Les he traído una historia basada en una serie llamada Eyeshield 21, les recomiendo la serie es estupenda. Bueno aquí se las traigo en versión de Inuyasha, aunque va a ver muchos cambios… demasiados pero ni modos xD
Disclaimer: Inuyasha no me pertenecen ni ninguno de sus personajes.
Shikon.
¡Quiero pertenecer al equipo!
-Kagome ¡Felicidades!- el abrazo de su hermana mayor es asfixiante.
-Kikio… me asfixias- susurro.
-Oh, perdóname- la soltó.
Kikio sonrió para su recién ingresada hermanita, Kagome le devolvió la sonrisa estaba orgullosa de su logro pues pudo ingresar a la misma preparatoria que Kikio; la preparatoria Shikon…
-¡Miren es Kagome-sama!
Ambas azabaches miraron a quien había pegado semejante grito.
-¡Kyyyyaaaa!- Kagome salió corriendo- ¡Kikio-nechan te veo al rato!
Kikio suspiro tal vez que Kagome haya entrado a una escuela pública no haya sido la mejor elección pensaba mientras veía como era perseguida por una multitud tanto de hombres como de mujeres.
……………………
Kagome respiraba agitadamente había recorrido toda la escuela corriendo y estaba cansada.
-Uff… debo tener más cuidado- susurro se apoyó en una reja pero…
-¡HUT! ¡HUT!
Kagome se volteo rápidamente, sus ojos brillaron con emoción.
-Futbol Americano- susurro extasiada.
-Así es- susurro una voz a su espalda.
-Kyyyaaaa…
-Tranquila niña mi nombre es Myoga, soy el que le da mantenimiento a los campos de este instituto- ella le sonrió al anciano apenada.
-Siento el grito- se disculpó arrebolada.
Myoga agito la mano restándole importancia.
-Ven.
Ella le siguió hasta una banca en donde se podía apreciar todo el campo de futbol Americano.
-Por lo que veo te gusta mucho ¿no?
-Así es, me encanta- contesto observando un placaje fenomenal-… pero jamás he oído sobre el instituto Shikon.
Myoga dejó escapar un suspiro de resignación.
-El instituto Shikon jamás ha ganado un partido a pesar de tener tan buenos jugadores…
-¿Por qué?
-Porque nunca han podido encontrar a un corredor ni a un receptor- le contesto claramente triste.
-Entiendo- su mirada fue a parar en el mariscal de campo- ¿Con que un corredor?
-¿Dijiste algo?
-No, nada solo me preguntaba… esto… Si… si me podría decir quiénes son los integrantes hasta ahora- respondió rápidamente notablemente nerviosa.
-Bueno pues bien a pesar de ser un gran equipo apenas cuentan con 6 jugadores…
-¡¿Qué?! Solo 6 jugadores.
-Desgraciadamente así es, mira- con un movimiento de su mano le señalo al mariscal de campo-
Su nombre es Sesshomaru Taisho de tercer año mariscal de campo y capitán, sus pases son 100% certeros aunque solo yo los he podido apreciar.
Él es Inuyasha Taisho de segundo año, hermano menor del capitán, nuestro pateador con una precisión de un 90%.
Él es Kagemaru Okami de tercer año es nuestro centro, a pesar de su apariencia tiene una fuerza descomunal.
Ese es Kohaku Kioto de segundo año es el aprendiz de Kagemaru tiene una fuerza sorprendente a pesar de su condición.
El que está al lado de Inuyasha es Miroku Kimoto de segundo año es nuestro punter tiene una buena potencia pero no tiene dirección.
Y por último él es Jaken Toky de tercer año no se mucho de él apenas este año empezó pero sé que lo entrenan para ser un Tight End.
Kagome se levantó emocionada y con un nuevo sentimiento en su pecho, sus ojos brillaban con intensidad.
-Este equipo es magnífico- en su voz se notaba la emoción.
Myoga la observo le parecía conocida, ese perfil esa determinación… sus ojos se abrieron asombrados e incrédulos.
-Tú eres…- Kagome se volteo a verlo temerosa- la hija de Sena Higurashi.
Ella sonrió aliviada, con una sonrisa deslumbrante avanzo al campo.
-Así es ¿Y sabe algo?- ladeo un poco la cabeza para verlo de reojo- perteneceré al equipo de futbol Americano de esta escuela.
-¡¿QUÉ?! Espera un momen…
No pudo terminar su advertencia puesto que ella echo a correr hacia el campo con una determinación de fuego. Él no pudo si no sonreír.
-Tenemos a alguien interesante este año- se levantó para seguir caminando.
……………………
Kagome corría al campo con rapidez pero sin dar su mejor esfuerzo, ella quería entrar quería jugar… quería ser igual que su padre un corredora… una running back de la luz.
Cuando llego al límite del campo sus piernas flaquearon pero solo por un momento antes de caminar con determinación al que el señor Myoga le había señalado con él capitán, mientras más se acercaba sentía la mirada de todos los jugadores sobre su persona, llego.
-Taisho Sesshomaru ¿Puedo hablar con usted?- su voz sonaba segura y firme.
Sesshomaru la miro fijamente, en sus ojos vio determinación.
-Oh, pero vean nada mas ¿Te le vas a declarar? Pero si no llevas ni un día en la escuela novata- ella dirigió su vista hacia la voz y si su memoria no fallaba ese debía ser Jaken Toky.
Ella quiso decirle muchas cosas pero había aprendido a que hay que callar aun que quieras decirles todas sus verdades, ya después se podría encargar.
-Si van a decir tonterías vayan hacer algo productivo unas 8 vueltas al instituto bastaran- hubo protestas- ¡VAYAN!
Todos fulminaron con la vista a Jaken antes de salir corriendo no sin antes darle un buen golpe al causante de que los pusieran a correr, Kagome sonrió.
-¿Y bien? ¿De qué quieres hablar?- su voz sonaba fría y cortante, ella no se intimido.
Los ojos chocolates de ella enfrentaron a dos témpanos de hielo dorado.
-Quiero ser parte del equipo de futbol Americano.
Sesshomaru había oído estupideces de parte de su equipo pero jamás había oído semejante barbaridad, una sonrisa se le escapó de sus labios.
-No me gustan las bromas ¿Dime qué quieres?- le dijo serio, ella enfureció.
-No es ninguna broma, ¡Quiero pertenecer al equipo!- exclamo.
El silencio reino en el lugar solo se oían en susurrar del viento.
-No- fue su única contestación.
Ella ahora si estaba molesta.
-¿Por qué? Porque soy mujer- su cuerpo temblaba.
-Tú lo has dicho.
Sesshomaru se volteo pero alguien se interpuso en su camino… Kagome.
-Si le dijera que puedo correr las 40 yardas en 4.8 segundos ¿Me aceptaría?- Sesshomaru vio que hablaba enserio. Frunció el ceño.
-Veamos si es cierto- Kagome sonrió.
……………………
-¿Lista?- ella solo asistió- ¡Fuera!
Kagome corrió, necesitaba lograr esos 4.8 segundos, necesitaba jugar futbol Americano… ese siempre fue su sueño, no ser una idol. Su pie derecho paso la línea de la yarda número 40.
Sesshomaru estaba sorprendido jamás pensó que ella pudiera superar la barrera de 5 segundos, apretó inocentemente el cronometro.
Ella se dirigió hacia él su corazón palpitaba fuertemente, estaba nerviosa sabía que había corrido con todas sus fuerzas.
-¿Y bien?
-Lograste un tiempo de 4.7 segundos-Kagome sonrió encantada con ese tiempo ella podía entrar- pero aun así no te aceptare.
Kagome sintió que sus esperanzas se desvanecían con el viento.
-Ahora si me disculpas deb…
-¡ESTO ES REALMENTE INACEPTABLE!- grito ella, él la miro sus ojos estaban cerrados, sus mejillas sonrojadas y con sus puños cerrados fuertemente.
-No lo es, mi decisión es inapelable- su voz era autoritaria y cansada.
-¡SOLO PORQUE SOY MUJER! ¡ESO NO ES JUSTO!- Sesshomaru dio media vuelta dispuesto a marcharse- ¡TÚ JAMÁS PODRÁS IGUALAR MI VELOCIDAD!
Eso detuvo bruscamente al peli plateado, Kagome pensó que tal vez recapacitaría.
-Eso no lo negare, tienes unas piernas de oro pero eso no es suficiente, no para mí.
-Dime la razón… por favor…
Sesshomaru se volteo y la vio triste, derrotada.
-Fuerza- ella alzo la vista- no tienes fuerza.
-¿Y si la tuviera…?
-No- el tono que uso fue el fin de la conversación.
……………………
Una joven de ojos chocolates tristes y de cabellos azabaches caminaba hacia la salida del instituto dejando escapar un suspiro de derrota, en su camino apareció una piedra… la pateo intentando descargar toda su tristeza y tensión en esa patada, la piedra salió disparada hasta unos arbustos.
-Auch- un quejido la asusto.
-Lo siento- exclamo mientras corría a ayudar, al llegar le esperaba un anciano muy familiar- señor Myoga.
-Hola querida al parecer estas molesta- comento casualmente mientras aceptaba la ayuda de ella. Se levantó. Ella sonrió tristemente.
-Molesta no, triste y un poco decepcionada- contesto.
-¿Qué paso niña?- ella suspiro.
-Al parecer no fui lo bastante buena para entrar al equipo- volvió a suspirar- Para Sesshomaru 4.7 segundos en las 40 yardas no es nada si no tienes fuerza.
-¡¿Cómo?! Rompiste la barrera de los 5 segundos- su voz sonaba asombrada y ella pudo detectar una chispa de reconocimiento y aceptación en sus ojos cansados y viejos.
-No se ilusione, como le dije él no me acepto- mi voz sonaba resignada.
Un brusco movimiento hizo que abriera sus ojos asombrada, Myoga la había cogido por los hombros mientras le miraba con suplica.
-No, nadie había superado la barrera de los 5 segundos desde que ese muchacho del instituto Konoha lo hizo… no te puedes rendir- sus manos gastadas por el duro trabajo afianzaron su agarre, Kagome admiro su determinación, ella igual lo había tenido pero él… ese hombre de ojos fríos y dorados se lo quito con unas cuantas palabras.
-Lo siento pero fuerza es lo que él necesita y como vera yo no lo tengo- una sonrisa amarga surco sus labios.
Myoga retiro sus manos decepcionado.
-Esperaba que fueras como tu padre- Kagome le miro con confusión- él no era el más fuerte, al igual que tu solo tenía esas magnificas piernas pero trabajo duro hasta convertirse en el más temido corredor…- la tomo de las manos- solo es cuestión de no rendirse… no te rindas.
Sus palabras, esa esperanza depositada… en ella.
-¿Por qué? ¿Por qué confía tanto en mí? Si apenas me acaba de conocer, no soy nadie solo tengo velocidad nada más, ni siquiera pude entrar al equipo- sus ojos comenzaron a verter lágrimas.
-Niña…
-Lo siento- se disculpó y se marchó corriendo.
Su visión era borrosa, su mente un revoltijo de emociones en su carrera choco contra alguien…
-Lo siento.
Se disculpó de nuevo pero jamás miro a la persona contra la que choco solo siguió corriendo intentando secar sus lágrimas conforme salían… sin resultado.
……………………
Sesshomaru solo observo cómo la niña de antes salía corriendo después de haber chocado contra él, se preguntaba el porqué de su llanto.
-Es por tu causa- la voz a su espalda le hizo girarse lentamente para encontrase con un viejo conocido.
-¿Mi causa?- encaro una ceja claramente confundido.
-Le destrozaste su sueño, ella tan solo quería ser igual que su padre.
-Myoga ella es débil- le aclaro.
-Solo porque es mujer no signif…
-No es eso viejo… ella puede ser tan rápida como quiera ser pero su coraje y determinación no bastaran contra la masa de músculos que tendremos como oponentes, solo saldría lastimada.
Myoga comprendió sin embargo sonrió, puso su mano derecha sobre el hombro de su más querido muchacho.
-No lo creo… esa joven es igual a ti, testaruda y terca- su sonrisa se ensancho al ver la clara molestia en el rostro de Sesshomaru- si confiaras un poco más en ella te llevarías una grata sorpresa.
Myoga retiro su mano dando un cabezazo como despedida se marchó con una suave sonrisa en sus labios.
-Confiar… hump que tontería.
……………………
Kagome llego a la salida agradecía que nadie estuviera tan tarde en el instituto, sus mangas están húmedas por tanto secar sus lágrimas.
-¿Kagome?- ella alzo su rostro sonrojado.
-Kikio- su voz sonaba ronca eso alerto a la mayor.
-¿Qué paso? ¿Por qué lloras?- esas palabras solo le hicieron querer llorar de nuevo, bajo la vista aguantando las ganas de abalanzarse sobre su hermana y llorar.
-Na-nada- se obligó a contestar.
-Niña- esa voz.
-Kikio-nechan te veo en casa- susurro y se marchó corriendo del lugar.
……………………
Sesshomaru se molestó solo había ido a devolverle un relicario a la azabache ya que cuando chocó contra él se le cayó.
-Que fastidio- susurro pero cuando iba a irse una voz lo detuvo.
-Taisho…
-Higurashi- respondió.
-¿Tú fuiste quien hizo llorar a mi hermana?- más que una pregunta sonaba a una afirmación.
-¿Qué me harás si yo fui?- pregunto con un tono de autoridad, Kikio retrocedió por instinto.
Ella empuño sus manos en una clara muestra de impotencia.
-Solo aléjate de ella- con paso firme se fue a casa a ver como seguía su hermanita.
-Qué día más complicado- guardo el relicario que tenía en su mano derecha.
……………………
Una suave mano limpio el vapor del espejo ya que mientras se bañaba este se empaño.
-Uff… que día más agotador- al mirarse al espejo pudo observar como sus ojos no tenía brillo, su puño se estrelló contra el cristal pero sin romperlo- estúpido… estúpido- su puño resbalo mientras su frente se apoyaba contra el frio cristal.
Después de unos segundos se reincorporo, sacudió su cabellera azabache y tomo su pijama, mientras se la ponía pensaba en como su sueño de casi una vida se esfumo en unos segundos, al terminar salió del baño.
-Kagome- la nombrada se estremeció y decidió huir- Espera Kag…- Kikio solo alcanzo a ver como su hermanita se iba corriendo a su habitación- esa niña.
Kagome tomo una bocanada de aire al estar segura tras su puerta pero un ruido en su ventana le hizo dar un salto asustada, con cautela se acercó para ver… una sonrisa se formó en sus labios, abrió la ventana mientras sacaba medio cuerpo para poder apreciar a su mejor amigo.
-Hojo- exclamo emocionada.
-Hola pequeña- saludo con una sonrisa suave- ¿Vas a bajar? O mejor subo.
-Baka sabes que mi padre te matara a penas pongas un pie en mi habitación- su sonrisa no disminuyo- espera un momento enseguida bajo.
……………………
-Bueno joven Hojo es un placer el volver a verlo, nosotros nos retiramos- Naomi la madre Kagome les brindo una sonrisa dulce mientras tomaba a su esposo del brazo el cual veía ceñudo al joven castaño- Kagome no te acuestes tarde.
-Si mamá- respondió mientras reía nerviosa al ver a su padre refunfuñar al ser sacado de la sala.
Al momento de quedarse solos, ambos se miraron después se echaron a reír.
-¿Cuándo podre estar contigo sin tu padre espiando detrás de cada puerta?- preguntaba con una sonrisa burlona.
Kagome se ruborizo apenada.
-Cuando te conviertas en mujer y te cambies el nombre a Joya- respondió algo cohibida pero con una sonrisa.
-Claro, claro- respondió mientras agitaba su mano.
Ella rio.
-Kagome ¿Por qué no te vi hoy en el instituto? No me digas que no aprobaste- su voz sonaba algo preocupada.
Kagome negó con la cabeza apresuradamente.
-No, no… es que pasaron muchas cosas y pues se me olvido que tenía que reunirme contigo, perdón- contesto con un sonrojo en sus mejillas blancas. Hojo suspiro.
-Tienes la mala costumbre de disculparte por todo… no lo hagas- se levantó de su asiento y fue a situarse al lado de su amiga.
-Claro… mmm Hojo
-¿Qué pasa?
-No nada…
Kagome pensó en decirle a Hojo lo que había pasado en la tarde pero no sería buena idea. Hojo ha sido su mejor amigo desde la infancia siempre le protegió y le seguía protegiendo; él era dos año mayor que ella, pero a pesar de haberse convertido en una idol él se había quedado a su lado… siempre.
Unos finos dedos tomaron otros más fuertes.
-¿Kagome que…?
-Gracias por estar siempre a mi lado- su flequillo ocultaba sus ojos chocolates que brillaban por algunas lágrimas que querían salir- Gracias.
Hojo sonrió rodeo con sus brazos la pequeña figura de su amiga con todo el cariño que le profesaba, ella se dejó hacer apoyo su cabeza contra su pecho aspirando el perfume que tenía impregnado en todo su ser.
-Ejem, ejem… hare como que no vi nada- la voz burlona de la azabache mayor hizo que se separaran bruscamente.
-Ki-Kikio- exclamo Kagome sonrojada mientras que Hojo solo se reía- ¡Y TÚ PARA DE REÍRTE!
-Sí, si lo que tú digas- Kagome le fulmino con la vista.
Kikio se sentó en donde anterior mente se había sentado el castaño.
-Bien, bien Kagome ahora no te me vas a escapar- la nombrada trago saliva, tomo la mano de su acompañante buscando apoyo.
-¿Kagome qué está pasando?- el castaño estaba confundido.
-Si Kagome ¿Qué está pasando?- la azabache menor se estremeció- ¿Por qué estabas llorando? ¿Quién te hizo daño?
-¿Llorando? Kagome tú…-Hojo miraba a ambas hermanas, se levantó y se arrodillo frente a su amiga le tomo ambas manos- ¿Quién te lastimo?
-Hojo no es lo que crees… yo fui la tonta que se hizo ilusiones- afianzo más las manos de su amigo- él solo me hizo ver la realidad… jamás podría unirme a ese club.
Los ojos de Kikio brillaron con astucia, se levantó y los dejo a solas. Ambos muchachos no notaron la ausencia de ella.
-¿Él? ¿Qué paso? ¿Qué club?
-Hey, hey muchas preguntas… solo diré que no cumplo con los requisitos solicitados- sus ojos mostraron tristeza, eso molesto al joven.
-¿Requisitos? Tú no cumplir los requisitos… que clase de idiota es ese tipo- Kagome no pudo evitar sonreír, Hojo sabia como animarla.
-Pues un idiota que necesita todos los requisitos para aceptarte… y que yo no cumplo…
-Sabes pequeña entonces solo existe una solución si de verdad quieres unirte a ese club- Kagome lo miro fijamente- cumple el requisito.
Su voz, su tono… como no confiar en él.
-Hojo no es tan fácil cumplirlo- respondió.
-Vamos, no puede ser tan difícil como lo haces ver… ahora si es ser más alta o más bonita definitivamente ni lo intentes- su sonrisa burlona se hizo presente de nuevo.
-¡OYE!- le grito mientras lo intentaba golpear, él solo rio, se levantó y esquivo sus intentos asesinos.
Kagome se abalanzo contra su mejor amigo, este solo negó con la cabeza antes de atajarla con sus brazos, aprisionándola.
-Y yo gano, como siempre- Kagome hizo un puchero, Hojo se inclinó y beso su frente- pero ya enserio inténtalo, intenta cumplir con el requisito sabes que siempre te apoyare.
Kagome se enterneció, que haría sin él.
-Lo intentare- cerro los ojos y se dejó llevar por el momento.
-Siento interrumpir pero ya esta tarde y es necesario que tu amigo se vaya- la voz de Sena los hizo estremecer y tragar saliva.
Se separaron lentamente encontrando a un papá enojado.
-Claro señor Higurashi ya me retiro- con un cabeceo se retiró no sin antes- nos vemos mañana señorita- despedirse.
-Hasta mañana Hojo- se despidió.
Cuando se cerró la puerta un tenso silencio cayó en la sala.
-¿Tiene algo que decirme jovencita?
-Ehhh… tengo mucho sueño, buenas noches papi- hizo buen uso de esas piernas desapareciendo en unos segundos de la sala.
-Esa niña me causara dolor de cabeza.
……………………
La oscuridad reinaba en esa habitación elegantemente amueblada si no fuera por los rayos de la Luna que atravesaban la ventana iluminando una figura que yacía acostada en la cama de suaves sabanas de seda de un color dorado como lo son sus ojos.
En el silencio que la noche le otorgaba levanto su brazo dejando caer de su mano un relicario en forma de corazón, sus dedos jugaron con la cadena haciendo que el corazón girara su curiosidad le estaba pidiendo que lo abriera.
-Bueno que más da- susurro.
Se reincorpora hasta quedar sentado, decidido abrió con fuerza, en el relicario había dos fotos en una aparecía ella con un muchacho no muy grande su novio se dijo mentalmente, en la otra era una foto de toda su familia.
-Ya veo por eso quiere ser la corredora- la puerta se abrió bruscamente.
Sesshomaru guardo rápidamente el relicario.
-Inuyasha no te han enseñado a tocar la puerta antes de entrar a un lugar- su voz era fría al igual que sus ojos.
-Ya deja tu educación y dime ¿Qué quería esa niña?
-¿Interesado en ella?- una sonrisa burlesca se formó en sus labios.
-Claro que no, solo era pura curiosidad- sus mejillas estaban rojas por el rubor que su hermano había provocado al decir eso.
Sesshomaru se levantó de la cama y con un movimiento rápido saco a su hermanito de su habitación, antes de cerrarle la puerta en la cara le menciono.
-Pronto sabrás que quería- Inuyasha alzo una ceja- … y por cierto ella tiene novio- una sonrisa surco sus labios al decir eso y cerró la puerta.
Inuyasha parpadeo varias veces antes de entender el significado de esas palabras, se sonrojo.
-Que no es ESO- grito a la puerta de roble blanco- estúpido hermano que me toco.
-Lo mismo digo.
-"Huy"
……………………
Kagome estaba sentada en su ventana dejando que la suave brisa le acariciara, cerró los ojos aspirando el aroma de la noche, su mano se dirigió a su pecho… abrió sus ojos bruscamente.
-No de nuevo- suspiro mientras rascaba su cabeza en un acto de inocencia.
-¡KAGOME A DORMIR!
-Si mamá- sus ojos miraron por última vez la Luna llena que se alzaba en el manto negro antes de cerrar su ventana.
Una estrella fugaz atravesó el firmamento.
Dos personas lo pudieron apreciar.
Dos ojos chocolates.
Dos ojos dorados.
Dos deseos.
-Cumpliré el requisito cueste lo que cueste- una sonrisa.
Continuara.
Espero les haya gustado. Me encantaría recibir sus reviews.
Lo siento lo volvi a subir, porque me equivoque en un nombre, donde habia puesto Koga, ahora puse Kagemaru, perdonad el descuido.
Gracias por leer!.
FiraLili
