pálido y mirada verde llena de pasión y deseos de subir al cielo, volaba rápidamente entre las nubes blancas, disfrutando de la brisa soplar en su pelaje y la incomparable sensación de libertad que le provocaba surcar los cielos.

Maniobraba de forma admirable entre cada obstáculo que se le atravesaba, cerrando sus ojos y respirando el aire puro de las alturas. No cabía duda que amaba volar, que estar en el cielo y sentirse amo de la velocidad era su mas grande pasión, su razón para vivir.

La rapidez con la que montaba las fuertes corrientes de aire y la gracia con la que se movía era tal, que parecía una pluma danzando entre las nubes, completamente a merced del viento. Libre, lleno de energía. Nada más necesitaba para ser feliz.

-¡Mas rápido Soarin, ya deja de estar jugando!- grito una pony pegaso de pelaje amarillo y peinado similar a las llamas. Su grito fue tan fuerte que logro sacar al potro de su burbuja de inspiración.

-Tranquila Spitfire, apenas estaba calentando- respondió el Wonderbolt aterrizando donde estaba su capitana.

La yegua bajo sus oscuros lentes para verlo y soltó un suspiro –Realmente te gusta presumir, estuviste seis segundo por encima del record- dijo mirando su tabla de velocidades.

-¡Wow! Soy asombroso- dijo sonriendo orgulloso – Ese record ya es mío- continuo mientras caminaba para tomar un poco de agua - ¿Quién tiene ese record? ¡Voy a destrozarlo!- finalizo riendo.

-No lo creo amigo- dijo Spitfire acercándose a su compañero – Te tomara años mejorar esa marca, después de todo fue hecha por Rainbow Dash- finalizo la capitana Wonderbolt riendo ante la cara de asombro del pegaso.

Soarin abrió su boca impresionado y justo después soltó una leve risa mirando al cielo – Bien hecho Dash pero voy a superarte- menciono decidido volando de vuelta al campo de entrenamiento de los Wonderbolts.


El campo de acrobacias y maniobras perteneciente a los Wonderbolts era esplendido, enorme, era la envidia de todos los equipos de acróbatas en Clousdale, pues no solo era el mas grande campo, sino que también recibía directamente las corrientes de aire. Era ideal para entrenar todo el día.

-¡Es suficiente entrenamiento por hoy!- comando Spitfire volando en el centro del campo para que todos los acróbatas la oyeran.

Fleetfoot y Soarin aterrizaron rápidamente pero no se retiraron como los otros pegasos, se quedaron a esperar a su capitana, ya que ellos eran el escuadrón principal de los Wonderbolts y a veces debían quedarse mas horas de las que indicaba el reglamento de los demás.

-Buen entrenamiento chicos. Tenemos el resto del día libre- dijo la yegua de pelaje amarillo sonriéndole a sus compañeros.

-Genial, estaba muy agotada- suspiro Fleetfoot.

-Yo no quiero descansar- dijo Soarin firmemente.

La capitana Wonderbolt estallo en fuertes carcajadas junto a su compañera voladora, mientras ambas rodaban por el piso. Pararon unos momentos después al ver la expresión enfadada que tenía el potro.

-Oh, lo dices enserio- dijo Spitfire mirándolo de forma confundida.

-¿Qué te pasa Soarin? Normalmente eres el primero que quiere irse a dormir sobre alguna nube- menciono Fleetfoot con burla en su voz.

-Lo sé- contesto soltando una ligera risa –Es solo que hoy me siento muy inspirado- finalizo observando al cielo.

-Bueno, hoy es día libre, así que puedes hacer lo que quieras- comento la yegua de pelaje amarillo mientras caminaba hacia campo abierto – Yo iré a comer algo, tengo un hambre voraz- dijo riendo y señalando su estómago cubierto por el uniforme que los identificaba como Wonderbolts.

-Voy detrás de ti Spit- secundo Fleetfoot caminando tras la líder.

– De acuerdo, yo daré unas vueltas por Equestria- grito Soarin para que sus compañeras lo oyeran.

-¡Trata de no meterte en problemas!- le ordeno Spitfire extendiendo sus alas, volando en dirección a Clousdale.

-Seguro- murmuro para sí mismo. Observo a las yeguas irse y procedió a volar rápidamente en dirección contraria. Dispuesto a seguir experimentando la sensación de libertad que le producía navegar sin rumbo entre las nubes.


Un par de horas más tarde, el sol ardía en todo su esplendor en el cielo, iluminando con sus rayos, cada parte de Equestria. Soarin aún se encontraba deslizándose entre el viento, como un rayo en plan de tormenta. Veloz y preciso, domaba los cielos con sus fuertes y poderosos aleteos.

Había sobrevolado gran parte de las ciudades de Equestria y no estaba pensando en detenerse, sin embargo un fuerte gruñido proveniente de su estómago lo hizo frenar de pronto.

-Tengo hambre- rio levemente. –Sera mejor que coma algo- pensó mirando al distante suelo. –Veamos… ¿en dónde estoy?- dijo analizando la superficie por donde sobrevolaba. –El bosque Everfree, una pastelería, la biblioteca de la Princesa Sparkle- dijo descendiendo y nombrando cada edificio por el que pasaba. -¡Estoy en Ponyville!- concluyo emocionado.

Redujo su altura y comenzó a buscar algún lugar donde pudiera comer algo, siguió buscando hasta que vio un enorme huerto de rojas y deliciosas manzanas, justo bajo él. Sonrió victorioso y cayo rápidamente en picada hasta la plantación de fruto rojo.


La ética de trabajo en Sweet Apple Acres era muy estricta respecto a sus normas, y es que, desde muy tempranas horas, Applejack y Big Mcintosh ya se encontraban cosechando las manzanas de sus árboles. Uno pensaría que tanto trabajo era estresante pero para los dos hermanos, era muy reconfortante el poder admirar sus cultivos llenos de manzanas y mas aun, recolectarlas, era un placer sublime, para ellos.

Applejack pateaba con mucha fuerza los árboles. Ese día se sentía especialmente entusiasmada por cosechar su fruta, lo que le provocaba mucha adrenalina al patearlos.

-Mas despacio, no tienes que patear tan fuerte- le dijo Big Mc a su hermanita.

- Pff… Así es mas rápido- contesto empujando sus fuertes patas contra el tronco de un árbol, haciendo que cayeran las manzanas rápidamente.

El potro de pelaje rojo, la miro con su inmutable serenidad y soltó un suspiro, camino hacia el granero mientras cargaba varias cajas de manzanas en el lomo –Bueno, pero ten cuidado, puedes causar un accidente- dijo antes de desaparecer tras las puertas de madera.

Applejack bufo restándole importancia y se preparó para seguir pateando los arboles. –Un accidente… - murmuro retrayendo sus patas lista para soltar una fuerte patada -… Por Equestria ¿Quién sería tan idiota como para atravesarse en medio de una patada?

Justo después, soltó sus patas con tal fuerza, que el resultado fue la patada mas brusca que había dado en todo el día… sin embargo, no escucho el ruido de la madera siendo golpeada, no sintió las manzanas caer del follaje, en cambio escucho el sonido seco de haberle pegado a una especie de bote vacío acompañado de un quejido masculino.

-Oh no…- dijo en un susurro, ya imaginándose que paso, volteo sus ojos verdes rápidamente solo para encontrar la imagen de Soarin de fauces en el piso, con sus ojos desorientados, su lengua colgando por fuera y su cuerpo inmóvil contra el árbol. ¡Le habida dado una patada tan fuerte como para matarlo!

-Oh no, oh no- dijo asustada. Tomo entre sus cascos la cabeza del pegaso y la miro fijamente – Oye amigo ¿estás bien?- pregunto preocupada agitando su cabeza con fuerza.

-Dhaaaa, ahuuuu, asjahas.

-¡Ponys emplumados!- Se había metido en un gran lio ._.


En un amplio campo cubierto de pasto que se mecía con las corrientes de aire, estaban dos hembras pegasos. Una era de color vainilla y larga melena rosada, de mirada tranquila y amable, ella observaba atentamente a su compañera de crin multicolor y pelaje celeste, quien estaba ejecutando asombrosas acrobacias en el cielo.

Rainbow Dash, era conocida por ser una excelente voladora, la mejor de Ponyville e incluso de toda Equestria.

Ella surcaba los cielos, cual halcón, con suma agilidad y rapidez. Dominada el viento y controlaba las corrientes a su merced, gozando la libertad que le provocaba agitar sus alas entre el aire. Sonreía orgullosa, mientras maniobraba en el cielo. La felicidad que le producía no tenía comparación. Amaba volar, más que nada en el mundo.

Realizo un par de acrobacia mas y aterrizo rápidamente frente a su amiga, con una gran sonrisa de satisfacción y arrogancia.

-¡Wow! Rainbow Dash, eso fue increíble. Mejoraste tu marca por cuatro segundos- menciono la pegaso amarilla. Su voz podía parecer apacible y serena pero en realidad estaba sumamente emocionada e impresionada por la destreza que tenía su amiga

-¡Cuatro segundos!... No me sorprende ¡Soy… asombrosa!- dijo alegre y con aires de orgullo la voladora celeste. –Con este tiempo, realmente impresionare a los Wonderbolts ¡Ya tengo un lugar asegurado!- finalizo de forma altanera.

- Si, con tus nuevas acrobacias podrás realizar tu sueño al fin- comento Fluttershy sonriéndole amablemente. –No hay duda de que eres una increíble voladora. Puedes hacer grandes cosas- dijo con emoción.

-Pfff, yo diría que puedo hacer cualquier cosa- dijo Rainbow elevándose escasos centímetros mientras extendía sus cascos con arrogancia – Apuesto a que podría…

-¡RAINBOW DASH! ¡FLUTTERSHY!- se escucho el fuerte grito de Applejack. La pony terrestre iba trotando con apuro hacia sus dos amigas. Llevaba jalando una enorme carreta llena de paja, donde secretamente había metido el desorientado cuerpo de Soarin. Se dirigió hasta las dos pegasos con una mueca de preocupación muy marcada en su rostro.

-Hola Applejack- Saludo tímidamente la voladora de pelaje vainilla.

-¿Qué hay A.J? ¿Vienes a ver mis increíbles acrobacias?- dijo la yegua celeste muy entusiasmada, sonriéndole a su amiga granjera.

-Ehh… no realmente… yo venía a…- pronunciaba con dificultad la pony terrestre. Estaba claro que le costaba luchar contra su honestidad- a… ¡Traerte un regalo!... si, si, ¡Vengo a traerte un regalo Rainbow!

-¡Genial! ¿Qué es?- cuestiono una emocionada y alegre Rainbow, volando justo frente a su amiga. –No tenías que molestarte… oh ¿acaso es algo de los Wonderbolts?- volvió a preguntar mas entusiasmada, apretando sus mejillas con sus cascos.

-Ehh… algo así

-¡Que emoción! ¡Que emoción! ¡Que emoción!- repetía Rainbow, volando rápidamente alrededor de Applejack. -¿Dónde esta mi regalo?- dijo muy cerca del rostro de su amiga.

-Está en la carreta- respondió nerviosa.

-¿Y porque lo traerías en una pila de paja?- cuestiono Fluttershy de forma confundida y curiosa. Appejack la miro muy angustiada, tratando de que sus palabras no se enredaran.

-¡Eso no importa!- grito Rainbow, posicionándose sobre la paja. -¡Apuesto a que son boletos para ver su espectáculo en vivo!

- Puede… ser, jeje- dijo Applejack con una risa nerviosa.

-¡Que emoción! ¡Que emoción!- Dash lanzo un grito de entusiasmo y comenzó a escarbar entre la paja. Al haber buscado por un par de minutos, toco un extraño objeto con su casco, hizo una mueca confundida y volvió a palparlo, sintiéndolo con una suave textura pero muy aguada y grande. Se sentía como ¿pelaje?

- Hay algo raro aquí- comento mirando a su amiga terrestre, quien le mando una mirada angustiada -Se siente muy blando- dijo mientras seguía tocándolo. Apretó con mas fuerza el objeto recibiendo un quejido masculino como respuesta. Rápidamente se alejó de la carreta exaltada.

-Ahhhhg…- se escucho un quejido apagado, como si fuera un zombie. Lentamente de la paja, comenzó a emerger una cabeza de pelaje azul pálido. Las tres yeguas lo miraron asustadas mientras la paja resbalaba del objeto, revelando a un pegaso de melena negra y mirada verde llena de confusión y preocupación. Parpadeo varias veces mirando fijamente a las yeguas pero sin decir una palabra.

-¡Un Wonderbolt!- Exclamo Fluttershy al reconocer es rostro del potro.

-¿Soarin?- pegunto Rainbow con una mueca de sorpresa. Agito su cabeza tratando de entender que pasaba y miro a Applejack con duda.

-¿Sorpresa?- atino a decir la yegua granjera agachando sus orejitas y escondiendo su rostro entre su sombrero café. Seamos honestos, podía ser peor.

-Applejack, ¿Qué significa esto?- cuestiono seriamente la yegua celeste, señalando al corcel.

-¡NO FUE APROPOSITO! - grito la terrestre exaltada - ¡Estaba cosechando las manzanas y, y, y Big McIntosh me dijo que no las pateara tan fuerte! Pero… él se atravesó y… ¡por Celestia! ¡NO debió cruzarse en mi camino!

-¿Lo pateaste? - pregunto Fluttershy caminando hacia Soarin.

- No fue mi intención hacerlo- respondió la yegua campesina bajando su cabeza totalmente arrepentida.

La pegaso amarilla miro fijamente al potro por unos instantes y después volvió la vista a sus amigas - No te preocupes, no parece estar lastimado- dijo tranquilamente.

-Él no está herido…- menciono Applejack caminando junto a Fluttershy - El problemas es… que no recuerda absolutamente nada de lo que paso ni siquiera sabe quién es- sentencio mirándolo con preocupación.

Rainbow Dash voló frente al pegaso y lo miro fijamente, clavando sus ojos violáceos en los verdes de Soarin. Mantuvo su vista fija en él y después soltó un suspiro -No lo creo, ¡Él es un Wonderbolt! Nada puede con un Wonderbolt- dijo totalmente convencida. -¿Cierto Soarin?- le pregunto sonriendo.

El pegaso la miro parpadeando un par de veces -¿Quién?

Las tres yeguas se miraron entre ellas. Rainbow le mando una mirada de reproche a la pony terrestre y esta solo soltó una risa nerviosa.

-Bueno chicas, debo irme- Dijo sacando al potro de su carreta y dejarlo sentado en el pasto frente a Rainbow - Hay muchas cosas que hacer en la granja- menciono colocándose el arnés de la carreta -Nos vemos luego ¡disfruta tu regalo Rainbow!- finalizo desapareciendo a todo galope.

Las pegasos apenas pudieron reaccionar justo cuando Applejack se había ido. Ambas miraron al potro en el pasto. Las dos con vistas preocupadas pues ahora no sabían qué hacer con un atontado Soarin.

-¿Qué haremos ahora?- le pregunto Fluttershy a su amiga de crin multicolor.

- No lo sé ¿Qué podemos hacer?- respondió sin apartar su vista del pegaso.

- Podemos llamar a los demás Wonderbolts, les explicamos lo que paso y que ello se encarguen- dijo la voladora vainilla.

- Bien pensado- comento Rainbow comenzando a emprender el vuelo hacia Clousdale. Voló un par de metros mas cuando algo en su mente se encendió de pronto. Sonrió ampliamente y volteo a ver a su amiga con una mirada llena de emoción - O… nosotras haremos que recupere su memoria- grito entusiasmada. Fluttershy la vio con confusión en su rostro pero también con preocupación. Sabía que esto le traería problemas - Piénsalo- continuo la pegaso celeste - Si lo logramos, estará tan agradecido que me recomendara como Wonderbolt o incluso ¡me nombren uno! - finalizo agitando a su amiga.

-No lo sé Rainbow- murmuro tímidamente la pegaso de larga crin - Eso suena muy complicado para las dos.

-Vamos, ¿olvidas quién soy? ¡Puedo hacerlo todo!- dijo orgullosa. Fluttershy no se veía del todo convencida pero acepto para darle el gusto a su amiga.

-No será tan difícil- dijo Rainbow volando sobre Soarin -Solo hay que recordarle quien es- Aterrizo frente al pegaso y lo miro firmemente - Muy bien Soarin, vamos a ayudarte a recordar todo.

El potro solo parpadeo confundido - ¿Eso soy yo verdad?

-Sí, tu nombre es Soarin- le dijo la pegaso de ojos violáceos - Eres un Wonderbolt, uno de los mejores acróbatas aéreos de Equestria- dijo emocionada - Fuiste el pony mas joven en graduarse de la academia de vuelo, ¡El único macho en el equipo principal de los Wonderbolts! ¡Co- Capitan del primer escuadrón! ¡El inventor del giro invertido con 360° grados! Y… mi héroe personal- finalizo sonriéndole.

-¡Wow! Soy asombroso- dijo el corcel muy entusiasmado, poniéndose de pie - Uh… lástima que no recuerdo nada.

Rainbow Dash se golpeó la cara con su casco frustrada. Seria más difícil de lo que pensó…


Finalizo. Me encanta la pareja que hacer Rainbow Dash y Soarin. Este fic será muy corto, espero les haya gustado, Déjenme sus comentarios y criticas por favor.